SIN TÍTULO

En esta obra se estiliza la flor de la pasionaria, transformando su estructura natural en un motivo ornamental de refinada simetría y ritmo. La composición vertical se organiza a partir de un tallo sinuoso que enlaza las flores y hojas en un movimiento ascendente continuo, generando dinamismo y equilibrio. El artista sintetiza los elementos botánicos mediante líneas curvas y volúmenes planos, logrando una armonía entre lo decorativo y lo orgánico. La paleta, de tonos pasteles azulados y ocres, aporta serenidad y acentúa la dimensión poética del motivo.