El Senado y Cámara de Diputados...

Art. 1°. - Declárase Bien de Interés Histórico y Artístico, según la clasificación del art.4° de la ley 12.665, a la denominada “Placa Árabe del Centenario” realizada por el artista sirio Jorge Batica, que se encuentra expuesta en el edificio del espacio cultural Museo de las Mujeres de la Ciudad de Córdoba, y fuera entregada por la colectividad siria en homenaje a la República Argentina en el año 1910, al entonces Gobernador de Córdoba Dr. Félix T. Garzón, por haber sido elegida esta provincia para conmemorar el Centenario de la Revolución de Mayo.

Art. 2°. - Objeto: La presente ley tiene por objeto la protección y preservación del patrimonio histórico y cultural de la misma.

Art. 3°. - De forma.

Señor presidente:

Hace más de cien años un grupo de árabes provenientes de Siria llegaban a Argentina escapando del Imperio Otomano. Como todos los extranjeros arribados por entonces, llegaron con la esperanza de encontrar un destino mejor que aquel que abandonaban.

La historia de la llamada “Placa Árabe” del Centenario hay que asociarla a dos personas en particular, a Don Moises Azize y Don Jorge Batica, ambos hacedores de una idea que se concretó por mayo de 1910, cuando la mencionada placa se obsequió al gobierno de la provincia de Córdoba para celebrar la conmemoración del centenario de la Revolución de Mayo.

Don Moisés Azize es considerado uno de los hacedores de las instituciones árabes que se crearon en Argentina, a saber: fundador del Club Honor y Patria, del Diario Sirio Libanés, de la Revista Oriental y de la Cámara de Comercio Sirio Libanesa en la República Argentina; en verdad, un hacedor de la comunidad árabe en nuestro país. Cuenta en su mención con numerosas condecoraciones, entre ellas la única en su género que haya recibido un ciudadano argentino y extranjero: la Orden Ouvre Humanitaire en el Grado de Gran Cruz por el Gobierno de Francia. Tanto la República Árabe Siria como la República del Líbano lo condecoraron en numerosas oportunidades.

Junto a Don Moisés Azize surge la figura de Don Jorge Batica, sirio proveniente de Damasco, cuyo verdadero apellido era Battikha; entre sus descendientes actuales, tiene dos personalidades de la iglesia árabe en el mundo: el Padre Elias Battikha y el Arzobispo Isidore Battikha de Damasco.

En 1908 Jorge Battikha llega a Buenos Aires junto a dos hermanos; una vez instalados fundaron la empresa Batica Hnos, dedicada al ramo de la ferretería, que luego se trasladó a la provincia de Córdoba. Allí se ubicaron en la calle Rivadavia 314, desde donde realizaron una ardua labor comercial. De ese modo, Batica Hnos. se transformó en una de las ferreterías más destacadas en su género, llegando a ser especialistas en herrajes.

Batica era un eximio escultor y un herrero cuyas obras ya tenían relevancia en Damasco; conocido entre la comunidad árabe por el amor a la patria, fue la persona en quien recayó la responsabilidad de lograr esta obra de singular magnitud: la Placa del Centenario. Por encargo de Don Moises Azize se le comunicó oficialmente que la comunidad árabe deseaba realizar un homenaje a la República Argentina y veían en él la persona indicada para realizar una placa de mármol.

La placa contiene materiales como oro, plata, bronce y mármol, y fue complementada con grabaciones en los costados en idioma árabe y español alusivas a la Revolución de Mayo en su Centenario de 1910; conjuntamente con el agradecimiento de la sociedad siria al pueblo argentino por la recepción de los inmigrantes árabes.

En la nave superior se puede detallar la presencia de dos laureles que han sido esculpidos sobre el mármol, colocándose en cada hoja pepitas de oro para finalizar con la realización por parte del artista con el escudo de Córdoba de aquel tiempo, junto a las piedras en oro dentro de la torre y los laureles.

En los dos costados de la Placa Arabe hay una leyenda que dice “Artista sirio, Jorge Batica”, adornado con dos laureles que se unen con el bulón que ajusta la placa a la pared. En el otro costado se repite la leyenda, pero en idioma árabe, con el mismo detalle finalizando el segundo bulón.

Los expertos han analizado la Placa Árabe y coinciden en que no puede ser extraída y retirada de su lugar, justamente por ambos bulones que sujetan la gran placa a la pared y cuya extracción podría producir el quiebre del mármol; Han aconsejado, por ello, que deberá permanecer allí definitivamente.

Este gran artista dotó a su obra con una simbología árabe, cuyo significado es hasta ahora desconocido. Dentro de la placa puede observarse la bandera del imperio otomano junto a varias banderas, abajo una serie de símbolos que se complementan con incrustaciones en oro macizo en la parte final. En la nave central está la TUGHRA simbología oficial del imperio otomano, esta denominación significaba la firma de los sultanes que durante ocho siglos habían gobernado, su constitución data de los primeros sultanes por ello al ser un acto oficial lleva en el centro su desarrollo con la firma de los mismos acompañada con el sol realizado en oro macizo y las armas que lo adornan con incrustaciones de oro y piedras preciosas.

En los Museos de Turquía las obras que llevan el símbolo de la Tughra tienen una consideración especial siendo reconocidas mundialmente, por ello esta obra de arte en el futuro tiene un misterio que lo develarán los estudiosos de obras antiguas.

Al costado de la Tughra principal se encuentra el escudo nacional y en el otro costado derecho el escudo de la provincia de Córdoba. Está escrito sobre una gran placa de bronce que cuyo tallado demandó una gran obra por parte del escultor. Al finalizar el recordatorio señala lo siguiente: “Córdoba, 25 de mayo 1910”.

Don Jorge Battikha realizó otras obras que se hallan en la provincia de Córdoba, como numerosos cofres de mármol y madera. También realizó marcos de cuadros junto a placas funerarias. Una de ellas se conserva hoy en la ciudad de Chepes de la provincia de La Rioja, en el panteón de la familia Saadi.

En 1914 fallece en la localidad de San Pedro Norte el Sr. José Saldes, abuelo materno del Sr Cónsul de Siria Don Abdala Saadi, por tal motivo es que Don Jorge Battikha se traslada a dicha localidad, dejando una placa funeraria única que contiene un ancla, adornada con uvas, un corazón en el medio junto a la cruz que también es de su autoría. La fecha es del 17 de setiembre 1914.

También realizó una pila bautismal en mármol de gran importancia donada al antiguo Hospital de Niños de Córdoba, en agradecimiento por la gran atención que recibiera su hijo de dieciocho años que fue atendido por una parálisis infantil, falleciendo luego.

Su compromiso con los inmigrantes árabes de aquel tiempo lo llevó a realizar la mencionada obra. Participó activamente en la Sociedad Sirio Libanesa de aquel tiempo como tesorero y luego como vocal junto a su hermano Elías. Según los registros que se pueden considerar en base al trabajo del Prof. Carlos Pachá, Don Jorge Battikha fue el impulsor del cambio en la denominación de Sociedad Siria para ser considerada como “Sociedad Sirio Libanesa de Córdoba”

Don Jorge Battikha falleció el 20 de setiembre del año 1953, a la edad de 78 años, ya completamente alejado de la comunidad siria que lo vio desarrollarse. Solo queda el mármol con las letras en árabe, el laúd que tocaba en sus tiempos libres junto al cigarro y los cinceles que acompañaron la creación de esa gran obra que engalana a toda Córdoba en el Museo de la Mujeres, que fuera entonces la Casa de Gobierno; luego pasó a ocuparlo el Ministerio de Economía y el Conservatorio Provincial.

El 26 de septiembre de 2017 el Directorio de la Agencia Córdoba Cultura del Gobierno de la Provincia de Córdoba, mediante la Resolución N° 321 Declaró de Interés Cultural, la “Placa Árabe”; por considerarse un bien cultural único, de gran importancia histórica, que recupera a la memoria de la comunidad toda, el sentido homenaje de la colectividad sirio libanesa en el Centenario de nuestra Patria.

Por todo lo expuesto es que solicito a mis pares me acompañen en el presente proyecto.