La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicito al Poder Ejecutivo informe a ésta Honorable Cámara las medidas de control dispuestas sobre los productos porcinos importados, para prevenir la entrada al país de la enfermedad “Síndrome Respiratorio Reproductivo Porcino” (PRRS, por sus siglas en inglés) con el objetivo de seguir considerando a nuestro país libre de PRRS, y en caso de detectarla, los protocolos a seguir.

Señor presidente:

A raíz de la apertura a la importación de carne de cerdo proveniente de Estados Unidos (EEUU), y considerando que en ese país existe la enfermedad denominada Síndrome Respiratorio Reproductivo Porcino (PRRS), se ha hecho pública la preocupación del sector porcino en nuestro país en cuanto a los riesgos sanitarios que ello implica.

Es importante resaltar, resumidamente, el gran crecimiento que viene teniendo el sector porcino en el país, tanto en carne como en subproductos, aumentando la producción y exportación; a la vez, y de no menor importancia, el consumo de carne de cerdo viene creciendo en el país a una tasa del 10 % anual. Otro punto importante a destacar refiere a los puestos de trabajo que el sector genera, cerca de 37000 personas de las cuales 17500 están abocadas a las granjas de producción. Las perspectivas del sector son seguir aumentando la producción, los niveles de exportación, fomentar el consumo de esta carne y conservar el status sanitario.

Argentina es un país que tiene un status sanitario envidiable en otros países, principalmente por no tener PRRS. El PRRS es una de las enfermedades más estudiadas a nivel mundial que afectan a la producción porcina, ya que las pérdidas económicas que ocasiona son cuantiosas (es la enfermedad que mayores pérdidas económicas ocasiona) y, una vez ingresada al país, es muy difícil y costosa su erradicación. Esta enfermedad fue reconocida clínicamente en EEUU en 1987. Desde entonces, la infección se ha extendido por Europa; fue detectada en países como Alemania, Holanda, Reino Unido, Bélgica, España y Dinamarca. También fue detectada en Asia.

Dicha enfermedad no ocasiona perjuicios en la calidad de la carne ni tampoco en las personas, pero sí causa graves problemas productivos-económicos en establecimientos dedicados a la producción de cerdos, por citar, problemas reproductivos en cerdas, y respiratorios en lechones y cerdos de engorde.Si bien la transmisión se produce principalmente por contacto directo y en menor medida por heces, orina, semen, secreciones e insectos vectores, la importación de carne es también una posible vía de entrada. Para reforzar esta información, organismos de investigación chilenos han considerado a la importación de carne como la forma por la cual ingresó el virus en ese país.

Es importante tener en cuenta también la suspensión de las autorizaciones de importación de cerdos vivos, semen, carne y subproductos porcinos provenientes de la República Oriental de Uruguay, luego de que en dicho país se detectaron en el año 2017 focos de PRRS (es la misma cepa que ocasiona la enfermedad en EEUU).

Es por ello la importancia de las medidas de prevención para su ingreso al país, y en caso de detectarla, la rápida intervención y medidas de contención de organismos oficiales para evitar y/o minimizar su propagación.