PROYECTO DE TP


Expediente 3580-D-2019
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON LA REDUCCION EN LA ADQUISICION DE VACUNAS INCLUIDAS EN EL CALENDARIO NACIONAL.
Fecha: 17/07/2019
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 97
Proyecto
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:


Dirigirse al Poder Ejecutivo Nacional en los términos del art. 100 inciso 11 de la C.N. para que, por intermedio de los organismos pertinentes, el Ministerio de Salud y Desarrollo Social, informe a esta Cámara de Diputados acerca de los motivos por los cuáles se dispuso reducir la adquisición de vacunas tal como fuera reconocido por el Secretario de Salud Dr. Adolfo Rubinstein, de conformidad con el siguiente cuestionario:
1.- Qué acciones y/o medidas se han dispuesto implementar para normalizar el suministro de vacunas faltantes del Calendario Nacional de Vacunación.
2.- Qué faltantes temporarios de vacunas se han detectado durante el año en curso que ameriten la adopción de medidas a tomar con cada jurisdicción. En su caso informe si se ha normalizado el abastecimiento de las siguientes: difteria, tétanos (dTpa), la meningitis (meningocócica) y la poliomielitis (Sabin), entre otras.
3.- Qué provincias continúan en la actualidad registrando una situación de faltantes de vacunas.
4- Qué población se encuentra afectada ante esta faltante de vacunas. Especificar cantidad y rangos etarios.
5.- Qué medidas se están implementando para revertir los problemas que aún persisten con la vacuna contra el meningococo tal como reconociera el Secretario de la Conaim, Cristian Biscayart, en la reunión del 9 de abril del corriente año.
6.- Qué medidas se han adoptado para enfrentar los factores que se describen como causa de los faltantes, esto es, problemas financieros, circuitos de compra complejos, provisión limitada y dificultades con los trámites de aduana, entre otros.

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


Con profunda indignación nos enteramos de una información que no desconocemos, -aunque ahora sí, fue confirmada oficialmente- y por la que venimos alertando y explicando sobre las consecuencias que podría acarrear en la salud de nuestra población.
Desde el año 2016, los usuarios de los servicios públicos de salud recibieron menos dosis de vacunas de las que el Estado nacional necesita para inmunizar a la población. Este dato fue confirmado por el ex Ministerio y actual Secretaría de Salud y Desarrollo Social de Nación quien, acepta por caso que, la vacuna Sabin tuvo 7 millones de dosis compradas en 2016, pero en 2018 se redujo a 3 millones.
Se trata de la respuesta al dictamen de la Comisión de Acción Social y Salud de la H. Cámara de Diputados de la Nación publicado en la orden del día Nº 1057/2019.
A ello, se le suman los factores señalados por el titular de la Conaim, Cristian Biscayart –en la reunión del 9 de abril del corriente año- que afectaron el suministro de vacunas: “problemas financieros, circuitos de compra complejos, provisión limitada y dificultades con los trámites de aduana, entre otros”.
Resulta llamativa esta explicación ya que es la misma que brindara la Secretaría de Salud el año pasado, cuando 23 jefes de programas de vacunación de todo el país denunciaron el faltante.
Este año, además, la advertencia por la situación irregular en la provisión de las vacunas la realizó la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE), que advirtió que el Ministerio de Salud no estaba cumpliendo con la entrega de vacunas incluidas en el calendario obligatorio, lo que podría significar un riesgo en la cobertura sanitaria de la población.
Por su parte, un informe de la Fundación Soberanía Sanitaria titulado “El Ajuste en el Calendario Nacional de Vacunación” de julio del corriente año señala que, la política de desfinanciamiento del ex Ministerio de Salud deja a las provincias y municipios sin la posibilidad de contar con las vacunas necesarias para cumplir con el Calendario Nacional de Vacunación. De 2016 en adelante se compraron, se distribuyeron y se aplicaron menos dosis.
Señor Presidente, tamaña información no sólo confirma lo que veníamos sosteniendo en anteriores pedidos de informes sino también, demuestra cómo y en qué sector se manifiesta el ajuste económico que viene llevando a cabo la Alianza Cambiemos, así como las consecuencias que se derivan del mismo cuando se dimensiona el daño potencial sobre el universo de población vulnerable desprotegida por la acción del Estado.
La Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles que depende del (ex) Ministerio de Salud de la Nación tiene entre sus objetivos prevenir enfermedades y muertes en todas las etapas de la vida a causa de patologías prevenibles por vacuna y alcanzar coberturas de vacunación superiores al 95 % en todas las vacunas del calendario en todos los departamentos de todas las jurisdicciones. No debemos olvidar a su vez que, la propia cartera sanitaria es además quien compra y distribuye las vacunas a cada una de las provincias.
Pese a los diversos pedidos de informes efectuados desde esta H. Cámara de Diputados, la información disponible en nuestro país sobre distribución y cobertura de vacunas es escasa y no está bien sistematizada. A pesar de no contar con información pública oficial, desde hace dos años se viene denunciando faltantes en distintas jurisdicciones, tanto en el sector público como en el privado.
Ya en 2018, y en ocasión de solicitar un pedido de informes sobre este tema destacábamos que los jefes de los Programas Provinciales de Inmunizaciones habían firmado una dura declaración dirigida a los Ministros de Salud de todas las provincias exponiendo una “profunda preocupación” por el desabastecimiento de vacunas recordando a su vez que el “responsable de asegurar la provisión de insumos, tanto biológicos como descartables” es el Ministerio de Salud de la Nación.
Señor Presidente, los equipos provinciales de inmunización tienen un solo objetivo: que las vacunas lleguen a cada una de las comunidades. Se realizan muchos esfuerzos –a veces con la carencia crítica de recurso humano- que no son valorados en su real dimensión, pero esta situación se fue desbordando y determinó la redacción de aquel documento que no hizo más que visualizar la realidad, haciendo foco además en que la situación fue planteada por ante la Comisión Nacional de Inmunizaciones y en el 1º Taller de Jefes PAI en el mes de marzo de 2018, lamentando que la temática no haya sido abordada en la agenda del Consejo Federal de Salud.
Aquel documento de honda relevancia en la materia concluía destacando que “Las vacunas SON OBLIGATORIAS por LEY, pero son ante todo un DERECHO y un signo de EQUIDAD”, por lo que se tienen que solucionar con carácter urgente los problemas que han llevado al país a esta situación crítica de insumos de manera tal de asegurar su provisión de acuerdo a la planificación enviada a cada una de las provincias con la debida anticipación.
Es decir, que la política gubernamental de Cambiemos en materia de vacunas resultó un fracaso, por el contrario, en nuestra gestión de gobierno se la apuntaló justamente por la importancia que reviste. No debemos agregar ni aclarar mucho más para concluir en cómo inciden las políticas de ajuste neoliberal sobre la planificación en salud ya que están a la vista.
La presentación tardía de la Secretaría de Salud de la Nación, a cargo de Adolfo Rubinstein, con la entrega a los Legisladores de un documento que expresa la baja en dosis de vacunas para las coberturas planificadas, admite una breve consideración. Es la prueba más visible del fracaso.
El documento del organismo estatal fue confirmado por el diputado Pablo Yedlin en estos términos. “Algunos recortes son alarmantes, como los de la vacuna para la Hepatitis A, para la cual en 2016 se adquirieron 880.000 dosis y en 2018 solo 401.000 y la de Hepatitis B pasó de 715.939 a 300.000”.
El propio Adolfo Rubinstein salió públicamente a reconocer la falta adjudicándola a problemas en las compras al Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Según fuentes que estuvieron en la reunión, la adquisición del stock de la vacuna para 2020 estaría en peligro.
Sin embargo, la sospecha que los especialistas y sanitaristas más renombrados resaltan, es que, los problemas en la distribución y el abastecimiento de las vacunas sea la puerta de entrada a la descentralización del Programa, algo que, perjudicaría seriamente las compras de las dosis.
Es que la cuestión de reducir la responsabilidad de los programas nacionales tiene como contrapartida que, al no financiar a las provincias, las obliga a salir a comprar, y ello importa un problema porque, no todos los distritos disponen de los recursos. A su vez, las provincias terminan pagando por las vacunas hasta veinte veces más del precio que puede conseguir la Nación a través de la compra mediante la Organización Panamericana de la Salud.
No se nos escapa que al actual escenario de falta de vacunas contribuyó eficazmente la decisión del Gobierno de degradar el Ministerio de Salud al rango de Secretaría, desguazando así, el formidable dispositivo de control, recursos y monitoreo del organismo en materia de prevención de vacunas.
Es evidente que los problemas de abastecimiento hacen que resulte imposible garantizar el derecho de inmunizar a la población. Cuando una familia acude a un centro de salud, por ejemplo, en una región alejada y se encuentra con que faltan dosis de alguna vacuna, ello configura una oportunidad perdida de vacunación porque, lo más probable es que esa familia no regrese.
Al respecto, Oscar Trotta, el ex Director del Hospital Garraham y Director del Instituto Revisor de Políticas Sociales y Acceso a la salud de la Defensoría del Pueblo señaló que: “Las familias sufren una complicación mayor por el cierre de los programas de abordaje territorial. Esto incluye a los vacunadores que iban a los barrios, los clubes, los lugares de trabajo”, y agregó: “Al desarticular esos programas, y como consecuencia de la situación económica, las familias no cuentan con los recursos para trasladarse y deciden postergar o suspender el esquema de vacunación”.
Señor Presidente, es inconcebible que a escasos meses de concluir el mandato del presidente Macri, se atribuya a errores o problemas de abastecimiento el faltante de vacunas o la reducción de su adquisición. Podemos conceder el beneficio del primer año de gestión para consustanciarse con el mecanismo de compra, distribución y aplicación, pero no se puede improvisar en salud, hay ineficiencia e irresponsabilidad manifiesta nada más ni nada menos que con la salud de la población.
El ex ministro de salud Daniel Gollán remarcó que el documento que difundió Rubinstein dejó en evidencia “lo que el Gobierno está tapando”. Al referirse a la situación de la Conaim destacó: “La Comisión siempre es muy moderada, pero están desbordados por la cantidad de denuncias de faltantes de vacunas y de otros materiales como los descartables. Las dosis no están llegando en tiempo y forma”
La envergadura del problema fue ocultada hasta que debió salir a la luz ya que hace apenas dos años, el documento de los Jefes de Inmunizaciones provinciales refería que “durante todo el 2017 no contamos con las dosis planificadas para cumplir con la vacunación antimeningocócica cuadrivalente (Menveo®) de los niños de 3 y 5 meses y de los adolescentes de 11 años: incluso en muchas provincias, la vacunación de este grupo etario no se realizó” y aún más, añadían que “ya nos comunicaron que no recibiremos las dosis adeudadas de 2017, lo que hace que la situación se plantee como crítica, sabiendo que existen dosis en aduana desde hace casi 1 año que, son además, insuficientes para cubrir a la población objetivo”’.
Un año después nuevamente se ha difundido en los medios de distintas provincias como Entre Ríos, Santa Fe, San Luis y Chubut, denuncias de los gobiernos locales sobre faltantes en la entrega de vacunas e insumos necesarios para la vacunación que debe proveer el Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación. En especial, triple bacteriana, Sabin, antimeningococo y triple viral.
En esa línea, el 25 de marzo de este año se realizó en Buenos Aires la primera reunión del Consejo Federal de Salud (CoFeSa), donde este tema marcó la agenda del encuentro: los ministros provinciales expresaron su preocupación al Secretario de Gobierno en Salud.
Un dato que surge del informe de la Fundación Soberanía Sanitaria hace hincapié en la provincia de Buenos Aires y refleja el impacto de la falta de entrega de insumos y vacunas en el mayor distrito poblacional de nuestro país.
“Durante 2018, la provincia de Buenos Aires, también sufrió las consecuencias del ajuste en la política de inmunizaciones. Del total de vacunas incluidas en el CNV, sólo en 3 casos recibió el 100 % de las dosis requeridas: la vacuna contra la difteria y el tétanos (doble bacteriana), la vacuna contra la tos convulsa, y tétanos (triple bacteriana) y la vacuna pediátrica contra la gripe. Para el resto de las vacunas, las dosis enviadas por el (ex) Ministerio de Salud de la Nación estuvo muy por debajo de los requerimientos de la provincia.”.
Es importante destacar que el informe releva 5 municipios de la provincia de Buenos Aires donde fueron detectados faltantes de vacunas: La Matanza, Avellaneda, José C. Paz, Mercedes y un municipio del conurbano que solicitó no ser mencionado. En todos ellos hay faltantes de alguna vacuna del CNV.
Señor Presidente, esto es inadmisible, según la ley 22.909 “Las vacunas son obligatorias en el territorio de la República Argentina”. El ahora (ex) Ministerio de Salud de la Nación es el responsable de asegurar la provisión de insumos, tanto biológicos (vacunas) como descartables, a cada una de las jurisdicciones en base a la planificación anual elaborada por cada provincia. Estos faltantes redundan en la disminución de las coberturas de vacunación. Es decir, en menos chicas y chicos bonaerenses vacunados y protegidos contra enfermedades. Las vacunas contra la hepatitis B, la poliomelitis (OPV), contra la difteria tosferina, tétanos, hepatitis B y Haemophilus influenzae tipo b (quíntuple), hepatitis A y contra el neumococo (neumo 13) han bajado su cobertura en 2017 respecto de 2015.
Nuestro país ha sido un ejemplo para la región y para el mundo por el amplio calendario nacional de vacunación con que cuenta. A poco de indagar en el informe de la Secretaría de Salud, se concluye que la política de inmunizaciones que durante más de 10 años llevó a cabo el Estado, ya no constituye una prioridad. Esta situación es la consecuencia de una política deliberada en materia de salud que obedece a designios externos de recorte del gasto público.
A partir de la información, ahora blanqueada por la Secretaría de Gobierno en Salud, y del relevamiento que realizara la fundación Soberanía Sanitaria en cinco municipios de la provincia de Buenos Aires, se pudo constatar faltantes de entregas o entregas irregulares de vacunas claves para prevenir enfermedades ya eliminadas en nuestro país como la poliomelitis o la difteria, y de otras controladas como el sarampión y la rubeola.
Si a este crudo diagnóstico verificado, le sumamos la disminución en la compra y distribución en las provincias y el descenso de las coberturas de esas vacunas, podemos concluir que nuestra población está en riesgo.
Otra cuestión no menos importante que trascendió por estos días vinculada al tema de esta iniciativa fue la imputación del fiscal Guillermo Marijuan a la ministra de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley y al Secretario de Salud Adolfo Rubinstein, por violar la sentencia firme del Juzgado Federal Nº 2 de La Plata, en donde se hizo lugar a la acción colectiva para que el gobierno cumpla con la vacunación contra la bacteria del meningococo.
En agosto de 2018, el Ministerio de Salud y Desarrollo Social comunicó que “con respecto a la vacunación antimeningocócica se acordó la estrategia de priorizar a los grupos más vulnerables de 3, 5 y 15 meses de vida y posponer la dosis de los 11 años hasta contar con la disponibilidad necesaria”.
Lo que hicieron los citados funcionarios fue excluirla del Calendario Nacional de Vacunación establecido en la ley 22.909, situación que originó el reclamo y la presentación del amparo colectivo que concedió el Juzgado Federal Nº 2 de La Plata y que quedó firme, pero el Ministerio se negó a cumplir.
Es decir que, en una materia sensible para la salud de la población el gobierno de Cambiemos hizo caso omiso a una resolución judicial.
¿De qué república nos hablan los que desobedecen a la justicia; los que terminan complicados judicialmente por violar una sentencia?
Señor Presidente, recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS), advirtió que hoy, las vacunas previenen la muerte de hasta 3 millones de individuos por año, y si más personas accedieran a ellas se podrían evitar 1,5 millón de muertes más. Consultado por Infobae, el doctor Daniel Stamboulian, experto infectólogo argentino, fue categórico: "Las vacunas fueron y son, después del agua potable, los elementos más importantes para la reducción de las enfermedades y muertes".
La vacunación ha sido uno de los principales logros en la reducción de la mortalidad infantil. Y es que el 30 por ciento de las muertes de niños menores de 5 años puede prevenirse con un gesto tan simple como ponerles una vacuna.
A su vez, en diciembre del 2018, se sancionó la nueva Ley de Vacunas que establece la gratuidad en el acceso a los servicios de vacunación "con equidad social para todas las etapas de la vida"; la obligatoriedad de aplicarse las vacunas para todos los habitantes; y la prevalencia de la salud pública por sobre el interés particular, entre otros principios.
Así, nuestro calendario nacional de vacunación cuenta con 18 vacunas para todas las poblaciones, que deben aplicarse desde los primeros días de vida hasta la adultez, y dos más exclusivas para las personas que viven en zonas de riesgo (fiebre amarilla y fiebre hemorrágica argentina).
La vacunación es una responsabilidad de todos y excede al ámbito de la salud para favorecer el acceso de esta herramienta en la sociedad. Es por eso que la población tiene que poder acceder a las vacunas y por ello las vacunas deben estar disponibles sin que pueda concebirse la existencia de faltantes. Se debe instalar el concepto de vacuna como derecho y responsabilidad, con un rol rector del Estado en cuanto a la disponibilidad y acceso.
Lo informado por el Secretario de Salud a ésta H. Cámara no agota nuestra inquietud y es por ello que con esta iniciativa buscamos obtener mayores precisiones al respecto toda vez que la persistencia de los factores señalados compromete la responsabilidad del Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación en su carácter de garante de la provisión de vacunas a cada una de las jurisdicciones.
Por todo lo expuesto, invito a mis pares, Señores Diputados de la Nación, a que me acompañen en el presente proyecto de Resolución, con su tratamiento y aprobación.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
ALONSO, LAURA V. BUENOS AIRES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
FILMUS, DANIEL CIUDAD de BUENOS AIRES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
VALLEJOS, FERNANDA BUENOS AIRES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
SORAIRE, MIRTA ALICIA TUCUMAN FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
GONZALEZ, JOSEFINA VICTORIA SANTA FE FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
ROMERO, JORGE ANTONIO CORRIENTES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
SALVAREZZA, ROBERTO BUENOS AIRES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
GROSSO, LEONARDO BUENOS AIRES MOVIMIENTO EVITA
MACHA, MONICA BUENOS AIRES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
YASKY, HUGO BUENOS AIRES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
ACCION SOCIAL Y SALUD PUBLICA (Primera Competencia)
Trámite
Cámara Movimiento Fecha Resultado
Diputados SOLICITUD DE SER COFIRMANTE DEL DIPUTADO YASKY (A SUS ANTECEDENTES)