El Senado y Cámara de Diputados...

ARTÍCULO 1° - Declárase Bien de Interés Histórico Nacional, en los términos de la Ley 12.665, a la casa donde viviera el ex presidente de la Nación, Dr. Ramón S. Castillo, sita en la intersección de las calles Eulalia Ares de Vildoza esquina Presbítero Adolfo Nieva, de la localidad de Ancasti, provincia de Catamarca.

ARTÍCULO 2° - La Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos, dependiente del Ministerio de Cultura de la Nación, instrumentará todo lo atinente para el cumplimiento de la presente ley.

ARTÍCULO 3° - Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

El presente proyecto promueve la declaración de bien de interés histórico nacional, en los términos que establece la Ley 12.665, a la casa donde viviera Ramón S. Castillo, ex presidente de la República, único ciudadano nacido en la provincia de Catamarca que hasta la fecha ha tenido el honor de ocupar la primera magistratura del país.

Ramón Castillo nació el 20 de noviembre de 1873 en la villa de Ancasti, provincia de Catamarca. Sus padres fueron Rafael Castillo y María Barrionuevo de Castillo. Cursó estudios secundarios en el Colegio Nacional de Catamarca y prosiguió sus estudios universitarios en la Facultad de Derecho de la ciudad de Buenos Aires, donde llegó a ser profesor titular de Derecho Comercial y Decano entre 1923 y 1928. Jurisconsulto y doctrinario de formación académica desarrolló una notable carrera judicial en la que empezó como meritorio en 1983 hasta llegar a ser integrante de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial hasta su retiro en 1918.

En política fue designado como interventor en la provincia de Tucumán en 1930, cargo que ejerció durante cinco meses. Desde 1932 a 1935 fue senador nacional por Catamarca y luego se desempeñó como ministro del Interior del gobierno de Agustín P. Justo entre 1936 y 1937, cargo al que renunció al aceptar la candidatura a vicepresidente para las elecciones de ese año en las que resultó electo, secundando a Roberto M. Ortiz como presidente. Tras la renuncia de éste por razones de salud y su posterior fallecimiento, Castillo ejercerá la primera magistratura desde el 27 de junio de 1942 hasta su derrocamiento ocurrido el 4 de junio de 1943.

En su breve gobierno se puede destacar como obra la reafirmación de la neutralidad argentina en la Segunda Guerra Mundial, la declaración de la Casa de Gobierno como Monumento Histórico Nacional, la creación de la Flota Mercante Nacional, la revocación de la concesión del Puerto de Rosario, la nacionalización de la Compañía Primitiva de Gas e inauguración del Gasoducto entre La Plata y Buenos Aires. Asimismo la creación de la Estación Astrofísica del Observatorio de Córdoba, la intervención de la Provincia de Tucumán y la disolución del Concejo Deliberante de la Ciudad de Buenos Aires, ante denuncias de corrupción en el mismo.

En el ejercicio de las diversas funciones ejecutivas que fueron reseñadas, Castillo participó activamente en la gestión para la realización de obras altamente significativas para Catamarca. En este punto podemos citar destacados trabajos viales como el camino de cornisa de la famosa Cuesta del Portezuelo y la pavimentación del camino que vincula a la capital catamarqueña con Valle Viejo y Fray Mamerto Esquiú. Asimismo se destaca la concreción del edificio de Correos y Telégrafos, el Hotel Nacional de Turismo y la hostería de Ancasti. No menos importante fue su intervención en la gestión del proyecto y licitación del dique El Jumeal, en la capital provincial.

Respecto de su actuación pública, Castillo fue protagonista de una etapa de la vida nacional signada por la fragilidad institucional, desde la consideración del fraude electoral hasta la posición del país en la Segunda Guerra Mundial, todo lo cual es objeto de las más diversas críticas. Sin embargo, como todos los personajes históricos son parte de nuestro acervo, con sus luces y sombras.

En la Villa de Ancasti se mantienen sectores de la casa paterna de Ramón Castillo, con su configuración original, en la esquina de las calles Eulalia Ares de Vildoza y Presbítero Adolfo Nieva, solar donde transcurrieron los primeros años de vida de quien resulta ser hasta el presente el único catamarqueño que alcanzara el honor de ejercer la presidencia de la República. Esta casa se ubica a metros de la plaza principal y a la vuelta de la Iglesia de Ancasti. Al frente de este bien inmueble con evidente interés histórico se ubica la Escuela N° 249, justamente denominada Ramón S. Castillo. En el entorno sencillo de este conglomerado pintoresco, la casa paterna de Castillo carece de cualquier referencia que permita a los turistas, o tan siquiera a los habitantes de la villa ancasteña, tomar consciencia de este patrimonio. Es por ello que considero muy útil a la preservación de nuestra historia y también como una revalorización del patrimonio turístico, tomar recaudos para que el bien en cuestión sea declarado de Interés Histórico Nacional en los términos de la Ley 12.665 y de tal manera la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos, dependiente del Ministerio de Cultura de la Nación, tome la participación pertinente para la conservación y revalorización de este bien.

Es por ello que solicito el acompañamiento de mis pares para la aprobación del presente proyecto.