La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que remita a esta Honorable Cámara, a través del Ministerio de Salud de la Nación, toda la información que disponga acerca de las condiciones infraestructurales y de servicios de todos los inmuebles que se encuentren emplazados en el predio de 41.716 metros cuadrados, en la zona oeste de la ciudad de Mar del Plata (Ruta 88 Km. 1 y medio), dentro del cual funciona el Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur, Juan Otimio Tesone (I.Na.Re.P.S.).

Asimismo, solicitamos que informe, con especial detalle, acerca de las condiciones sanitarias y de infraestructura del inmueble emplazado dentro del mismo predio, en el que funciona la Escuela Especial N° 501 “María Estela Brito”, la cual no ha comenzado aún el ciclo lectivo 2018 por falta de mantenimiento edilicio, impidiendo la asistencias e integración de alumnos y alumnas con necesidades educativas especiales, situación que constituye una violación a los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes.

Señor presidente:

En el amplio predio de 41.716 metros cuadrados, en la zona oeste de la ciudad de Mar del Plata (Ruta 88 Km 1 y medio), funciona desde 1958 el Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur, Juan Otimio Tesone, (I.Na.Re.P.S.), dependiente del Ministerio de Salud de la Nación.

Pero en el mismo predio también están emplazadas las instalaciones edilicias en las que funciona la Escuela Especial N° 501 “María Estela Brito”, perteneciente a la educación pública estatal, que nuclea distintos niveles de enseñanza, como educación especial de nivel inicial y la educación especial primaria. Asimismo también funcionan distintos ámbitos para la ayuda y la Integración escolar.

Lamentablemente la Escuela no ha podido aún iniciar el ciclo lectivo 2018, debido a los graves inconvenientes que presenta el inmueble en que funciona la institución escolar. Los problemas concretos que afectan directamente a los 75 alumnos que cuenta la sede (matrícula que se eleva a 150 niños y niñas si se suman los que asisten a integración), incluyen filtraciones en los cielos rasos, falta de agua en los baños, falta de calefacción, instalaciones eléctricas precarias, entre otras.

Para que Usted pueda comprender mejor Señor Presidente, se trata en su mayoría de estudiantes que poseen discapacidad neurolocomotora. Razón por la cual se desplazan en sillas de ruedas o con diferentes tipos de andadores. Estos estudiantes poseen diagnósticos severos como parálisis cerebral, distrofias, multidiscapacidad, etc. y realizan doble jornada, asistiendo a la formación laboral y la formación pedagógica. Así pues, la mayoría de los y las alumnas ingresan a las 08:30 hs. y salen a las 16:30 hs., casi todo el día.

Cabe destacar también, que los niños y las niñas en su mayoría están descubiertas de un sistema de salud, y en ese marco la escuela constituye el espacio donde reciben contención para algunas de las demandas no satisfechas, y representa un ámbito para la protección del derecho a la salud y a la educación principalmente, así como todas las garantías que los y las asisten por disposición de la Convención Internacional de los Niños, NIñas y Adolescentes.

Así pues, en el marco de esta realidad familiar y socioeconómica, la escuela 501 representa el ámbito en el que cada uno de estos niños y niñas puede ser atendida dignamente mientras aprende, se relaciona y juega, materializándose así la posibilidad de desarrollar sus capacidades dentro de un contexto social y educativo digno, de interacciones sanas y acordes a sus necesidades.

Según indicaron, las autoridades del establecimiento comenzaron a gestionar una solución urgente en mayo de 2017 ante el Consejo Escolar del distrito de General Pueyrredón y la Dirección Provincial de Infraestructura de la Provincia de Buenos Aires, aunque gran parte de los inconvenientes los vienen arrastrando desde 2016.

La solución de estos inconvenientes, que se replican en muchas otras escuelas especiales como la 503, 512, 514, resulta urgente dado el hecho de que el trabajo que realizan los y las docentes, se lleva a cabo en condiciones sumamente precarias. “Sólo había un baño (expresan los directivos en relación al ciclo lectivo 2017), y como estábamos con media escuela sin calefacción, ese mismo baño era el que se usaba con las preceptoras para los chicos que necesitaban ser cambiados. O sea que las demoras para ingresar al baño eran una falta de respeto y una vulneración a los derechos de nuestros alumnos”.

Efectivamente ante este escenario, observamos como legisladores y legisladoras de la Nación, representantes de las voluntades y la expresión popular, que nos encontramos ante una situación de vulneración de derechos de los y las niñas que asisten a dicho establecimiento, los que como usted sabe cuentan con derechos y garantías especiales dadas sus capacidades diferentes.

Recordemos que la Ley 26061 de protección integral de los derechos de Niños, Niñas y adolescentes, establece en su artículo tercero el Principio del Interés Superior de Niños y Niñas, el cual implica la prevalencia de sus derechos e intereses frente a otros derechos e intereses igualmente legítimos, cuando exista conflicto entre ambos.

Es oportuno recordar este principio instituido por ley sancionada en este Congreso Nacional, toda vez que aún sin determinar las competencias de intervención jurisdiccional sobre la escuela, el ámbito de gobierno que primariamente tenga injerencia en el espacio donde los y las alumnas desarrollan su vida escolar y su proceso de integración a la vida social, deberá atender esa garantía de derechos. Para el caso, entendemos que dicha competencia corresponde al Ministerio de Salud de la Nación.

Por todo lo expuesto, solicito a los y las legisladoras, acompañen con su voto la presente solicitud de informe.