La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Su más enérgico repudio y profunda preocupación por las agresiones sufridas por el camarógrafo de la agencia Télam Fabricio Baca, y el cronista Jorge Moure de Radio Mitre, el pasado 10 de abril del corriente mientras cubrían la asunción del designado interventor del Partido Justicialista, Luis Barrionuevo.

Señor presidente:

Durante el transcurso de la jornada en la que, tras fallo judicial, asumió el interventor del Parido Justicialista Luis Barrionuevo, en la sede del PJ nacional se desataron acontecimientos violentos que llevaron a una situación de creciente tensión entre manifestantes y la prensa.

Mientras el camarógrafo Fabricio Baca del departamento de video de la Agencia Télam, realizaba la cobertura de la intervención en esta sede partidaria, fue agredido al arrastrársele hasta el capó de un auto tomado por el cuello. Continuó recibiendo golpes en la espalda mientras Alejo Ruiz, compañero del periodista, quitó al agresor de la escena. Jorge Moure, periodista de Radio Mitre también hizo referencia a agresiones del tipo de codazos en la boca del estómago y empujones – y a través de su cuenta de twitter se solidarizó con Fabricio Baca.

Tanto el Foro de Periodismo Argentino (FOPEA), como la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) y Télam ya han repudiado los hechos; y el camarógrafo radicó la denuncia policial.

Nos solidarizamos con el periodista agredido y nos unimos a FOPEA que "exige que se investigue y se sancione a los agresores de los periodistas que estuvieron en la puerta de la sede nacional del PJ".

La actuación del periodismo debe existir sin condicionamientos de sectores que pretenden coartar, presionar y condicionar a los trabajadores de prensa que se encuentran comprometidos con brindar la información tal cual se produce. Se destaca que es el medio mediante el cual el liderazgo político rinde cuentas a su ciudadanía y publicita acontecimientos que requieren atención. El acontecimiento mencionado es

sumamente intranquilizador y constituye un doble motivo de alarma: por el agravio a la libertad de expresión que representa la coerción al trabajo periodístico y por la violencia que vulnera la integridad física de otro ser humano.

Por lo expuesto Sr. Presidente, le solicitamos la aprobación del presente proyecto de declaración.