La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar beneplácito por la Campaña “Ningún Bebé con Chagas” desarrollada por la Fundación Mundo Sano e implementada en nuestro país a partir del mes de marzo de 2019.

Señor presidente:

El Chagas es una enfermedad producida por el Trypanosoma cruzi, un parásito que transmiten las vinchucas, insectos que se alimentan de sangre y habitan principalmente en zonas rurales y periurbanas de Latinoamérica, aunque, en las últimas décadas, a partir de las corrientes migratorias, se ha observado con mayor frecuencia en los Estados Unidos, Canadá, España, y algunos países del Pacífico Occidental, dejando de ser una enfermedad exclusivamente rural.

El Chagas se transmite a las personas principalmente por las heces de las vinchucas, a través de transfusiones de sangre o trasplantes de órganos provenientes de una persona infectada, por ingesta de alimentos o bebidas contaminadas, o por transmisión de una madre infectada a su hijo durante el embarazo o en el parto (transmisión vertical, congénita o perinatal).

El 90% de las personas infectadas no saben que han contraído la infección, ya que pueden pasar muchos años hasta que se manifiesten los síntomas, que son de tipo cardíaco o digestivo; y el 70% de los casos, si no se diagnostica precozmente, puede llegar a ser mortal, siendo las causas más comunes de fallecimiento las afecciones cardiovasculares y, en ocasiones, la muerte súbita. Lo más importante a destacar es que el Chagas con un diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado se cura.

Según datos de la OPS/OMS, el Chagas tiene hoy un alcance global de 6 a 8 millones de personas infectadas, de las cuales 1,2 millones son mujeres en edad fértil y nacen cada año en el mundo 9.000 bebés infectados, uno cada hora, donde la gran mayoría de ellos no accede al diagnóstico ni al tratamiento.

En nuestro país, según datos de OPS/OMS, hay aproximadamente 7 millones de personas en riesgo de contraer Chagas, 1,6 millones de infectados y 1.300 bebés que cada año nacen con la enfermedad; constituyéndose, así como la principal enfermedad endémica de la Argentina.

Cabe señalar que en los últimos 30 años hubo grandes avances gracias al control vectorial en los países endémicos. Sin embargo, hoy una de las vías de transmisión más importantes de la enfermedad es la vertical, congénita o perinatal; es decir, cuando una madre se la transmite a su hijo durante el embarazo o al momento del parto. Al respecto, la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) advirtió en un informe reciente que la transmisión perinatal se encuentra en crecimiento y que ya representa el 40% de los casos nuevos y que sólo se detecta el 30%.

Asimismo, ha habido en los últimos años avances importantes respecto a las herramientas hoy disponibles, tanto para el diagnóstico como para el tratamiento de la enfermedad, en nuestro país.

En este sentido, el diagnóstico durante el embarazo a través de un estudio de sangre conocido como "Prueba de Chagas" es obligatorio a partir de la Ley N° 26.281. Por otro lado, la Organización Panamericana de la Salud publicó las Guías de Tratamiento del Paciente Infectado, a partir del consenso alcanzado en la comunidad científica y médica respecto al tratamiento de la enfermedad; las cuales en marzo de este año el Ministerio de Salud de la Nación las publicó como resolución. Por último, en nuestro país existen dos drogas (el benznidazol y el nifurtimox) que el Ministerio de Salud entrega en forma gratuita a través de su Programa de Chagas a todos los pacientes para su tratamiento y, desde hace algunos meses se aprobó y se encuentra disponible en la Argentina los comprimidos de benznidazol para los bebés que nacen infectados.

Sin embargo, en nuestro país sigue existiendo una gran brecha en la disponibilidad y acceso al diagnóstico y tratamiento. Por tal motivo, adquiera gran relevancia la Campaña Ningún Bebé con Chagas desarrollada e implementada por la Fundación Mundo Sano a partir del mes de marzo del corriente año.

Ningún Bebé con Chagas es una campaña de sensibilización y visibilización de la enfermedad dirigida a mujeres en edad fértil. Se busca que, para el 2030, todos los bebés que nazcan con la enfermedad puedan tratarse y curarse, así como lograr que todas las mujeres en edad fértil accedan al diagnóstico y tratamiento. La campaña busca que la mujer joven que tiene Chagas, antes de quedar embarazada, haga el tratamiento. Para que, cuando quede embarazada, no se lo transmita a su bebé.

La campaña consiste en un video de un minuto y medio con el cual se busca generar impacto a través de la historia de Ana, una beba que hubiese heredado el Chagas si su mamá antes de quedar embarazada no hubiese decidido hacerse el tratamiento y curarse. Además del spot, la campaña cuenta con el sitio www.ningunbebeconchagas.com, donde se puede firmar el compromiso para el año 2030 e invita a compartir la campaña en la redes con el hashtag #NingúnBebéConChagas.

Mundo Sano es una fundación familiar, fundada en 1993 por el Dr. Roberto Gold para reducir el impacto de las enfermedades desatendidas, cuya misión es la de desarrollar modelos de gestión eficaces que sean replicables, escalables y transferibles, a través de alianzas público-privadas, sobre la base de la investigación científica multidisciplinaria junto a las comunidades afectadas.

Las enfermedades desatendidas son un conjunto de enfermedades infecciosas, muchas de ellas parasitarias, que afectan a las poblaciones que viven en condiciones socioeconómicas de pobreza y que tienen problemas de acceso a los servicios de salud.

Estas enfermedades predominan en climas tropicales y húmedos, son crónicas y tienen efectos perdurables en la salud de las personas. En su mayoría, reciben poca atención y se ven postergadas en las prioridades de políticas de salud pública, sumado a la inexistencia de estadísticas fiables que también han dificultado los esfuerzos por darlas a conocer. La desatención también se produce en el nivel de la investigación y el desarrollo.

Muchas de las enfermedades desatendidas pueden prevenirse, eliminarse e incluso erradicarse si, tal y como subraya la Organización Mundial de la Salud, se mejora el acceso a intervenciones seguras y rentables ya existentes.

Para abordar estas enfermedades Mundo Sano desarrolla programas y proyectos alineados a sus tres pilares: investigación transnacional, divulgación del conocimiento y cooperación público privada.

La Fundación Mundo Sano tiene sus oficinas principales en Buenos Aires y Madrid. Pero además cuenta con sedes en zonas estratégicas de Argentina como Tartagal (Salta), Añatuya (Santiago del Estero), Pampa del Indio (Chaco), Clorinda (Formosa) y Puerto Iguazú (Misiones); y, desde la oficina de Madrid coordinan las actividades desarrolladas en África.

Por todo lo aquí expuesto, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación de este proyecto de resolución.