Luis Eugenio Basterra
Diputado de la Nación
UNIÓN POR LA PATRIA
Período: 10/12/2023 - 09/12/2027
PROYECTO DE RESOLUCION
Expediente: 8348-D-2014
Sumario: EXPRESAR BENEPLACITO POR LA PUBLICACION DEL LIBRO DE ANA OLIVO "ANITA DESDE LAS LIGAS AGRARIAS. TIERRA, TRABAJO Y DIGNIDAD", COLECCION "HISTORIAS DE VIDA".
Fecha: 23/10/2014
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 151
	        Expresar beneplácito por la 
publicación del libro de Ana Olivo "Anita desde las Ligas Agrarias. 
Tierra, trabajo y dignidad", Colección "Historias de vida", Literatura 
silvestre y popular, Coordinadores: José Muchnik y Roberto Cittadini. 
Ediciones Ciccus, agosto 2013. 
	          
      
  
 
					FUNDAMENTOS
Señor presidente:
	        Por medio del presente proyecto 
solicitamos a esta Honorable Cámara exprese su beneplácito por la publicación 
del libro "Anita desde las Ligas Agrarias. Tierra, trabajo y dignidad" de Ana Olivo 
que forma parte de una colección coordinada por José Muchnik y Roberto 
Cittadini y cuenta con el apoyo del programa Prohuerta del INTA y el Ministerio 
de Desarrollo Social de la Nación. La colección constituye historias de vida, son 
testimonios escritos  por sus protagonistas. 
	        
	        
	        La historia de Anita Olivo es 
conmovedora, ejemplo de lucha y tal como refleja en su contratapa César 
Mariano Baldoni el libro "es un retrato no sólo de una región, sino de un mundo 
campesino que se han empeñado en quitar de nuestro imaginario colectivo, pero 
que persiste, se transforma y emerge. Un relato que va más allá de los 
estereotipos: Anita luchadora, madre, hija, hermana, vecina, trabajadora. Ingresar 
en su mundo es ingresar en nuestro mundo, una historia conmovedora, 
movilizadora y que nos llena de esperanza por el potencial de nuestro 
pueblo".
	        
	        
	        Ana Olivo, es correntina y tiene 62 
años, nació, creció, vivió, luchó y sigue luchando por la dignidad de las familias 
rurales que viven del esfuerzo que significa la agricultura familiar. Viene del seno 
de una familia de trabajadores rurales y bregó siempre para que su trabajo fuera 
dignamente considerado. 
	        
	        
	        Su vida en el campo no fue sencilla y 
cansada de padecer las injusticias y los abusos de los propietarios de los campos 
emprendió una lucha firme y sostenida 
	        
	        
	        para lograr que fueran 
respetados los derechos de las familias rurales. Por aquellos años, las familias 
completas estaban abocadas al trabajo esclavo que los dueños de la tierra les 
ofrecían. El padre, la madre y los niños dedicaban su vida al cultivo, en la 
mayoría de los casos, del tabaco a cambio de precarias viviendas y una huerta 
para su propio sustento.  A muy temprana edad se movilizó para que los niños 
puedan estudiar presionando para que los propietarios donaran el terreno para la 
construcción de la escuela, con la ayuda del sacerdote que periódicamente 
visitaba el paraje rural donde vivía junto con su familia, se capacitó y motivó a 
otros jóvenes para que se formaran en el trabajo rural e impulsó la formación de 
grupos de discusión y organización para cambiar la dura realidad de las familias 
de agricultores sometidas a las decisiones caprichosas e inhumanas de los 
dueños de la tierra. Ella en su libro dice: "Para mí fue importante todo esto, lo 
tomé con gran responsabilidad y convicción"
	        
	        
	        Nunca dejó de trabajar, 
pero tampoco nunca abandonó la lucha. Desde su infancia en parajes rurales de 
Goya y Curuzú Cuatiá se preocupó y ocupó de que la vida de las familias 
campesinas mejorara. "Hacíamos las cosas sin pensar en nuestros derechos, si 
bien el trabajo del tabaco es familiar, nos dábamos cuenta que no teníamos 
descanso. En muchos casos no éramos dueños de nada. Nuestros padres 
dejaban la vida, llegaba fin de año y teníamos que comenzar otra vez" - expresa 
en su libro.
	        
	        
	        En los años 70, los pequeños grupos 
campesinos ya estaban organizados y conscientes de las injusticias. Más de 15 
mil familias trabajaban en los campos tabacaleros a cambio de un contrato de 
palabra por el cual trabajaban la tierra pero entregaban desde el 30% hasta el 
50% de su cosecha. Comenzaron los reclamos, se constituyeron asambleas, se 
entregaron petitorios a las autoridades. El malestar de los campesinos era cada 
vez más notorio y con ello el fastidio de 
	        
	        
	        los patrones. Los campesinos se 
organizaron en Ligas Agrarias, constituyeron delegados, realizaron huelgas y 
pronto reclamaron una ley que los protegiera. Y allí estuvo siempre Ana Olivo, 
ella la era delegada de su región. 
	        
	        
	        Las estructuras políticas que 
respondían a los propietarios de los campos en principio realizaron algunas 
pequeñas concesiones a los reclamos de los campesinos pero no pudieron 
sostenerlas y enseguida comenzó su persecución. Ana Olivo y su entonces novio 
fueron ilegalmente apresados y ella fue obligada al destierro. Primero sola, luego 
con su marido y después con sus hijos aguardaron en México el regreso a la 
democracia y retornaron a la Argentina. Aquí, se afincaron nuevamente en el 
campo. Continuaron con las tareas agrícolas pero con otra perspectiva, 
conscientes de sus valores y sus principios lograron ser dueños de su tierra y así 
de su producto, también sus hijos tenían la escuela para estudiar. 
	        
	        
	        Ana Olivo y su familia dejaron de 
cultivar tabaco, porque como dice ella misma "hemos trabajado muchos años 
para mantener estos grandes monopolios que se han aprovechado de nuestra 
juventud y la de nuestros hijos". Pero no abandonó el camino de la lucha por la 
dignidad de las familias rurales. Procura que los jóvenes se queden en el campo 
trabajando a través de organizaciones que los incentivan para que se capaciten, 
sean promotores de proyectos de trabajo. De hecho, hoy existen escuelas de 
estudios superiores, como las "Escuelas de las Familias Agrícolas (EFA)" y otras 
que tienen extensiones áulicas en el campo.
	        
	        
	        Ana Olivo está y estará vinculada a la 
defensa de la agricultura familiar. En sus reflexiones finales dice textualmente: 
"Hoy a los 61 años, veo que el campo sigue teniendo la misma importancia que 
tuvo siempre y que hace falta mucho trabajo de concientización y de contención 
de los campesinos. Por eso hay que seguir trabajando, acompañando y 
creciendo".
	        
	        
	        Estamos convencidos de que una 
historia de vida como la de Ana Olivo es ejemplo de lucha para todos los jóvenes 
pero especialmente para las familias rurales que aún hoy sufren maltrato y 
abuso. Por estas razones, solicitamos el acompañamiento de esta iniciativa para 
su aprobación.
	          
      
  
 
					
  | Firmante | Distrito | Bloque | 
|---|---|---|
| PERRONI, ANA MARIA | CORRIENTES | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ | 
| BASTERRA, LUIS EUGENIO | FORMOSA | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ | 
| FERREYRA, ARACELI | CORRIENTES | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ | 
| RUBIN, CARLOS GUSTAVO | CORRIENTES | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ | 
Giro a comisiones en Diputados
					| Comisión | 
|---|
| CULTURA (Primera Competencia) | 
Trámite en comisión(Cámara de Diputados)
					| Fecha | Movimiento | Resultado | 
|---|---|---|
| 11/12/2014 | DICTAMEN | Aprobado por unanimidad con modificaciones en los términos del articulo 114 del reglamento de la H. Cámara | 
Dictamen
					| Cámara | Dictamen | Texto | Fecha | 
|---|---|---|---|
| Diputados | Orden del Dia 1668/2014 | CON MODIFICACIONES; ARTICULO 114 DEL REGLAMENTO DE LA H. CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION | 16/12/2014 | 
 Trámite 
 
							| Cámara | Movimiento | Fecha | Resultado | 
|---|---|---|---|
| Diputados | APROBACION ARTICULO 114 DEL REGLAMENTO DE LA H CAMARA DE DIPUTADOS; COMUNICADO EL 09/02/2015 | APROBADO |