Período:133 Reunion:4 Fecha:15/07/2015 MOVILIDAD DE LAS ASIGNACIONES FAMILIARES


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Corresponde considerar el dictamen de mayoría de la Comisión de Presupuesto y Hacienda recaído en el proyecto de ley venido en revisión del Honorable Senado sobre movilidad de las asignaciones familiares y de la Asignación Universal por Hijo conforme a la ley 26.417.

aquí orden del día n° 2171

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) En consideración en general.
Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SR. FELETTI, ROBERTO JOSE (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: entre los años 1994 y 2006 la Argentina tuvo un desempleo altísimo, de dos dígitos. Recordemos que en la historia económica de nuestro país nunca hubo un ciclo de desempleo tan largo. En la década del 30, en la que el desempleo también fue muy elevado, ese ciclo duró desde 1930 hasta 1936, apenas seis años.
Evidentemente, un desempleo de dos dígitos, que en 1995 alcanzó un pico del 17,5 por ciento y en 2002 de casi el 23 por ciento, destruye el tejido social y laboral de este país. Doce años de desempleo prolongado y alto aniquilan las expectativas de vida de la mayoría de los trabajadores en procura de transformar sus propias vidas y las de sus familias, así como también de progresar.
El gobierno de Néstor Kirchner, que asumió en 2003 y que luego continuó la actual presidenta Cristina Fernández, no solo tuvo que tomar sobre sus hombros el sobreendeudamiento del país que maniataba al Estado y le impedía ejecutar cualquier política pública, sino que también tuvo que hacerse cargo del destrozo social que supuso doce años seguidos de desempleo de dos dígitos.
Afortunadamente para los trabajadores argentinos y para este país, desde 2007 en adelante el desempleo es de un dígito. Hace ya nueve años que en la Argentina el desempleo es la mitad de lo que fue en ese ciclo largo y negativo.
Obviamente, frente a semejante situación social se replantea –y este gobierno se la coloca sobre sus hombros- la necesidad de reparar la protección social emergente. Con el primer peronismo, a partir de la década del 40, la protección social en la Argentina dependía del grado de formalidad, es decir, de la integración plena al mercado de trabajo de quienes estuvieran en condiciones de hacerlo. Me refiero a que la posibilidad de jubilarse, la protección previsional y la protección de chicos y adolescentes –las asignaciones familiares- dependían de la condición de empleado formal.
La destrucción del mercado formal de trabajo operada en ese ciclo de doce años de desempleo hizo que el gobierno nacional replanteara la política de protección social, y por primera vez en la Argentina el acceso a un haber previsional o a una asignación familiar dejó de depender de la condición de empleado formal, porque precisamente había que hacerse cargo y reparar doce años de desempleo prolongado y elevado.
Este gobierno se hizo cargo de ello y constituyó un esquema de protección social, previsional y familiar sustancialmente distinto al que rigió en la Argentina y que fue destruido en ese ciclo. Ese esquema consiste en proteger los dos extremos de la pirámide de edad, esto es, los adultos mayores por un lado y los niños y adolescentes, por el otro, con un ingreso más allá de la condición laboral de quien se encuentra en plenas condiciones de ser parte de la población económicamente activa.
Este es un nuevo Estado de bienestar para la Argentina. La verdad es que frente al escenario mundial actual uno quisiera que este Estado de bienestar fuera conservado, protegido y ampliado, ya que se han creado condiciones de reparación social que en el pasado no existían.
Ese es el dato nuevo que pretendemos consolidar con la presentación de este proyecto de ley, que viene a completar lo que fue la ley de movilidad previsional. Recordemos que esa norma permitió que los trabajadores argentinos que se habían desenvuelto en el mercado informal y que por el accionar de empresarios inescrupulosos no contaban con aportes –cabe aclarar que no es que estos trabajadores no hayan hecho los aportes sino que fueron los empresarios quienes no los hicieron- pudieran acceder al haber previsional. En la actualidad este haber previsional alcanza un nivel de cobertura que en el caso de los trabajadores pasivos se ubica por encima del 95 por ciento.
Además, se ha previsto que el haber previsional cuente con un esquema de movilidad atado al proceso de recaudación, por el que los montos se actualizan dos veces al año. Este es el primer elemento de reparación de esos doce años de desempleo abierto que se aplicó a través del esquema previsto en la ley de movilidad previsional.
Ahora le toca el turno a la otra punta de la pirámide de edad: los niños y adolescentes. Esta propuesta constituye un complemento de protección para los niños y adolescentes, que también se va a actualizar dos veces al año con el mismo esquema asociado a los niveles de recaudación, incorporando por primera vez dentro de las asignaciones familiares la Asignación Universal por Hijo, que ya estaba prevista en la ley 26.474. Como dije, esto viene a completar la situación del otro extremo de la pirámide de edad, porque consideramos que todos tienen derecho a ser protegidos por el Estado, a acceder a un ingreso y a sentir que tienen garantizada su educación por el simple hecho de ser niño o adolescente.
En el caso de los adultos mayores y en el de las asignaciones familiares ese concepto de protección es un bien a cuidar en la Argentina. Justamente estas normas que garantizan la movilidad, tanto en materia previsional como de asignaciones familiares, vienen a consagrar ese Estado de bienestar que ya he mencionado y que debe ser cuidado.
A continuación me voy a referir al significado que tiene la necesidad de reparar esos doce años de desempleo. Para ello me voy a focalizar en lo que fue la universalización de las asignaciones familiares a partir de la implementación de la Asignación Universal por Hijo sobre la base de los cálculos que se hicieron en el momento de su implementación a fines del año 2009, cuando yo formaba parte del Ministerio de Economía. Esto nos permitirá adquirir una visión sobre el impacto que tiene desde el costado fiscal y económico la consagración de este derecho.
En ese momento, proyectando el cálculo hacia el año 2010 –recordemos que la Asignación por Hijo comenzó a regir en noviembre de 2009-, representaba medio punto del PBI, es decir, un 0,5 por ciento del Producto Bruto Interno del año 2010. Pero como todo iba a consumo, también se determinó que la asignación tenía un multiplicador del 2,54 por ciento sobre el nivel de actividad, o sea que por cada peso que en ese momento se destinaba al pago de la Asignación Universal por Hijo se estimulaba y multiplicaba el consumo en 2,54 pesos. Lo que quiero decir con esto es que con medio punto del producto se recuperaba casi 1,30 por ciento de dicho producto gracias a la Asignación Universal por Hijo. Este es un gran efecto multiplicador de la demanda.
Otro punto importante que se determinó en ese entonces es que el 68 por ciento de los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo se focalizaba en el 20 por ciento de los hogares más pobres; el efecto de reparación social era directo e inmediato. En tercer lugar, pudimos determinar que en los municipios del Gran Buenos Aires más afectados por el proceso de desempleo y que gozaban de mayor reparación, el impacto de la erogación o la inversión pública de la Asignación Universal por Hijo elevaban sus presupuestos en un 40 o 50 por ciento en forma directa. Esto implicaba un cambio sustantivo en el proceso de producción y consumo de esos entes económicos.
Pero además, a septiembre de 2010 en el Ministerio de Economía hicimos un trabajo de campo en dos de los municipios –no los voy a nombrar más beneficiados por la Asignación Universal por Hijo. Respecto de una canasta de diez productos se preguntaba en distintas bocas de expendio cuáles habían sido los más vendidos. En esos municipios los productos cuyas ventas se vieron incrementadas fueron mermeladas y galletitas. Es decir que la Asignación Universal por Hijo transformó el desayuno y la merienda de muchos chicos. El consumo que se incrementó no fue el del paco o el del juego –hemos escuchado esa afirmación sino que fue el de mermeladas y galletitas, de acuerdo con nuestro trabajo de campo.
En ese escenario, nos parece que consagrar un derecho con una movilidad definida por ley va a acentuar el proceso de incremento que la Asignación Universal por Hijo sufrió desde su implementación.
Desde noviembre de 2009 hasta junio de 2015, en 68 meses la Asignación Universal por Hijo se incrementó un 365 por ciento. Si lo anualizamos factorialmente, esto significa un incremento de un 31,15 por ciento por año. Este fue el impacto y la evolución de la Asignación Universal por Hijo que se busca consagrar a partir de marzo de 2016, haciéndolo converger con la movilidad previsional. Esto quiere decir que en forma simultánea el haber previsional y la asignación familiar van a tener una movilidad dos veces al año. Este impacto sobre la política de ingresos que recibe un hogar es notable e importante.
Si nosotros pensamos las intervenciones estatales de reparación de esos doce años de desempleo prolongado nos vamos a encontrar con tres aristas: el incremento de los haberes previsionales en el marco de la recuperación de los fondos de jubilaciones y pensiones por parte del Estado, el incremento de las asignaciones familiares en el marco de la implementación de la Asignación Universal por Hijo y el incremento del presupuesto educativo en el marco de lo que fue la recuperación de la capacidad del Estado de decidir sobre sus recursos. Es un shock de inversión social en términos de política previsional, de política de asignaciones familiares y de política educativa que intervino directamente sobre el proceso de deterioro que habían provocado esos años.
No quería intervenir en un debate pero tengo que hacerlo porque no queda otra alternativa.
Es difícil pensar que con un 15 por ciento de desempleo haya menos pobres que con un 7 por ciento. Es muy difícil pensar o imaginar que con haberes previsionales que alcanzan al 95 por ciento de la gente en condiciones de percibir un haber previsional sea lo mismo que cuando solo estaba cubierto el 67 por ciento. Es difícil pensar que habiendo un incremento en la cobertura de 3.700.000 niños y adolescentes que antes no tenían dicho ingreso, hoy haya más pobres que antes. Es muy difícil imaginar que la gigantesca inversión social puesta –como dije antes en educación, política previsional y asignaciones familiares tuvo como objetivo generar más pobres, y que las políticas de ajuste, contracción del gasto, endeudamiento y megadevaluaciones, originaban una condición de bienestar mayor, aunque hubiera menos pobres. Es realmente difícil sostener estos argumentos. Por eso, no los utilicen más.
Otro tema que también me parece trascendente, ligado a este asunto, es el nivel de presión tributaria. Esto pudo conseguirse no solo por el desendeudamiento del Estado sino también porque la Argentina elevó la presión tributaria de 28 a 39 puntos del producto, es decir, 11 puntos. Es muy difícil pensar que podríamos haber tenido una política de reparación como ésta, con reclamos sistemáticos de rebajas de impuestos que hubieran sostenido la educación, las jubilaciones y las asignaciones familiares.
Este debate que espero se desarrolle hoy apunta al corazón del futuro. Es decir, se sostiene este Estado de bienestar, este presupuesto educativo, las nuevas universidades, la cobertura previsional y las asignaciones familiares o se retrocede a dos dígitos de desempleo durante doce años. Este es un debate clave y central.
Es muy difícil pensar que con esta cobertura social, agregando una política de fuerte reducción del desempleo, elevación del salario mínimo y negociaciones paritarias durante doce años continuos, con salarios en alza, hoy tengamos más pobres que antes. Reitero: es muy difícil sostener y pensar esto.
Por último, es muy difícil sostener también que contando con una política de precios, de contención de tarifas de los servicios más esenciales y una política de canasta básica, hoy tengamos más pobres que antes. En síntesis, es muy difícil sostener, con potentes políticas de ingresos, de empleo y de salarios, hoy en la Argentina haya más pobres que antes.
La consagración de derechos, del nuevo Estado de bienestar, protegiendo al ciudadano como tal con la ampliación de su ciudadanía que completa los derechos individuales de los que todos ya hemos hablado como la fertilización asistida, el matrimonio igualitario o la identidad de género, constituye un bien a cuidar a futuro en la Argentina.
Este nivel de presión tributaria, de presupuesto educativo, de protección previsional y de asignaciones familiares es decisivo para la construcción de la ciudadanía argentina. Todo lo otro es desconexo, abierto, no se sabe bien qué se quiere ni cómo se vincula.
Por lo tanto, voy a pedir el apoyo unánime a esta norma, porque estamos consagrando una nueva Argentina, distinta, que no admite vuelta atrás. De lo contrario, recordemos doce años seguidos de desempleo de dos dígitos. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Formosa, quien comparte el término de 20 minutos con el señor diputado Sacca.


SR. BURYAILE, RICARDO (FORMOSA): Señora presidenta: comparto muchos de los conceptos expresados por el señor miembro informante, aunque no coincido con la generalidad ni el análisis del debate en particular.
Hoy venimos a analizar un proyecto de ley sobre movilidad de la Asignación Universal por Hijo. En realidad nosotros elaboramos un dictamen de minoría para dejar asentada la posición del bloque de la Unión Cívica Radical, en lo que entendemos es una extensión de derechos en una asignación a la niñez que ha sido consagrada tanto en los tratados internacionales como en la Constitución Nacional.
Si no se aceptan las modificaciones que proponemos vamos a votar favorablemente en general y en particular el proyecto en consideración. No obstante, vamos a sugerir lo que a nuestro juicio permitiría lograr una ampliación de derechos y una verdadera política de inclusión a la niñez en esta materia.
Por eso solamente informaremos nuestro dictamen de minoría. Desde ya adelantamos nuestro voto por la afirmativa a la iniciativa en tratamiento, pero nos gustaría que se debatiera en profundidad un proyecto de ley de universalización del ingreso a la niñez, que en definitiva es el tema del que estamos hablando.
Hubo una cantidad innumerable de proyectos referidos a la movilidad. El de la Asignación Universal por Hijo data de 2009 y se relaciona con un decreto de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. A partir de allí hubo proyectos que tuvieron origen en distintos bloques de la oposición y que buscaron consagrar la movilidad a través de una ley, analizándola tal como hoy lo hace la iniciativa presentada por el oficialismo. En este sentido debemos mencionar los proyectos planteados oportunamente por los señores diputados Negri, Giubergia, Moyano, Pinedo, Scaglia, Sacca y Casañas, como así también los de los diputados mandato cumplido Milman y Piemonte y de quien habla. Todos esos proyectos de legisladores de diferentes bancadas buscaban otorgar previsibilidad al aumento de la Asignación Universal por Hijo en cuanto a su capacidad adquisitiva.
¿Qué entendemos nosotros que hoy se está haciendo? Que se está hablando solamente de movilidad y no de un proyecto de integralidad. A nuestro juicio la iniciativa en consideración no contempla a determinados sectores que deberían estar incluidos en ella. Por ejemplo, el artículo 1° del dictamen de mayoría solamente hace referencia a la Asignación Universal por Hijo, por embarazo y por discapacidad. Nosotros entendemos que también debería incluirse algo que el gobierno ha consagrado y que son los planes Progresar. Actualmente hay casi 570 mil jóvenes que perciben dichos planes. No entendemos la razón por la cual no se ha contemplado respecto de ellos el mismo ajuste previsto en el caso de la movilidad previsional. Eso se distribuye de acuerdo con el nivel educativo. Así, el 31 por ciento se destina a los alumnos universitarios, el 12 por ciento a los terciarios, el 23 por ciento a quienes toman cursos y el 29 por ciento a los secundarios. En consecuencia, reitero que a nuestro juicio debería incluirse el tema de los mencionados planes en el artículo 1° del dictamen de mayoría.
En cuanto al artículo 2° consideramos –y así lo manifestamos en nuestro dictamen de minoría- que resulta restrictivo entender que solamente en la Patagonia se percibirá un 30 por ciento más en concepto de Asignación Universal por Hijo. ¿Por qué decimos esto? Porque soy diputado por Formosa, y como muchos de mis colegas, conozco la realidad del NEA y del NOA. Hoy no tenemos los índices de pobreza, que me gustaría discutir con números y no con suposiciones. Por eso, cuando uno duda respecto de este tema lo mejor sería tener estadísticas del INDEC y no presuponer que a través de determinadas políticas los índices de desocupación o de pobreza han subido o bajado. Lo mejor sería disponer de esos números.
Hoy las cifras indicadoras de la pobreza en el NEA y el NOA superan tres o cuatro veces las correspondientes a la Patagonia.
Por lo tanto, a nuestro juicio, en lo relativo a la Asignación Universal por Hijo debería aplicarse en las provincias del NEA y del NOA el mismo tratamiento que en la Patagonia. Me refiero a las provincias de Formosa, del Chaco, de Corrientes y de Jujuy. Involuntariamente en nuestro dictamen hemos omitido a La Rioja, pero resulta obvio que debería estar contemplada. Es decir, deben incluirse todas las provincias del NEA y el NOA.
Hay un punto que resulta incomprensible. Están excluidos los monotributistas. Hoy el nivel de ingreso para poder tener derecho a percibir la Asignación Universal por Hijo asciende a 7.500 pesos.
Sin embargo, tenemos monotributistas que están por debajo de ese nivel de ingresos y la mayoría tiene locación de servicios. A su vez, casi todos son contratados por el Estado y no perciben la Asignación Universal por Hijo.
¿Qué cosas deben pagar los monotributistas y qué cosas no tienen que pagar? Deben pagar AFIP y el impuesto a los ingresos brutos, pero no tienen ART, aguinaldo ni vacaciones. A todo eso hay que sumar que no perciben la Asignación Universal por Hijo.
Este es un proyecto serio, y acompañamos muchos de los conceptos que se han vertido, pero merece la inclusión y la consideración de determinados sujetos que hoy están excluidos. Por lo tanto, pedimos al bloque de la mayoría que tenga en cuenta nuestras sugerencias.
¿De qué cantidad estamos hablando? Entre Asignación Universal por Hijo y la asignación contributiva estamos hablando de casi 7 millones de niños. Se trata de una cifra muy importante que ha permitido el aumento de la escolaridad y la implementación de una política de inserción. La pregunta es por qué excluimos a casi 2.700.000 monotributistas. Esta es la pregunta que nos hacemos y creo que merece respuesta de parte del oficialismo. Si hoy un trabajador en relación de dependencia con un ingreso de 7.500 pesos puede percibir Asignación Universal por Hijo, ¿por qué el que tiene locación de servicios y percibe 4.000 pesos no puede recibirla? Creo que debemos avanzar en este sentido.
Tampoco entendemos la exclusión de los colegios privados o que se ponga como condición la exclusividad de asistir a colegios públicos. El Estado es responsable de la educación y, en virtud de ese rol, hay colegios de gestión privada que tienen subvención pública y muchos colegios privados con chicos en situación de riesgo que otorgan becas a esos estudiantes a los que hoy deliberadamente se está excluyendo.
Desde ese punto de vista, creo que hoy estamos cometiendo un error. Lo importante no es dónde estudia sino que el alumno estudie y se forme. El nivel de ingreso va a determinar si le corresponde percibir la Asignación Universal por Hijo o no. Compartimos este criterio, pero nos parece que la mencionada limitante debería ser excluida.
¿Qué otras cosas tenemos que ver en relación con esta iniciativa? La situación de pobreza en el NEA y el NOA es estructural, y estamos hablando de necesidades básicas insatisfechas: cloacas, educación y nivel de ingresos. Es cierto que la vida en el sur es más cara, pero cuando analizamos los ingresos también se mide el poder adquisitivo. Entonces, si las cosas son más caras pero tengo un mayor nivel de ingreso, no se puede comparar con la situación del NEA y el NOA porque para nosotros, como argentinos, necesitamos poner en un pie de igualdad a todos los niños, cualquiera sea la región a la que pertenezcan.
No nos parece equitativo ni justo hacer una comparación con las provincias de Formosa, Jujuy y Chaco, donde la situación social es absolutamente distinta a la de la Pampa Húmeda -la zona central-, que es la más rica de la Argentina.
Para poner un ejemplo, mencionaré algunos números que tienen que ver con algo que también ha dicho el miembro informante. A mi criterio, se trata de la medida más importante que ha tomado el gobierno y tiene que ver con la moratoria previsional. Esto permite que 6 millones de adultos mayores tengan ingresos y no tengan que estar mendigando. Me parece que esta es una medida revolucionaria y la aplaudo.
Sin embargo, cuando observo el nivel de ingreso tengo que mirar el haber jubilatorio, porque tiene relación con la masa salarial. Por ejemplo, en la provincia que represento –Formosa el haber jubilatorio promedio asciende a 3.728 pesos, y es el más bajo del país. Sin embargo, la Asignación Universal por Hijo es la misma que en la provincia de Río Negro, donde el promedio de haber jubilatorio es de 8.000 pesos, o en la provincia de Santa Cruz, donde asciende a 7.500 pesos.
Señora presidenta: vamos a acompañar este proyecto, pero entendemos que estamos perdiendo una enorme posibilidad de ampliar derechos, de incorporar más gente que merece ser incluida y desde ese punto de vista podamos acompañar los proyectos que existen en la Cámara en ese sentido.
Nos parece muy restrictivo y que perdemos una oportunidad, pero tanto en general como en particular, aunque el oficialismo no acepte las modificaciones, igualmente este bloque votará afirmativamente en el entendimiento de que la movilidad es un avance, no obstante que hubiésemos querido tener más inclusión. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Tucumán.


SR. SACCA, LUIS FERNANDO (TUCUMAN): Señora presidenta: la verdad es que no podemos más que celebrar esta iniciativa del oficialismo porque estamos totalmente de acuerdo, y como expresó el señor diputado Buryaile, vamos a acompañar en general este proyecto. Pero queremos hacer notar que hace por lo menos tres años que desde la oposición venimos proponiendo, escuchando el clamor de la gente, este tipo de movilidad.
Por lo tanto, la celebración pasa porque por fin el oficialismo escuchó a la oposición en un planteo; tarde, tres años después, pero lo planteó.
Por otra parte, no podemos dejar de lado el actual contexto de nuestro país y la situación económica de la familia argentina. Esta situación no tiene que ver ya con una cosa superada, como es la inclusión, donde todos y cada uno de los legisladores de este Congreso, por lo menos desde que estoy presente, hemos trabajado por la ampliación de derechos y hemos votado cada proyecto de ley que creímos que iba en esa línea. Hoy hemos avanzado muchísimo en esta cuestión y no es solo la inclusión, algo que ya superamos como país, sino que se trata de ver que todos aquellos a los que hemos incluido tengan un salario digno y que el dinero que llegue a sus bolsillos a través de cualquiera de las formas legales que correspondan, alcance para vivir dignamente, educar y vestir a sus niños.
El problema de hoy es que el dinero no está alcanzando y desde el Poder Ejecutivo nacional no se están tomando medidas serias para contener la inflación.
Esta iniciativa me deja un sabor a que le falta un poco y sería bueno –porque todavía estamos a tiempo modificar algunas cuestiones para poder votar un texto mucho más abarcativa, que tenga en cuenta muchas más cuestiones, como las que hemos planteado en nuestro dictamen. Por ejemplo, proponemos que en lugar de ser una actualización semestral, sea trimestral, con lo cual sería más acorde a la realidad inflacionaria de nuestro país. Pareciera que no existe la inflación en nuestro país, pero ella está y nos carcome el bolsillo, sobre todo a la gente que necesita esta ayuda, porque tener la asignación o no es la diferencia entre poder llevar un plato de comida para sus hijos todos los días o no.
Entonces, la actualización trimestral es un muy buen planteo, pero si el oficialismo no acepta la modificación y mantiene la semestral, sería bueno aplicarla a partir del próximo mes de septiembre, para lo cual tenemos tiempo, están los números y también la gente de ANSES está dispuesta. ¿Por qué esperar hasta 2016? Sería muy bueno que se aplicara a partir de septiembre de este año, porque la gente no puede esperar, entendiendo que la inclusión ya fue superada y que queremos cuidar que la inclusión sea real, con dinero que alcance.
Por otro lado, no puedo dejar de mencionar que cuando recorro mi provincia y otras del NOA observo la pobreza extrema en la que nos encontramos. Y no puedo dejar de reconocer, incluso parafraseando al doctor Raúl Alfonsín cuando hace casi treinta años decía que nuestro país es rico en el centro, despoblado en el sur y pobre en el norte, que transcurrido ese tiempo sigamos repitiendo esta frase y que no hayamos podido avanzar en gran medida. Incluso a pocas cuadras de la plaza central de San Miguel de Tucumán vemos esta estructura de pobreza que no permite a nuestro pueblo salir adelante. Cuando se toma este tipo de medidas sin duda que es un paso para adelante, pero deberíamos ser más justos y equitativos.
Estamos totalmente convencidos de que el sur es una zona compleja y la tenemos que ayudar más porque su costo de vida es alto. También es alto el nivel de subsidio en el sur para cuidar que el nivel de ingreso sea alto. De ninguna manera me interesa ir en contra de esta propuesta; repito que estoy totalmente a favor, pero me parece que deberíamos equipararla al NOA y al NEA, donde la pobreza es inmensa. Cuando camino por esas regiones no ya como político o diputado sino como ciudadano de Tucumán, advierto que no hay otro modo de dar solución que no sea desde el Estado. Por eso elaboramos esta iniciativa, para que el coeficiente de 1,3 también sea aplicado al NOA y al NEA; entendemos que sería un criterio de justicia.
En lo personal, realizo tareas como contador público; conozco a muchos profesionales de las ciencias económicas, de la abogacía y de otras ramas del saber que están inscriptos como monotributistas y que, como tales, pelean permanentemente porque no pueden entrar en ninguna estadística que les permita crecer. No podemos dejar de contemplar a un monotributista de clase B, cuyo ingreso anual es de 44.000 pesos –es decir, aproximadamente 4.000 pesos mensuales e invalidarlo para que cobre la Asignación Universal por Hijo. Por eso creo que también sería un criterio de justicia modificar la norma en este punto.
Reitero que es preciso incorporar a los monotributistas, quienes pelean día tras día, en esta figura porque además no tienen la posibilidad de conseguir un empleo estable, situación que espero que más adelante se revierta. La realidad de este grupo de trabajadores hoy es lastimosa; tengamos en cuenta que la categoría para la que se pide que puedan ser incluidos en la asignación ronda los 10.000 pesos mensuales, a lo que debemos agregar una carga impositiva alta y la ausencia del beneficio del aguinaldo.
Cuando vemos los números oficiales, notamos que para ser considerado como una persona de clase media en nuestro país se necesita que el grupo familiar tenga un ingreso de entre 12.000 y 20.000 pesos mensuales. La categoría más alta en nuestro dictamen se refiere a los monotributistas que perciben alrededor de 10.000 pesos por mes. Estos argumentos contribuirán a la hora de decidir si se incorpora o no a los monotributistas de las categorías B, C, D y E en el beneficio de la asignación universal por hijo.
Tampoco podemos dejar de señalar que resulta oportuno discutir sobre el nivel de ingresos de nuestros jubilados. Si adherimos a una movilidad jubilatoria que se aplica dos veces al año –en su momento votamos en sintonía con esa propuesta porque estamos totalmente de acuerdo, no puede ser que no contemos con un índice que contemple todos los parámetros que mueven la economía de un país como el nuestro. Se toman estadísticas como las del INDEC, cuando dicho no solo por la oposición sino también por sectores independientes y algunos representantes del oficialismo son claramente falaces; las promesas de normalizar los parámetros de la inflación quedaron en promesas desde hace más de un año. Si se elaborara un índice que permitiera tal actualización, no tendríamos jubilados que perciben 3.800 pesos por mes ni creeríamos que eso significa incluirlos. Por el contrario, incluirlos es darles un salario digno; de la misma manera, incluir con la asignación universal por hijo conlleva aplicar un criterio de justicia más amplio que alcance no solo al sur sino también al norte del país. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SR. LOZANO, CLAUDIO RAUL (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: desde el bloque Unidad Popular acompañaremos en términos generales el proyecto de ley presentado por el oficialismo, por la sencilla razón de que es mejor que lo que existe en materia de actualización de la Asignación Universal por Hijo y de las asignaciones familiares.
Del mismo modo, en su momento valoramos como un avance el régimen de asignación universal no porque coincidiésemos con la manera como estaba planteado sino porque era mejor que el que existía hasta ese momento. Esas son las razones por las cuales acompañamos esta iniciativa. Es indudable que para quienes perciben esta asignación resulta más beneficioso tener un ajuste automático pautado por ley que una actualización arbitraria o discrecional, según defina el Poder Ejecutivo, y resulta mucho más interesante tener dos ajustes al año que uno.
Desde 2009 hasta el presente, la trayectoria que ha tenido la evolución del poder adquisitivo de la Asignación Universal por Hijo y del sistema de asignaciones familiares en general, en tanto las actualizaciones eran de una sola vez al año en contextos inflacionarios que oscilaban entre el 20 y el 30 por ciento o más en materia de inflación anual, daba como resultado que cada vez que se producía un aumento se generaba un incremento del poder adquisitivo de la asignación universal pero, a partir de allí, mes a mes iba perdiendo valor. Por ejemplo, llegamos a mayo de este año antes del último aumento anunciado, que lleva a 837 pesos la asignación con una caída del 16,3 por ciento en el poder adquisitivo de la asignación universal, que a precios de 2009 quiere decir de manera muy sencilla que los 190 pesos originales se transformaron en 150 pesos.
Lo que quiero decir con esto es que el sistema que hemos venido teniendo daba como resultado la erosión del poder adquisitivo y por lo tanto vulneraba el ingreso de aquellos que percibían la asignación. Por ello, es mejor tener dos actualizaciones al año y que sean por ley y no de manera arbitraria. Por estas razones, nosotros lo acompañamos.
Pero a pesar de este acuerdo básico con el proyecto en debate hay una razón por la cual presentamos un dictamen de minoría, y tiene que ver con que en esta discusión hay dos cuestiones. Una de ellas es de fondo: qué sistema de protección social tenemos en la Argentina para los pibes menores de dieciocho años.
La segunda cuestión es la siguiente: una vez definido ese sistema con un determinado tipo de asignaciones y de valor, de qué manera lo actualizamos.
La verdad es que el gobierno trae a debate en el Congreso el segundo tema, que es un aspecto secundario o menor que depende del tema uno, es decir, del problema mayor, que es cuál es el sistema de protección social que elegimos tener en la Argentina para atender la situación de los menores de dieciocho años.
El gobierno una y otra vez -lo hizo en 2009 y lo vuelve a hacer ahora- elude debatir en el Parlamento nacional el sistema de protección social para los pibes menores de dieciocho años. Ese es el tema que nosotros queremos discutir y que debiera discutir el Congreso, más allá de que obviamente es mejor actualizarla dos veces por año y tener un índice, etcétera.
No hemos logrado discutir este tema, a pesar de que en este Parlamento hay múltiples proyectos planteando distintos criterios para tener un sistema de protección social. Nosotros creemos que hay que hacerlo, porque más allá de algunas provocaciones en términos de presentación de estadísticas absolutamente falaces, tanto por parte de la presidenta de la Nación en conferencias internacionales como por parte del propio jefe de Gabinete, lo cierto es que en la Argentina seguimos teniendo cuatro de cada diez pibes bajo la línea de pobreza.
Por lo tanto, tiene sentido dar una discusión de fondo sobre el sistema de protección social que efectivamente tenemos. Y cuando vamos a este punto, aparecen discusiones que no tiene sentido no dar. La primera es la siguiente: hablamos de asignación universal, pero nosotros entendemos que lo que tenemos en la Argentina no es universal.
En segundo término, tenemos un sistema absolutamente fragmentado, heterogéneo y con profundas inequidades.
En tercer lugar, no hay una relación que diga por qué razón pagamos por el pibe lo que pagamos. No hay una referencia objetiva que nos permita decir por qué establecemos este monto y no otro.
En cuarto término, como no tenemos eso, tampoco tenemos un criterio de actualización que tenga que ver con las condiciones de reproducción de un pibe menor de 18 años en nuestro país.
Por último, tenemos el problema de que el financiamiento de la asignación universal viene del sistema previsional, cuando éste todavía tiene un conjunto de deudas pendientes que resolver y no le sobran recursos para hacerlo.
¿Por qué decimos que la asignación no es universal? Tenemos un total de pibes menores de 18 años de 12.950.000, y el sistema nacional de asignaciones familiares cubre 4.038.000 chicos. Tenemos cubiertos por deducciones del impuesto a las ganancias unos 236.500 pibes. Con cobertura de los sistemas de asignaciones familiares provinciales tenemos 1.360.000 chicos, y dentro del sistema de asignación universal 3.642.000 pibes. En total estamos cubriendo por vía del sistema de asignaciones familiares, en sus diversas modalidades, 9.275.000 pibes.
Tenemos fuera de la cobertura, y por eso decimos que no es universal, 3.677.000 chicos en la Argentina. A su vez, a través de otros programas, por ejemplo las pensiones para madres de siete pibes o más, se cubren un millón de pibes más, y por medio de otros programas que no son específicos, como puede ser el caso de ciudadanía porteña, se cubren otros 80.000 chicos.
En total tenemos cubiertos 10 millones de pibes. Hay 2.568.000 chicos que no reciben absolutamente nada. ¿Es universal? No es universal. ¿Merece discutirse que sea universal? Sí, y esto es lo que estamos eludiendo cuando no ponemos en debate el sistema de protección social y pretendemos conformarnos con el sistema que tenemos hoy.
La segunda cuestión que estamos tratando de plantear con nuestro dictamen de minoría es que este es un sistema absolutamente fragmentado, heterogéneo, que reconoce valores múltiples de acuerdo con el lugar donde haya nacido el pibe y qué ocupación tengan los padres.
Hay un sistema de asignación universal para los pibes que en realidad son hijos de trabajadores no registrados, de desocupados o que tienen ingresos inferiores al salario mínimo. Tenemos un sistema de asignaciones familiares nacional para los trabajadores registrados. A su vez, hay distintos sistemas de asignaciones para los trabajadores de los Estados provinciales.
¿Cuál es el resultado? Mientras nosotros pagamos por un pibe menor de 18 años, hijo de un trabajador no registrado, 837 pesos con la última actualización, estamos pagando en Catamarca 60 pesos para el hijo de un trabajador estatal; en Santa Fe, 260; en Capital, 270; en Misiones, 424; en Río Negro, 450, y en Córdoba, 540.
Lo que quiero decir es que hay una anarquía absoluta que diferencia entre los pibes por el lugar en el que están ocupados los padres, y efectivamente no nos permite tener un criterio de equidad a la hora de llegar con la prestación que en todo caso estamos llevando adelante.
Por lo tanto, ni el sistema es universal porque no llega al conjunto de los 12.900.000 chicos que tenemos en la Argentina, ni garantiza equidad porque tenemos funcionando tres sistemas distintos y no hemos dado un debate para poder unificar esto, como en todo caso correspondería. Esa debería ser la tarea y el debate principal al que tendría que abocarse el Parlamento argentino.
La otra cuestión que señalamos es que el valor que establecemos no está definido en función de nada. Uno debería preguntarse qué valor tendríamos que establecer para la asignación universal.
La lógica sería proponernos objetivos. Por ejemplo, deberíamos tratar de que lo que se perciba por el pibe garantice que no pase hambre. Por lo tanto, deberíamos tener la canasta de indigencia de un menor de 18 años, o pensar cuál sería la canasta de bienes y servicios para que un chico no sea pobre en la Argentina.
Los cálculos que se pueden hacer en un país donde no tenemos estas canastas, que es un verdadero problema, nos dicen que en realidad la canasta alimentaria para un pibe menor de 18 años oscila entre los 750 y 850 pesos; y la canasta básica para que no sea pobre un chico menor de 18 años, se ubica entre los 1.400 y 1.900 pesos.
Nosotros pensamos que con lo que se está planteando con el aumento último para la asignación universal –reitero que no lo perciben todos y hay muchos otros valores según el sistema que se considere-, en realidad los 837 pesos se acercan a la canasta alimentaria, están lejos de la canasta de pobreza. En este sentido, para nosotros debería existir un sistema de asignación universal que garantice que ningún pibe se encuentre en situación de pobreza en la Argentina.
Si estableciéramos cuál es la canasta de bienes y servicios necesarios para que un chico viva sin estar en situación de pobreza en nuestro país, surgiría con naturalidad cuál es la movilidad. Ésta no debe ser la misma que se utiliza para el sistema previsional. La movilidad tendría que ver con la evolución de los precios de esa canasta de bienes y servicios que, como dije, en la Argentina no tenemos.
El último punto se relaciona con el financiamiento. Estamos fijando este índice de actualización que es el mismo que se utiliza para el sistema previsional no porque corresponda aplicar el mismo índice para los pibes, sino porque en realidad el organismo que paga las asignaciones es el mismo que abona las jubilaciones. Como tenemos un índice elaborado para garantizar que los recursos del sistema previsional de la ANSES sirvan para afrontar los pagos, se fija el vínculo con la evolución de la recaudación.
Ahora bien, ¿es razonable pagar con los fondos del sistema previsional la Asignación Universal por Hijo? ¿No le quita progresividad al sistema el hecho de no buscar los recursos en las rentas extraordinarias de las petroleras y sí en el financiamiento con el que debiéramos atender los haberes jubilatorios?
Alguien podría decir que la ANSES debe ocuparse de estas cosas por el hecho de ocuparse de la seguridad social y de percibir impuestos. Lo que ocurre es que ciertamente esos impuestos que se recaudan y van a parar a la ANSES son fondos con asignación específica con destino a los haberes previsionales. Sucede que la ley jubilatoria argentina establece que la prioridad es pagar los haberes de la clase pasiva y cancelar las deudas previsionales.
Nosotros pagamos haberes jubilatorios, pero estamos lejos del 82 por ciento móvil que habría que garantizar. Además, no hemos cancelado las deudas previsionales que tiene el sistema con nuestros valores. Solamente podríamos discutir la utilización de recursos para otras cosas –por ejemplo, para la Asignación Universal por Hijo- si en realidad hubiéramos cumplido con el pago de las deudas que tenemos en materia previsional, cuestión que efectivamente no ha acontecido.
Por lo tanto, desde nuestro punto de vista, tanto el monto que debiera garantizarnos que ningún pibe se encuentre en situación de pobreza, como el criterio de actualización, efectivamente no son los mejores que podríamos tener.
En nuestro dictamen de minoría estamos convocando a que el Parlamento ponga en debate un sistema único de Asignación Universal por Hijo que permita terminar con el hecho objetivo de que existan 2.500.000 pibes que no perciben absolutamente nada y 3.700.000 chicos que no figuran en el sistema de asignaciones, con el fin de tener un índice de actualización adecuado. Obviamente esto requeriría alguna resolución vinculada con el problema del INDEC, ya que no podríamos tener una canasta básica y otra de pobreza si no resolvemos el problema de las estadísticas públicas.
Lo que estamos planteando significa animarnos a discutir el futuro, cuestión que implica ocuparnos de un hecho objetivo: que cuatro de cada diez pibes en nuestro país –a pesar del crecimiento de los últimos años de la actividad económica- están por debajo de la línea de pobreza. También implica no aceptar la provocación que supone decir que en la Argentina existe un 1 por ciento de pobreza o un 4,7 por ciento bajo la línea de pobreza. Se trata de una falsedad absoluta que el último ministro de Economía de este gobierno se encargó de erradicar, porque son índices que prácticamente no se podían justificar ni fundamentar. El objetivo de nuestra propuesta en materia universal debe ser “ningún pibe pobre en la Argentina”.
El miembro informante del dictamen de mayoría decía que es muy difícil pensar que con estas políticas la pobreza pueda estar en otro nivel. En realidad, es muy difícil pensar que podamos hablar de pobreza e intervenir sobre ella si efectivamente no tenemos estadísticas públicas que indiquen cuántos pobres y cuántos indigentes hay en la Argentina.
También es difícil seguir hablando del presente comparando con el lamentable pasado del colapso de la convertibilidad. Y es absolutamente absurdo que pretendamos discutir el futuro congelándolo con el presente de desigualdades. Para nosotros este Parlamento tiene un doble objetivo: discutir un verdadero sistema único de asignación universal y garantizar que ningún pibe siga en situación de pobreza en la Argentina. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por el Chaco.


SRA. TERADA, ALICIA (CHACO): Señora presidenta: voy a informar el dictamen de la Coalición Cívica–ARI. Coincido en parte con los fundamentos expuestos por el señor diputado Lozano, ya que en realidad hoy estamos tratando de dar un marco legal a algo que se estableció por el decreto 1.602/09, que instrumentó lo que se denomina la Asignación Universal por Hijo. Pero muy lejos de la realidad está que esto sea realmente universal, porque tal como lo dijo recién el señor diputado Lozano, hay alrededor de 3.600.000 chicos que están fuera de este sistema.
Desde nuestro bloque la preocupación ha sido siempre la asignación universal por hijo, a tal punto que en 1997 las diputadas Carrió y Carca presentaron un proyecto legislativo en ese sentido. Sin embargo, a pesar de que ya han transcurrido más de dieciocho años, esto no se ha concretado. A pesar de que en la discusión de esta movilidad de la asignación por hijo existió la oportunidad de incluir todos los proyectos legislativos existentes en la Cámara de Diputados de la Nación, esto no se ha producido. Simplemente se pretende otorgar una movilidad con la que por supuesto estamos de acuerdo aunque entendemos que es insuficiente. Los que vivimos en el Norte –soy de la provincia del Chaco- vemos cuál es nuestra realidad, sabemos que hay 220 mil chicos que reciben la asignación por hijo, pero eso no es suficiente. Por más que el monto se haya actualizado a 837 pesos por hijo, no alcanza para cubrir los gastos para la alimentación adecuada de un niño. Además, existe falta de control en cuanto a la escolaridad y al sistema sanitario y no se cumplimenta con los requisitos básicos para poder seguir percibiendo esta asignación por hijo.
Nosotros entendemos que el Congreso de la Nación es el ámbito donde deberían estar discutiéndose políticas públicas tendientes a universalizar esta asignación por hijo que antes estaba atada al trabajo. Pero hoy estamos fomentando todo lo contrario: la no cultura del trabajo. ¿Por qué? Porque justamente quienes reciben esta asignación por hijo son las personas desocupadas y quienes no tienen trabajo en blanco, con lo cual se fomenta el trabajo en negro o no registrado.
Tampoco está claro cómo va a ser esta metodología, porque está ligada a la misma movilidad del sistema jubilatorio. Las personas comunes no sabemos cuál es la metodología que va a utilizar la ANSES, cuáles son los índices, cómo se llega al resultado de la movilidad y al porcentaje que hoy se aplica y que por supuesto continúa siendo insuficiente porque la actualización va por las escaleras mientras que la inflación va por el ascensor.
También quisiera referirme a la financiación.
Soy una de las que siempre dice que el fondo de garantía de sustentabilidad del sistema previsional tiene un nombre más que claro a la hora de determinar la afectación directa de estos recursos. Sin embargo, y a pesar de la poca discusión que hubo en torno a este proyecto, los fondos de la ANSES van a continuar financiando el pago de la asignación por hijo.
En ese sentido, tal como surge de la propuesta presentada por el bloque de la Coalición Cívica-ARI, entendemos que esos fondos tendrían que surgir de la aplicación de un gravamen sobre la renta financiera o sobre el juego. De esta manera se obtendrían fondos genuinos para hacer frente al pago de esta asignación.
Como representante de la zona norte de nuestro país me quiero referir también a la desigualdad que observamos cada vez que tratamos cuestiones que de una u otra forma pueden afectar o beneficiar a la zona patagónica. Acá nos llenamos la boca hablando de federalismo, pero resulta que cuando debemos ponerlo en práctica siempre se lo hace en beneficio de una sola zona: la patagónica. Al respecto, si bien en toda esa región el costo de vida es más elevado, no es menos cierto que hablamos de una zona que cuenta con regalías petroleras e importantes ingresos a través del turismo, que son recursos con los que no cuentan muchas provincias del norte de nuestro país. Por lo tanto, tendríamos que buscar la forma de hacer efectivo ese federalismo del que tanto hablamos a través de una política pública integral en materia de Asignación Universal por Hijo. Es necesario que todos perciban este beneficio y no solamente el que está desocupado o el que no llega a percibir un salario por encima del mínimo vital y móvil.
Otra cuestión que hemos observado y que nos genera gran inquietud es que quienes percibimos salarios que están por encima del mínimo no imponible para el cálculo del impuesto a las ganancias podemos descontar las cargas familiares en las declaraciones juradas, pero este derecho no lo tienen los trabajadores de clase media cuyos ingresos se ubican por encima del salario mínimo vital y móvil y perciben en concepto de salario familiar un monto que encima es menor al de la Asignación Universal por Hijo.
Nos hubiese gustado discutir un sistema de Asignación Universal por Hijo que pudieran percibir todos los chicos de la Argentina. Esa sería una verdadera política pública que contemple por igual al hijo de quien está desocupado como al de aquella persona que está trabajando pero que quizás no percibe un salario digno que se ubique por encima del monto del salario mínimo, vital y móvil, porque obviamente este último tampoco cubre las necesidades básicas de una familia tipo.
Adelanto que voy a pedir la inserción en el Diario de Sesiones del resto de los argumentos que fundamentan nuestra posición. Simplemente quiero recalcar que nos hubiese gustado discutir una verdadera política pública universal. Digo esto porque en este proyecto se habla de asignación universal, cuando en realidad se trata de un beneficio que no tiene ese carácter. Tampoco se hace una verdadera defensa del federalismo y se siguen utilizando recursos de la ANSES para financiar el pago de este beneficio en lugar de buscar fondos genuinos que bien se podrían generar a través de la aplicación de un gravamen sobre la renta financiera.
Esos son los puntos con los que no estamos de acuerdo. No obstante ello, entendemos que constituye un paso adelante establecer un mecanismo de movilidad automática que permita actualizar el monto de este beneficio en los meses de marzo y septiembre de cada año. Lamentamos la metodología que se ha utilizado, como así también que esto comience a regir recién en marzo de 2016 y no en forma inmediata, que es lo que la gente necesita.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) A continuación pasaremos a la lista de oradores que harán uso de la palabra en representación de cada uno de los bloques. En primer término compartirán el término de quince minutos los señores diputados María del Carmen Bianchi, Julio Solanas, María Emilia Soria y Juan Carlos Díaz Roig.
Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SRA.(BIANCHI (M.C.)) Señora presidente: voy a ser breve. Efectivamente nos encontramos aquí para tratar una política de transferencia condicionada así ha sido evaluada, que es la Asignación Universal por Hijo. El hecho de que sea una política condicionada no habla mal de quien la impulsa sino que justamente retrata la situación de una época del país en la que fue concebida.
No es posible plantear el ingreso ciudadano a la niñez como un conjunto de deseos que pueden expresarse en una ley. Debemos pensar que los resultados alcanzados por la Asignación Universal por Hijo, reconocidos regional e internacionalmente, han modificado efectivamente la vida de millones de niños y niñas de este país.
Para ello fue necesario remover los obstáculos del desempleo, generar una política de empleo, recuperar los fondos de las AFJP y, sobre todo, generar la reinserción y la reafiliación de aquellos a quienes el proceso neoliberal había dejado desafiliados socialmente. No se trata simplemente de una expresión de deseos sino de la construcción de la institucionalidad necesaria para llevar adelante esas políticas.
En ese sentido, los receptores de la Asignación Universal por Hijo han ganado nada menos que 132 días de clase adicionales al año, redujeron la deserción, la repitencia y el abandono escolar. Un 40 por ciento de los receptores de la Asignación Universal por Hijo son menores de 5 años y están alcanzados por los procesos de vacunación que se han ampliado y cumplen con los controles sanitarios. Para el nivel secundario, la asistencia supera el 90 por ciento.
Se mejoró el acceso a una dieta rica en proteínas y se optimizaron los parámetros de talla, peso y altura. Mejoró la salud infantil y se redujo el riesgo alimentario. El 94 por ciento de los niños, niñas y adolescentes realizan los controles sanitarios previstos. El ciento por ciento de las madres de niños menores de dos años hicieron los controles completos durante el último embarazo y la Asignación Universal por Hijo, junto con la Bolsa Familia de Brasil, han sido reconocidos como los programas de inclusión más exitosos de América latina.
Estas políticas de transferencia condicionada –lo que ha posibilitado que fuera eficaz y eficiente- se dieron en el marco de un proceso de destrucción institucional, política, social y económica como en el que nos encontrábamos. Ese carácter de condicionada y condicionante fue lo que le ha permitido este seguimiento y esta valoración positiva a nivel nacional.
La inclusión en el sistema de seguridad social pone de manifiesto también la voluntad política de caminar hacia una política de universalización. Por supuesto que faltan muchas discusiones sobre el sistema de protección social a la infancia, pero quiero recordar que el ingreso ciudadano fue bandera de lucha de los movimientos sociales en el marco de la más destructiva política neoliberal que hayamos tenido con posterioridad a la dictadura.
No se puede volver a tratar el sistema de protección social a la niñez con esa inocencia e ingenuidad de base. Con todos los defectos que se han señalado, no podemos dejar de reconocer los logros obtenidos por la Asignación Universal por Hijo. Es por ello que celebro que, a pesar de todas las críticas que se plantean, haya una decisión política de acompañarla, porque nosotros necesitamos este compromiso de aquí hacia adelante.
Queremos lo máximo, pero vamos a proteger y defender lo logrado hasta aquí con sistemas institucionalizados. Quiero que esto se haga efectivo en un compromiso de todas las fuerzas políticas para sostener una política de inclusión y de equidad para la infancia como la que este gobierno ha desplegado en estos doce años. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Entre Ríos.


SR. SOLANAS, JULIO RODOLFO (ENTRE RIOS): Señora presidenta: hoy venimos a ratificar desde este Congreso de la Nación la enorme política de Estado que ha tenido nuestro gobierno nacional, popular y democrático. La oposición ha hecho planteos que alguna vez ya hemos escuchado. Me alegro mucho que esta oposición haya encausado una idea y pueda venir hoy al recinto a apoyar esta iniciativa.
En el año 2009 he escuchado manifestaciones dolorosas tanto para el pueblo argentino como para los más humildes de la patria. Por ejemplo, se decía que las jóvenes argentinas iban a quedar embarazadas para poder cobrar la Asignación Universal por Hijo o que con esta medida iba a promoverse la delincuencia y, sobre todo, la estigmatización de los más humildes.
Evidentemente, en tiempos de elecciones, es prácticamente imposible que no acompañen esta iniciativa, y ello me alegra muchísimo. Creemos decididamente que este es el camino de la reconstrucción, brindando posibilidades a los más humildes, por medio de un Estado que debe velar y proteger a los ciudadanos más pobres de la patria.
Escucho la discusión acerca de los más pobres de la patria, como si ellos no fueran personas o ciudadanos. En muchos casos, esa aseveración se vincula con la idea de ciudadanos de primera y de segunda en la República Argentina. Me refiero a enunciaciones emanadas de esta gran urbe que es la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde se impone de manera decisiva el número de pobres en nuestro país. No me cabe la menor duda de que nuestro gobierno ha trabajado fuertemente para recuperar la dignidad del pueblo y de los más humildes.
Se ha manifestado aquí que debería profundizarse la universalidad. Creo que la posibilidad de hacerlo se relaciona directamente con ganar o perder las elecciones. Si uno no cuenta con el acompañamiento del pueblo, seguramente no podrá hacer lo que algún diputado recién manifestaba. En este sentido, es absolutamente valorable esta decisión compartida por la mayoría del pueblo y fundamentalmente por los más humildes de la patria.
En el caso de la provincia de Entre Ríos hay aproximadamente 16.000 asignaciones universales y el índice de pobreza ha decrecido un 15 por ciento. Esto significa que se ha logrado instalar trabajo genuino, lo que ha resultado saludable para los ciudadanos. Este gobierno ha tomado 5.000.000 de trabajadores nuevos para combatir el trabajo no registrado. Esta ha sido nuestra tarea que se vincula con las cuestiones más pequeñas de los pueblos, como recuperar el agua potable, la dignidad, la construcción de baños y ampliación de habitaciones, modificaciones que son parte de una vivienda digna, para lograr la inclusión de los ciudadanos más humildes.
No tengo dudas de que con esta medida estamos contribuyendo a sostener la idea de proteger decididamente a los más pobres de la patria. En este sentido, nuestro gobierno ha sido señero. No se trata de dejar planteado este tema hacia el futuro, sino de resguardar la visibilidad de la Asignación Universal por Hijo, que se concatena con el 98 por ciento de los mayores del sistema previsional, que se ajustará en marzo y septiembre.
Estamos dispuestos a profundizar todo lo que se ha hecho. No se trata solo de declamar. Hoy tenemos el orgullo de decir que en la República Argentina este gobierno ha quebrado el espinazo al clientelismo político. Estoy hablando de la ANSES, organismo que estaba en extinción.
Por todo lo dicho, pensando en los humildes de la patria, en los ciudadanos de mi barrio, de El Morro, y de otras localidades de la provincia de Entre Ríos, voy a apoyar orgulloso y saludablemente este proyecto de ley, pensando –como decía Eva Duarte de Perón que detrás de cada persona hay un derecho.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Río Negro.


SRA. SORIA, MARIA EMILIA (RIO NEGRO): Señora presidenta: es un orgullo y una alegría para mí estar tratando este proyecto de ley sobre la movilidad de las asignaciones familiares.
No puedo dejar de destacar que es un gran acierto de este gobierno generar políticas inclusivas y sociales que carecen de precedentes por su magnitud, alcance y cobertura. Se trata del derecho a ser incluido, a gozar de una vida saludable y a tener un real acceso a la educación. Se trata del empoderamiento de aquellos sectores que fueron postergados por otros gobiernos y excluidos del sistema. Debo confesar que me sorprende, pero aún más me alegra saber que esta iniciativa cuenta con el consenso de la totalidad del arco político. Todos coincidimos que en lo relativo a la conquista de los derechos sociales no se puede dar ni un solo paso atrás.
Sin embargo, la satisfacción no siempre es total. He escuchado a muchos diputados de la oposición y también a algunos compañeros esbozar consideraciones muy a la ligera sobre el diferencial propuesto para la zona desfavorable. En ese sentido me parece importante señalar que lo que se está debatiendo es el mayor costo de vida de esas zonas desfavorables y no la cantidad de beneficiarios que tiene cada provincia.
Tal vez mis colegas no saben lo que es vivir en la Patagonia, por lo que me permitiré ilustrarlos un poco.
Los precios cuidados, las canastas básicas de alimentos y de útiles escolares, los materiales de la construcción, los alquileres y el transporte son más elevados en las provincias patagónicas que en el resto del país. Ello, sumado al clima y a las distancias, hace que el costo de vida indefectiblemente sea superior.
De acuerdo con la última Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares realizada por el INDEC respecto de los años 2012 y 2013, el gasto correspondiente al consumo medio mensual por hogar a nivel país fue de 5.500 pesos, mientras que en la Patagona fue superior a 6.000 pesos, en el NEA de 3.800 pesos y en el NOA de 4.500 pesos. Es decir que sin lugar a dudas el costo de vida promedio de los patagónicos es elevado.
Lo sucesivos gobiernos argentinos se propusieron terminar con esta desigualdad. En ese sentido se sancionó la ley 23.272 y sus modificatorias. Lo mismo ocurrió en el caso de la ley 19.485, que presupone un coeficiente superior para el cálculo de las jubilaciones patagónicas. A modo de ilustración quiero señalar que nuestros trabajadores agrarios y petroleros, los empleados de comercio y otros cobran un adicional por zona desfavorable.
Vivir en la Patagonia argentina es más caro. La corrección de la desigualdad que ello implicaba en relación con el resto del país fue objeto de políticas, tanto de este gobierno como de los anteriores, e incluso de este Parlamento.
Por eso, porque vivir en la Patagonia es más caro, quiero decir a mis colegas patagónicos que debemos hacer cumplir el artículo 16 de la Constitución Nacional, que establece que todos los habitantes son iguales ante la ley, no solamente para defender este derecho relacionado con la zona desfavorable en este proyecto de ley de movilidad de las asignaciones familiares, sino también para solicitar el tratamiento urgente de la iniciativa por la que se modifica la ley de impuesto sobre los combustibles y que tiene por finalidad terminar con la inequidad y el absurdo que sufren las provincias productoras de hidrocarburos respecto del resto del país.
Resulta irrazonable que en la provincia de Río Negro el combustible se pague, en promedio, un 6 por ciento más caro que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; que en la de Neuquén se abone un 4 por ciento más que en dicha ciudad y que en La Pampa su precio sea un 10 por ciento superior. Estas provincias que he mencionado son productoras de hidrocarburos. Por eso solicito el tratamiento de este importante proyecto.
No solamente celebro el diferencial por zona patagónica que establece el proyecto de ley en consideración, sino que además exhorto a esta Honorable Cámara a dar tratamiento a todas aquellas iniciativas por las que se tiende a igualar la calidad de vida en las provincias. Sepan, compañeros, que aquí tendrán a una ferviente militante.
Por lo expuesto, acompaño con orgullo el proyecto en tratamiento. (Aplausos.)

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Formosa.


SR. DIAZ ROIG, JUAN CARLOS (FORMOSA): Señora presidenta: el sistema previsional y de seguridad social argentino es, sin lugar a dudas, el mejor de América Latina. Ello es así por su cobertura, que es superior al 95 por ciento, por el mayor haber jubilatorio mínimo, por la mejor media y por la mejor fórmula de movilidad. Esto ha sido reconocido internacionalmente por las tres grandes agencias, que son la OISS, la AISS y la CISS.
Hoy venimos a dar un paso muy trascendente, en el sentido de que también se aplique la fórmula de la movilidad a las asignaciones Universal por Hijo, por maternidad y familiares. Me refiero a esa fórmula que votamos en soledad y respecto de la cual tanto nos discutieron. La oposición nos aseguraba que no iba a superar el 4 por ciento. Los diputados que integramos esta Cámara desde hace varios años recordamos ese debate.
Es una satisfacción que hoy hayan cambiado de criterio y que la mayoría nos acompañe. Más allá de que nosotros no nos olvidamos de que todos han votado absolutamente en contra es bueno que en esta oportunidad los argentinos estemos de acuerdo.
Solamente quiero contestar dos o tres afirmaciones que, desde mi humilde criterio, son bastante incorrectas. En primer lugar, me quiero referir al tema del financiamiento. La legitimación para que los hijos de los desempleados y los trabajadores en negro reciban la Asignación Universal por Hijo reside en que nuestro sistema previsional se financia con aportes, contribuciones e impuestos. Quiere decir que son cotizantes al sistema de seguridad social cada vez que compran algo.
La inequidad anterior se generaba por el financiamiento relacionado con los hijos de los trabajadores y de los desempleados y el beneficio de la Asignación Universal por Hijo de los trabajadores en blanco. Esto lo hemos reparado, de modo que existe una absoluta legitimación porque son cotizantes del sistema de seguridad social. Por lo tanto, no han porqué discutir el fondo de financiamiento.
Hasta hoy no se ha tocado el fondo de garantía de sustentabilidad para pagar esto: alcanza con el flujo anual de los recursos y en la actualidad las planillas de la ANSES así lo demuestran. Inclusive ha habido excedentes que se impactan posteriormente para garantizar el fondo de garantía de sustentabilidad.
Por otro lado, es mentira que exista la cantidad de juicios que aquí se ha señalado.
En cuanto a los haberes actuales, solamente el 3 por ciento de los nuevos jubilados están reclamando un ajuste o una redeterminación del haber. El total de juicios contra la ANSES es menor al 4 por ciento de los jubilados históricos, y esto se arrastra de gobiernos anteriores al nuestro. De todos modos, no hay otra posibilidad que reconocer el juicio porque no existe una facultad para negociar la sentencia, aceptar o pagar algo que no se ha obligado por sentencia firme, porque así lo ordena la vieja doctrina de la Procuración del Tesoro de la Nación.
De modo que pretender la existencia de falacias y falencias en aquello que nos debiera enorgullecer a todos los argentinos obedece sinceramente a una chicana. Estamos en una época electoral y, como político, se entiende.
Pero quiero significar, sobre todo a los amigos de la oposición, que hay que dejar de mentir. Hace diez días escuché al tercer candidato de la oposición –que hoy ya no pertenece a la Unión Cívica Radical porque cedió gentilmente su puesto a otro partido- afirmar muy suelto de cuerpo en un programa de televisión que en la Capital Federal los jubilados cobrarán el 30 por ciento más que en el resto del país. Esta persona sostenía que si ellos llegaban al gobierno iban a pagar a los jubilados un 30 por ciento más. Eso es mentira. No se puede mentir así. La Capital Federal no tiene caja y no puede pagar más a sus jubilados.
Por lo tanto, abstengámonos de esta clase de utilización de las necesidades de los jubilados y llevemos el debate a otro nivel. Es importante señalar esto porque el histórico y viejo reclamo del 82 por ciento –esta tan vituperada fórmula de movilidad- ha llevado a que la jubilación mínima hoy constituya el 81 por ciento del salario mínimo, vital y móvil de los trabajadores argentinos.
Por último, yo sé que muchos creen que acá se trata de reducir el gasto, enfriar la economía y, en todo caso, financiar el déficit con crédito. En este sentido, todos los que formamos parte de este gobierno estamos dispuestos a decir: “Minga que nosotros vamos a congelar el gasto; minga que vamos a congelar la economía y minga que vamos a endeudar a una nueva generación de argentinos para pagar a los fondos buitres y a sus testaferros”. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Mendoza, quien comparte su tiempo de quince minutos con la diputada Patricia Giménez y el diputado Mario Fiad.


SR. COBOS, JULIO CESAR CLETO (MENDOZA): Señora presidenta: venimos a darle mayor institucionalidad a esta política que oportunamente debió haber sido definida por ley, y hoy lo hacemos aunque sea por carácter transitivo al asignarle una movilidad para paliar los efectos inflacionarios, porque al estar expresada por ley, estamos dándole fuerza legal a esta asignación especial.
Para no ser reiterativo quiero establecer dos conceptos que hasta ahora no se han desarrollado, y pido autorización para insertar el resto de mi discurso en el Diario de Sesiones para dejar expresada mi postura sobre las diferencias que tenemos, no obstante que vamos a acompañar el proyecto, como ya ha expresado nuestro bloque.
Nuestra ley establece la obligatoriedad del sistema educativo, y recientemente fue modificada para establecer esa obligatoriedad para el nivel secundario; y hace muy pocos meses tratamos la obligatoriedad a partir de los cuatro años.
Ahora, ¿qué entendemos por obligatoriedad? Es obligación del Estado asignar el docente, las escuelas, los planes sociales cuando el Estado no puede generar condiciones dignas de trabajo. Pero lo cierto es que la obligación también cae sobre los padres de mandar a sus hijos a la escuela, y sobre los chicos de estudiar.
Creo que aquí faltan dos cosas para que el Estado verdaderamente sea garante del cumplimiento de la obligatoriedad. Primero, tenemos que discutir en este Congreso una Ley de Paternidad Escolar Responsable para ver qué hacemos con los padres o tutores que no mandan a los chicos a la escuela. No se trata de decir que si el chico no va a la escuela el padre pierde la asignación, porque para mí no es como un subsidio al desempleo sino que se trata del derecho de la infancia y la niñez de asegurar la presencia del chico en la escuela.
Además, debemos tener un registro permanente de la actividad escolar y académica, que va más allá de solicitar una constancia de que el chico está inscripto en una escuela a comienzos del año y en el segundo cuatrimestre, sino que tiene que ser permanente, ya que hoy la tecnología brinda la posibilidad de saber qué chico está en el escuela y cuál no, y si no está, hay que ir a buscarlo.
Por eso creo que este Congreso está en falta con la sanción de un proyecto que nosotros denominamos Cédula Escolar, que es el registro digital de toda la actividad académica del chico.
Son instrumentos para un Estado que tiene que estar siguiendo muy celosamente el cumplimiento de la obligatoriedad. Siempre digo que el primer delito es que un chico esté en la calle y no esté en la escuela.
Para eso necesitamos, además de la movilidad que hoy estamos sancionando, brindar los medios para que el Estado garantice ese instrumento nivelador del desarrollo social que es la educación y que fue señera.
Queremos una educación de calidad. Los desafíos del sistema educativo, siempre decimos, es que los chicos puedan ingresar al sistema, permanecer en el sistema y aprender en el sistema.
Por lo tanto, hoy estamos dando un paso importante pero quedan aún otros pasos por dar por parte de este Congreso para asegurar efectivamente la presencia de los chicos en la escuela y el aprendizaje, que tiene que ser garantizado por una educación de calidad y de excelencia. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Mendoza.


SRA. GIMENEZ, PATRICIA VIVIANA (MENDOZA): Señora presidenta: siempre existió consenso con los argumentos del decreto 1.602/09, sobre Asignación Universal por Hijo, que se basaba en la inclusión, la lucha contra la pobreza y el desempleo. Pero también siempre se pidió que esta asignación fuera universal y en el marco de una ley.
Vamos a apoyar el proyecto porque siempre lo hemos querido, pero hay que saber que llega seis años tarde, y no solo llega tarde sino que llega mal. Llega mal porque no es universal ni resuelve los objetivos que se planteó originalmente el decreto. No es universal porque discrimina, por varios motivos que ya han sido mencionados. Personalmente lo que más me preocupa es la discriminación por el lugar de residencia.
Este proyecto de ley establece diferencias territoriales que favorecen a unos y castigan a otros según un criterio geográfico caprichoso. De esta manera, los niños de seis de las nueve provincias con menor porcentaje de menores de edad bajo la línea de pobreza que perciben la asignación son favorecidas, mientras que resultan altamente perjudicados los niños de Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Misiones, Corrientes y Salta, las seis provincias que presentan altísimos niveles de desnutrición. Esto es muy triste y preocupante.
La excusa es que la Patagonia es una zona geográfica desfavorable y que tiene un costo de vida mayor, pero para la pobreza, el empleo y la inclusión no es una zona desfavorable; por el contrario, sus indicadores son los mejores. Entonces me pregunto por qué resulta favorecida. ¿Acaso porque en esa zona hay amigos especiales?
Para que los señores diputados tengan una idea, los índices de cobertura de los niños de Tierra del Fuego y del Chaco tienen una amplitud que va del 11 al 52 por ciento. Esta discriminación flagrante duele.
Hoy se discute sobre la necesidad de actualizar automáticamente los montos que se otorgan mediante este programa; está bien, pero debería habérselo hecho antes. Hay tres factores que amenazan los logros alcanzados con la asignación universal por hijo: la inflación, la pobreza y la generación de empleo genuino. En todos ellos, el país va muy mal.
Hechas estas consideraciones, pido que se inserten en el Diario de Sesiones algunos datos sobre estos temas que, como es sabido, además se ven afectados por la actitud del gobierno de sostener una política de ocultamiento y adulteración de esta información que es tan importante. (Aplausos en las bancas.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Jujuy.


SR. FIAD, MARIO RAYMUNDO (JUJUY): Señora presidenta: siguiendo la línea de la solicitud efectuada en el Senado de la Nación por varios legisladores de nuestro bloque –fundamentalmente por el señor senador Morales, quien hizo una defensa expresa sobre el NOA y el NEA, pido que se modifique el proyecto de ley a efectos de quitarle todo lo arbitrario, discriminatorio y discrecional que tiene al conceder un beneficio diferencial a la Patagonia, excluyendo injustificadamente al NOA y al NEA que son las regiones con las mayores condiciones de pobreza estructural y alta vulnerabilidad.
Sabemos que esta iniciativa es un reconocimiento expreso de esa situación y que cada vez son más las personas que necesitan la asistencia del Estado. Cada vez es más grande la cantidad de familias que son expulsadas del sistema y que se transforman en víctimas de la marginación; entonces, el desafío debe ser asistirlas desde el Estado en la emergencia, en el ejercicio de la obligación inexcusable que le cabe al gobierno de garantizar los derechos. Pero este proyecto también es un reconocimiento a la necesidad de anclar en una norma con jerarquía de ley la movilidad de la asignación, como consecuencia del proceso inflacionario en el que nos encontramos inmersos.
Desde hace tiempo, a través de distintas iniciativas se viene sosteniendo la necesidad de sancionar una ley para evitar que esto quede supeditado a la voluntad de dar o no el beneficio; es decir, a la discrecionalidad y a la falta de institucionalidad que ello supone.
Recién ahora el Poder Ejecutivo toma nota de lo bueno que es respetar la institucionalidad de la República, la división de poderes y la trascendencia de las leyes. Estaremos de acuerdo en general, como bien lo expresaron los miembros informantes de nuestro bloque y otros diputados de nuestra bancada que me precedieron en el uso de la palabra.
Estamos de acuerdo con el proyecto en general porque compartimos con el gobierno la mirada sobre la cantidad de gente que verdaderamente necesita la asignación universal. Coincidimos con el gobierno en que esta política de la asignación universal por hijo es fundamental, porque hoy está garantizando la supervivencia de muchos compatriotas. Tiene razón la señora presidenta cuando piensa en la cantidad de hijos y mujeres desamparados, vulnerables, en condiciones socioeconómicas extremas, que hay en la Argentina de hoy. Es así, pero es innegable que después de doce años, eso es producto del modelo.
Ayer se conoció el informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, que arroja como resultado un crecimiento de la pobreza en el país. Claro está que no podemos confrontarlo con datos oficiales porque no existen.
En síntesis, estamos de acuerdo en general con el proyecto de ley pero, ¿por qué crear una ley que nazca con desigualdades, para generar discriminaciones y establecer diferencias injustas? En el artículo 2° del proyecto se establece un valor diferencial para la Patagonia con el fin de compensar –como bien se dijo- el mayor costo de vida en esa zona, como así también contribuir al sostenimiento y desarrollo de las economías regionales.
Esto nos parece bien pero, ¿por qué razón se excluye al Norte argentino? De acuerdo con los últimos datos del censo de 2010, el Norte argentino tiene cifras de pobreza muchísimo mayores que las de la Patagonia. Es una de las zonas más postergadas del país, con falta de acceso a recursos básicos.
Nosotros sabemos que la Constitución Nacional pone en cabeza del Estado la obligación de proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su territorio, promoviendo políticas diferenciales que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones establecido en el artículo 75, inciso 19). Y el inciso 23) de este artículo habla de proveer medidas de acción positivas para generar igualdad de oportunidades.
Es decir que corresponde al Congreso de la Nación definir estas políticas diferenciadas. Por ello, nos corresponde incluir al NOA y al NEA en las políticas diferenciadas del artículo 2° del proyecto, reconociendo que es imprescindible un tratamiento distinto en función de su contexto socioeconómico de alta vulnerabilidad.
Aquí estamos para defender los intereses de los niños de nuestra provincia. Son niños invisibilizados que necesitan la asistencia del Estado, pues les falta una alimentación adecuada y no tienen acceso a la salud ni a la vivienda, es decir, no tienen condiciones dignas de vida. Les están quitando oportunidades y minando su futuro. Nos corresponde a nosotros corregir esta situación de postergación y desigualdad con las herramientas que nos da la Constitución Nacional. Debemos hacerlo aquí y ahora por ley de la Nación y no subordinando sus derechos a la voluntad discrecional de algún gobernante.
Nos sorprende y lamentamos que legisladores jujeños del bloque oficialista en el Senado hayan justificado la discriminación y hayan permitido una nueva postergación para el Norte argentino. Lamentamos que la sumisión haya llegado al extremo de sacrificar los derechos de nuestra gente, aunque se privilegie a la Patagonia.
Señora presidenta: lo que estamos pidiendo es un mismo tratamiento, es decir, que se nos otorgue el mismo beneficio que se proporciona a la Patagonia. Estamos pidiendo derechos, estamos pidiendo justicia. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires, quien comparte el tiempo de quince minutos con el señor diputado Federico Sturzenegger.


SRA. GONZALEZ, GLADYS ESTHER (BUENOS AIRES): Quiero adelantar que nuestro bloque va a acompañar este proyecto de ley por las siguientes razones. En primer lugar, porque hace tiempo que venimos reclamando que la asignación universal por hijo se establezca por ley, como resultado del consenso de los diferentes sectores políticos, y consolidando un derecho: el derecho a un piso mínimo de protección social.
La segunda razón por la cual lo apoyamos es porque hemos presentado varios proyectos para que dichas asignaciones, incluyendo las asignaciones familiares tengo un proyecto de mi autoría-, tengan un mecanismo de actualización que sea independiente de la conveniencia y la arbitrariedad o discrecionalidad del poder político de turno, estableciendo la automaticidad que prevé este proyecto de ley, que también se utiliza para la movilidad jubilatoria.
Obviamente, estas actualizaciones son indispensables para que todas las asignaciones no pierdan su valor real frente a la inflación, que además siempre afecta a los que menos tienen. De hecho, hemos ido observando cómo han sido las actualizaciones, y en el caso de la asignación universal por hijo debemos reconocer que ha sido bastante bien actualizada. Pero no ha ocurrido lo mismo con las asignaciones familiares, que a pesar de que en los últimos años han recibido aumentos, todavía hay mucho desfasaje. Si bien en este último se ha tratado de compensar, todavía están por debajo del promedio de los aumentos salariales desde el 2003 y del índice de inflación acumulado.
¿Cuál es el desafío hacia adelante? Nos interesa pensar en el futuro. Se trata de un derecho que han adquirido los niños, y hay que pensar desde este punto de partida hacia dónde queremos ir. Quisiera que no perdamos de vista cuál es la situación actual.
Voy a permitirme leer un informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la estimación del impacto de la AUH en la pobreza y en la indigencia. Una de las conclusiones que me parece importante resaltar, para no perder de vista cuál es la situación social, es la siguiente: la ampliación de la cobertura y el importante papel de protección económica que claramente desempeñan los programas AUH y de madres de siete hijos, son también una demostración de la permanencia, la consolidación y reproducción de una población excluida, sin acceso a un empleo digno y a un sistema de protección más favorable y estable con asignaciones familiares y jubilaciones contributivas. Agrega que la recepción de tales programas sociales, de transferencias de ingresos, no deja de ser también un indicador del déficit en materia de autonomía económica, de equidad distributiva e inclusión social, que pesa sobre amplios sectores de la población.
Estamos hablando de 11 millones de personas que se encuentran por debajo de la línea de pobreza. La mayor incidencia la tienen los menores de 18 años, que en un 35 por ciento son pobres. Esto es lo que se llama “la infantilización de la pobreza”. Esto nos exige plantearnos cómo evolucionar con esta política pública, cómo mejorar este sistema de protección.
Aquí quiero detenerme en lo que falta, y creo que lo podríamos haber solucionado si este debate hubiese permitido algunos aportes. Además, va a ser el desafío del nuevo gobierno; Mauricio Macri tiene la voluntad de avanzar en este sentido.
Más allá de debatir en el futuro sobre una política de protección social universal que otorgue cobertura a toda la población sobre la base de su condición de ciudadanía y no de pobreza, mi planteo prioritario hoy es la situación de garantizar de mínima que estemos llegando a todos los niños pobres.
En este sentido, me parece que deberíamos corregir esto, y no es sólo un análisis técnico de nuestros equipos de desarrollo social de la Fundación Pensar, sino también es lo que me expresa la gente en la calle, los vecinos. Hace dos días estuve en una reunión de vecinos y una mamá, Priscila, del Barrio Nueva Ana de Avellaneda, decía: “Tengo dos hijos, estaba cobrando la Asignación Universal por Hijo, los llevaba a una escuela estatal y los pasé a una escuela pública de gestión privada buscando calidad educativa, seguridad y que se cumpla con los días fijados en el calendario escolar.”
Me comentaba esa señora que se trataba de una escuela en la que pagan una cuota mínima. Por ese motivo dejaron de cobrar la Asignación Universal por Hijo. Se trata de una de las cosas que debemos corregir para que la asignación se continúe pagando para los chicos que van a escuelas públicas de gestión privada. Son establecimientos subvencionados por el Estado. Incluso podemos fijar un tope de cuota mínima, aunque en general se trata de familias que continúan siendo pobres y que realizan un gran esfuerzo para encontrar calidad educativa.
El otro tema que quiero señalar es que debiéramos plantearnos un sistema de protección que no tenga restricciones en cuanto a la formalización del empleo. Esto lo percibimos con muchas familias que no quieren “blanquearse” cuando tienen posibilidad de ingresar a un empleo formal, porque pierden la Asignación Universal por Hijo. Esto no sólo desincentiva, sino que además no tiene sentido.
Por ejemplo, en la Ciudad de Buenos Aires existe un programa que se llama Ciudadanía Porteña. Está asignado a las familias pero con otra visión: no está atado al hecho de tener o no un trabajo formal, sino a si esa familia tiene ingresos por debajo del nivel de pobreza e indigencia. Entiendo que debería ser el criterio a seguir para este programa social.
Obviamente que en el programa Ciudadanía Porteña se hace un registro único de beneficiarios para medir los índices de riqueza y pobreza.
Vuelvo a remarcar que estamos de acuerdo en que la Asignación Universal por Hijo es un derecho para los niños. Además, ha sido uno de los logros más destacables de esta gestión. Tenemos el desafío de que el Estado pueda ejecutar con políticas públicas este sistema, acompañando a las familias para que los niños logren un desarrollo humano sustentable, además de estar integrado socialmente. Deben tener una vivienda digna, una vida digna y un empleo digno.
Reconocemos que esta asignación ha empoderado a las mujeres y las continuará empoderando. Les ha dado capacidad económica y tenemos que pensar cómo vamos a continuar ayudando a estas jefas de hogar para que trabajen y estudien. Para ello, deben existir programas de capacitación y empleo, con los centros de primera infancia para que puedan llevar a sus hijos.
No se trata solo de ingresos monetarios, sino de incorporar a las familias otras cuestiones como la educación y la salud.
El doctor Albino decía que no se trataba solamente de la pobreza material, sino de la pobreza de afectos.
Para terminar y ceder la palabra a mi compañero de banca quiero efectuar un planteo que significa un desafío a la vez: debemos tener una mirada más cercana a la familia como unidad de intervención estatal.
Por eso me voy a permitir leer algo que dijo el Santo Padre, el Papa Francisco, hace poco tiempo en Bolivia: “La familia merece que los responsables del bien común le presten una especial atención.”
Nosotros somos los responsables del bien común. Las familias están sometidas a muchos factores de riesgo: la violencia doméstica, el alcoholismo, el machismo, las drogas, el desempleo, la inseguridad civil, el abandono de las personas mayores, los niños de la calle, etcétera.
Son muchos los problemas sociales que las familias resuelven y lo hacen en silencio. Por eso, el hecho de no proteger a la familia, significa dejar desguarnecidos a los más vulnerables. El desafío está planteado. (Aplausos en las bancas.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SR. STURZENEGGER, FEDERICO ADOLFO (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: repasemos algunos números. La Asignación Universal por Hijo llega al 30 por ciento de los niños de la Argentina; también alcanza el 90 por ciento en los niños en los 3 deciles de menores ingresos en la Argentina.
Para una familia con tres hijos dentro de estos 3 deciles, representa un aumento del 50 por ciento en su ingreso medio.
En un trabajo del año pasado Marco Stamponi y Leopoldo Tornarolli -dos investigadores compararon este programa con otros de Latinoamérica y el Caribe. Llegaron a la conclusión de que se trata de uno de los programas más inclusivos, ambiciosos y progresistas de la región.
Un grupo de investigadores de la Universidad Nacional de La Plata se dedica a investigaciones sociales. Por ejemplo, en un trabajo de 2012, Guillermo Cruces y Leonardo Gasparini, demostraron que la Asignación Universal por Hijo implicó una reducción del 30 por ciento de la pobreza argentina. También implicó una disminución del 13 por ciento en la desigualdad, cuando uno compara los niveles de ingreso del decil más bajo y del decil más alto.
En un trabajo de este año, Leonardo Gasparini y el licenciado Garganta hablan sobre el impacto de la Asignación Universal por Hijo en el empleo. Encuentran que no hay absolutamente ninguna evidencia que afecte los niveles de participación, esa idea de que la Asignación Universal por Hijo iba a afectar la voluntad de trabajar. Sí encuentran que hay un efecto sobre la formalización: la gente se formaliza de manera más lenta. Ese es un tema sobre el cual desde este bloque hemos presentado algún proyecto y sería interesante analizar.
Por su parte, Salvia y Tuñón, de la UCA –que justamente no es un lugar muy favorable al gobierno- en un trabajo del año pasado encuentran que la Asignación Universal por Hijo es responsable de una reducción de más del 60 por ciento en la exclusión escolar, así como también de la reducción del trabajo infantil.
Es decir que por donde se lo mire este es un proyecto que hay que acompañar, porque justamente intenta mejorar este instrumento que ha tenido todos estos resultados tan positivos para la inclusión social en la Argentina.
Ahora bien, desde el punto de vista de nuestro trabajo en el Congreso, se da una cosa bastante particular, que tiene que ver con nuestro funcionamiento como cuerpo. El primer proyecto presentado sobre el deseo de actualizar fue el de la diputada Carrió, en 1997. Luego presentaron proyectos en ambas Cámaras Gerardo Milman, en 2010; Silvana Giudici, en julio de 2010; Juan Mario Pais, en agosto de 2010 –cuyo proyecto es exactamente igual al que trae el Ejecutivo en este momento-; Elena Corregido, Federico Pinedo; Héctor Piemonte, Luis Sacca, Alberto Pérez, Facundo Moyano, Víctor Hugo Maldonado, Miguel del Sel -también con el mismo índice de actualización que propone el gobierno-, Sergio Massa, Julio César Martínez, Mario Raúl Negri, Patricia Bullrich y Julio Cobos.
Entonces, desde el punto de vista de nuestro funcionamiento, somos 257 diputados pertenecientes a diferentes fuerzas políticas que estamos todos de acuerdo. Pero, además, no se trata de que tengamos que especular acerca de si estamos o no de acuerdo, sino que eso está escrito. Entonces, si 257 personas escriben que coinciden y, sin embargo, tienen que esperar a que el Ejecutivo envíe un proyecto, algo está diciendo que estamos funcionando mal como cuerpo legislativo.
Comento esto porque de alguna manera se traslada a la discusión de la universalización, que fue mencionada por los diputados preopinantes y por muchísimas otras personas. Silvia Augsburger, Claudio Lozano, Felipe Solá, Irma García, Martín Sabbatella, Juan Carlos Forconi, Sergio Panza, Mirta Pastoriza, Elena Corregido, José Martínez, Ricardo Alfonsín, Sergio Massa, Julio César Martínez y Patricia Bullrich también lo proponen.
Entonces, si nos abocáramos a ver un proyecto sobre el cual hay total consenso dentro de las fuerzas políticas, me parece que no tenemos que esperar que el Poder Ejecutivo lo mande para poder avanzar.
La diputada Bianchi pedía el compromiso de las fuerzas políticas con la Asignación Universal por Hijo, y por supuesto que lo tiene por parte del PRO. Nosotros pedimos el compromiso de ellos de trabajar en pos de la universalización, que incluso los diputados del Frente para la Victoria lo proponen.
Creo que debemos cambiar un poco el eje de la discusión y focalizarnos en los niños. La pregunta que cabe es: ¿por qué un trabajador formal que tiene un ingreso, por ejemplo, de entre 7500 y 9800 pesos, cobra una asignación familiar y el niño la recibe, pero si un monotributista tiene el mismo nivel de ingreso, no la percibe? ¿A ese niño lo consideramos diferente del hijo de un trabajador formal? No. Entonces, me parece que la universalización tiene que ver con ese punto: son más de 2.500.000 monotributistas, cuyos hijos no están incluidos. Esto es lo que comentaron la diputada González y el diputado Buryaile: aquellos padres que deciden enviar a sus hijos a colegios públicos de gestión privada también debieran ser incluidos. Creo que nos debemos ese debate y hay bastante consenso al respecto.
Por otra parte, estas son transferencias condicionales. Es decir que les pedimos a los padres que muestren los logros en educación y en salud. ¿Pero por qué, por ejemplo, a una persona que paga el impuesto a las ganancias, que toma la deducción especial por hijo y que a través de esa deducción cobra una ayuda para sus hijos, no le pedimos nada con respecto a la salud? ¿No nos preocupa la salud de ese niño porque su padre paga el impuesto a las ganancias?
Evidentemente, cuando cambiamos el foco del análisis y pensamos en el niño, nos damos cuenta de que el sistema carece de algunas cosas y que podría ser mejorado. Esto es parte de la agenda que está pendiente, que no incluye únicamente la cuestión de la universalización, sino también –y de manera primordial- el tema de la educación. Digo esto porque no sólo tenemos que defender el tema del 6 por ciento del producto bruto como parámetro para fijar el presupuesto educativo, sino también la calidad de la educación.
Por esa razón, solicito a la presidenta de la Comisión de Educación, aquí presente, que impulse la discusión sobre los institutos de evaluación de calidad educativa, que es el mecanismo por el cual…


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Solicito al señor diputado que redondee su exposición, dado que ha finalizado el término del que disponía para hacer uso de la palabra.


SR. STURZENEGGER, FEDERICO ADOLFO (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Ya finalizo, señora presidente.
Decía que debemos asegurarnos de que ese 6 por ciento del PBI que se destina a la educación nos permita alcanzar un buen nivel educativo. Días pasados me decía una persona: “Dime cómo es hoy tu sistema educativo y te diré cómo será tu país dentro de veinte años”. Por lo tanto, no solo tenemos que trabajar para que todos los chicos perciban la Asignación Universal por Hijo, sino también para que tengan un mejor futuro. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Seguidamente compartirán el término de quince minutos las señoras diputadas Mirta Tundis y Elia Nelly Lagoria.
La Presidencia solicita a los señores diputados que respeten el tiempo del que disponen para hacer uso de la palabra.
Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.


SRA. TUNDIS, MIRTA (BUENOS AIRES): Señora presidenta: quiero agradecer al gobierno nacional el hecho de que haya decidido enviar a este Parlamento el proyecto de ley de movilidad y tomar en cuenta la propuesta oportunamente presentada por los diputados del bloque del Frente Renovador Sergio Massa y Graciela Camaño el 26 de agosto del año pasado, que ya planteaba la necesidad de implementar un mecanismo de movilidad en el pago de la Asignación Universal por Hijo y por embarazo. Por lo tanto, existe un antecedente escrito, que es esa propuesta que ya hablaba de un sistema de movilidad del cual el gobierno nacional hoy se hace eco. Por lo tanto, vemos con placer que se haya decidido establecer la movilidad por ley.
Por otra parte, se ha dicho que es importante que quien tenga que seguir gobernando nuestro país mantenga estos beneficios para la gente. Seguramente esto es algo con lo que todos estamos de acuerdo porque nadie pretende quitarle beneficios a los ciudadanos y, mucho menos, a quienes padecen más necesidades, tienen menos, son más vulnerables o resultan más invisibles a la sociedad, como generalmente ocurre con los niños y con los adultos mayores.
Por otro lado, se ha señalado también que el gobierno bajó el nivel de desempleo. Este es un dato importante, porque de ser así tendría que haber más recaudación y, por ende, más recursos para mejorar estos beneficios. En este sentido, si bien la asignación universal ha tenido aumentos todos los años, ella nunca estuvo acorde con las necesidades de una familia.
Aquí se habla de “asignación universal”, pero lo cierto es que esta asignación no es tan “universal”, porque hay chicos que quedan al margen de este beneficio. Este es el caso de los hijos de trabajadores monotributistas, que con su aporte pagan un mínimo en concepto de aporte previsional y el resto en concepto de ganancia. Sin embargo, sus hijos se ven desprotegidos al quedar al margen de este beneficio, porque existe la duda –como en algún momento dijo un funcionario- de que quizás tenga un yate.
Si este es el problema, con todos los recursos con los que en la actualidad cuenta la AFIP, tranquilamente podrían averiguar quién es un monotributista pudiente y quién un trabajador al cual le cuesta vivir, porque tiene un taller de chapa y pintura, un pequeño almacén o un quiosco. Lamentablemente, estas personas que han decidido cumplir con la ley e inscribirse en el pago de un tributo se ven privados de percibir esta ayuda.
Esa situación ha provocado que muchos de esos trabajadores dejen de pagar o directamente no se inscriban en el Monotributo para poder cobrar la Asignación Universal por Hijo.
Obviamente que desde este bloque vamos a acompañar el proyecto, porque es algo que propusimos y venimos impulsando desde el año pasado, pero también adelanto que el año próximo no solo vamos a sostener el pago de la asignación, sino también a mejorarla, porque es importante que todos los niños de esta Nación tengan derecho a la asignación universal.
También se dijo en este recinto que, según algunas estadísticas, se comprobó que los niños compran más mermelada y galletitas, es decir, que utilizan la asignación para alimentos, pero la asignación universal se da también para controlar que los niños vayan al colegio y reciban su educación.
Nosotros decimos: ¿por qué no una ayuda escolar? Reciben la asignación universal, pero esos mismos niños no tienen derecho a recibir una ayuda escolar, que se otorga una vez al año, al comienzo de las clases, a quienes perciben asignaciones familiares. Si estamos hablando de niveles de pobreza, de niños que no tienen acceso porque sus padres están desocupados, de monotributistas, de empleadas domésticas o de trabajadores informales que cobran menos del salario mínimo vital y móvil, ¿por qué no darles esta ayuda escolar?
Digamos la verdad, ¿cómo nos sentíamos nosotros cuando éramos niños? En mi caso utilizaba cartera –no mochila, como los niños de ahora y podía ir a comprar mis cuadernos, los forros, los lápices, las pinturitas; podía elegir comprar mis útiles. Ahora los niños tienen que depender de la buena voluntad de algún municipio o alguna fundación que les pueda entregar los útiles escolares. ¿Por qué no otorgar la ayuda escolar para que ellos puedan tener los útiles que quieran? Esto daría más dignidad a esos niños y a sus familias.
Vemos bien que se otorgue esta movilidad dos veces al año, pero también tenemos que mejorarla, teniendo en cuenta que aquí mismo y desde este gobierno se reconoce que el desempleo bajó. Entonces, debe haber mucha mayor recaudación y se podrían mejorar los beneficios hoy existentes.

- Ocupa la Presidencia de la Honorable Cámara, la presidenta de la Comisión de Juicio Político, doctora Anabel Fernández Sagasti.

SRA. TUNDIS, MIRTA (BUENOS AIRES): También se habló en este recinto de la moratoria previsional de inclusión, pero se trata de una moratoria que tiene como fecha de vencimiento el 18 de septiembre del año próximo. ¿Por qué no prevenir y dejar abierta una moratoria de inclusión para que continúe con el próximo gobierno? Si el gobierno que asuma el año próximo estuviera en desacuerdo, que se atreva a decir que no.
Hablamos de jubilación anticipada, que este gobierno implementó durante la gestión de Sergio Massa, junto con la moratoria, jubilación que duró tan solo un año y medio. Hoy tenemos 30 mil desocupados de más de 60 años y menos de 65, en el caso de los hombres, y más de 55 y menos de 60, en el caso de las mujeres, que no tienen acceso a ningún beneficio previsional, al sistema de salud o a la posibilidad de trabajar. ¿Por qué se dieron de baja todos esos planes, que eran tan beneficiosos? Hoy por hoy hay muchos proyectos al respecto, pero no se tratan, a pesar de que el desempleo bajó y hay mucha mayor recaudación.
¿Qué pasa con las rentas vitalicias? Más de 80 mil personas que reciben pensiones de maridos y jubilaciones por invalidez, cobran 200, 300, 500 y, algunos, 1000 pesos por debajo del haber mínimo. ¿Por qué no se toma la decisión de dar la dignidad de un haber mínimo a estas personas, que aportaron durante tantos años y fueron olvidadas por el sistema cuando se privatizó? Estuve en desacuerdo con esa privatización y por eso ponderé cuando este gobierno estatizó el sistema y la creación del SIPA, pero si hay recaudación, por qué no mejorar estos haberes, si esto no genera una gran erogación.
Hubo aportes voluntarios a las AFJP por parte de aquellas personas que estaban en condiciones de hacerlo, para poder tener mayores ingresos al momento de jubilarse, que nunca se devolvieron. Ese problema no se ha resuelto. Hay personas que a lo mejor hicieron aportes de 500 o mil pesos, que no sabemos si están dentro del sistema del Fondo de Garantía de Sustentabilidad o vaya a saber dónde están. Todavía no se ha resuelto cómo devolverlo, aunque existe una apelación ante la Justicia.
La jubilación tiene movilidad, pero ahí también tenemos una deuda interna no reconocida. Por eso sigue habiendo juicios, aunque es cierto que este gobierno ha pagado la mayor cantidad de juicios en base a que ha tenido un mayor presupuesto, que este año ascendió a la cifra de 10.500 millones de pesos.
Por eso es que decimos: bienvenida sea la movilidad. Agradecemos al gobierno por haber hecho la propuesta, algo que desde el Frente Renovador se hizo el 26 de agosto del año pasado. Nosotros, desde este espacio, vamos a apoyar esta iniciativa, y el año próximo mejoraremos la movilidad. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(FERNÁNDEZ SAGASTI) Tiene la palabra la señora diputada por Chubut.


SRA. LAGORIA, ELIA NELLY (CHUBUT): Señora presidenta: consideramos hoy el proyecto de ley enviado a este Congreso para hacer realidad y aplicar a las asignaciones familiares la movilidad prevista en la ley 26.417, algo que venía pidiéndose desde que este gobierno implementara, por medio de los decretos 1602/09 y 446/11, la Asignación Universal por Hijo para lograr una protección social y por embarazo, y llevar paliativos a la institución familia, tan vapuleada en estos últimos tiempos. Institución que a partir de 1943 mereció, por el gobierno de Perón, la atención que le correspondía, cuando se estableció un fondo común para financiar a los trabajadores ferroviarios con cargas de familia. Luego fue la inclusión de su protección y los derechos del trabajador previstos en el artículo 37 de la Constitución Nacional de 1949, que fue derogada.
El artículo 14 bis de la Constitución Nacional, fundamental en lo que respecta a la protección integral de la familia, establece los deberes del Estado para con ella en lo relativo a la seguridad social y a lo que económicamente debiera brindarse.
Si bien estoy de acuerdo con lo que la Asignación Universal por Hijo representa como derecho, comparto la idea de que se estipule su movilidad por ley. También resulta necesario aclarar que existe un universo de personas a la que no está llegando este beneficio. Por ello, entiendo que es necesario que, a los efectos de que el Estado sirva como desarrollo de las familias, se amplíe el beneficio más allá de las personas que cuenten con el salario mínimo vital y móvil. En este sentido, considero que debe extenderse a toda aquella persona que reúna los requisitos estipulados por ley, y que perciban como remuneración o ingreso la suma en que comienza a tributarse el impuesto a las ganancias. De esta manera, el Estado estaría contemplando situaciones como la de una persona que estando empleada y percibiendo un sueldo superior al salario mínimo vital y móvil, no pueda cubrir los gastos para satisfacer las necesidades básicas de su familia.
Resulta necesario que el Estado cubra y promueva el desarrollo de las familias que se encuentran en esta franja. Además, debemos destacar que se trata de familias en las que el empleo es genuino y formal, pero que con su ingreso económico no logran cubrir todas sus necesidades. No debemos castigarlas; todo lo contrario, debemos fomentar su desarrollo.
Asimismo, como novedad, el proyecto plantea una diferenciación en cuanto a la zona de residencia del beneficiario de la asignación. Específicamente para toda la Patagonia y el partido de Carmen de Patagones, en la provincia de Buenos Aires, el incremento es un 1,3 por ciento superior del valor de la asignación. Desearía que el valor de la asignación fuera más realista, acorde con el costo de la canasta familiar de estos lugares. Tal vez esto demande tiempo, pero no creo que sea algo imposible de lograr.
Por todo lo expuesto y porque considero que esta medida va a ayudar a brindar dignidad a toda persona, adelanto mi voto afirmativo. Creo que los niños y los jóvenes son nuestro futuro, y deben ser lo primero.


SRA. PRESIDENTA(FERNÁNDEZ SAGASTI) Tiene la palabra la señora diputada por Santa Fe, que comparte el término con la señora diputada Villata.


SRA. CICILIANI, ALICIA MABEL (SANTA FE): Señora presidenta: en nombre del interbloque FAP venimos a decir que apoyamos esta iniciativa que contempla la actualización de la Asignación Universal por Hijo. Obviamente que vamos a hacerlo, porque venimos bregando por ello hace mucho tiempo, en un país en el que tenemos inflación y creemos que es necesaria esta actualización por ley para proteger, en algún aspecto, el valor adquisitivo de esta asignación.
No obstante, voy a plantear algunas conceptualizaciones.


- Ocupa la Presidencia la vicepresidenta 1ª de la Honorable Cámara, profesora Norma Amanda Abdala de Matarazzo.

SRA. CICILIANI, ALICIA MABEL (SANTA FE): La Asignación Universal por Hijo implicó un cambio central en la forma de pensar las políticas sociales. Recién escuchábamos al diputado Feletti hacer una comparación entre las políticas sociales de la década del gobierno kirchnerista y de los años 90. Obviamente que hubo un avance, y nadie podría desconocerlo. Después de tantos años de aplicación estamos en condiciones de hacer evaluaciones y saber clara y positivamente que es muy importante, pero no suficiente, para superar la brecha de desigualdad en la Argentina. Reconocemos que constituyó un avance en el sentido de que se incluyó a los trabajadores formales e informales, pero esa cuestión que significó un avance está muy lejos como para hablar de una universalización, cuando hay millones de niños y niñas que no tienen acceso a esta asignación.
Por lo tanto, estamos convencidos de que el debate por una asignación para la niñez como un derecho se encuentra pendiente. La masificación que implicó esta política pública del kirchnerismo no significa universalización. Hoy los niños y los adolescentes argentinos dependen fuertemente de la situación laboral de sus padres para recibir algún otro tipo de ingreso. Esto implica la existencia de una profunda desigualdad entre los niños y las niñas de nuestro país, la cual resulta aún más grave en el caso de aquellos que viven en una situación de vulnerabilidad social.
Hay una desigualdad entre los que tienen este tipo de cobertura y los que no la reciben, que son millones. Pero también hay una enorme desigualdad entre los que reciben la propia cobertura, porque existen distintos requisitos para cobrar una asignación familiar contributiva y condicionalidades que deben ser cumplidas para recibir la asignación universal.
Consideramos que el debate que está pendiente en la Argentina no solo es el referido a la asignación a la niñez, considerada como un derecho y como una política social, sino también aquel que se relaciona con una agenda de desarrollo que permita superar la brecha de desigualdad. Estamos seguros de que la ciudadanía se encuentra esperando eso por parte de la política argentina. Comparto las opiniones vertidas por algunos señores diputados que me precedieron en el uso de la palabra en cuanto a que no tiene mucho sentido que en el día de hoy estemos hablando durante muchas horas respecto del tema de la actualización, sobre el que estamos todos absolutamente de acuerdo.
Desde el interbloque FAP nos preguntamos lo siguiente: ¿destinar el 0,5 por ciento del PBI contribuye a superar la situación de desigualdad que sufren nuestros niños y niñas en la Argentina, sabiendo cuales son las condiciones de pobreza en las que viven millones de ellos? No queremos venir a discutir aquí los datos proporcionados por la UCA o por el INDEC. Nos parecen irrelevantes, ya que recorremos las calles de nuestras ciudades y vemos que la pobreza es palpable; estamos convencidos de ello.
Lo que venimos a discutir en este recinto –y también queremos hacerlo en el futuro- es qué cantidad de bienes públicos vamos a asignar para poder contar con esta agenda de desarrollo de la que estamos hablando, a fin de que una educación y una salud pública de calidad realmente brinden igualdad de oportunidades a todos los niños y niñas de la Argentina.
No deja de llamarnos la atención que diputados de distintos bloques políticos hablen del Norte y del Sur como diferenciador de la existencia de una mayor y de una menor pobreza. Esta última es actualmente en la Argentina la pobreza de las grandes ciudades y convive con núcleos urbanos de desarrollos de riqueza muy potentes y que se encuentran diseminados a lo largo y a lo ancho del país, incluida la Capital Federal, que registra el mayor índice de ingresos por habitante. No obstante, en esta ciudad también tenemos niños que se encuentran en una situación de pobreza y de vulnerabilidad que necesitan la Asignación Universal por Hijo.
Creo que es absolutamente inconducente estar discutiendo esto sin reconocer la compleja y diversa realidad territorial y cómo la pobreza se ha desplazado desde el Norte y el Sur argentinos hacia los grandes centros urbanos, donde se registra la mayor riqueza en este país.
Esta es la complejidad que queremos debatir. Deseamos discutir acerca del tema de la pobreza antes y después del coeficiente de Gini. Queremos saber cuál es la situación antes y después del pago de impuestos, como así también que les reintegren el IVA a los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, ya que el hecho de que tengan que pagar por ella una tasa del 21 por ciento en concepto de ese tributo constituye una total injusticia. Queremos saber a dónde se dirige el gasto público de calidad que se aplica a estos sectores vulnerables y no a financiar y a sostener a las familias de altos ingresos con subsidios a la energía, que son recibidos por una enorme cantidad de población que no lo necesita.
Creemos que ese es el debate pendiente de la agenda de desarrollo. En ese sentido, el interbloque FAP siempre va a estar dispuesto a debatir para superar la desigualdad en la Argentina.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Córdoba.


SRA. VILLATA, GRACIELA SUSANA (CORDOBA): Señora presidenta: obviamente, estamos de acuerdo con este proyecto, pero recuerdo una madrugada en soledad en este recinto donde discutíamos la ley de impuesto a las ganancias. En ese entonces veníamos de una sesión en donde nos habían hablado de los derechos que este gobierno nacional y popular le había entregado a cada uno de los argentinos. Justamente en esa sesión pedíamos que se volvieran a debatir otros derechos que estaban pendientes, entre ellos, el 82 por ciento móvil. Asimismo, pedíamos que se debata si el salario es ganancia y podía ser gravado –como lo es en la actualidad- y también solicitábamos que la Asignación Universal por Hijo sea aprobada por ley.
Me pregunto si no es oportunismo que en el día de hoy estemos tratando esta iniciativa. Si no es oportunismo, ¿es especulación? Y si no es especulación, puede ser que este gobierno, después de cinco años, nos haya escuchado. En principio, desde la oposición pedimos que esto fuera aprobado por ley pero, como siempre, venimos a debatir a las apuradas esta iniciativa. Debemos tener en cuenta que esta actualización va a aplicarse recién en marzo del año que viene.
Yo me pregunto: ¿por qué hay que diferenciar a los niños y a las madres que reciben este beneficio? ¿Por qué hacer una diferencia entre el sur y el norte?
Todos hemos entendido perfectamente que esta actualización está contemplada en el artículo 2°, que sostiene que la región patagónica tendrá un importe diferencial consistente en aplicar el coeficiente del 1,3 sobre el valor de la asignación vigente. Sabemos que el gobierno analiza el costo de vida, ¿pero por qué no analizamos que ante la realidad de la pobreza en nuestro país –donde el 30 por ciento de la población es pobre y el 50 por ciento de los niños se encuentra en esta situación- se pone en serio riesgo su desarrollo en un futuro cercano?
Cuando empezamos a analizar la pobreza nos damos cuenta de que hay una región muy importante, la del norte, que está siendo castigada por los índices de pobreza. Es más: quisiera traer a este recinto –si me permiten leerlo- lo que dijo la presidenta el pasado 9 de julio: “¡Qué les voy a hablar de igualdad acá al Norte Argentino si toda la vida los han tratado como argentinos de segunda!”
Cuando la señora presidenta dijo esto pensé que íbamos a poder modificar este proyecto de ley: ¿por qué los que viven en la Patagonia van a poder recibir un 30 por ciento más y no sucede lo mismo con los que habitan el norte argentino?
En función de los datos que arroja la Encuesta Permanente de Hogares vemos claramente que la región del NOA tiene un 30,4 por ciento de pobreza y la del NEA un 39,3 por ciento. Cuando analizamos, de acuerdo con el mismo índice, a las provincias patagónicas vemos que en ese caso el mismo asciende al 13,8 por ciento.
Entonces, teniendo en cuenta que no estamos apurados para tratar esta iniciativa, podríamos extender esta medida a las provincias que integran el NOA y el NEA. Propongo que el incumplimiento de las contraprestaciones como la vacuna y el certificado de escolaridad- no los excluya del padrón, porque al hacer esto los aislamos más. Deberíamos crear un nuevo padrón para que sobre ese grupo vulnerable que no cumple con las vacunas que corresponden ni con el trámite simple del certificado de escolaridad se pueda llevar a cabo un seguimiento diferente para trabajar directamente y profundizar la inclusión, en vez de sumirlos en la marginación.
Como dijo la señora diputada Ciciliani, todos estamos de acuerdo con que se apruebe esta actualización por ley, pero pedimos al oficialismo que tenga en cuenta los índices de pobreza del norte argentino y que sea incluido en el coeficiente marginal contemplado en el artículo 2°. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Santiago del Estero, quien comparte el tiempo de 10 minutos con el señor diputado Herrera.


SRA. NAVARRO, GRACIELA (SANTIAGO DEL ESTERO): Señora presidenta: hace treinta días, en un día más de trabajo de la señora presidenta de la Nación, a través de una teleconferencia inauguraba en Santiago del Estero, en esa tarde gloriosa, las obras más emblemáticas que se puedan brindar a provincias del interior profundo, algo histórico: agua, luz y caminos.
Esa misma tarde anunció el aumento de las asignaciones familiares y, además, que enviaba este proyecto de ley al Congreso. Han transcurrido treinta días desde ese momento y hoy estamos considerando esta iniciativa.
Todo Santiago del Estero lo recibió con total beneplácito porque se trata de continuar aquella famosa reparación histórica que inició Néstor Kirchner.
Escucho aquí a diputados que cuestionan las asignaciones y las jubilaciones de los beneficiarios que nunca tuvieron aportes y que llegaron a los 60 o 65 años de edad y este gobierno tuvo que asumir el compromiso, ante tantos argentinos, de lograr estas conquistas sociales para paliar tanta discriminación de un Estado ausente.
Se están quejando de que una gestión tiene que resolver la situación de argentinos que cumplen más de sesenta años de edad. ¿Qué pasó con los gobiernos anteriores?
Justamente, esta asignación es una reparación histórica. En Santiago del Estero no teníamos trabajo, no teníamos agua, luz ni vivienda. ¡Y en diez días Santiago del Estero cumple 462 años! Recién ahora nos hacen obras de agua. Lamentablemente, la naturaleza de nuestra provincia ha sido adversa.
¿Por qué Santiago del Estero apoya totalmente estas decisiones y conquistas? Porque realmente reivindicamos lo que en tantos años muchos gobiernos nunca tuvieron: una mirada federal.
Señora presidenta: hay mucho que decir. Esta es otra conquista y el bloque en pleno va a acompañarla, porque lo que vemos continuamente en esta gestión es que siempre se trata de adquirir derechos para dar una mejor calidad de vida a los santiagueños y mucho más a los argentinos.
Agradezco esta oportunidad y adelanto el voto positivo.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Santiago del Estero.


SR.(HERRERA) Señora presidenta: en el mismo sentido considero que este es un día histórico; en primer lugar, por haber la presidenta de la Nación armado este proceso respecto de la asignación universal por hijo y plasmarla con un aumento dos veces al año, cuestión que es muy importante y que los argentinos tenemos que celebrar.
Aquí podemos observar la calidad de la gestión que lleva adelante nuestra querida presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien gobierna con una mirada desde abajo hacia arriba. Esto significa que la prioridad de este proyecto nacional y popular son los humildes.
Por las razones expuestas, porque respaldamos al Poder Ejecutivo nacional, apoyamos la sanción de este proyecto de ley. Adelantamos desde ya nuestro voto afirmativo y solicito autorización para insertar mi discurso en el Diario de Sesiones.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SRA. CARRIZO, ANA CARLA (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: como ya lo adelantara la señora diputada Terada, los integrantes de nuestro interbloque daremos nuestro apoyo a esta iniciativa, porque entendemos que es importante que exista un mecanismo de actualización para las asignaciones familiares en general, y la asignación universal por hijo y la asignación universal por embarazo en particular.
Asimismo, coincidimos en general con observaciones efectuadas por algunos bloques de la oposición respecto de la ausencia de universalidad efectiva y de un debate sobre el sistema de protección integral de la infancia.
Me gustaría hacer alguna reflexión a propósito de lo que se dijo en este recinto, porque se usaron algunas expresiones muy fuertes que luego fueron repetidas por diputados de la oposición: la ausencia de un piso mínimo en todo el territorio nacional para acceder a un sistema de protección integral de la infancia y la idea de federalismo.
Cuando escucho a algunos legisladores a veces me sorprendo, porque pareciera que “federalismo” es una palabra de la que surgen todas cosas buenas, cuando lo cierto es que en la Argentina –como en toda democracia federal, donde es difícil gobernar hay un Estado nacional y veinticuatro estados subnacionales. En este contexto, contar con un sistema de protección integral de la infancia depende no solamente del Estado nacional, sino también de los veinticuatro oficialismos gobernantes en el país.
En este punto, me gustaría hacer un llamado a la reflexión. Hace casi ocho años se sancionó la ley de protección integral de la infancia, pero todavía el Congreso adeuda la designación del defensor de los derechos del niño. Esto es importante, porque no sabemos quién controla en las provincias que esa protección exista.
Durante el debate también se habló de ausencias estructurales, de que todavía faltan educación y salud. Me pregunto cómo podemos hablar de un sistema de protección integral de la niñez si no tenemos sistemas de control.
Con un grupo de diputadas nos impusimos la tarea de reconstruir el mapa de control de las políticas públicas asociadas a la infancia en la Argentina, y pudimos observar que solo en cinco provincias se avanzó en la creación de la figura del defensor de los derechos del niño como una figura externa a la administración pública. Es decir que solamente cinco provincias cumplieron con la obligación de designar esta figura que permite controlar y exigir a los oficialismos provinciales la implementación de un sistema integral de protección de la infancia y que el 75 por ciento de ellas no lo hicieron.
En consecuencia, advertimos que cuando en nuestro país se habla de infancia, se dice mucho y se explica poco. Nuestro interbloque se conformaría con que el Congreso pudiese hacerle caso a la Justicia, quien ya dio la razón a las ONG, y antes de fin de año constituya la comisión bicameral para que podamos tener un defensor de los derechos del niño que controle las políticas públicas asociadas a la infancia. Asimismo, esperamos que los diputados que hablaron de la necesidad de contar con un piso mínimo en todo el territorio hagan lo propio con los oficialismos de sus provincias. (Aplausos en las bancas.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por San Luis.


SRA. ARENAS, BERTA HORTENSIA (SAN LUIS): Señora presidenta: en esta intervención seguiré en general los lineamientos expresados por el senador nacional y candidato a presidente de la Nación, doctor Adolfo Rodríguez Saa, en oportunidad del tratamiento de este proyecto en el Senado el pasado 1° de julio, aniversario de la muerte del general Perón, quien tanto hizo por el bienestar social de la Argentina.
Por supuesto, la idea de que el monto de las asignaciones no contributivas se actualice del mismo modo que las contributivas o laborales no merece ningún comentario, pues estamos todos de acuerdo. Es muy bueno que este tema nos una, más allá de las diferencias partidarias o circunstanciales, sobre todo si pensamos que es un beneficio para los sectores más vulnerables de nuestra República.
También debo decir que es prudente reflexionar y profundizar sobre algunas cuestiones que ya han planteado los señores diputados, como el incremento de los montos para los habitantes de la Patagonia, fundamentado en el costo de vida de dicha zona. Debo reconocer que las estadísticas de la pobreza son tal vez más severas en el NOA y en el NEA argentinos. Si bien el costo de vida en la Patagonia argentina puede ser más elevado, esto quizás se ha ido paliando sobre la base de mayores salarios y beneficios relacionados con los servicios y los combustibles, mientras que en el Norte argentino no han existido este tipo de incentivos.
Por lo tanto, creemos que es justo que se equipare beneficiando al Norte argentino, por las condiciones que ya han expresado los señores diputados. Estamos hablando ni más ni menos que de seres humanos, por lo que necesitamos generar igualdad de condiciones para todos los que están en situación vulnerable.
Tengo que hablar necesariamente de lo que significa la pobreza. Es indudable que el gobierno toma estas medidas para combatir la pobreza, pero no alcanzan, porque la pobreza también consiste en no disponer de la oportunidad de disfrutar la libertad con dignidad y tener una larga vida, sana y creativa, junto al resto de la sociedad.
Las causas de la pobreza son diversas y existen distintas formas de medirla. Se puede tomar en cuenta el porcentaje de la población con disminución de esperanza de vida, el analfabetismo, el no acceso al agua potable, a la salud y a la educación, e incluso la mala nutrición de los niños menores de cinco años.
Indudablemente, en general los índices surgen de una marcada polaridad social. Los seres humanos somos los únicos seres que pensamos en el futuro, y esto nos diferencia de las demás especies. Cuando combatimos la pobreza tenemos que pensar en esto, no solamente resolver lo inmediato sino el porvenir de la gente.
Por eso la manera de combatir la pobreza es dar fuentes de trabajo. Como decía el general Perón, “Gobernar es crear trabajo”, y a eso debemos abocarnos. Debemos abocarnos a que haya situaciones de pleno empleo, a que la industria nacional genere mayor cantidad de empleos, porque de esta manera realmente estaremos combatiendo la pobreza.
Por supuesto que con estas asignaciones universales estamos cubriendo un piso, lo mínimo, pero el pueblo merece vivir mejor. La provincia de San Luis –lo decimos con orgullo- es la mejor administrada del país y así lo dicen numerosos indicadores.
La Asignación Universal por Hijo fue creada por el decreto 1.602. Hoy estamos transformando en ley una movilidad, pero la asignación queda limitada a un decreto presidencial. En la provincia de San Luis, en el año 2003, el gobernador Alberto Rodríguez Saá creó el Plan de Inclusión Social para paliar la crisis que venía del año 2001, pero no nos conformamos y en 2011 reformamos la Constitución provincial y se incorporó el artículo 11 bis. Permítanme que lo lea. Dice así: “Esta Constitución reconoce todos los derechos y garantías establecidos en la Constitución Nacional, a los que se considera un piso por sobre el cual la provincia de San Luis puede establecer mayores derechos y garantías.
“Todos los habitantes de la provincia gozan de los derechos de inclusión social y de inclusión digital, como nuevos derechos humanos fundamentales.”
La provincia de San Luis reconoce también la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas. Esto realmente asegura que dichos beneficios no los cambie ningún gobierno. Fue votado por el pueblo de San Luis y se transformó en un derecho constitucional.
Por eso creemos que estos derechos humanos fundamentales deben ser reconocidos por la legislación nacional de máxima jerarquía, deben ser constitucionalizados, como se hizo en San Luis.
Hoy, de acuerdo con los números, hay alrededor de 18 millones de personas que están en situación de pobreza, y estamos tratando esto con un precario decreto. Estamos de acuerdo con esta ley de movilidad, pero lo que dio origen a esto sigue en un precario decreto. Por lo tanto, esto sería como el Estado al revés. No obstante, adelanto el voto positivo de nuestro bloque.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Córdoba.


SR. SCHIARETTI, JUAN (CORDOBA): Señora presidenta: quiero fundamentar los reparos y aportes que tenemos para este proyecto de ley, que ya los habíamos presentado en un proyecto de fecha 3 de noviembre de 2014. Ahí planteábamos la necesidad imperiosa de que la Asignación Universal por Hijo que es una buena medida y sin duda favorece a cerca del 40 por ciento de las familias argentinas, cuyos jefes trabajan en la informalidad o son desocupados se transformara en una política de Estado.
Para ello era imprescindible que se sancionara por ley y que además se estableciese un mecanismo para poder aumentar esta Asignación Universal por Hijo de manera automática, no dependiendo de la voluntad de quien ejerciese el Poder Ejecutivo nacional.
Nos pareció también importante que a la hora de fijar la automaticidad se utilizaran los índices que más beneficiaran a quienes recibían la Asignación Universal por Hijo. Como estamos hablando de uno de los sectores más vulnerables de la sociedad, hay que pensar que en el futuro la Argentina seguramente revisará la manera de calcular los índices de inflación. También debemos pensar que en el futuro la inflación puede ser superior al aumento salarial que se otorgue. De ahí que nuestra propuesta consista en que la actualización sea semestral en forma automática por el índice de inflación o el de variación salarial, el que fuese mayor. ¿Por qué decimos esto? Porque cuando el salario le gana a la inflación, es razonable que los sectores más vulnerables que cuentan con estos beneficios acompañen el aumento. El problema se presenta cuando la inflación es superior al salario: los sectores más vulnerables serán los que más sufrirán, ya que sus ingresos son destinados a la subsistencia de la familia.
Por eso nos parece importante que la redacción del proyecto especifique que se tendrá en cuenta el índice de variación de la inflación o del salario, el que resulte mayor; además de que la actualización sea semestral.
También nos parece importante que la Asignación Universal por Hijo tienda a incorporar la mayor cantidad de tutores o padres de los beneficiarios que se desempeñan en el mercado formal de trabajo. Como dijo el general Perón, no existe mejor política social que un buen empleo. Realmente lo que precisan los argentinos es que exista empleo en el mercado formal para que los sueldos estén en blanco.
En ese sentido, nos parece importante incorporar dos cosas. En primer lugar, que reciban la Asignación Universal por Hijo todas las empleadas o empleados domésticos. Si bien esto está planteado en la norma específica cuando la ANSES interpreta quién puede ser beneficiario, resulta que solamente reciben la Asignación Universal por Hijo aquellas empleadas domésticas que ganan el salario mínimo y que además no tienen marido o pareja que conviva con ellas. Además, aunque la pareja o el marido no conviva con ella, si es monotributista y no recibe la Asignación Universal por Hijo, la empleada doméstica también deja de percibirla.
Haciendo las cuentas, como muchas veces las hacen los argentinos, lo cierto es que a las empleadas domésticas que perciben el salario mínimo les conviene que los empleadores no las registren para no perder la mencionada asignación.
Por ello, para impulsar el hecho de que exista el trabajo formal, debemos lograr que la Asignación Universal por Hijo se extienda a todas las empleadas domésticas, ganen lo que ganen. Esto en la medida en que su conviviente o esposo no perciba la Asignación Universal por Hijo.
Lo que he manifestado va a ayudar a que exista empleo más formal, impulsando una medida de estricta justicia social, porque quienes trabajan como empleadas domésticas tienen derecho a percibir la asignación.
También nos parece importante incorporar otro artículo que diga que si el padre o tutor que percibe la Asignación Universal por Hijo ingresa a un empleo formal, que ésta le sea abonada por un lapso de tres años, independientemente del salario que perciba.
Hablo de “independientemente”, porque todos sabemos que cuando aumenta un poco el salario se reduce la asignación o directamente se le quita. Se trata de otra medida que persigue la idea de impulsar el hecho de que exista más trabajo formal en la Argentina.
Creo que esto que va a ser transformado en ley será una política de Estado que terminará con la discrecionalidad del Poder Ejecutivo, sea cual fuere el que esté al frente del país. Estamos dando un paso adelante, porque nadie podrá quitar este derecho a sus beneficiarios. Por lo tanto, nos parece importante garantizar que nunca pierde el valor en términos reales en relación con la inflación. Por una cuestión de justicia social y de impulso al trabajo formal, es relevante que se extienda a todas las empleadas domésticas y que se conserve durante tres años cuando el tutor o padre del beneficiario ingresa al mercado formal.
Con estas observaciones, adelanto el voto afirmativo en general de la bancada Unión por Córdoba al proyecto de ley en consideración.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SR. HELLER, CARLOS SALOMON (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: este es un tema del que se ha hablado bastante y sobre el cual uno intenta agregar algo sin repetir.
Me gustaría comenzar citando una frase del discurso que brindó el Papa Francisco el 9 de julio pasado en Santa Cruz, Bolivia, en el Encuentro Mundial de los Movimientos Populares. Entre muchas otras cosas, manifestó: “La primera tarea es poner la economía al servicio de los pueblos: los seres humanos y la naturaleza no deben estar al servicio del dinero. Digamos no a una economía de exclusión e inequidad donde el dinero reina en lugar de servir. Esa economía mata. Esa economía excluye. Esa economía destruye la Madre Tierra.”
Un poco más adelante, ya refiriéndose a algo que nos incumbe directamente en relación con el tema que estamos tratando, señaló: “Los planes asistenciales que atienden ciertas urgencias solo deberían pensarse como respuestas pasajeras, coyunturales. Nunca podrán sustituir la verdadera inclusión: esa que da el trabajo digno, libre, creativo, participativo y solidario.”
Estoy absolutamente de acuerdo con ese criterio, y también es cierto que todo esto requiere un proceso que no es fácil y que hemos venido transitando durante estos últimos doce años en la Argentina. Forman parte de ese proceso las negociaciones paritarias, que han servido para mejorar el salario real, así como también las tareas destinadas a reducir la flexibilización laboral. Sin embargo subsisten graves problemas, como el de los trabajadores no registrados, cuyo número si bien se ha venido reduciendo en estos últimos años sigue rondando el 32 por ciento de la fuerza laboral. Indudablemente, esta es una cifra alta y representa una asignatura pendiente y un tema sobre el que habrá que seguir trabajando. Se trata de trabajadores sin acceso a la seguridad social ni a las obras sociales y con salarios menores a los de los trabajadores registrados.
Si bien hemos aprobado infinidad de leyes en este Parlamento –que no vale la pena que detalle porque todos hemos sido actores de ellas-, siguen faltando muchísimas otras e incluso todavía falta una acción posterior a la sanción de las leyes para reducir el trabajo no registrado. Indudablemente, esto requerirá nuevas y mayores regulaciones estatales.
Quiero reivindicar en un párrafo el origen de la Asignación Universal por Hijo porque muchas veces hemos escuchado que tiene autores con nombre propio. Y yo quiero recordar acá que entre el 14 y el 17 de diciembre de 2001 el Frente Nacional contra la Pobreza conformado por organizaciones sociales, de derechos humanos, religiosas y de trabajadores realizó una consulta popular en la que más de tres millones de personas se manifestaron a través de su voto a favor de lo que se denominaba como un shock redistributivo, que tenía por objeto poner en marcha el consumo interno, lo cual estaba claramente en contra de las medidas que había adoptado el gobierno de ese entonces.
Ese fue un claro ejercicio de democracia directa, con un pueblo opinando y decidiendo sin intermediarios. Justamente fue en el ámbito del Frenapo donde se plantearon estas cuestiones y allí nació la idea de la asignación universal.
La consulta popular aprobó la creación de un seguro de empleo y formación de 380 pesos para cada jefe y jefa de hogar desocupado, una asignación de 60 pesos por hijo menor de 18 años y una asignación de 150 pesos para los jubilados sin cobertura. Esto era lo mínimo indispensable que se podía plantear en un momento de grave descomposición social, aun antes de la debacle de la convertibilidad y de la caída en picada de la actividad económica y de las condiciones sociales.
Para tener una idea de lo que significaban aquellos 150 pesos hicimos algún cálculo partiendo de la base de que equivalían 150 dólares –aunque en realidad era un engaño-, que actualizados al día de hoy nos da un valor de 2.100 pesos, monto que se ubica muy por debajo del mínimo actual de las prestaciones previsionales, que están en 3.821 pesos. Asimismo tengamos en cuenta que hoy en día están cubiertos la casi totalidad de los adultos en condiciones de jubilarse y que se paga el doble de la prestación mínima de aquel entonces, que incluso se ubicaba muy cerca del haber promedio. Digo esto porque en el presente el haber promedio de los jubilados y pensionados está en 5.760 pesos, cifra que curiosamente es similar a la que algún estudio que conocimos en el día de la fecha refiere como el límite para fijar el índice de pobreza.
En ese sentido, encontrándose las jubilaciones en ese nivel y partiendo de la base de que es difícil imaginar hogares en los que el ingreso de la familia se ubique por debajo de los 1.700 pesos, aprovecho la oportunidad para poner en duda la veracidad y certeza de esos datos que nos quieren hacer creer que casi el 30 por ciento de los argentinos está bajo el índice de la pobreza.
Tengo aquí muchos datos más que voy a insertar en el Diario de Sesiones, porque el tiempo del que dispongo no me permite plantearlo personalmente. De todos modos, con esta información vemos cómo la Argentina ha mejorado en la consideración universal en materia de sus políticas de inclusión social y cómo la asignación universal aparece como una de las herramientas fundamentales para el logro de esos objetivos.
Para finalizar, dejo asentado nuestro acompañamiento al proyecto en tratamiento, convencidos de que la fórmula elegida para ajustar los valores de la asignación ya ha resultado exitosa en el caso de los jubilados. Esto le brinda seguridad a quienes deban permanecer bajo este régimen de que la asignación tendrá una actualización automática que preservará su valor.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por el Neuquén.


SRA. COMELLI, ALICIA MARCELA (NEUQUEN): Señora presidenta: adelanto el voto afirmativo del bloque del Movimiento Popular Neuquino al proyecto de ley en tratamiento que estamos próximos a sancionar.
A cinco años de la puesta en vigencia del decreto 1.602 podemos dar cuenta del impacto positivo que han tenido estas políticas de Estado a lo largo y ancho del país en pos de bregar por la igualdad, la inclusión, la lucha contra la pobreza extrema y una mejora de los indicadores sociosanitarios y educativos. Tal como se ha dicho reiteradamente, todos estamos de acuerdo con eso; bienvenido sea. Más allá de la necesidad de buscar autores o distintas iniciativas previas, que es cierto que las ha habido, lo importante es que hoy estaremos dando sanción a este proyecto.
Cuando se puso en marcha la Asignación Universal por Hijo, allá por 2009, se procuró alcanzar a aquellos niños y niñas cuyos padres no percibían ningún ingreso de carácter formal. Sin embargo –también hay que decirlo se desataron muchas críticas y mitos en la opinión pública, en algunos casos insostenibles y hasta perversos. Hoy la evidencia empírica hace que quede claro para todos que este es un instrumento tan firme que enmudece cualquier opinión de este discurso, a veces de una doble moral, en el cual se discriminaba al excluido o se culpaba a la víctima de estar en situación de pobreza, como si eso fuera una suerte de delito o por lo menos una causa de sospecha. Por eso se cuestionaba la política de asistencia, de subsidio. Esto lo hemos escuchado en boca de más de un dirigente o comunicador.
En este recinto se ha hablado bastante de la vulnerabilidad de los niños, de las consecuencias de la desnutrición, la falta de lactancia materna, la desorganización familiar, la deserción escolar, el trabajo infantil. En este sentido, toda política que bregue por hacer realidad lo que nosotros también materializamos, como la Ley de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, siempre va en el mejor de los sentidos.
Comparto lo que dijo alguna diputada en cuanto a que aquí hay una responsabilidad que también corresponde a los Estados provinciales. Tenemos una responsabilidad como sociedad, como padres, como familia, como Estados provinciales y como Nación.
En esta oportunidad quiero destacar dos o tres elementos que si bien se han mencionado vale la pena reiterar, y tienen que ver con las externalidades positivas de este programa, que no solo mejoran lo que es el coeficiente de Gini favoreciendo la igualdad sino también lo que tiene que ver con la salud de los niños, niñas y adolescentes: su vacunación o los controles médicos periódicos de las madres embarazadas. También es importante en cuanto a lo que representa en el ingreso de un grupo vulnerable: desde un 25 por ciento hasta un 40 por ciento en los hogares más pobres. Dado que la percepción en muchos casos es llevada adelante por un hogar monoparental a cargo de una mujer, también destacamos el empoderamiento que esto significa para las mujeres.
En suma, destacamos los controles en salud, y en general desde nuestro bloque entendemos que la Asignación Universal por Hijo no solo alimenta y educa a los niños sino que alimenta y educa a los futuros médicos, maestros, músicos, artistas e ingenieros. Creemos que es mucho más que una mera asignación y es más bien una regla que entendemos que va en pos de una Nación más desarrollada, igualitaria y justa.
Por último quiero hacer referencia a algo que aquí se ha criticado en cuanto a los criterios geográficos, que alguna diputada calificó como caprichosos, que hacen que la Patagonia tenga un diferencial, mezclando en el análisis lo que tiene que ver con niveles de pobreza entre el Sur y el Norte, que no los voy a discutir. Lo cierto es que es mucho más complejo el análisis de una diversidad territorial. ¿Saben ustedes cuánto gasta una familia de la Patagonia en el consumo de gas? Porque no es lo mismo ser pobre con temperaturas bajo cero que sobre cero. Podemos esperar y desear un mayor nivel de Asignación Universal por Hijo, pero pretender discriminar y desentenderse de lo que significa vivir lejos de los centros de producción y distribución en zonas que están verdaderamente en desventaja es algo diferente. No obstante, cabe aclarar que producimos gran parte de la energía que se consume en el resto del país y en las grandes capitales con subsidios que ni siquiera contamos, porque hasta el combustible pagamos más caro en la Patagonia norte que acá, en la ciudad de Buenos Aires.
Si se trata de mejorar y buscar una igualdad debemos elevarnos todos en lugar de pretender sobresalir aplastando al de al lado, como es tan común en el ámbito de la política.
Los beneficios y diferencias con que hoy cuenta la Patagonia por su propio clima han constituido un debate viejo que ha quedado totalmente superado. En todo caso, tratemos de mejorar las zonas que tienen mayor índice de pobreza. Reitero: analicen un solo dato: consumo de leña y gas por familia en mi pueblo, hoy bajo la nieve, y en las provincias del Norte. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Mendoza.


SR. DEL CAÑO, NICOLAS (MENDOZA): Señora presidenta: esta norma plantea superar la literalidad de los aumentos instrumentados por el Poder Ejecutivo. Este es el único elemento por el cual desde el PTS, Frente de Izquierda, vamos a votar favorablemente esta iniciativa.
Aunque la asignación universal es muy importante para amplios sectores de la población, la lógica oficial durante todos estos años ha sido mantener la asistencia en los niveles mínimos, naturalizando la pobreza estructural, la precarización laboral y los bajos salarios. Sin ir más lejos, el 18 por ciento de los jóvenes que tienen entre 18 y 25 años hoy se encuentra desocupado. Desde el oficialismo, para intentar justificar y vanagloriarse de ciertas estadísticas socioeconómicas, siempre se hicieron comparaciones con el año 2001 o con esos años en los que se produjo un crack económico en la Argentina. Sin embargo, como reconocen el propio oficialismo y economistas de distintos sectores políticos, durante estos doce años de gobierno kirchnerista hubo crecimiento a tasas chinas y los grandes capitalistas y empresarios se la “llevaron en pala”, como muchas veces dijo la propia presidenta, en el sentido de que habían obtenido extraordinarias ganancias.
Por ejemplo, si consideramos el año 1974, advertimos que la desocupación apenas superaba el 2 por ciento. Es decir que todas las políticas que se implementaron en la década de los 90 hoy se están naturalizando. Después de doce años estamos viendo un sistema perverso en el que existen trabajadores cuyos salarios apenas superan el costo de la canasta familiar. Me refiero a datos de los trabajadores del INDEC, que todavía pelean contra la intervención, o a los del sector aceitero, que si bien habían logrado imponer a las poderosas patronales un aumento del 36 por ciento de sus salarios, el gobierno no homologó dicho convenio porque consideraba que no respetaba el techo del 27 por ciento estipulado en muchas paritarias con la complicidad de los dirigentes sindicales. Estas estadísticas, que no son las fraguadas por el INDEC, indican que el costo de la canasta familiar es de 14 mil pesos. Los trabajadores cuyos ingresos apenas superan ese valor deben pagar el impuesto al salario, mientras que los propios beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, que como dijo el señor miembro informante, la gastan en galletitas, tienen que pagar la tasa del 21 por ciento en concepto de IVA, que es un tributo al consumo popular.
La ANSES se desfinancia para justificar que los jubilados no cobren el 82 por ciento móvil. Sin embargo, la renta financiera no está gravada, mientras que las grandes mineras y petroleras no tienen que pagar impuestos progresivos ni extraordinarios, como sí lo son las ganancias que obtienen.
Entonces, creemos que ya ni siquiera se habla de la redistribución de la riqueza, sino que muchas veces directamente nos dicen que estos trabajadores que pagan el impuesto al salario son privilegiados.
Quiero hacer una mención importante respecto de un tema que este Parlamento aprobó el año pasado, a fin de poder efectuar comparaciones. Concretamente aquí se aprobó el pago de una indemnización a los vaciadores de REPSOL, a pesar de que en su momento se dijo que ellos eran los que iban a tener que pagar al Estado argentino por los daños causados. La totalidad de lo que se pagó a los vaciadores de REPSOL equivalió a tres veces lo que se destina en el término de un año al pago de la Asignación Universal por Hijo.
Por eso creo que esto está muy claro. A veces intentaron decirnos desde el gobierno que había que elegir. La elección que hay aquí es muy clara: se trata de seguir beneficiando a los grandes empresarios y capitalistas, como así también en cuanto al tema del pago de la deuda externa.
Quiero aportar otro dato: en 2015 se va a destinar al pago de la Asignación Universal por Hijo menos de la tercera parte de lo que se abonará en concepto de intereses de la deuda externa.
Por eso nosotros venimos peleando e inclusive hemos presentado en esta Honorable Cámara un proyecto que no ha sido debatido y que establece la adopción de medidas de emergencia mínimas, como por ejemplo el incremento, en primer término, de la Asignación Universal por Hijo, la cual, si se afectaran los intereses que he mencionado, hoy podría ascender aproximadamente a 2.500 pesos, al tiempo que podría ser extendida a los más de tres millones y medio de niños y adolescentes que actualmente no la perciben. Por eso es falso lo que se dice en el sentido de que esta asignación tiene un carácter universal.
Nuestro proyecto también planteaba el cese de los despidos y las suspensiones por veinticuatro meses, la necesidad de un salario mínimo equivalente al costo de la canasta familiar, la eliminación del impuesto al salario y, por supuesto, el pago del 82 por ciento móvil a los jubilados.
Esa es la perspectiva que defendemos desde el PTS, desde el Frente de Izquierda. El señor diputado Feletti dijo que es muy difícil entender cómo es que había más pobres cuando existía una menor desocupación. Quizás lo que resulte difícil de entender por parte del señor diputado es cómo hace para llegar a fin de mes la mitad de los trabajadores de la Argentina cuando ganan menos de 5.700 pesos por mes. En consecuencia, creemos que es una hipocresía sostener que es difícil entender estas cifras.
Los trabajadores del INDEC, que resisten la intervención a ese organismo, también han elaborado un estudio que indica que actualmente hay en la Argentina un 25 por ciento de pobres.
Por ese motivo, en lugar de esconder la realidad de millones de trabajadores argentinos se deben afectar los intereses de los grandes empresarios y capitalistas.
Por ello este proyecto está al servicio de cada una de las luchas que dan los trabajadores y el pueblo argentino para obtener sus derechos.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. GIUSTOZZI, RUBEN DARIO (BUENOS AIRES): Señora presidenta: es natural que en ese sentido la abrumadora mayoría reconozca un avance y es importante poder hacer un pequeño repaso respecto de lo que ha pasado en las últimas décadas.
Recuerdo que a fines de la dictadura militar aspirábamos a tener el derecho de reunión y la posibilidad de elegir y ser elegidos, pero siempre nos quedábamos con el sabor amargo frente a la lucha tendiente a recuperar derechos y conquistas de otros tiempos.
Nos remontábamos a la discusión del siglo pasado, cuando el mundo se debatía entre naciones que adscribían a una especie de capitalismo salvaje y al totalitarismo de Estado y así nacía una tercera posición que ponía al capital en un rol director del Estado al servicio del hombre -que acuñó el general Perón- y que en el transcurso del tiempo se fue convirtiendo en una verdad asumida por el conjunto de las fuerzas políticas no solo nacionales.
Por distintas razones e influencias se empezó a reconocer este punto como un objetivo de necesidad absoluta en donde el Estado pueda tener un rol director. Es así que en democracia ya tuvimos el derecho a votar, a ser elegidos y a reunirnos, y recuperamos lo más esencial de la vida de una comunidad. De esta manera empezamos a militar, a recorrer y a debatir sobre otros derechos. Por ejemplo, el derecho de saber cuál era el destino de las víctimas del terrorismo de Estado y la alegría de poder recuperar a los que estaban siendo liberados luego de haber sido presos políticos.
Además, debemos recordar la eliminación de la ley de obediencia debida y de punto final -que después se terminó consagrando en una de las principales conquistas de ese período-, así como de los indultos. También hemos recuperado YPF.
Cuando el Estado recupera la administración de los fondos de pensiones en su rol de director se produce uno de los principales logros del pueblo argentino, y al mismo tiempo surge la posibilidad de consolidar este tipo de reivindicaciones avanzando en una nueva generación de conquistas para el conjunto del pueblo argentino, especialmente para aquellos sectores más desfavorecidos.
Es por eso que la consolidación de la Asignación Universal por Hijo a partir del hecho de que a futuro no pueda ser víctima de ningún programa de ajuste que pueda tener una movilidad por ley constituye un acontecimiento que debemos festejar. Esta es una de las siete u ocho conquistas más importantes desde la vuelta de la democracia.
Por eso adelantamos nuestro voto afirmativo y vamos a acompañar este proyecto. Lo hacemos con alegría y consideramos que significa un enorme paso hacia adelante sobre el cual podremos construir todo lo que nos falta hacer en este querido país.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. BROWN, CARLOS RAMON (BUENOS AIRES): Señora presidenta: han pasado casi seis años desde que se instituyera por decreto de necesidad y urgencia, como parte de un régimen de asignación familiar, un subsistema no contributivo denominado Asignación Universal por Hijo para protección social destinado a niños, niñas y adolescentes de grupos familiares de desocupados o trabajadores informales.
Dicho decreto de necesidad y urgencia, dictado unilateralmente y eludiendo el debate parlamentario, recogía –como todos saben- diversas iniciativas que gran parte del arco político, organizaciones sociales y de trabajadores venían impulsando reiteradamente desde fines de los 90.
Es importante señalar que la movilidad o actualización automática de estas prestaciones sociales que el oficialismo trae hoy a consideración en el recinto insisto- luego de seis años ha venido siendo exigida y proyectada desde un primer momento por casi todos los bloques políticos de la oposición de este cuerpo.
Desde el bloque FE, más allá del tiempo perdido y de algunas observaciones que oportunamente plantearemos en la discusión en particular, acompañaremos la iniciativa. En tal sentido, adelantamos nuestro voto positivo en general.
Pero si bien esto es así, no debemos dejar pasar esta oportunidad, máxime a pocos meses de concluir la gestión del actual gobierno, de realizar algunas consideraciones respecto de las políticas sociales y sus resultados. Más allá de cualquier discurso o relato, a las políticas hay que juzgarlas por sus resultados, y lo cierto es que el tan mentado modelo de crecimiento con inclusión social, permanentemente exaltado por la retórica oficialista, no ha mejorado la realidad de millones de argentinos que viven sumidos en la pobreza.
Nos encontramos con una llamativa inconsistencia que no resuelve el relato oficial. Más de uno de cada cuatro argentinos vive en situación de pobreza; 28,7 por ciento es el último dato del Observatorio de la Universidad Católica Argentina del día de ayer, casi 40 por ciento en el caso de menores de 18 años.
Resulta evidente que el modelo definitivamente no funciona, aunque las estadísticas oficiales pretendan esconderlo. El último dato conocido del INDEC es el difundido por Cristina Fernández de Kirchner en el Foro de la FAO, que dijo: “pobreza debajo del 5 por ciento”.
Queda claro que no existe una política de transferencia de ingresos suficiente con niveles de inflación como el que tenemos de 25 o 30 por ciento anual. Tenemos que mejorar mucho la calidad del gasto social para que verdaderamente constituya un puente hacia la inclusión de millones de compatriotas y no un subsidio perverso a la pobreza estructural.
Los argentinos, particularmente nuestra provincia de Buenos Aires, debemos dejar de ser rehenes de políticas asistenciales. Discutamos inclusión en serio. Además de medir, por supuesto, correctamente el grave problema de la pobreza estructural que tenemos, debemos trabajar fuertemente para mejorar la calidad del gasto social institucionalizando un mecanismo de control más idóneo, que reduzca y a su tiempo elimine todo margen para la intermediación espuria y el manejo discrecional.
Compartimos los dictámenes de minoría, que además de estos puntos contemplan la necesidad de que las regiones menos favorecidas de nuestro país –recién escuchaba a una diputada de esas regiones- se vean más beneficiadas por estas políticas con montos diferenciados, y se eliminen todas aquellas restricciones que dejan fuera del sistema a un importante número de niños, niñas, adolescentes y mujeres embarazadas.
Los diferentes niveles de gobierno deberían coordinar sus gestiones para que el monitoreo de controles médicos, asistencia escolar y desempeño educativo no sean realizados de manera manual sino a través de las nuevas tecnologías, que detectan rápidamente los resultados y permiten actuar sobre ellos.
Estamos profundamente convencidos como peronistas de que la mejor política para redistribuir genuinamente el ingreso, lo más justo y perdurable de todo, es generar trabajo digno. Y nuestra economía claramente ha agotado su capacidad para generar empleo genuino en los últimos años de inflación, destruyéndose miles de puestos de trabajo privados y convirtiéndose el sector público en el único que absorbe a los trabajadores.
Sumado a esto, la informalidad laboral mantiene inaceptables niveles en torno al 35 y 40 por ciento, grave problema estructural que no ha podido ser resuelto.
Debemos incluir en serio a aquellos hermanos que, aunque las estadísticas oficiales los “ninguneen”, lamentablemente siguen sumidos en la pobreza, no con dádivas sino con trabajo digno, educación de calidad para sus hijos, salud, agua potable, cloacas y transporte.
Con las críticas efectuadas y las consideraciones que hemos realizado, acompañaremos en general la sanción de este proyecto de ley insistiendo en los justos reclamos que todavía están pendientes de resolución.
Adelanto que durante la consideración en particular plantearemos que se modifique la periodicidad en la movilidad a fin de que sea trimestral en lugar de semestral, como un mayor reaseguro ante la inflación. Asimismo, propondremos que se determine su importe a partir de una canasta básica de bienes y servicios elaborada por cada una de las economías regionales con el objeto de obtener un beneficio útil y no un consumo que adolece de todo rigor de verdad ante la grave situación inflacionaria que vive el país, que licua mes tras mes los derechos de los trabajadores.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Salta.


SR. LOPEZ, PABLO SEBASTIAN (SALTA): Señora presidenta: este proyecto de ley que finalmente institucionaliza y da carácter permanente a la Asignación Universal por Hijo, revela el fracaso de este gobierno autoproclamado nacional y popular para resolver los problemas de la pobreza y la desocupación.
Durante el debate se señaló claramente que esta política asistencial originada en el Banco Mundial es aplicada desde 2009 y no desde 2003, cuando salíamos de la debacle de 2001 y 2002. Esto quiere decir que hablamos de una política asistencial instaurada para tratar de paliar la recesión económica, la desocupación, los despidos y la pobreza provocados por la política económica de este gobierno.
Resulta claro que con esta ley el gobierno pretende dar continuidad o permanencia a esa política asistencial porque no está dispuesto ni tomó medida alguna para resolver los problemas de fondo. Prueba de ello son los anuncios de políticas de ajuste, de devaluación, de tarifazos y de nuevos arreglos con los fondos “buitres”. El nivel de pobreza que surge de una estadística publicada durante el día de ayer, se ve agravado por el pago de una deuda externa completamente usurario.
Con esta institucionalización de las asignaciones universales queda demostrado que se pretende seguir conviviendo con una parte muy importante de trabajadores casi un tercio desocupados y con otra –también un tercio de trabajadores flexibilizados o tercerizados. La mano de obra está completamente sobreexplotada.
La estadística publicada ayer, que indica que el nivel de pobreza está por arriba del 28 por ciento, encierra un dato muy importante: que la pobreza no solamente está presente en los sectores que tanto el gobierno como algunos miembros de la oposición afirman –los sectores excluidos del sistema, es decir, de aquellos que no tienen trabajo sino también en los trabajadores ocupados que hoy perciben menos de 6.000 pesos de salario, o sea, menos de la mitad del costo de la canasta familiar. Esto significa que esos trabajadores también se encuentran por debajo de la línea de pobreza. Incluso, muchos de ellos se encuentran en blanco.
Esta situación se observa en municipios de mi provincia, donde hay trabajadores en blanco cuyos salarios están por debajo del costo de la canasta familiar que asciende, según trabajadores aceiteros que vienen de una gran huelga, a 14.000 pesos, cifra a la que también ha llegado la Universidad Nacional de Rosario.
Otro elemento importante es de dónde saldrán los fondos para financiar esta actualización. Seguramente de la ANSES, que debe garantizar el 82 por ciento móvil para los jubilados. El 75 por ciento de los jubilados cobra la jubilación mínima, que asciende a 3.800 pesos. Esto de ninguna manera se puede considerar como una redistribución de la riqueza sino claramente una redistribución de la pobreza.
El índice que se va a tomar para actualizar las asignaciones familiares y la Asignación Universal por Hijo es contrario al derecho de los jubilados a percibir el 82 por ciento móvil. Se lo tomará como parámetro, como piedra basal para toda la asistencia social, y terminará consagrando lo que es la política jubilatoria de este gobierno, que considera que una jubilación no es el derecho de un trabajador a cobrar un salario diferido cuando cesa su actividad laboral sino simplemente una asistencia social.
Eso también está implícito en esta iniciativa. La ANSES va a tener que cargar con esta actualización cuando ya carga con una cantidad de bonos incobrables que el gobierno colocó para pagar la deuda externa. Esta es una ANSES que por primera vez en abril de este año ha tenido un déficit de 2.300 millones de pesos.
Es claro que hay enormes limitaciones, algunas de las cuales ya se han señalado en este debate. Por ejemplo, se contempla una situación especial para la Patagonia y no para el NOA y el NEA, donde la pobreza está haciendo estragos. Ha habido niños muertos por desnutrición en Salta –mi provincia-, en Chaco, en provincias en las que avanzó el negocio sojero –con el que se obtuvieron grandes ganancias- y en provincias petroleras. En todas ellas mueren chicos por desnutrición.
El reajuste recién se producirá en marzo de 2016, con lo cual se van a saltar el que debería hacerse en septiembre del corriente año. Además, excluye a una parte importante de hijos: los de los trabajadores que pagan impuesto a las ganancias -que debería ser eliminado para los trabajadores bajo convenio- y los de los monotributistas.
Esta iniciativa me recuerda la ley de intangibilidad de los depósitos de Cavallo. Acá se ha dicho que esta es una especie de intangibilidad de la asignación universal. Recordemos que la política económica de Cavallo provocó un derrumbe. En aquel momento se violó la ley de intangibilidad de los depósitos, que no fue derogada. Hoy, ante el enorme déficit fiscal, el hecho de que se siga pagando la deuda externa y se haya endeudado a la ANSES pone en riesgo también esta intangibilidad que se quiere aplicar.
Nosotros apoyaremos en general este proyecto. Pensamos que las asignaciones deben aumentar en una proporción que garantice un aumento real del poder adquisitivo de los beneficiarios, y que a partir de esa actualización, debe ser financiado por un fondo exclusivamente vinculado con los aportes patronales. Asimismo, queremos que en estos beneficios sean incluidos todos los trabajadores para que la asignación tenga efectivamente un carácter universal.
Por último, quiero decir lo siguiente. Es claro que no se va a salir de la pobreza si no se afecta la ganancia de los capitalistas. Son ellos los que tienen que pagar esta crisis y no cargarla sobre la espalda de los trabajadores.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.


SRA. PUCHETA, RAMONA (BUENOS AIRES): Señora presidenta: hoy en este recinto tratamos de colaborar desde nuestro bloque para realizar lo que creemos es un acto parcial de justicia social.
He caminado por los barrios más pobres y he visto a nuestra gente pasar por las más viles de las miserias. Hemos tomado la calle reclamando por un derecho que hoy tenemos la posibilidad de convertir en ley.
Desde hace tiempo millones de niños perciben la asignación universal, que los incluye en una sociedad un poco más justa, pero nosotros queremos que sea realmente justa. Me gustaría decir que este derecho es justo e igualitario, pero no es así, toda vez que dentro de las voces que hemos escuchado nos tocó oír a esa mamá o papá trabajador informal que tienen un pequeño comercio en un barrio y que parecen ser castigados por el Estado porque como cumplieron con la ley y se inscribieron como monotributistas, pues sus hijos no tienen derecho a percibir la Asignación Universal por Hijo.
Debemos contemplar una ampliación para todos de la misma manera, trabajadores informales y formales, votando una ley inclusiva, igualitaria y justa.
Por otro lado, no podemos de dejar de mencionar la diferencia entre argentinos, ya que se prevé una asignación universal diferenciada para nuestros hermanos de la Patagonia y no para los del NOA y el NEA, y puedo asegurarles que estos últimos necesitan mucho más. De cualquier modo estamos contentos porque hoy vamos a aprobar esta ley.
Creemos que los del NOA y el NEA somos argentinos de segunda clase, y nuevamente me encuentro con la tristeza porque padecemos las mismas necesidades y miserias, miserias extremas. Lamentamos que la diferencia radique en el costo de vida y no en el derecho a una vida justa y sin necesidades de nuestros hermanos.
Celebramos la iniciativa de convertir en ley la perfección de este derecho. Estamos para esto, para hacer ley lo que la gente necesita. Aprobar este proyecto es resolver las urgencias y demostrar que podemos trabajar juntos. ¡Claro que podemos hacerlo! Todos estamos de acuerdo –algunos más, otros menos- con que esto tiene que ser ley pues va a servir para que nadie venga de un día para el otro a sacarnos lo que nos corresponde. Hoy esto va a ser ley porque es un derecho que nos merecemos todos los argentinos.
La Asignación Universal por Hijo es para los niños, para los jóvenes, por su bienestar, por su sonrisa, que no puede seguir esperando, no puede estar pendiente de si mañana alguien va a quitar este derecho y no va a cumplir para que mínimamente puedan comer, aunque no crean que es mucho lo que se puede hacer con esto, garantiza mínimamente un plato de comida una vez por día. No podemos decir que es lo que corresponde, o sea, que los chicos coman cuatro veces al día, pero es un derecho que hemos logrado entre todas las fuerzas políticas, y lo vamos a defender convirtiéndolo hoy en ley. Por eso el Frente por la Inclusión Social votará positivamente este proyecto.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por La Pampa.

SR. FERNANDEZ MENDIA, GUSTAVO RODOLFO (LA PAMPA): Señora presidenta: brevemente quiero hacer algunas reflexiones. Comienzo por decir que obviamente votaré por la afirmativa esta iniciativa que termina de consolidar una suerte de gradación sobre este derecho que se ha ido consolidando. Si a alguien le generaba dudas su validez como ley, a partir de esto quedará absolutamente en claro y no habrá reglamentarismos que valgan.
A lo largo de este debate muchísimos se han usado diversos verbos con respecto a esta Asignación Universal por Hijo. Algunos usaron el verbo “inventar”, y dijeron: “la inventamos nosotros”; otros, el verbo “defender”: “la defendimos entre todos”; otros, el verbo “bregar”: “por ella hemos bregado entre todos”. Pero hay un verbo que únicamente utilizó este gobierno, que es “pagar”. El único que pagó la Asignación Universal por Hijo es este gobierno. Quienes sostienen que esto no significa un gran avance en la redistribución del ingreso en el país, no sé qué canal están mirando.
También oí decir: “Hemos caminado y caminado; hemos hablado con la gente.” En verdad no sé por dónde caminan; por donde yo ando la gente está absolutamente agradecida por la Asignación Universal por Hijo. No existe duda alguna acerca del impacto que ha tenido en la matrícula escolar, como tampoco en lo que ha significado en relación con la prevención de la salud y el sistema de vacunación. No tenemos ninguna duda de que hay muchos menos chicos con frío y menos chicos que padecen necesidades básicas luego de la instauración de este derecho.
Por eso, cuando uno escucha una crítica despiadada en realidad no sabe si creer a quien la manifiesta. Esto lo sostengo porque muchos de los que dicen que apoyan esta asignación por lo que significa para paliar necesidades llevan de candidato a presidente de la Nación a un señor que dijo, nada más y nada menos, que parte del dinero destinado a la Asignación Universal por Hijo se va por la canaleta de la droga y el juego. Es un comentario que me recuerda lo que viví cuando era chico; nosotros hablábamos de los viejos gorilas, que eran los que decían que los negros se chupaban toda la plata que recibían. El comentario sobre la canaleta es más o menos del mismo tenor, con la diferencia de que lo dice un candidato a presidente de la Nación.
Independientemente de ello, la crítica viene de sectores que nunca han gobernado. Además, con billetera ajena cualquiera es generoso, es más fácil pagar más en concepto de jubilaciones, de asignaciones y contar cuánto falta para cumplir con la totalidad de los beneficios que debe recibir la población. Sin embargo, nunca han gobernado, y los que lo han hecho no pueden mostrar una sola iniciativa que aunque sea se parezca a este derecho que alcanza a millones de niños en la Argentina.
En cuanto a la moratoria jubilatoria, los que venimos del interior hemos visto gente que durante toda su vida trabajó en negro, no pudo hacer sus aportes ni el patrón los efectuó como empleador, y sin embargo tuvo un destino jubilatorio que no pensaba. Es muy fácil decir que dejamos esto in eternum y establecer todo este tipo de críticas.
En cuanto a la pobreza, algunos tienen hasta un observatorio para contar la cantidad de pobres que hay en el país; otros filosofan acerca del tema, pero este gobierno ha sacado a muchísima gente de la pobreza.
De nuevo volvemos a los verbos: algunos observan, otros cuentan y lo que ha hecho este gobierno es trabajar para sacar a millones de argentinos de la pobreza.
Las reflexiones de la oposición me recuerdan a aquel héroe de la mitología árabe que había sido provisto por los dioses de todos los poderes con la condición de no usarlos. Era una especie de metáfora de la impotencia en medio de la omnipotencia. Podemos ver que la oposición es absolutamente omnipotente sentada en estas bancas, pero se vuelve absolutamente impotente cuando tiene que gobernar.
Recuerdo que Oscar Wilde se describía a sí mismo diciendo que era un sujeto que poseía todos los talentos menos uno: el de poder usarlos.
Es muy fácil conversar y hablar, porque todos tenemos guitarra en este recinto. Si hemos llegado acá es porque no nos falta capacidad de oratoria. Todos tenemos discursos en contra de la pobreza, pero pocas veces se pueden mostrar resultados reales e inversiones concretas para combatir este flagelo.
Hemos instituido derechos que durante décadas en la Argentina fueron negados a gente que estaba en la peor de las indigencias. Por eso entiendo que denigrar este tipo de cuestiones es una actitud francamente mezquina que difícilmente les vaya a dar algún beneficio que no sea un par de minutos de televisión que no sé quién pueda estar mirando.
Más allá de eso, creo que tenemos que estar orgullosos, y como peronistas debemos entender que esto constituye claramente un paso adelante en la justicia social. Seguramente nos falta mucho por hacer, pero también hay que decir que este gobierno ha trabajado para lograr independencia económica y soberanía política para poder tomar esta clase de decisiones. Cualquiera habla, pero el que se mantuvo en sus trece frente al FMI, los fondos buitre y ante los centros internacionales de poder para tomar estas decisiones en beneficio de los pobres, fue este gobierno. A los demás no los vimos; escuchamos sus palabras y les agradecemos los consejos, pero sinceramente nos quedamos con quienes hicieron algo por los pobres. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) A continuación comenzamos con la lista de oradores individuales. Solicito a los señores diputados que utilicen estrictamente los cinco minutos, según lo resuelto en la reunión de jefes de bloque, porque hay más de sesenta anotados.
La Presidencia llamará a hacer uso de la palabra según la lista, y si el diputado o diputada no se encontrara presente, continuará con el siguiente.
Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SRA. BRAWER, MARA (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: hoy venimos a votar un proyecto que implica un piso de dignidad para todos los argentinos pues refuerza la Asignación Universal por Hijo y le da continuidad y garantías a través de la movilidad que aprobaremos.
La Asignación Universal por Hijo es reconocida por la FAO, el Banco Mundial y una serie de organismos internacionales como uno de los programas más importantes del mundo para luchar contra el hambre. Ese debería haber sido el titular de los diarios de hoy: que todas las fuerzas políticas de la Argentina estamos luchando juntas al sancionar este proyecto para combatir el hambre en este país. Sin embargo, este no ha sido el titular.
Hay algunos que siguen insistiendo en hacernos creer que en estos doce años no pasó nada, pero es mucho lo que pasó y lo que estamos haciendo hoy. Este piso de dignidad es el que nos lleva a que nunca más haya hambre, a que nunca más las manifestaciones populares en la Argentina tengan que ver con un pedido de comida.
El reconocimiento por parte de la oposición de la certeza e idoneidad que tiene esta norma es parte de esta lucha. Esta asignación universal y estos salarios familiares tienen la enorme virtud de que la cabeza del cobro está en las mujeres. Este proyecto ayuda a fortalecer a las familias argentinas y también combate la violencia de género porque son las mujeres –que mayoritariamente tienen la responsabilidad del cuidado de los hijos- quienes cobran las asignaciones universales y quienes pueden pedir, por más que no sean asalariadas, cobrar la asignación familiar en caso de separación o conflictos en la familia.
Esta iniciativa fortalece a las familias, del mismo modo que la ley de matrimonio igualitario. Aprovecho para hacer un homenaje a todos los diputados y las diputadas que hace cinco años votaron esa ley. La familia argentina se fortaleció entonces y se fortalece hoy con este proyecto.
Por otra parte, el hecho de que nos acompañen todas las fuerzas políticas constituye un reconocimiento a aquellos que en su momento fundamentaron y lucharon para que se votara la movilidad de las jubilaciones. Recuerdo perfectamente –aunque no estaba en este recinto- los discursos que decían que con este índice de movilidad el gobierno estaba estafando a los jubilados, porque en realidad iba a haber una disminución en sus haberes. Por lo tanto, cuando hoy nos acompañen en la sanción de este proyecto, nos estarán diciendo –espero que sea así- que se equivocaron cuando no nos acompañaron en la estatización de YPF y de Aerolíneas Argentinas o cuando nos criticaron por haber decidido recuperar los fondos de las AFJP, manifestando que ese dinero iba a formar parte de la caja en vez de reconocer que esos recursos no solo nos permitieron mejorar las condiciones de nuestros jubilados sino que –entre otras cosas- rompió la desigualdad generando una igualdad digital en la formación de las nuevas generaciones.
Sinceramente me llena de orgullo participar de este debate, en el convencimiento de que con este proyecto estamos fortaleciendo nuestra patria y que esta vez lo estamos haciendo todos juntos. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Catamarca.


SRA.(JUÁREZ) Señora presidenta: celebro que en el día de hoy estemos tratando este proyecto de ley venido en revisión del Honorable Senado, por el que se aplica a las asignaciones familiares, a las asignaciones a la protección social y a las asignaciones por embarazo la movilidad establecida a través de la ley 26.417.
Asimismo, quiero destacar la decisión política del oficialismo de traer este tema a debate. Personalmente entiendo la postura de todos los colegas, principalmente los de la oposición, que durante mucho tiempo veníamos reclamando la adopción de una medida de estas características.
También tengo que reconocer que si esto se está considerando en el día de hoy es porque hubo una decisión política por parte del oficialismo. Por lo tanto, agradezco esta iniciativa, porque es necesario institucionalizar este derecho. En la Argentina hay muchos pobres –sobre todo niños- que todavía esperan un gesto de grandeza y de generosidad de la clase política de nuestro país.
Como sabemos, la Asignación Universal por Hijo viene a paliar las consecuencias de la pobreza extrema y ha permitido mejorar los indicadores sociosanitarios y educativos a partir de la exigencia de las constancias escolares y de los controles de salud como condición para que los titulares del derecho puedan acceder al cobro de la asignación. Pero también resulta necesario tomar conciencia sobre la necesidad de revisar los mecanismos de control y las metodologías de seguimiento en ambas temáticas.
Sabemos que este gobierno ha asignado mayor presupuesto al sistema educativo, pero también debemos ser conscientes de que en muchos lugares del país no ha mejorado la calidad educativa. Entonces, si bien esta medida es muy buena, tenemos que actuar con responsabilidad cuando se detectan inconvenientes, entre los cuales está la necesidad de mejorar los mecanismos con los que se controla el pago de este beneficio.
Por otra parte, considero necesario hacer una modificación en el artículo 2º, que contemple el pago de un importe diferencial a los titulares residentes en las provincias del NOA y el NEA. En este sentido, escuché con atención a los legisladores de la Patagonia que sostuvieron la importancia de establecer ese beneficio diferencial aplicando un criterio territorial. Obviamente, estoy de acuerdo con que en la Patagonia se registran condiciones climatológicas y geográficas extremas que justifican el otorgamiento del beneficio, pero quien les habla proviene de una provincia del norte de nuestro país en la que también hay mucha gente pobre en zonas periféricas que hacen patria viviendo en esos lugares, como la Puna catamarqueña y la precordillera.
Entonces, si se ha resuelto aplicar ese criterio diferencial por razones geográficas y de habitabilidad, creo que las provincias del norte –por ser Estado dependientes y por tener muchos pobres- también tendrían que haber sido contempladas dentro de ese régimen diferencial. Lo decimos honestamente, sin ánimo de hacer chicana política, solo pidiendo revisar el criterio y beneficiar a nuestras provincias.
Junto con el diputado Brizuela del Moral hemos hecho una observación al Orden del Día N° 2171 para que se considere este criterio.
Según datos de la ANSES de 2011 –no tenemos índices actualizados, Catamarca tenía 37.726 beneficiarios sobre una población de 113 mil niños, lo cual representa un 33,4 por ciento de beneficiarios.
Como se ha agotado el tiempo del que dispongo para hacer uso de la palabra, solicito insertar el resto de mi discurso en el Diario de Sesiones. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Queda registrada su solicitud, señora diputada.
Tiene la palabra la señora diputada por Tucumán.


SRA. CARRILLO, MARIA DEL CARMEN (TUCUMAN): Señora presidenta: el presente proyecto de ley impulsado por el Poder Ejecutivo nacional establece que las asignaciones familiares contempladas en la ley 24.714 serán móviles de acuerdo con el mismo cálculo del índice de movilidad que se utiliza para las jubilaciones, acorde con la Ley de Movilidad Jubilatoria 26.417.
Estas asignaciones representan una suma fija mensual destinada a grupos familiares que se encuentran desocupados, a trabajadores no registrados que se desempeñan en la economía informal percibiendo un salario menor al mínimo vital y móvil, a trabajadores inscriptos en los planes Argentina Trabaja/Manos a la Obra del Ministerio de Desarrollo Social o Programa de Trabajo Autogestionado, Jóvenes con Más y Mejor Trabajo, Programa Promover la Igualdad de Oportunidades, Programa de Inserción Laboral del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, a monotributistas sociales o empleados del servicio doméstico, entre muchos otros.
Sin embargo, nos vienen a hablar del final de ciclo. ¿De qué final de ciclo nos hablan, con un Estado cada vez más presente y avanzando a paso firme en la reafirmación de los derechos de los sectores más vulnerables mediante políticas públicas inclusivas? ¿Alguien puede creer al candidato presidencial de la oposición que dice que cuando toca el timbre en alguna casa le dicen que reniegan de esta asignación universal? Yo no lo creo en absoluto. Fueron las políticas neoliberales que devastaron nuestra Nación las que arrasaron con la dignidad del pueblo argentino.
Que nadie se confunda. Estamos ante un hito fundamental en el reconocimiento de los derechos de los más vulnerables, combatiendo la deserción, el abandono escolar y requiriendo el control de vacunación de nuestros niños y adolescentes.
Quienes, como en mi caso, representamos en este recinto a los pueblos del interior de nuestro país podemos dar testimonio real y concreto del proceso de empoderamiento de derechos y de efectiva inclusión social que el otorgamiento de estas asignaciones ha significado.
En el departamento Monteros, provincia de Tucumán, de donde provengo, se otorgaron 4.227 asignaciones universales por hijo y en mi municipio de Monteros fueron otorgadas 1.280. Realidad efectiva, números concretos que cierran con la gente adentro, no afuera.
Mediante la presente iniciativa legislativa, tanto las asignaciones familiares como las asignaciones universales que se otorgan por hijo, hijo con discapacidad, por ayuda escolar para la educación inicial, básica y polimodal, por nacimiento y por adopción, serán aumentadas en marzo y septiembre de cada año por el índice de movilidad que se utiliza para actualizar las jubilaciones desde 2009.
Obviamente esta medida no tiene nada que ver con aquellas viejas recetas de ajuste y de achicamiento del Estado que desde el Fondo Monetario Internacional y otros organismos internacionales nos imponían en los 90 y que en el ámbito nacional eran estrictamente implementadas y acatadas por muchos de los que hoy se presentan como una opción de cambio.
Con esta iniciativa queda claro que la ya implementada movilidad en materia de jubilaciones se extiende ahora con este beneficio de movilidad al otro punto de la pirámide etaria, que es la niñez y la adolescencia.
Con justo criterio la presidenta Cristina Fernández de Kirchner fundamentó la presente iniciativa legislativa para que el aumento que se produzca en forma automática no esté sujeto a alguien que quiera licuar este beneficio mediante la no concesión de aumentos, para que con el tiempo la Asignación Universal por Hijo pase a ser un recuerdo.
Una vez más, estamos ante una iniciativa presidencial que nos brinda la posibilidad de ser protagonistas privilegiados en este proceso histórico de recuperación de derechos tendientes a garantizar el desarrollo y crecimiento de nuestro pueblo. Me siento orgullosa de ser parte de este proyecto de gobierno porque seguimos recuperando derechos, profundizando crecimiento y reafirmando la dignidad de nuestro pueblo.
En definitiva, señora presidenta, queda claro que el eje fundamental de este proyecto nacional que conduce la presidenta Cristina Fernández de Kirchner es, fue y será la plena vigencia de los derechos humanos y la inclusión social con crecimiento.
Por lo expuesto, manifiesto mi voto favorable, desde el firme convencimiento de que el presente proyecto contribuye a afianzar el empoderamiento de derechos de nuestro pueblo y la reafirmación irrenunciable de su dignidad. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Santa Fe.


SRA. SCAGLIA, GISELA (SANTA FE): Señora presidenta: celebro que hoy todos estemos votando esta iniciativa. Lamento que esta Cámara hasta ahora no haya tratado proyectos que son de la oposición, que hace tiempo se vienen reclamando y que muchas veces no han tenido tratamiento en el ámbito de las comisiones. Sería muy importante que prestáramos atención a esta situación, ya que se trata de mejorar la calidad de vida de la gente y de que los argentinos hagamos todo lo necesario para reducir la pobreza.
No creo que esta iniciativa tenga un solo dueño o que haya sido pensada por una sola persona. No es propio de una república que el Poder Ejecutivo envíe este tipo de iniciativas al Parlamento y que la oposición decida tratarlas. Por el contrario, este procedimiento tendría que ser parte de un proceso de una Cámara que a través de sus voces y representantes lleve adelante este tipo de proyectos.
En este marco, considero importante que se atiendan los reclamos y se consideren las inserciones sugeridas por muchos diputados, que hace tiempo estamos bregando por ampliar los derechos de la gente y la universalidad de la asignación universal para que sea verdaderamente universal.
Es bueno poder tratar en esta Cámara iniciativas que nos hagan pensar en la universalidad de aquellos chicos que, por ejemplo, no tendrán acceso a la asignación universal ni al ajuste propuesto por ser hijos de trabajadores monotributistas o concurrir a escuelas privadas. No me refiero a establecimientos educativos de alto rango, porque muchas veces los padres de estos chicos deciden mandarlos a escuelas religiosas por considerar que tienen una mejor educación o para garantizar una formación religiosa.
Por otro lado, este ajuste que veníamos proponiendo, se vincula con la inflación que tiene el país y que el oficialismo no quiere reconocer. Nos gustaría que no fuera inflacionario y que la gente –como planteó en un principio el señor miembro informante pudiera garantizar el desayuno a sus hijos todos los días. Esto es fundamental: si podemos comprar mermelada y galletitas, también podemos suplantar esa alimentación con otros productos. Lo que quiero decir con esto es que no pretendo que este ajuste implique seguir comprando solo galletitas y leche sino que permita comprar un litro más o un cuaderno más, para que las familias progresen y salgan de la pobreza.
Cabe señalar que los 3.000.000 de chicos que no están incluidos en la asignación universal, porque son hijos de monotributistas, podrían acceder a ella si todos nos pusiéramos a trabajar sobre el gasto que implica “Fútbol para todos” en nuestro país. Si el 0,16 por ciento se asigna al fútbol, creo que ahí tenemos una buena caja para dar al futuro de nuestra Argentina, que es el de nuestros chicos.
Asimismo quiero plantear –seguramente por una cuestión de tiempo después solicitaré autorización a la presidencia para efectuar una inserción en el Diario de Sesiones- es que hoy debemos tener presente que el índice de deserción escolar en la República Argentina es muy elevado, como así también la cantidad de chicos que no terminan la escuela en tiempo y forma. Casi el 51 por ciento de los chicos que terminan la escuela o cuyas edades están comprendidas entre los dieciocho y los veinticuatro años, no siguen estudiando. El 22 por ciento de ellos no estudia ni trabaja. En consecuencia, allí tenemos una deuda pendiente.
Por eso aprovecho la posibilidad de hacer uso de la palabra en este recinto y el hecho de que estemos todos de acuerdo en cuanto a que debemos ponernos a trabajar respecto de las grandes deudas sociales que tiene nuestro país. Así como todos los diputados hoy pudimos ponernos de acuerdo y avanzar con esta medida, también podemos hacerlo respecto de otros temas que están pendientes y trabajar durante todo este año a fin de garantizar a la gente la posibilidad de tener empleo.
Quiero responder a una señora diputada que cuando Mauricio Macri, el candidato a presidente de la Nación a cuyo partido represento, toca los timbres de las casas, la gente no reniega de la Asignación Universal por Hijo sino que, por el contrario, solicita que a partir de ese beneficio también pueda obtener un empleo.
Es fundamental que durante un tiempo ayudemos a que la gente pueda convivir entre la Asignación Universal por Hijo y la posibilidad de tener un empleo en blanco, porque eso es lo que realmente le permitirá salir de la situación de emergencia en que se encuentra.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Entre Ríos.


SR. ELORRIAGA, OSVALDO ENRIQUE (ENTRE RIOS): Señora presidenta: la decisión del Poder Ejecutivo de enviar este proyecto para su tratamiento implica un paso más en la reafirmación de los derechos de todos los ciudadanos y continúa en el camino emprendido en 2003 por el entonces presidente Néstor Kirchner, tendiente a lograr la equiparación de los derechos de los trabajadores formalizados y de aquellos que aún no lo están.
Corresponde al Estado llevar adelante las políticas necesarias para lograr este cometido. Así lo entendieron el presidente Néstor Kirchner y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Esta convicción se ha traducido en cada una de las medidas que han tomado y en todos y cada uno de los proyectos de ley que han enviado a este Parlamento.
Podemos mencionar, a modo de ejemplo, la ley 26.061, de Protección Integral de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes; el decreto 1.602/2009, por el que se estableció la Asignación Universal por Hijo para Protección Social; el decreto 446/2011, por el que se reconoció a las mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad; la prioridad de la mujer en cuanto al pago de las asignaciones familiares, tema que considero muy importante; la ley 26.417, de Movilidad Jubilatoria, y el Programa Progresar.
Actualmente las familias de nuestro país se encuentran protegidas desde el primer mes del embarazo de la mujer hasta que el hijo alcanza la edad de veinticuatro años, sin límite en el caso de aquellos que sufren alguna discapacidad.
Como bien se señala en un reciente estudio de Bernardo Kliksberg, la región se encuentra ante una nueva generación de políticas sociales. Se pasó del otorgamiento de una simple ayuda social al cumplimiento por parte del Estado de la obligación que le corresponde en una democracia, que es la de garantizar los derechos sociales básicos. Se destaca así que la Asignación Universal por Hijo no es un programa, sino que su objetivo desde su implementación en 2009 ha sido la generalización de un derecho a sectores que estaban privados de él, como una extensión del sistema de asignaciones familiares al que ya tenían acceso los trabajadores asalariados del sector formal.
Como consecuencia de esto se puede observar que las prestaciones Asignación Universal por Hijo y Asignación Familiar por Hijo se relacionan y se permite el traspaso automático de una a otra dentro del sistema de seguridad social universal.
Si bien este proyecto trata del conjunto de las asignaciones familiares, quiero destacar que una de las conclusiones del mencionado estudio de Bernardo Kliksberg respecto de la Asignación Universal por Hijo indica que todo esto estuvo bien direccionado y tira por tierra las críticas infundadas que recibió. Ellas se refieren muchas veces –por ejemplo, en el caso de la provincia que represento- al hecho de que al ponerse en marcha la Asignación Universal por Hijo, que está relacionada con la educación, redundaba en falta de bancos para los alumnos. Así, veían el vaso medio vacío y no medio lleno. Es decir, criticaban la vuelta de los chicos al colegio debido a esa asignación.
Algunas de las conclusiones de este estudio hacen que, por ejemplo, la Asignación Universal por Hijo percibida sea un derecho propio de los chicos o que el otorgamiento de la Asignación Universal por Hijo está sujeto al cumplimiento de corresponsabilidades en materia de controles de salud, vacunación y asistencia a la educación, y todos estos índices que miden estas situaciones son más favorables.
Quiero destacar aquí que esta corresponsabilidad se basa en dos instituciones que no han perdido credibilidad a través del tiempo: el sistema educativo y el sistema de salud.
En nuestro país es muy difícil encontrar algún director o directora de escuela que firme la asistencia de un chico a fin de que la familia no pierda la Asignación Universal por Hijo o que firme un documento en el que no se haya cumplido con la vacunación. Por lo tanto, me parece que estos sistemas están muy bien implementados y benefician de por sí a toda la República.
Entiendo que es de suma importancia consagrar a través de una ley la aplicación de las disposiciones de la Ley de Movilidad de las Prestaciones del Régimen Previsional Público a todas las asignaciones familiares. De esta manera, se evitará que se desvirtúe su finalidad por falta de adecuación y actualización de los montos de las mismas, como ya se hizo en los años 90.
Construir es una tarea lenta pero constante. Por eso estoy seguro de que en pocos años más veremos el beneficio que va a traer la asignación de esta política ya que desde el punto de vista de la educación y la salud los futuros niños van a estar preparados para llevar adelante el progreso de nuestra Nación. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.


SR. PERALTA, FABIAN FRANCISCO (SANTA FE): Señora presidenta: como ya lo han dicho otros representantes de nuestro interbloque, vamos a acompañar el proyecto en tratamiento y lo haremos a pesar de que sostenemos algunas críticas.
Creemos que esta es una asignación discrecional por hijo; no es universal. Esa es una deuda que este Parlamento va a seguir teniendo. Tampoco tiene una remuneración acorde con un objetivo establecido y no sabemos muy bien por qué se establece el monto que se fija.
Me gustaría hablar de la financiación, y a partir de allí volvemos a insistir con una deuda que tiene la República -y particularmente este gobierno- al no haber podido encarar una reforma fiscal que haga más equitativa no sólo la distribución de los recursos sino esencialmente la forma en que se recauda.
Hoy seguimos teniendo importantes sectores concentrados. Aquí se ha hablado de la renta financiera y de la minería -también podríamos citar al juego-, que no pagan acorde a sus grandes ganancias. Al contrario; se han concentrado y extendido al punto tal que el actual candidato a presidente por el oficialismo tuvo que extender licencias de juego para poder pagar el aguinaldo de la administración pública de la provincia que conduce.
Voy a hacer algunos comentarios relativos a los conceptos que ha vertido el miembro informante en este recinto. Aquí se discute el porcentaje de pobreza, y esta discusión es posible desde el momento en que el gobierno nacional decidió aniquilar el INDEC. Por ese motivo es que está habilitada la discusión de ese porcentaje. Si tuviéramos un INDEC como corresponde nadie estaría en esta discusión.
De todas maneras, nos parece que el ejemplo de la movilidad jubilatoria también nos obliga a reflexionar en el sentido de que esta ley nació mal, sin la actualización correspondiente, y más allá de los porcentajes que se enuncian, los días miércoles ya se han llevado a cabo más de 1.200 marchas de jubilados donde se reclama un incremento de los 3.300 pesos, y esto no merece mayor explicación.
Me parece que se vuelve a despreciar una oportunidad de discutir la equidad. Llegamos acá al penoso debate de ver qué región del país es más pobre y necesitaría una mejor remuneración.
Como se dijo aquí, tenemos que discutir la actualización trimestral, las incompatibilidades que hacen que alguna asignación se caiga cuando se recibe otro programa, y hasta el rol de la mujer, que en este programa queda bastante estereotipado.
Todo esto no lo pudimos hacer, porque más allá de que estemos tratando esta iniciativa, y que ya lleve casi cinco años el decreto que promulgó la presidenta, hace muchos años, antes de ese decreto, había proyectos sobre este tema que nunca se quisieron tratar.
Me parece que esta norma es elocuente en cuanto a que conceptualmente nosotros diferimos con el oficialismo de esta Cámara. Muchas veces se habla desde el oficialismo que se quiere disciplinar a las corporaciones desde la democracia. Nosotros compartimos que el poder democrático es el único que tiene una visión planificadora dentro de la República, a la que todas las corporaciones se deben subordinar. Pero es imposible que exista poder democrático cuando hay debilidad institucional. Y el rol al que se ha reducido a este Congreso, de discutir casi exclusivamente la agenda del Poder Ejecutivo, sin duda habla de un debilitamiento y por ende un debilitamiento de nuestro poder democrático.
Me parece que esa es una clara contradicción. Por supuesto, entiendo que como es obvio el bloque oficialista tiene que promover las iniciativas del Poder Ejecutivo nacional, pero no puede ser que el Congreso quede reducido exclusivamente a la agenda del Poder Ejecutivo y no podamos tratar acá proyectos como el de acceso a la información pública, despenalización de la tenencia de sustancias para consumo, interrupción del embarazo, basura electrónica y una cantidad de temas que han quedado imposibilitados de ser debatidos.
Así que nosotros vamos a acompañar el proyecto pero no tenemos duda de que se pierde una oportunidad. Ojalá que a partir del 10 de diciembre tengamos un Congreso más fuerte, por lo tanto una democracia más fuerte, que de verdad discipline a las corporaciones. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por La Rioja.


SRA.(HERRERA) Señora presidenta: como la norma de este Congreso lo establece –y no la utilizo asiduamente- voy a pedir autorización para leer porque voy a remitirme a frases textuales.
Allá por 1951, una luchadora de la justicia social y que marcó la vida de muchísimos argentinos, sobre todo de los peronistas, Eva Duarte de Perón, fue la percursora en brindar asistencia social a familias en situación de vulnerabilidad. Así, en su libro La razón de mi vida –de ahí la autorización que he solicitado-, proponía bajo el título “Una idea”, dotar a las mujeres argentinas de un ingreso a partir de su casamiento, con el fin de reforzar los lazos familiares y maritales.
Decía: “Pienso que habría que empezar por señalar para cada mujer que se casa una asignación mensual desde el día de su matrimonio. Un sueldo que pague a las madres toda la Nación y que provenga de los ingresos de todos los que trabajan en el país, incluidas las mujeres. Nadie dirá que no es justo que paguemos un trabajo que, aunque no se vea, requiere cada día el esfuerzo de millones y millones de mujeres cuyo tiempo, cuya vida, se gasta en esa monótona pero pesada tarea de limpiar la casa, cuidar la ropa, servir la mesa, criar los hijos, etcétera. Aquella asignación podría ser inicialmente la mitad del salario medio nacional y así la mujer ama de casa, señora del hogar, tendría un ingreso propio ajeno a la voluntad del hombre”, Eva Perón.
En la misma obra, Evita también plantea la posibilidad de asignar otro monto a las mujeres por cada hijo nacido y otras situaciones. Textualmente dice: “Luego, podrían añadirse a ese sueldo básico los aumentos por cada hijo, mejoras en caso de viudez, pérdida por ingreso a las familias del trabajo, en una palabra, todas las modalidades que se consideren útiles a fin de que no se desvirtúen los propósitos iniciales. Yo solamente lanzo la idea. Será necesario darle forma y convertirla, si conviene, en realidad.” Estas palabras fueron pronunciadas por Eva Perón.
Esta propuesta realizada en su momento por la gran Evita fue truncada por el golpe de Estado de 1955 que derrocó al gobierno de Juan Domingo Perón. En 1974, durante su tercer gobierno, en virtud de la ley 20.586 se otorgan algunas asignaciones familiares a los jubilados y pensionados. Más adelante, en 1996, se sanciona la ley 24.714, de asignaciones familiares. Finalmente, con un grande de la historia también peronista como Néstor Kirchner, en 2003 comienza un nuevo proceso de implementación de medidas tendientes a la protección de todas las personas que forman parte del sector más vulnerable de la Nación, sin discriminar a nadie y utilizando los recursos del Estado para lograr el crecimiento de la población mediante la inclusión de los que menos tienen, redistribuyendo el ingreso y dando más posibilidades a los más necesitados.
En 2009, Cristina Fernández de Kirchner dicta el decreto 1.602/09 por el que se crea la asignación universal por hijo para protección social, que ampara a los menores de aquellas familias que hasta ese momento no gozaban de las asignaciones familiares. Esto constituyó un logro en materia de seguridad social.
En 2001, nuestra presidenta hace realidad aquel sueño de Eva Perón al reconocer a las mujeres embarazadas en estado de vulnerabilidad el derecho de percibir la asignación por embarazo. Simultáneamente, el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento establece en un informe que la asignación universal por hijo es la iniciativa más importante en materia de protección social en la Argentina. Sus autores, Fabián Repetto y Gala Díaz Langou, afirman que el beneficio que por entonces alcanzaba a un total de 1.927.310 hogares y 3.684.441 titulares de derecho implicaba una importante reducción en los índices de pobreza, indigencia y desigualdad de ingresos en el país. El trabajo concluye en que la asignación ha implicado un gran avance en términos de cobertura.
En la actualidad, la asignación universal por hijo constituye el piso y no el techo en materia de seguridad social, y permite que ningún niño argentino deba abandonar la escolaridad. De esta manera, pueden ser educados y tener las mismas posibilidades de futuro que otros niños en mejor situación económica. Esto se llama inclusión, señores diputados.
Teniendo en cuenta la historia de nuestro país, sobre todo en lo que se refiere al desarrollo de políticas inclusivas, podemos afirmar que las asignaciones constituyen un piso que debemos mantener siempre actualizado. Todo esto, que comenzó con Eva Duarte de Perón allá por 1951, siguió con las políticas de inclusión social establecidas primero por Juan Domingo Perón y luego por Néstor Kirchner y Cristina.
Por las razones expuestas, doy mi apoyo a este proyecto de ley para la inclusión social en nuestro país. (Aplausos en las bancas.)

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Corrientes.


SR. RUBIN, CARLOS GUSTAVO (CORRIENTES): Señora presidenta: advierto que la asignación universal por hijo es defendida y apoyada pero a su vez criticada profundamente, ya sea por insuficiente, porque no llega a todos los que debería llegar o porque no es financiada de manera adecuada. En definitiva, pareciera ser que se reniega de ella pero no se lo dice públicamente; no se expresa con todas las letras el desacuerdo con las asignaciones familiares y particularmente con la asignación universal por hijo.
Algunos cometieron un “sincericidio” en su discurso al decir que con este dinero se financian actividades ilegales, o como pasó con un ministro de Salud de la provincia de Corrientes, que dijo que las niñas se embarazan para cobrar la asignación por hijo, tratando de encontrar una justificación a los escandalosos índices de embarazo adolescente que tiene esa provincia.
Por eso digo que hay que debatir esto con toda sinceridad. Realmente hoy estamos dando un paso fundamental para una asignación que ha venido a cambiar la situación de la historia argentina, y los números no nos dejan mentir. Las evaluaciones objetivas en materia de salud indican que se ha cumplido casi en un 95 por ciento el amplio calendario de vacunación en la Argentina. En materia de educación, el porcentaje de chicos que ha vuelto y se ha mantenido en las escuelas ha superado el 25 por ciento. Algunos se quejan porque hay que construir más escuelas o más aulas. Por eso digo que siempre se está buscando mantener una situación de pobreza o exclusión y no tomar medidas de fondo, como la que se está tomando en este caso.
Pero además del tema social está el económico. En este sentido, debemos mencionar lo que ha significado en todos los lugares el impulso al consumo que trajo la asignación por hijo. En el caso de la provincia de Corrientes, ingresan más de 100 millones de pesos mensuales para los 121 mil niños que reciben la asignación por hijo. También hay que mencionar a las más de 60 mil embarazadas que están cobrando su asignación en Corrientes. La mejor política de preservación de la vida que existe en la Argentina es la asignación por embarazo, que hoy permite a la mujer embarazada, independientemente de su situación familiar, recibir un mínimo de cobertura por parte del Estado, tanto en materia de salud como en materia económica.
Asimismo debemos mencionar el mercado interno que se reactiva; los mismos que por ahí se quejan son aquellos que aprovechan, a través de sus negocios, la implementación de grandes cantidades de dinero que reactivan el mercado interno. Por otro lado, es mentira que esas asignaciones desalientan el trabajo. Lo que desalienta el trabajo son las remuneraciones de hambre que estaban acostumbrados a pagar a las empleadas domésticas, a los empleados del campo o a los obreros de la construcción, que hoy ya no quieren trabajar por cualquier dinero sino que tienen un piso de dignidad que les garantiza la posibilidad de negociar mejor su situación. En aquellas provincias como Corrientes, que tienen más de 40 por ciento de empleo en negro, están siendo subsidiados por esta asignación por hijo, porque lo que hacen los empleadores es mantenerles el trabajo en negro con la excusa de que, si los blanquean, van a perder esa asignación.
De manera que, en el fondo, lo que aquí está en discusión es qué queremos hacer con la política social en la Argentina. Nosotros desde el gobierno, el kirchnerismo, el peronismo y el Frente para la Victoria pensamos que la mejor política social es la política económica. Esto no es una decisión de política social. Esto es una decisión de política económica, que tiende a dignificar al hombre, a buscar que aquellos que tienen la cruz de haber nacido en un hogar pobre tengan los mismos derechos que aquellos que han nacido en otro tipo de hogar.
Este año el pueblo argentino va a decidir si continúa esa política económica. Nosotros queremos que esta vez realmente llegue el crecimiento y la igualdad a esos sectores a los que siempre se les prometía que en algún momento les iba a llegar y nunca ocurría. Acá hay política económica y decisión para que de una vez por todas reinen en el pueblo el amor y la igualdad.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Jujuy.


SRA. BURGOS, MARIA GABRIELA (JUJUY): Señora presidenta: en primer lugar, quiero aclarar al señor diputado preopinante que nadie está en contra de esta iniciativa. Por el contrario, todos estamos a favor. Lo que se dice en este recinto es para enriquecer o mejorar aún más este proyecto de ley.
Particularmente celebro la decisión política de avanzar y transformar en ley estas asignaciones, además de implementar su movilidad. De esta manera se pone énfasis en reconocer la inflación, que no se quiere reconocer abiertamente. Al estar incorporado el tema de la movilidad se la está reconociendo ínsitamente.
No es mi deseo repetir lo que han pronunciado mis colegas anteriormente. Estamos ante una importante conquista de derechos, pero sobre todo ante la generación de una verdadera política de Estado que va a trascender este gobierno. Este es un reclamo de todos los sectores políticos, y particularmente hablo por el radicalismo, que tuvo la iniciativa de hacerlo hace ya algunos años, a través de las señoras diputadas Elisa Carrió y Elisa Carca en 1997, y del señor senador Gerardo Morales en el 2003, quien presentó un proyecto sobre el régimen universal de ingreso social materno infantil.
Es indudable el efecto positivo que en general tuvo la implementación de la Asignación Universal por Hijo, reduciendo la pobreza e incentivando la escolarización de los niños y niñas. Pero es nuestra obligación reconocer que no obstante ello se producen desigualdades, que son preexistentes, no contemplando diversas realidades y dificultades en el acceso a los derechos fundamentales. Por ejemplo, han quedado fuera del sistema de cobertura una gran cantidad de niños y niñas por no cumplir con la documentación requerida, y estoy hablando de niños y niñas invisibles, que aún hoy están indocumentados. También está el caso de los hijos e hijas que no conviven con sus padres y que por razones diversas éstos no transfieren el beneficio a quienes son realmente los destinatarios.
También están los niños y niñas en situación de calle y los excluidos por cuestiones burocráticas. Muchas veces los impedimentos son de tipo geográfico y climatológico, por las grandes distancias que deben recorrer hasta llegar a los centros más poblados donde se tramitan los beneficios.
Me refiero en especial a mi provincia, a la Puna Jujeña. En Jujuy en el departamento de Susques, ubicado a 3.620 metros sobre el nivel del mar, que comprende a 23 localidades y parajes como Catua, Coranzuli, Olaroz Chico, El Cóndor, El Porvenir y Medanitos entre otros, las temperaturas en verano oscilan entre los ocho y diez grados y en invierno entre cero y veinte grados bajo cero, con un régimen escolar especial que se extiende de agosto a junio de año a año.
Sin oponerme a la aplicación del diferencial del 30 por ciento del monto de las asignaciones para la región Patagónica, que se sustenta en el mayor costo de vida, la Asignación Universal por Hijo es una herramienta con la que se pretende atacar la pobreza y la indigencia. Por eso, lógicamente debería hacerse foco también en aquellas zonas donde los índices de pobreza e indigencia son más grandes, en condiciones sociales desfavorables, con una economía de subsistencia y donde el acceso a los recursos es dificultoso, y por ende, costoso. Informes como el realizado por la fundación OCLADE, de la Prelatura de Humahuaca, confirman este cuadro de situación.
Lo que el dictamen de la Unión Cívica Radical propone, sin eliminar el incremento a favor de las regiones del sur del país, es extender el mismo beneficio a las regiones del NOA y del NEA con el objeto de mitigar la pobreza estructural y sus consecuencias.
En relación con este tema, en ocasión del tratamiento del proyecto en el Senado, la legisladora Fellner, que también representa a la provincia de Jujuy, expresó que no era necesario incorporar en el texto de la ley la extensión para las zonas del NOA, NEA y de Malargüe de la aplicación del diferencial del 30 por ciento que ya se otorga a la región Patagónica. Sugirió que esperemos el decreto de la presidenta para la zonificación correspondiente.
Si el fundamento de la institución por ley de la asignación universal es convertirla en una política de Estado para que su implementación no quede sometida a la discrecionalidad del Poder Ejecutivo, ¿por qué se pretende dejar librado a un decreto la corrección de las desigualdades que la misma ley aún no aborda?
En cuanto a la aplicación de la ley, me pregunto: ¿por qué tener que esperar a marzo del año próximo y no hacerlo ahora, en septiembre, como sí lo establece nuestro dictamen de minoría? Además, ¿por qué no hacer las modificaciones trimestralmente y no semestralmente?
Vamos a exigir promover, sostener y defender toda acción pública que esté dirigida a resguardar los derechos de los niños, niñas, adolescentes y madres embarazadas.
Queda un largo camino por delante. Si avanzamos hoy con la sanción de la ley con las propuestas sugeridas, en un marco de tolerancia, pluralismo y verdadero debate en esta Cámara, habremos dado un paso adelante hacia una sociedad más igualitaria y equitativa, reafirmando los principios democráticos por los cuales venimos luchando hace demasiado tiempo. (Aplausos en las bancas.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Santiago del Estero.


SRA. PASTORIZA, MIRTA AMELIANA (SANTIAGO DEL ESTERO): Señora presidenta: nos encontramos a minutos de convertir en ley la movilidad automática de la Asignación Universal por Hijo. Seguramente lo haremos con el consenso de todas las fuerzas políticas que conforman este Parlamento.
En la actualidad, los montos de las asignaciones son establecidos discrecionalmente por el Poder Ejecutivo. Ahora proponemos un mecanismo automático de movilidad, basado en las variaciones semestrales que se producen en la recaudación previsional, en el índice salarial y finalmente en los recursos que llegan a la ANSES. De esta forma, garantizamos la salud financiera del sistema y el razonable incremento de las asignaciones.
Su dimensión ya no va a depender de la intencionalidad que tenga el gobierno de turno, porque vamos a asegurar que este derecho permanezca en el tiempo de manera justa y equilibrada.
La futura ley será un eslabón más en una larga cadena de conquistas de los derechos ciudadanos que viene creciendo desde hace más de cien años, oportunidad en la que el ex presidente Hipólito Yrigoyen comenzara a construir un sistema de seguridad social para la protección de los trabajadores.
En las últimas décadas este régimen –atado al mundo del trabajo ha buscado nuevas herramientas que permitan la incorporación de aquellos ciudadanos que quedaron excluidos del sistema. Con el objetivo de ampliar la protección social, se ha marcado un nuevo rumbo donde las personas –independiente de su situación laboral tienen derechos o estándares mínimos de bienestar en razón de su condición de ciudadanos.
En la medida en que se logra romper con la línea divisoria de asalariados y desocupados mediante una implementación de corte universal, se puede avanzar en la construcción de sociedades más igualitarias. Esta es la idea transformadora de la Asignación Universal por Hijo. Es la ampliación de la asignación familiar que se da a los trabajadores formales para que también llegue a los hijos de los desocupados, siendo una medida complementaria de nuestra concepción en el sentido de lograr trabajo decente para todos los argentinos. De esta forma, deseamos asegurar que este derecho no es incompatible con la necesidad de construir los parámetros de igualdad y libertad que genera el propio empleo. Por el contrario, en los últimos años se ha generado una enorme cantidad de puestos de trabajo que se articulan automáticamente con la asignación universal.
La creación de ese beneficio tuvo aspectos muy positivos en la salud pública y en el aumento de la matrícula escolar. Las carteras educativas provinciales dan cuenta del incremento en la matrícula y en la tasa de retención.
Imagínense el impacto que tiene esta medida en mi provincia –Santiago del Estero donde perciben asignaciones cerca de 240 mil niños.
Como sociedad hemos producido un cambio de paradigma hacia la universalización de los sistemas sociales. Todo esto ha desembocado en mejoras en la calidad de vida de las personas mediante el acceso universal a la educación y la salud.
El impacto de la Asignación Universal por Hijo es un hito en la ampliación de derechos de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad. Su movilidad automática la libera de la discrecionalidad y la enlaza a las posibilidades presupuestarias de una Nación que se comprende a sí misma como una sociedad de iguales. Es por ello que adelanto mi voto afirmativo a este proyecto.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Catamarca.


SRA. ORTIZ CORREA, MARCIA SARA MARIA (CATAMARCA): Señora presidenta: hoy nos encontramos nuevamente tratando otro proyecto de ley con claro sentido de justicia por cuanto viene a consagrar la integridad y a completar el sistema de las asignaciones familiares al establecer la movilidad de casi todas ellas.
Con este proyecto se determina la inclusión por ley de la movilidad de las asignaciones prevista en la ley 24.714 a la que hacía referencia nuestra querida diputada Herrera, que establece lo referente a la asignación por hijo, la prenatal, la ayuda escolar. Se refiere también a la movilidad de la Asignación Universal por Hijo y por embarazo.
Asimismo, se expresa que la movilidad se establecerá conforme a lo dispuesto en el anexo de la ley 26.417, teniéndose en cuenta las variaciones que se producen en la recaudación previsional por un lado y en el índice de salarios, por el otro. De esta forma se logra dejar atrás un sistema de determinación de los montos de las asignaciones familiares, que viene siendo puramente discrecional, es decir, exclusivamente dependiente de la voluntad del Ejecutivo para dar lugar a un procedimiento automático de aumento y actualización de dichos montos, el mismo que se utiliza para la movilidad de las jubilaciones.
Por su parte, se prevé un valor diferencial para las asignaciones universales por hijo y también por embarazo en la zona patagónica, compensando de esta manera el mayor costo de vida que implica residir en dicha zona.
Con el presente proyecto también se pretende asegurar la universalidad de la cobertura garantizando la protección del grupo familiar, ya sea a través del cobro de alguna asignación o bien aplicando la deducción especial que prevé la ley de impuesto a las ganancias.
No cabe duda de que esta medida que aquí se propicia constituye un elemento fundamental de la política social de Estado que bien supo instaurar con su llegada al gobierno nuestro presidente Néstor Kirchner y cuyo camino continúa y continuará valiosamente nuestra querida presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Cuando escucho a nuestro presidente de la Cámara de Diputados, el doctor Julián Domínguez, con la fuerza con que se dirige al pueblo, y cuando escucho a cada uno de mis compañeros de bloque del Frente para la Victoria, no se puede dudar de que son hombres y mujeres que defienden los derechos de nuestra gente con pasión y emoción, pero por sobre todo con el convencimiento de obrar conforme a los principios y valores en pos del logro del tan ansiado bien común. Como siempre solemos expresar aquellos que portamos con orgullo el profundo amor por la democracia como gobierno del pueblo y el imprescindible respeto a nuestra Carta Magna, no podemos negar que con este proyecto de ley estamos cumpliendo con la máxima del artículo 14 bis, que establece la necesidad de prever la protección integral de la familia y la compensación económica familiar.
También quisiera agregar que cada una de las normas tratadas con alto grado de solidaridad y de justicia para quienes más lo necesitan es una feliz consecuencia de la década ganada; y todas –incluida la que hoy nos toca discutir- llevan ínsito en su espíritu el más puro objetivo de eliminar las inequidades existentes entre los diversos sectores sociales a fin de achicar las diferencias entre quienes más tienen y los más vulnerables de nuestros hermanos.
Por estos y otros motivos adelanto mi voto favorable al proyecto de ley en tratamiento y solicito autorización a la Presidencia para insertar el resto de mi discurso en el Diario de Sesiones. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Catamarca.


SR. TOMASSI, NESTOR NICOLAS (CATAMARCA): Señora presidenta: me llena de orgullo ser parte de esta Cámara de Diputados, que en el día de hoy se dispone a coronar dentro del sistema normativo un hecho histórico que con decisión política ha transformado a nuestro país: me refiero a la Asignación Universal por Hijo.
Lo que empezó siendo una política pública de asistencia hoy es un derecho adquirido por todos los niños y niñas hijos de trabajadores desocupados o informales. A seis años de su lanzamiento, que fue allá por 2009, nos cuesta imaginar un Estado ausente, porque hubo un gobierno que decidió estar presente e intervenir en esa economía que excluía y marginaba. Digo esto porque gracias a esta asignación las familias de los niños y niñas beneficiarios pueden cubrir sus necesidades básicas, y así, al poder estudiar y estar sanos, ellos serán los encargados de romper con el círculo de la marginación.
Lamentablemente, el país tocó fondo a fines de los años 90 y la destrucción del tejido social generó más exclusión. Hoy podemos decir que la Asignación Universal por Hijo es una herramienta que nos permite cortar con el avance de la marginación y recomponer el tejido familiar y social, para que los hijos e hijas de quienes fueron excluidos dejen de estar en esa situación.
Pese a los avances que se han registrado en materia de empleo en la última década –creación de más de 5 millones de puestos de trabajo y reducción significativa de la informalidad- son muchos los trabajadores que se encuentran desocupados y precarizados y que, por lo tanto, se ven imposibilitados de cubrir las necesidades materiales básicas de sus hijos durante su crianza.
En 2014 la asignación universal alcanzó a más de 3,5 millones de chicos. Si este dato lo sumamos a las asignaciones que perciben los trabajadores formales, podemos decir que la cobertura alcanza al 90 por ciento de los niños de nuestro país. Así, por ejemplo, en 2014 en mi provincia Catamarca- fueron 37.500 los niños y niñas alcanzados por esta cobertura.
Además, desde la implementación de este beneficio a la fecha el monto de la asignación fue aumentando por decisión política, registrando un incremento del 365 por ciento en los seis años de vigencia.
El objetivo es que con este proyecto de ley que seguramente hoy se va a sancionar no dependamos más del dictado de un decreto ni de la voluntad del Ejecutivo nacional. A partir de ahora, tal como sucede con las jubilaciones y pensiones, la actualización se hará en forma automática en función de la evolución de la economía.
En ese sentido, y como creemos que esto puede seguir mejorando, aunque no de manera inconsciente, sostenemos que la fórmula de actualización tanto de las asignaciones previsionales como las destinadas a la niñez, tienen que regirse por la combinación de la evolución de los ingresos de los trabajadores activos formales, el índice del salario y los ingresos del sistema de jubilaciones y pensiones. Esta fórmula garantiza la actualización de los ingresos en forma pareja entre los desocupados y ocupados y la sustentabilidad del sistema previsional.
Con la sanción de esta iniciativa quienes estamos de acuerdo con las gestiones de Néstor y de Cristina estamos seguros de que dejamos nuestra huella en materia de seguridad social, que es un pilar clave para lograr la justicia social. La sanción de este proyecto garantiza la justicia por sobre el color político de quien detente el gobierno y dota de objetividad la evolución de esta prestación que es clave para la inclusión social.
Ojalá sigamos transformando el país para que en el futuro no haya ciudadanos que necesiten de esta asignación, pero mientras tanto es nuestro deber moral, ético y político asegurarnos como sociedad que nadie nos quite este derecho adquirido.
Por lo tanto y por todo lo expuesto vamos a apoyar con total y absoluta convicción este proyecto de ley. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Mendoza.


SR. PETRI, LUIS ALFONSO (MENDOZA): Señora presidenta: como ya lo han anticipado miembros de nuestro bloque, la Unión Cívica Radical va a acompañar este proyecto de actualización de la Asignación Universal por Hijo. Ya desde hace mucho tiempo veníamos reclamando en cada uno de los espacios en donde nos tocaba estar la necesidad de que desde estas bancas se discutiera esta herramienta social que tiene una importancia gravitante en la República Argentina, fundamentalmente en la primera infancia.
No quiero entrar en una disputa acerca de si fue la oposición o este gobierno el que planteó la necesidad de contar con herramientas como la Asignación Universal por Hijo o la Asignación Universal por Embarazo. Más allá de las autorías, lo cierto es que esta asignación es una realidad.
A partir del ingreso de este proyecto el gobierno reconoce que la oposición tenía razón cuando decía que no bastaba con un decreto de necesidad y urgencia… (Manifestaciones en las bancas.)
¡Déjeme hablar, diputado Kunkel! No bastaba con un decreto de necesidad y urgencia…


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Diputado, por favor…


SR. PETRI, LUIS ALFONSO (MENDOZA): No bastaba con un decreto de necesidad y urgencia porque necesitábamos que la Asignación Universal por Hijo fuese una verdadera política de Estado. Porque no solamente necesitamos que tenga consagración legislativa; necesitamos que tenga consagración constitucional.
Acá escucho a miembros del oficialismo que graciosamente hablan de que esta era una herramienta discrecional, arbitraria. Pues esa herramienta discrecional y arbitraria la utilizaron estos últimos seis años. Porque los aumentos de la Asignación Universal por Hijo no tenían en cuenta el proceso inflacionario que desde 2007 viene viviendo la República Argentina sino que lo que tenían en cuenta era el termómetro electoral, y lo utilizaban como una herramienta electoral cuando esto debía ser una verdadera política de Estado. Estas son las cosas que decimos cuando defendemos la necesidad de tener una…


SR. KUNKEL, CARLOS MIGUEL (BUENOS AIRES): ¡Ustedes derogaron la Constitución del 49, golpistas, con su jefe Aramburu!


SR. PETRI, LUIS ALFONSO (MENDOZA): También decimos que era necesario que esta Asignación Universal por Hijo reconociera las particularidades del territorio de la República Argentina, que reconociera el carácter federal de nuestro país. Decíamos que no es la misma la realidad de los chicos del centro de la República Argentina que la de los del noroeste o noreste argentino. Son distintas realidades. Seguramente a todos los acucia la pobreza, pero pega más fuerte en algunas provincias y en algunas localidades del país. Necesariamente esto debía ser reconocido por esta iniciativa.
Por eso reclamábamos que más allá de reconocer la justicia de un incremento del beneficio a las provincias patagónicas porque todos conocemos las vicisitudes, las distancias, las inclemencias del tiempo que tienen que sufrir aquellas personas que viven en el sur, también era necesario reconocer a otras localidades que sufren las mismas problemáticas.
Me refiero particularmente a una localidad de mi provincia, Malargüe, que comparte con aquellas provincias del sur la misma realidad pero que lamentablemente no se encuentra amparada por este incremento del 30 por ciento. Ni hablar de las provincias del NOA o del NEA, donde claramente todos los indicadores hablan de que la pobreza alcanza a no menos del 30 por ciento.
Lo que ha ocurrido en el país es que se ha incrementado la pobreza, y esto es lo que este gobierno no quiere reconocer. No solo se ha incrementado la pobreza sino –lo que es más grave se ha producido una infantilización de la pobreza.
Fíjense que la UCA, una universidad prestigiosa de nuestro país, que realiza relevamientos y estadísticas que molestan al gobierno, porque develan la realidad que las estadísticas oficiales no develan, da cuenta claramente de que en los sectores más postergados, de más bajos ingresos, se encuentra el 58 por ciento de los niños, mientras que en el 30 por ciento más rico, solo hay un 10 por ciento.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) La Presidencia solicita al señor diputado que redondee su exposición.


SR. PETRI, LUIS ALFONSO (MENDOZA): Finalmente, celebramos que este Congreso trate la Asignación Universal por Hijo; pero creo que el verdadero desafío es lograr las condiciones necesarias para alcanzar el crecimiento y generar puestos de trabajo que permitan que los hombres y las mujeres recuperen su dignidad. (Aplausos.)

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Formosa.


SR. BASTERRA, LUIS EUGENIO (FORMOSA): Señora presidenta: ¡La UCA, la UCA, la UCA, me tiene…! Hablan de una universidad prestigiosa y está tan cuestionada en términos de criterios metodológicos. No me parece correcto que se tomen como verdades absolutas estos datos en lugar de considerar la información que proviene de nuestras universidades públicas. (Aplausos.) Cada vez que encuentran un resquicio argumentan en contra de las evidencias.
No me interesa ahondar en las canaletas del juego y la droga; canaletas por las que se supone va a derivar el recurso que nuestra sociedad brinde a la Asignación Universal por Hijo. Creo que esto es no comprender la esencia. Como alguna vez un viejo maestro de la política me dijo, no debemos juzgar intenciones, sino acciones.
Nos sentimos absolutamente reconfortados de que hoy el amplio espectro de las minorías del Congreso se haya decidido a apoyar esta iniciativa que, en la práctica, lleva adelante nuestro gobierno, con seriedad y responsabilidad. Para dar institucionalidad a este proceso de conquista de los derechos, hoy venimos a proponer la actualización de la Asignación Universal por Hijo dos veces por año.
No se trata de una medida aislada o única. Deviene de lo que significa el aporte a la formación y concreción de una infancia y una juventud psicofísica y emocionalmente plena y realizada. La Asignación Universal por Hijo significa, para nosotros, que el niño coma en su casa, reciba las dieciséis vacunas del calendario obligatorio, pueda estudiar y, por sobre todas las cosas, aspire a un futuro cierto de inclusión.
Esta iniciativa no viene a atender una situación de emergencia heredada; sino que forma parte de un conjunto de otras medidas. Por ejemplo, en la provincia de Formosa estamos viviendo un profundo proceso de transformación del sistema educativo. Se han construido o refaccionado 1.100 escuelas. Invito a cualquier colega o ciudadano a mirar por Google cualquier localidad de la provincia. Allí podrá identificar los techos azules, que son todas las escuelas hechas a nuevo o refaccionadas. También se han atendido los centros de salud para que los niños tengan las mismas oportunidades, tanto en el límite con Salta como con Paraguay, sobre la vera del río Paraguay como con el límite con el río Bermejo, en Chaco.
Asimismo, podemos destacar más de 2.300 kilómetros de fibra óptica con el programa Conectar Igualdad que llega a toda la juventud. Hoy venimos de celebrar el 103 aniversario de Misión Tacaaglé, donde vimos desfilar a las comunidades de criollos y de jóvenes Qom con sus netbooks. Estamos demostrando a la comunidad que a 1.400 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, cualquier niño tiene acceso a Internet. Todo esto forma parte del concepto de inclusión que venimos a garantizar para que ningún niño quede excluido.
Estamos comprometidos con este modelo que propusieran Néstor y Cristina, que tiene por finalidad garantizar un futuro de profundización en esta dirección. Quienes tengan la intención de cambiarlo, tendrán que concurrir al Congreso para modificar estas decisiones.
Por último, quiero efectuar una consideración. Quienes conceptualmente han emitido opiniones en el sentido de que las mujeres se embarazan para poder cobrar esto o de que este dinero se utiliza para la droga o el juego hoy nos traen una diatriba de demagogia y nos vienen a plantear la importancia de efectuar incrementos en algunas regiones, para lo cual toman otras de menor desarrollo relativo, como son las del NEA y del NOA. Esto lo hacen solamente para lograr centímetros y ponerse más a la izquierda de la izquierda cuando plantean de manera incorrecta lo que significa el mecanismo de la Asignación Universal por Hijo.
No voy a minimizar la inteligencia. Por eso digo que hay una actitud demagógica. Cuando hablamos del costo de vida en las provincias del Sur y lo comparamos con el existente en las del Norte estamos haciendo referencia a cosas absolutamente diferentes.
Por lo tanto, me parece que debemos debatir con números concretos, no sobre la existencia o no de la pobreza estructural, sino sobre lo que significa el para qué de la Asignación Universal por Hijo.
Por las razones expuestas, vamos a acompañar con mucha convicción el proyecto en consideración. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Salta.


SR. VILARIÑO, JOSE ANTONIO (SALTA): Señora presidenta: creo que debemos destacar de dónde provenimos. ¿Por qué se implementaron las jubilaciones universales y la Asignación Universal por Hijo? Creo que eso se hizo con dos concepciones distintas. Por un lado, estaban los que pensaban que el mercado lo resolvía todo, que son los liberales, que consideran que cuando hay que ajustar la economía siempre se lo debe hacer sobre el trabajo, los salarios y las jubilaciones, no sólo congelándolas, sino también disminuyéndolas.
Por el otro, estábamos aquellos que como Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner considerábamos que el Estado debía ser el impulsor y el desarrollador de la economía. En ese sentido creamos seis millones de puestos de trabajo para generar una mayor riqueza, la que a través de un mecanismo de redistribución debería llegar a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad.
Este fue el motivo por el que se estableció la Asignación Universal por Hijo, que había que garantizar y que fue objeto de un clamor de todos los sectores que se opusieron claramente a todas estas políticas neoliberales, cortando las rutas y haciendo la marcha contra el hambre y la pobreza.
Todos estos sectores, entre los cuales estaba la Iglesia, plantearon la necesidad de garantizar la seguridad alimentaria. Esto comenzó como una decisión política cuya implementación debía hacerse gradualmente, a medida que la economía se fuera recuperando. Esta consideración también es válida en el caso de las jubilaciones.
Esa decisión política fue adoptada primero por Néstor Kirchner y luego por Cristina Fernández de Kirchner.
Posteriormente se trató de universalizar esto a través de la sanción de los proyectos de ley correspondientes para que, definitivamente, quede como la consagración de un logro del pueblo argentino.
Por eso hoy estamos dando un paso muy importante después de haber avanzado durante seis años, con un gran impacto en la realidad de la sociedad. No sé dónde han estudiado los que provienen de algunas universidades. No obstante, puedo hablar del lugar del que provengo, que es una zona muy alejada en la que hay comunidades de pueblos originarios; esto incluye a los lugares más inhóspitos de mi provincia.
Allí puede apreciarse el impacto que produjo la Asignación Universal por Hijo. Concretamente, no sólo permitió que los chicos volvieran a las escuelas rurales, sino que también generó un impacto sobre la economía. Precisamente, pasado mañana voy a ir a uno de esos pueblos, el de Iruya, donde no hay bancarización. En este sentido también se dio dignidad a la gente humilde de ese lugar porque se le permitió acceder a un sistema bancario de una ciudad. La única manera de pagar una prestación a las personas en estos lugares tan alejados consistía en que el agente financiero o el correo estatal se acercaran a ellos.
En ese sentido debe apreciarse el impacto económico que se genera cuando esa gente baja con sus producciones de alimentos y de artesanías. De esa forma el dinero se genera en ese mismo lugar, mientras que antes había que ir a cobrar a los grandes centros urbanos. Esto último implicaba una permanencia en esas ciudades con sus correspondientes gastos, lo que hacía que a estas personas el dinero se les esfumara de las manos.
En Salta actualmente hay más de 140 mil jóvenes que perciben este beneficio. El último año hemos perdido 5 mil chicos, lo que constituye un buen dato estadístico que indica un amesetamiento. No hubo un aumento exponencial, lo que representa el mejor síntoma de que este es un buen recurso contra la pobreza.
Asimismo, solamente tenemos 4 mil embarazadas. Esta cifra no llega a un tercio de la tasa de crecimiento vegetativo.
También es muy importante rescatar algo que contempla la ley de Asignaciones Familiares y de lo que muchos no hablan.
No sólo en zonas de mi provincia, sino también en departamentos limítrofes ya se aplica este mecanismo y tenemos que generalizar la Asignación Universal por Hijo a través de un verdadero estudio para determinar si el indicador es la zona de frontera o el índice de pobreza, y eso tiene que hacerse a través de un estudio muy racional.
Por ejemplo, en el departamento Orán –zona 1- y en los departamentos de Los Andes, Santa Victoria y General San Martín el promedio salarial oscila entre 7.000 y 9.800 pesos. A Salta le tocarían 562 pesos y a las zonas desfavorables, 744 pesos, que ya se están pagando en la zona 1, Orán, mientras que en el departamento San Martín se están pagando 1.486 pesos. Es decir, no es solamente el 30 por ciento, sino que prácticamente se está triplicando el valor.
Este es un camino que la norma ya reconoce y seguramente se aplicará en la etapa que viene. Esta política de inclusión social ha sido valorada por el sistema educativo –que ha permitido que muchos chicos vuelvan a la escuela- y por el sistema sanitario. Esto es fundamental.
Anteriormente los médicos entregaban certificados médicos como si fuesen recetas de cocina. Hoy se cumple a rajatabla el control del peso y la talla, y se hace una revisación básica antes de expedir el certificado. De esta manera, se cumple con la meta que se fija en esta política social.
Para nosotros es un orgullo que, así como hemos universalizado las jubilaciones, hagamos lo mismo en esta materia. Este índice es realmente formidable no sólo en cuanto al funcionamiento de las jubilaciones, sino en lo que se implementará a partir de marzo.
Quédense tranquilos que con los decretos de la presidenta el aumento fue del 365 por ciento y, según este índice, ascendería al 375 por ciento. (Aplausos.)



SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Santiago de Estero.


SRA. RUIZ, AIDA DELIA (SANTIAGO DEL ESTERO): Señora presidenta: estamos viviendo un tiempo de profundos cambios sociales con un alto impacto en el presente y en el promisorio futuro.
La Asignación Universal por Hijo constituye uno de los avances más importantes de nuestro sistema de seguridad social y es, sin duda, uno de los más grandes logros de este proceso político que conduce nuestra querida presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que fuera iniciado por el ex presidente Néstor Carlos Kirchner allá por el año 2003.
Lo que años atrás fue un proyecto de ley hoy se ha transformado en una política pública de alto impacto social, que debemos custodiar como legisladores.
Sin duda alguna estamos en presencia de una herramienta que ha mejorado la distribución del ingreso, asegurando la alimentación y los estudios de los niños más desposeídos.
Los datos estadísticos hablan por sí solos. Este año se dispondrá de 35 millones de pesos para atender 3.573.598 asignaciones familiares, lo que implica casi el 2 por ciento del presupuesto nacional.
En Santiago del Estero, hacia fines del año pasado, se habían otorgado 123.534 asignaciones, algo inédito en la historia de la provincia.
Si abordamos la inclusión social hay que remarcar que ha sido muy importante la inversión y su influencia directa altamente positiva. En este sentido, los datos de mi provincia son muy elocuentes: con el programa de inclusión digital Conectar Igualdad los docentes y alumnos secundarios ya recibieron 82.291 netbooks, que fueron repartidas en 224 establecimientos educativos.
Por su parte, ya son 15.922 jóvenes santiagueños los que están cobrando el plan Progresar.
En cuanto a las jubilaciones y pensiones, en la actualidad hay más de 100 mil adultos mayores que reciben haberes previsionales, y se han duplicado las cifras de 2003.
En cuanto a futuras mamás, hay 2.935 beneficiarias por la asignación de embarazo para protección social. Asimismo, las asignaciones familiares para trabajadores ascienden a 52.300.
Todos estos datos nos muestran cómo la seguridad social es una política pública que enorgullece, porque claramente les da a los que menos tienen para distribuir la riqueza en forma equitativa.
Los investigadores del Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales, CEDLAS, afirman que el programa ha tenido un significativo impacto reductor sobre los niveles de pobreza y desigualdad, y resultados alentadores sobre el nivel de asistencia escolar.
En particular, respecto a la movilidad de las asignaciones familiares, quiero señalar que es una medida protectora, una reforma de segunda generación, que no cabe duda corresponde a un verdadero Estado de bienestar y garantiza la universalización y el efectivo goce de los derechos adquiridos, tal como dijo nuestra presidenta, para que el aumento se produzca en forma automática y no esté sujeto a alguien que quiera licuar este beneficio mediante la no concesión de aumento para que con el tiempo la asignación universal por hijo pase a ser un recuerdo.
Finalmente, quiero adelantar mi voto positivo, remarcando y resaltando que debemos seguir trabajando en este rumbo en pos de una mayor seguridad social. Debemos reconocer los hitos y protegerlos, porque sin duda alguna van a ser verdaderas políticas de Estado, para que de esta manera podamos erradicar la pobreza en nuestro pueblo. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Misiones.


SRA. LEVERBERG, STELLA MARIS (MISIONES): Señora presidenta: hoy es, sin duda, una sesión histórica. Estamos consagrando una de las políticas sociales mejor construidas en la historia del país, más allá obviamente de que también reivindicamos que lo ha sido en este tiempo, el tiempo donde Cristina Fernández de Kirchner toma la decisión en el año 2009 de poner en funcionamiento la asignación universal mediante el DNU 1.602/09, que modifica la ley 24.714.
Quiero recordar también la lucha intensa y añeja en la que nos embarcamos todos los compañeros de la CTA de los Trabajadores, junto a otros actores, cuando se proclamaba ya la necesidad del ingreso universal para todos los niños y niñas de este país. Se trató y se trata de un sueño hecho realidad.
Más allá de la oportunidad en que fue tomada la histórica y trascendental decisión por este gobierno nacional, popular y democrático, debemos decir, en primer lugar, que la misma no hubiera sido posible sin haberse logrado antes una verdadera soberanía financiera, monetaria y económica, como la concretara nuestro querido ex presidente Néstor Kirchner cuando pusiera fin a la relación de sumisión a la que el FMI nos tenía subyugados, cancelando la totalidad de la deuda con dicho organismo en el año 2005.
Por ello, en ese sentido he promovido ante esta casa un proyecto de ley que establece el 15 de diciembre de 2005 como el Día de la Moneda Nacional Argentina, en conmemoración de la soberanía recuperada por Néstor, que abre el proceso inédito de desendeudamiento con los acreedores externos y con los organismos multinacionales de crédito.
El actual proceso de desendeudamiento ha sido el que precisamente ha permitido tomar innumerables decisiones a favor de nuestro pueblo, en las que la asignación universal por hijo ha sido un pilar inmenso, entre otras grandes decisiones políticas.
No hace falta, compañeros, remitirnos a ese pasado infame de fines de la década de los años 90 y principios del nuevo siglo para saber con certeza qué es lo que deparan las políticas neoliberales o los gobiernos que detestan al pueblo. Somos testigos de lo que ocurre en Europa, donde Grecia es obligada a aceptar durísimas condiciones de ajuste para hacer frente a su deuda pública, aun a costa de todo el entramado de protección social mínimo que forma parte del contrato social de los ciudadanos griegos para con su Estado.
América latina ha sido un caso testigo y un verdadero ejemplo de cómo abandonar esas políticas y reconstruir la dignidad del pueblo. Desde nuestra trayectoria en la lucha sindical como trabajadores docentes, y también como simples ciudadanos que hemos luchado y hecho frente a las innumerables oportunidades en que se quiso saquear el Estado o destruir instituciones públicas como la escuela, podemos dar testimonio de que se dieron enormes pasos para reconstruir el bienestar de cada argentino.
Los trabajadores organizados a través de gremios como CTERA y CTA apoyamos con todas nuestras fuerzas cada paso dado hacia la inclusión de los grandes colectivos sociales que históricamente se vieron marginados de cualquier tipo de beneficio social o de trabajo digno. Hago mías las palabras del compañero Hugo Yasky cuando destaca como buena noticia que hoy se sancione un proyecto de ley que obliga a los futuros gobiernos a actualizar permanentemente los valores de la asignación universal por hijo y de las asignaciones familiares, tal como ya ocurre con las jubilaciones que se pagan a través de la ANSES.
Histórica lucha, histórica bandera de todos los trabajadores que encontramos en este modelo nacional y popular un espacio para las reivindicaciones y la justicia social, donde los sectores populares sienten que forman parte de una política de Estado.
Como bien lo refleja CIFRA, Centro de Investigación y Formación de la República Argentina de la CTA, la asignación universal por hijo está en su momento de mayor poder adquisitivo, no solo en términos nominales, sino también en términos reales merced a los aumentos decididos por el Estado nacional desde 2009. Con este mecanismo de ajuste automático de los montos, aseguraremos una verdadera justicia distributiva para el universo de titulares del beneficio que hoy, según la ANSES, alcanzó un pico histórico de casi 8 millones de asignaciones familiares. Actualmente, el 60 por ciento de los niños cuenta con cobertura.
Finalmente, quiero decir que a partir de este modelo nacional y popular, con la presencia permanente de Cristina Fernández de Kirchner –que es quien fija las políticas de Estado, reivindicamos a las clases populares y a los sectores más vulnerables. Aquí se hace patria con más derechos. (Aplausos en las bancas.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Tucumán.


SRA. GALLARDO, MIRIAM GRACIELA (TUCUMAN): Señora presidenta: como es sabido, la Asignación Universal por Hijo fue creada en virtud de un decreto del año 2009 y actualmente alcanza a unos 3.600.000 beneficiarios.
En 2003 la inversión total que hacía el Estado en materia de asignaciones familiares equivalía solo al 0,42 por ciento del producto bruto interno; hoy es el 1,15 por ciento.
Durante el debate se habló de informes y estudios de universidades privadas y demás. Permítaseme mencionar tres ejemplos de organismos que evaluaron el impacto de las asignaciones en nuestro país.
Un trabajo de la Universidad Nacional de Tres de Febrero y de la Organización Iberoamericana de Seguridad Social sobre el impacto de la Asignación Universal por Hijo para la protección social concluye que este beneficio permitió elevar hasta el 26 por ciento el acceso a la comida -esto representa, además, un 40 por ciento de ingreso de hogares pobres- y también apreció que el 80 por ciento de niños y niñas de cuatro años hoy asisten a la escuela. Adicionalmente, este informe afirma que en el marco familiar también la Asignación Universal por Hijo ha producido una importante capacidad de atenuar la desigualdad dentro de los hogares de menores ingresos; es decir que eleva más en términos relativos y absolutos los ingresos de los más pobres, igualando hacia arriba.
También quiero hablar sobre la Comisión Económica para América Latina y el Caribe –CEPAL-, que hizo un informe y dijo que la reducción de la pobreza en la región ha sido posible gracias a la complementariedad de efectos, crecimiento y distribución. Esta entidad, que como ya sabemos depende de las Naciones Unidas, precisó que entre 2002 y 2010 nueve países de la región redujeron la pobreza, principalmente a partir del crecimiento de los ingresos medios, destacando que este efecto fue particularmente importante en Argentina, Colombia, Ecuador, Honduras y República Dominicana, donde este efecto fue responsable de un 80 por ciento más en la caída de la pobreza.
La crisis económica de 2009, sin embargo, no frenó esta tendencia, ya que la pobreza no sólo se ha reducido adicionalmente, sino que lo ha hecho con un mayor énfasis redistributivo, según dice la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena Ibarra, y, además, destacó que el factor de más peso en este sentido fue la reducción de la desigualdad del ingreso laboral, o sea, el alza del ingreso mínimo y el aumento de ingresos no laborables, que están constituidos por el mayor acceso de los hogares pobres a beneficios jubilatorios, el aumento de jubilaciones mínimas y la extensión de los programas sociales.
Cabe mencionar que hace poco el Banco Mundial también presentó un informe donde reconoce los avances concretados por la Argentina en la lucha contra la reducción de la pobreza y la desigualdad. Resalta el rol que tuvieron en este logro el gasto público social y las transferencias monetarias dirigidas a sectores de menores ingresos. Esto se refiere específicamente a que la Argentina es el país que destina mayor porcentaje de su PBI al gasto público social y el mayor monto de recursos a la población con menos posibilidades económicas. El Banco Mundial también destacó que los programas de Asignación Universal por Hijo, Jefes y Jefas de Hogar, Familias para la Inclusión Social y el Programa Nacional de Becas Estudiantiles tienen un efecto altamente positivo en la reducción de la pobreza.
Por último, quiero decir que en Tucumán 86 mil adultos cobran la Asignación Universal por Hijo, lo que implica 163 mil niños que se ven directamente beneficiados.
Dado que ha concluido mi tiempo, señora presidenta, solicito permiso para insertar el resto de mi discurso en el Diario de Sesiones. No quiero finalizar mi intervención sin agradecer a nuestra presidenta esta decisión política de la movilidad de la asignación universal.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Queda registrado su pedido de inserción, señora diputada.
Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. GRIBAUDO, CHRISTIAN ALEJANDRO (BUENOS AIRES): Señora presidenta: realmente es un día de mucha felicidad para quienes veníamos reclamando que se deben discutir en el Congreso todas aquellas normas relacionadas con acordar proyectos o programas de gobierno a futuro, que es lo que se consideran políticas de Estado. Los que pregonamos y trabajamos por eso, los que hemos acompañado proyectos de ley que tienen que ver con la asignación universal por hijo y los que nos negábamos a entender que esto podía ser únicamente responsabilidad de un gobierno por vía de un decreto, hoy sentimos ese estado de felicidad. Seguramente hay cosas que mejorar, y la ley –como toda ley- no va a alcanzar y es muy probable que en un futuro sufra modificaciones. Pero la verdad es que hoy es un día que nosotros celebramos y que nuestro bloque acompaña de la mejor manera, que es votando en forma positiva.
Estos son días en los que uno se levanta a la mañana y escucha al jefe de Gabinete, al señor Aníbal Fernández, cuestionar datos e investigaciones de universidades que no dicen lo que quiere escuchar el gobierno o, por lo menos, el jefe de Gabinete. El señor jefe de Gabinete nos tiene acostumbrados a esto cuando dice, por ejemplo, que en la Argentina no hay pobreza, que hay más pobreza en Alemania, y que no podemos escuchar a una universidad que no opina en el mismo sentido que él, como funcionario de gobierno.
Eso habilita a que el Congreso de la Nación ahora que vamos a tener una ley sobre la Asignación Universal por Hijo, que todos celebramos- empiece a trabajar en otras políticas de Estado, que están pendientes en el país, que tienen que ver con lo que todos acordamos que es el Estado de bienestar, con las bases de una recuperación social, cultural, política, económica y productiva a partir de la peor crisis, que fue la del 2001. Esta es una responsabilidad política de todos. No me refiero a un presidente o presidenta, sino al conjunto de la sociedad, a un aspecto mucho más amplio que un gobierno. Porque todos maduramos y aprendimos de lo peor de una crisis.
El señor jefe de Gabinete cuestiona universidades, índices y, tan suelto de cuerpo, nos compara con Alemania, faltándoles el respeto a las familias más humildes de nuestro país. Muchos diputados preopinantes del oficialismo hablaban de la CEPAL, pero yo no veo qué dice el INDEC sobre el tema de la pobreza en la Argentina.
Cuando nosotros empezamos a trabajar en este tema siempre vimos, en primer lugar, qué dice nuestra fuente de estadísticas, que es el INDEC, que tiene que ser parte de una política de Estado, ya que es una institución tan importante como cualquier otra, incluso como este Congreso de la Nación.
Sin estadísticas oficiales es muy fácil mentir, y la mentira en este país tiene que ser parte del pasado. La maduración nos tiene que llevar a que nunca más pueda haber un gobierno que hable con mentiras, sin recuperar el INDEC, el desarrollo y la producción en la Argentina. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Entre Ríos.


SR. GERVASONI, LAUTARO (ENTRE RIOS): Señora presidenta: desde el oficialismo hacemos permanentemente alusión al desprecio que se manifiesta por las instituciones públicas y por nuestras universidades públicas, porque si a la oposición le sirve los datos de una universidad privada, como la UCA, los utilizan. Si dicen que no hay datos oficiales, ¿por qué toman como certeros los datos de esta universidad? Son cuestiones a las cuales nosotros estamos acostumbrados, y creo que en su gran mayoría el pueblo argentino también se está dando cuenta de esto.
La Asignación Universal por Hijo fue una demanda y un sueño histórico de los sectores más progresistas de la sociedad argentina, que recién con este proyecto político se pudo hacer realidad. En un principio lógicamente fue rechazado por el espectro más conservador de la política argentina. Sin embargo, hoy día no pueden rechazar esto. No lo hacen porque saben que se enfrentarían a la mayoría del pueblo argentino.
Sin lugar a dudas eso deja ver un sesgo de hipocresía y de cinismo dentro de cada uno. No hablo de los referentes políticos que están sentados acá, sino de los que están afuera, que forman parte de la oposición, y de los poderes concentrados de la economía.
Hoy manifiestan de la boca para afuera que están de acuerdo con la Asignación Universal por Hijo, pero por otro lado nunca entendieron ni comprendieron que todo esto se inició en 2003, oportunidad en la que no acompañaron las políticas de desendeudamiento de la República Argentina. Fueron medidas que inició Néstor con el Fondo Monetario; las moratorias jubilatorias y la estatización de las AFJP. No entendieron el tema de la política internacional con los fondos buitres. Deben saber que si no tenemos recuperación económica será imposible llevar adelante políticas tan inclusivas como ésta.
Por eso uno a veces se sorprende viendo o escuchando a la oposición, ya que pronuncia un discurso y, por otro lado, hace lo contrario.
Como el tiempo es corto, voy a solicitar autorización para insertar mi exposición en el Diario de Sesiones. No tengo duda alguna de que me va a tocar votar uno de los proyectos de ley más inclusivas en mi carrera como diputado nacional.
Para los peronistas que tenemos una formación justicialista, estamos ante una medida que ya se venía elaborando y que no tiene un dueño. Lo pensó Eva Perón en 1951 y lo escribió en La Razón de mi Vida. Seguramente que también estuvo en la cabeza del general Perón y de todos los pensadores justicialistas.
Sin duda alguna, hay que buscar la oportunidad de concretar este tipo de actos. Lo que debemos rescatar es que mientras en otras partes del mundo van cediendo ante las presiones o extorsiones de los poderosos en detrimento de los pueblos, en la República Argentina votamos leyes para proteger a los históricamente olvidados.
Hoy día nuestro país es un ejemplo más para el mundo. La Argentina tiene una ley de avanzada en materia social, que es inédita en el mundo. Además, cuenta con una presidenta coraje que nos cobija a todos, que es un orgullo que esté al frente de nuestro país y que nos vea el mundo.
Por eso voy a votar con mucho orgullo y con el corazón este proyecto de ley, que creo es un reclamo histórico que va a quedar en la memoria de muchísimos millones de argentinos. (Aplausos en las bancas.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Santa Cruz.


SRA. TOLEDO, SUSANA MARIA (SANTA CRUZ): Señora presidenta: hoy estamos celebrando el hecho de que podamos votar una iniciativa que hace varios años está dando vuelta por estos pasillos. Quiero nombrar a dos diputadas que en su momento pertenecieron a la Unión Cívica Radical y que pusieron en la agenda política este tema: Elisa Carrió y Elisa Carca.
Siempre pensamos que el ingreso universal a la niñez o la asignación universal, que es su equivalente, han sido un conjunto de normas que consolidaron el paradigma de la protección integral de los derechos de niños, niñas y adolescentes. Esto implica una nueva relación del Estado con ellos en su condición de sujetos y ciudadanos.
Desde que esta asignación se hizo efectiva mediante el dictado del decreto 1.602/09, nuestros mayores cuestionamientos se basaron en tres puntos fundamentales. Debía convertirse en una ley del Congreso Nacional, evitando la discrecionalidad en el otorgamiento efectivo de la asignación. También debía ser realmente universal para que nadie quede fuera de este beneficio, en tanto y en cuanto cumpliera con los requisitos. Finalmente, debía dejar de ser una decisión del funcionario de turno la actualización del monto a percibir.
Dentro de esos puntos, quiero poner un énfasis especial en la discrecionalidad del otorgamiento. Esto ha provocado que según quién solicitaba el beneficio, un funcionario determinaba su otorgamiento, sin importar si cumplía o no con los requisitos. También lo seguían cobrando aquellos que no mantenían la regularidad en la presentación de la documentación requerida para recibirlo; por el simple hecho de tener un puntero amigo, seguían percibiéndolo.
Es de conocimiento público que, incluso, se presionó a instituciones educativas y a docentes para otorgar los certificados de asistencia a clase de niños, niñas y adolescentes que no concurrían. Esto significa una total falta de transparencia en el manejo de los fondos del Estado, no del gobierno.
Este es el principio fundamental por el cual siempre reclamamos la sanción de una ley al respecto, producto del sistema republicano y democrático de un país que en los últimos años ha perdido esta forma de actuar. Se transmite que las leyes son decisiones de una persona o de un gobierno y no producto de un debate consensuado entre los diferentes sectores políticos.
He escuchado a varios oradores hablar de inclusión, de ajustes de las jubilaciones y de muchas otras medidas que son consecuencia de una supuesta década ganada. Sin embargo, si realmente fuese así, quisiera que me expliquen por qué la jubilación mínima no cubre la canasta básica, por qué los índices de pobreza superan ampliamente el 20 por ciento, por qué los ypefianos todavía esperan la reglamentación para poder cobrar lo que les corresponde después de 23 años de lucha y por qué hace doce años que venimos prorrogando la ley de emergencia económica.
Podría seguir enumerando cuestiones atinentes a la deuda social que el Estado no ha saldado, pero hoy lo importante es que aunque esperamos tantos años para que se transforme en ley, de esta forma ningún ciudadano va a dudar de que esté quien esté en el gobierno, y cumpliendo con los requisitos pertinentes, va a seguir recibiendo la asignación.

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por el Chaco.


SR. PEDRINI, JUAN MANUEL (CHACO): Señora presidenta: sin duda, hoy estamos celebrando y dando marco legal a una de las decisiones más transcendentes de este gobierno: el sistema de Asignación Universal por Hijo que nos permite universalizar una política de equidad social y de inclusión como nunca antes habíamos tenido en la República Argentina.
Son siete millones los beneficiarios de estas políticas de inclusión, de los cuales aproximadamente tres millones perciben la Asignación Universal por Hijo y otros cuatro millones cobran las asignaciones familiares y por hijo de los trabajadores formales. Creo que todos los argentinos tenemos que estar orgullosos de esto, ya que el 99,6 por ciento de nuestros niños recibe una asignación directa.
Muchas veces la oposición critica esta cuestión. Tal vez no sepan muy bien qué decir. Tanto en este recinto como en reuniones de comisión se dijo que eran excluidos de este programa los niños que concurren a alguna escuela privada con subsidio estatal. Esto es una bajeza porque es de una falsedad absoluta. En la provincia del Chaco hay muchas escuelas de gestión privada, y, sin embargo, sus alumnos cobran regularmente la Asignación Universal por Hijo.
En el Ministerio de Educación hay un registro donde se establece cuáles son las escuelas, y los niños que concurren a ellas no tienen ninguna objeción para que sus madres puedan cobrar el correspondiente beneficio. Por lo tanto, creo que no por mucho repetir una falsedad se convierte en algo cierto. Las medidas de inclusión no están determinadas por quién administre la escuela, sino según reciban o no subsidios estatales. Solamente están excluidas las escuelas totalmente privadas –por decirlo de algún modo-, que son aquellas que no reciben ningún tipo de asignación por parte del Estado.
Hoy una legisladora juró por la memoria del ex presidente Alfonsín. Eso me hizo recordar que él no solo ganó las elecciones recitando el Preámbulo de la Constitución sino también diciendo que con la democracia se come, se cura y se educa. Justamente, la Asignación Universal por Hijo es eso, ya que esencialmente se trata de una asignación alimentaria, con el agregado de que para tener acceso a ella las familias deben presentar los correspondientes certificados escolares y de vacunación de sus hijos. Por lo tanto, esta asignación también da de comer, cura y enseña a todos nuestros niños.
Esta medida tiene una gran significación que incluso fue reconocida por entidades que están en las antípodas de nuestro pensamiento ideológico, como el Banco Mundial y la Universidad Católica Argentina, tan crítica de los proyectos sociales de nuestro gobierno. Digo esto porque todos los informes de esas entidades debieron reconocer que esta era una medida de inclusión que traía equidad.
Gracias a esta decisión y a otras que ha adoptado nuestro gobierno hoy la Argentina registra la menor brecha entre ricos y pobres de Latinoamérica. Además, este es el único país latinoamericano que tiene a los mayores y a los niños con un ciento por ciento de cobertura a través de las asignaciones directas que otorga el Estado nacional.
Esto es lo que nos deja la presidenta Cristina para el signo de los tiempos. Recordemos que en este mismo recinto dijo que no iba a dejar un país fácil para la dirigencia porque iba a entregar un país mucho mejor para todos los ciudadanos.
Para finalizar, estoy convencido de que este sistema de actualización automática garantizará por mucho tiempo el mantenimiento de este beneficio. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. HARISPE, GASTON (BUENOS AIRES): Señora presidenta: tengo el honor de integrar esta Cámara que en el día de la fecha va a consagrar una nueva ley de asignación de derechos. Al respecto cabe aclarar que la Asignación Universal por Hijo ya fue incorporada dentro del sistema de la seguridad social por la ley 24.714, que la consagró como parte del subsistema del régimen no remunerativo de la seguridad social vigente en nuestro país.
Por supuesto que voy a votar orgullosamente en el mismo sentido en que lo harán mis compañeros del bloque del Frente para la Victoria, e imagino que el resto de los bloques lo harán de la misma manera. No tengo duda de que hoy damos por tierra con aquel precepto de que la niñez debe ser asistida a través de programas sociales o del régimen del patronato, de acuerdo con lo que establecía una ley del año 1919. A partir de la sanción de esta iniciativa vamos a dejar atrás el mecanismo de los programas sociales focalizados sobre la base de los cuales se hizo frente a la desgracia que en algún momento nos tocó vivir en la Argentina como consecuencia de la aplicación de las peores políticas neoliberales.
Recuerdo cuando en los años 90 y durante los años 2000 y 2001, es decir, en los peores tiempos que enfrentó nuestro país, cortábamos la ruta para conseguir un programa social. Recuerdo ir de a miles y volver de a cientos o decenas con programas sociales, y la mayoría de la gente, que no alcanzaba el beneficio, volvía llorando a sus casas con la impotencia de no conseguir un trabajo ni un programa social.
Los programas sociales eran focalizados porque de alguna manera tenían intermediación del Estado y del gobierno, que definían quién podía acceder y quién no, seguramente porque no alcanzaba para todos ese era el argumento, o del movimiento u organización que conseguía el programa social y lo asignaba de acuerdo con categorías como esfuerzo, lucha o amistad.
Frente a estas circunstancias desgraciadas que vivimos en la Argentina de ver que los pibes se morían de hambre en los comedores o que sufrían porque hubo quienes entregaron y vendieron la patria por eso se inventaron estos programas sociales para asistir esa demanda de los años 90, hoy tenemos la posibilidad de estar votando algo que consagró nuestra presidenta coraje. Ella, con suma valentía, puso en marcha algo que los movimientos sociales o sindicales habíamos pregonado en los 90 y principios de esta década, como mencionó hoy el señor diputado Heller, que recordaba que el Frente Nacional contra la Pobreza había levantado la bandera del Seguro de Capacitación y Empleo, que tenía un programa como la Asignación Universal por Hijo.
Esta era la demanda, el reclamo o la voluntad de sectores comunitarios que impulsaron una asignación, que contaron con la valentía y la fortaleza fiscal que tuvieron primero Néstor Kirchner y luego nuestra presidenta. No hay que olvidarse que Néstor Kirchner fue el único gobernador que en la consulta popular de 2001, unos días antes del estallido, puso las urnas en las escuelas de Santa Cruz para que votaran el programa del Seguro de Capacitación y Empleo que incluía la Asignación Universal por Hijo.
En ese marco estamos dando una vuelta de página en la historia consagrando la Asignación Universal por Hijo, dando cuerpo legal a la movilidad, incorporando esta cuestión a la ley 24.714 y poniendo por delante la voluntad de nuestro pueblo.
Por eso, contestando a una diputada que hace un rato decía que esta no había sido una década ganada, puedo testimoniar, como muchos de los que estamos aquí, que hemos ganado una década porque no hay que movilizarse por una migaja de pan, porque ahora hemos consagrado que los trabajadores con trabajo y los que están sin trabajo tienen una asignación con movilidad, que es un derecho para los hijos de los trabajadores, los actuales y los que vendrán.
No vamos a perder este derecho consagrado porque además de tener una ley tenemos un pueblo movilizado y organizado que ha construido un movimiento nacional que lidera nuestra compañera Cristina Fernández de Kirchner. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por La Pampa.


SR. TORROBA, FRANCISCO JAVIER (LA PAMPA): Señora presidenta: los miembros informantes de nuestro bloque han expresado las coincidencias y las disidencias que tenemos respecto de este proyecto. Estas últimas están basadas en que la asignación universal no es del todo universal, en función del diferencial del 30 por ciento para las provincias patagónicas.
Voy a hacer algunas breves reflexiones. La primera es que creo que es bueno lo que está pasando en el Congreso de la Nación. Es bueno que después de cinco años un proyecto de la oposición deje de ser un decreto para convertirse en una ley. El mensaje de que la asignación universal ha llegado para quedarse es un buen mensaje de la dirigencia política a la sociedad, del rol que tiene que cumplir el Estado nacional.
Quisiera manifestar también que las cosas en la Argentina cuestan, que esta iniciativa es un paso importante y que posiblemente algunas de las cuestiones que hoy se han planteado como disidencias deban ser revisadas en el futuro.
Estamos de acuerdo con la movilidad. Este concepto se plantea como consecuencia de un proceso inflacionario que debemos reconocer; pero también debemos pensar si esta movilidad seguirá ligada, en el tiempo, con el aumento de las jubilaciones. Tal vez podríamos plantear la necesidad de establecer alguna renta excepcional que supla los aportes de la ANSES. Dejo planteada esta cuestión, porque creo que será uno de los temas a considerar en un futuro en el Congreso. Por ejemplo, sería bueno saber si esta medida quedará ligada a la movilidad jubilatoria o podrán considerarse otros índices más certeros que se relacionen con las necesidades de nuestros niños.
Reitero que este es un paso importante que ha dado el Congreso de la Nación, pero considero que en el futuro este lugar donde se logran los consensos deberá volver a considerarlo.
Como soy legislador de una de las provincias patagónicas quiero referirme a uno de los artículos de esta iniciativa que impulsa mayores beneficios según las zonas. En este sentido, el planteo de nuestro bloque merece ser reconsiderado. No debemos venir a discutir acá quiénes son los más pobres o dónde existe un costo de vida más elevado. El argumento esgrimido por los legisladores del NOA y del NEA forma parte de una realidad de la Argentina que también merece ser considerada. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. DEPETRI, EDGARDO FERNANDO (BUENOS AIRES): Señora presidenta: estamos tratando uno de los temas más importantes de política económica de nuestro gobierno y del país. Lo hacemos no porque pensemos que el destino de nuestros pibes sea solo la Asignación Universal por Hijo sino porque esta medida forma parte de una decisión mucho más importante y profunda de nuestro proyecto, que es la distribución de la riqueza nacional y el rol que debe tener el Estado en la comunidad.
La Asignación Universal por Hijo fue originalmente planteada por la Central de Trabajadores Argentinos –de la que fui y todavía soy parte, integrada por otros legisladores que hoy están en la oposición, el entonces gobernador de Santa Cruz, Néstor Kirchner, y Cristina, como legisladora. En ese momento planteábamos como tema central el porqué de la Asignación Universal por Hijo y de un seguro de capacitación y formación para los desocupados. Asimismo analizamos la necesidad de atender la demanda de los mayores, que quedaron expulsados del sistema previsional. Evidentemente, existía una decisión de los grupos económicos, los mismos que hicieron el golpe de 1976, condicionaron a Alfonsín, impusieron la economía de guerra, adelantaron la caída del gobierno de Alfonsín con la hiperinflación, se asociaron con el menemismo después, formaron parte del proceso de privatización, fueron funcionales y alentaron, bajo el gobierno de la Alianza, la rebaja de los salarios de los trabajadores estatales, y terminaron con la devaluación del duhaldismo. El eje central y modular de esa política económica fue la desocupación.
La desocupación fue el mal mayor que sufrieron la clase trabajadora y el pueblo argentino. Sobre los índices del 25 por ciento de desocupación estructural y del 54 por ciento de pobreza, sobre esos símbolos nefastos de esas décadas infames, se asentaba la subordinación del pueblo a una estructura clientelar y a un manejo del Estado nacional por parte de quienes solo pensaban en perpetuarse en el poder.
Los que en ese momento ejercían la conducción del Estado nacional lo hacían para favorecer desde allí la concentración de la riqueza, la extranjerización de la economía, la precarización del empleo y la pobreza estructural de la mayoría de nuestro pueblo.
Entonces, lo más importante es reivindicar a la Asignación Universal por Hijo en el camino de levantar nuevamente la creación de empleo como una cuestión central de nuestro pueblo. A partir de la generación de 5 millones de puestos de trabajo, de la discusión de los convenios colectivos de trabajo, de la recuperación del salario de los trabajadores y de la estatización del sistema previsional venimos a reivindicar la Asignación Universal por Hijo en una definición central de nuestro gobierno, tanto con Néstor como con Cristina, que consiste en poner al Estado argentino en defensa de los intereses de nuestro pueblo.
No podríamos concebir la posibilidad de estar discutiendo hoy el tema de la movilidad de la Asignación Universal por Hijo si no hubiéramos ganado la batalla principal que dieron el pueblo y el gobierno para tener un país en crecimiento y con empleo y dignidad. Como formamos parte de un proyecto que ha devuelto la dignidad al pueblo podemos sancionar una ley que va a ampliar los derechos y a permitir la continuidad de nuestro modelo.
Por supuesto que para garantizar la ley que se sanciona primero debemos votar el proyecto correspondiente y posteriormente militar y asegurar la posibilidad de que el próximo gobierno que maneje las decisiones del Estado siga profundizando esta política. En este sentido no tengo duda de que no daremos un paso atrás y de que seguiremos sosteniendo el proyecto que dio origen a la Asignación Universal por Hijo, la cual, con Cristina Fernández de Kirchner y con la ley que sancione este Parlamento, se incorporará definitivamente como un derecho para los pibes, las pibas y, sobre todo, el pueblo argentino. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Santiago del Estero.


SR.(JUÁREZ) Señora presidenta: venimos a acompañar este proyecto de ley que viene a institucionalizar el proceso de ampliación de derechos consagrados a lo largo de todos estos años, permitiendo la movilidad de las distintas asignaciones familiares.
Esta iniciativa otorga una cobertura integral de protección a los grupos familiares más vulnerables de nuestro país por estar dirigida a aquellas personas que se encuentran desempleadas o a las que, teniendo empleo, lo poseen de manera informal.
El proyecto que abarca las asignaciones Universal por Hijo y por Embarazo han venido dando resultados muy positivos para la población de nuestras provincias, especialmente las de menores oportunidades, al atacar de forma directa la inequidad y la pobreza, permitiendo paliar las dificultades que se presentan a los padres para poder brindar educación y servicios médicos a sus hijos.
Recordemos que desde el mes de abril del corriente año, con la Asignación Universal por Hijo, se ha otorgado la Ayuda Escolar Anual que la ANSES abona habitualmente por chicos cuyos padres son trabajadores formales y que ahora se extiende a los trabajadores no registrados.
Así, los padres de más de 2.600.000 niños, niñas y adolescentes de entre cuatro y dieciocho años de edad que tienen registrada escolaridad ante la ANSES reciben, además de la Asignación Universal por Hijo, la ayuda escolar en forma automática.
Del mismo modo ha tenido una muy beneficiosa injerencia la Asignación por Embarazo, al permitir reducir notablemente la mortalidad maternal, perinatal y neonatal.
Como bien dijo el diputado Feletti, hemos inaugurado una etapa nueva en derechos para la Argentina. Ahora se extiende este beneficio de movilidad en la retribución al otro extremo de la pirámide etaria y al otro punto de los sectores vulnerables –la niñez y la adolescencia- permitiendo también que los chicos puedan acceder a un ingreso más allá de la condición laboral de quien los tiene a su cargo.
Por ello la aplicación de esta política pública de verdadera justicia distributiva en la que el Estado asume el rol de protector de los sectores marginales de nuestro vasto territorio ha sido de favorable impacto. O sea que no solo mejoró el acceso a la salud y a la educación sino que ha modificado el desarrollo diario de quienes de este modo accedieron a la posibilidad de planificar la economía hogareña.
Es mi anhelo de cristiano que si bien algunos aportes bien intencionados expresados por algunos diputados no se tuvieron en cuenta ahora porque el objeto de la ley de referencia –valga la redundancia- está referida a la movilidad de las asignaciones, sean tenidos en cuenta en futuras discusiones para beneficio de nuestros hermanos más necesitados.
El sociólogo, economista y consultor Bernardo Kliksberg bien señala en su publicación que a cinco años de su inicio la Asignación Universal por Hijo logró un año más de escolaridad para esos niños que en un 40 por ciento son menores de cinco años y redujo la deserción, la repitencia y el abandono escolar, así como el mejor acceso a una dieta rica en proteínas y la optimización de los parámetros de talla, peso y altura.
Por todo lo expuesto, me congratula tener la oportunidad de acompañar el presente proyecto de ley. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por San Juan.


SR. CACERES, EDUARDO AUGUSTO (SAN JUAN): Señora presidenta: hemos escuchado con atención a todos los colegas y la verdad es que nos llama mucho la atención el hecho de que en el año número doce, ya cuando se están yendo y cuando se está cumpliendo un ciclo, se vengan a acordar de un reclamo que viene de una idea que tiene varios años. Esto es lo más importante.
Se trata de un tema que no hay que dejar de discutir en el debate no por el hecho en sí sino porque constituye un avance y algo positivo que mejora la situación en la cual estábamos, pero hay que debatirlo pensando en el rumbo del país que viene y teniendo en cuenta el futuro que queremos para él.
¿Cuáles van a ser los pilares básicos y fundamentales que van a sostener los próximos años y cuál será la manera de gobernar?
Hay cosas que ya han mencionado algunos señores diputados. Se ha hablado del financiamiento de la ANSES, que es algo muy importante, porque al día de hoy todavía tenemos jubilados que reciben una retribución muy baja. También sigue vigente ese gran reclamo eterno del 82 por ciento móvil.
Cabe preguntarse si al día de hoy siguen existiendo esas herramientas. No creo que la idea sea ajena a este modelo de gobierno que ha tenido la determinación de ir hacia ese sector.
También existe otro tema importante que no se puede dejar de mencionar, que es qué pasa con los chicos cuyos padres hacen un gran esfuerzo para llevarlos a una escuela privada, que muchas veces no quiere decir que tenga una gran cuota. Esos chicos hoy están excluidos de la Asignación Universal por Hijo. Quizás la vara debería haber sido en el nivel de ingresos exclusivamente y no por ciertas condiciones que excluyen a muchos chicos, que en toda la Argentina son más de 3 millones que quedan sin este beneficio.
Otro tema importante respecto de la actualización es que tenemos que ser conscientes de que con esta inflación no solamente enfocados estrictamente en los graves problemas que ella genera y que no podemos resolver, muchos chicos en nuestro país dejan de tomar varias cajas de leche.
Cuando nosotros caminamos y conversamos con la gente nos dicen que se sienten entrampados o enjaulados, y cuando les preguntamos por qué, dicen que sienten que el Estado no los ayuda a salir de la situación de pobreza, que está más preocupado en la administración de esa situación de pobreza, y no ven en forma clara y nítida una hoja de ruta para salir adelante, cumplir sus sueños, sus proyectos de vida, dar formación y estudios a sus hijos; en definitiva, tener una vida mejor.
Para poder tener esa movilidad social que brinda un buen empleo, un trabajo digno, debemos pensar en el empleo como fuente de todo desarrollo. Tampoco creo que con este proyecto se proteja el empleo de la mejor manera. Hay muchas empleadas domésticas que porque su pareja es monotributista o tiene un empleo prefieren rechazar un trabajo, porque el Estado las induce a hacerlo. En definitiva, estamos perdiendo la posibilidad de que más personas puedan estar registradas y con un empleo formalizado.
De manera que este no es un aporte para dignificar el empleo, bandera que de manera muy legítima y justa alzan muchísimos diputados en este recinto, lo cual es valorable, pero claramente este proyecto no va en esa dirección.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Señor diputado: por favor, redondee su discurso porque se agotó su tiempo.


SR. CACERES, EDUARDO AUGUSTO (SAN JUAN): La pregunta es hasta cuándo vamos a seguir sin rumbo, sin una brújula; hasta cuándo vamos a aguantar los argentinos no tener claro y nítido hacia dónde vamos para mejorar la calidad de vida, y no tener que conformarnos con que solamente un sector de la población reciba las dádivas de este gobierno. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por San Juan.


SRA. CASTRO, SANDRA DANIELA (SAN JUAN): Señora presidenta: el diputado preopinante es de mi misma provincia pero yo veo una realidad totalmente distinta. Para mí, la única verdad es la realidad.
Nosotros venimos caminando las calles y el país desde los años 40, reivindicando derechos a partir de leyes e incluso de una Constitución. No estamos caminando las calles a último momento.
Creo que hay diputados que tienen que releer la Constitución, porque los decretos de necesidad y urgencia pasan por la Comisión Bicameral Permanente y luego se tratan en el recinto, y lo que aquí se vota se convierte en ley. La Asignación Universal por Hijo es ley. Lo que el proyecto que hoy estamos tratando regula, institucionaliza y cristaliza para bien de los argentinos es la movilidad de todas las asignaciones familiares incluidas en la ley 24.714, es decir que habla de una integralidad y de una amplitud.
También hay que decir que este proyecto pone un piso, no un techo. Nunca una asignación será menor a lo que hoy es. Esto también es importante porque tiene que ver con algo que siempre decimos: no vamos a dar ni un paso menos.
De acuerdo con el proyecto de ley, el cálculo para la asignación estará a cargo de la Administración Nacional de la Seguridad Social. Como recordarán los señores diputados, este organismo no siempre estuvo presente; durante mucho tiempo en nuestro país no se supo qué pasaba con los fondos de los jubilados e incluso ni siquiera estaban en manos argentinas. Era una pérdida total y absoluta de soberanía.
En estos últimos años la ANSES dio probadas muestras del destino de las prestaciones sociales que brinda. Podemos ver, por ejemplo, cómo se han colmado las aulas de nuestras escuelas a partir de la Asignación Universal por Hijo y cómo se desarrolló una política en materia de salud dirigida a la protección de nuestra infancia y adolescencia. Estas no son expresiones declamatorias sino que hay acciones políticas concretas en las distintas áreas de gobierno.
Hace un rato, al escuchar algunos discursos, pensaba por qué aparecen siempre los planteos de esto o aquello y nunca los planteos de esto y aquello. Más temprano, en este recinto se habló sobre el empleo. Al respecto debo decir que también en este aspecto se desarrolló una política, ya que las amas de casa y las empleadas domésticas también tienen sus leyes.
La iniciativa que estamos considerando ratifica y está en sintonía con la norma que establece en los meses de marzo y septiembre la actualización de todas las prestaciones y servicios sociales.
Me parece muy correcto y oportuno que la mayoría de los sectores políticos apoyen este proyecto de ley, pero a la vez no entiendo algunos de sus cuestionamientos porque hay una política que es clara. Hay un rumbo que, repito, no comenzó en los últimos tiempos sino que viene de los años 40 y tuvo un impulso propicio para la realidad de la Argentina en estos doce años.
Este tipo de normas se encuentra en total sintonía con ese camino que a mí, como legisladora de San Juan, me lleva a votar favorablemente este proyecto de ley que dispone una actualización móvil para todas las asignaciones familiares.
Esta es la realidad de nuestro país y estamos totalmente confiados en que seguirá siendo la realidad de los próximos años. (Aplausos.)

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Misiones.


SR. PASTORI, LUIS MARIO (MISIONES): Señora presidenta: esta breve intervención tiene por objeto reafirmar en general la propuesta que suscribe en el dictamen de minoría el señor diputado Buryaile y reforzar en particular el reclamo, a esta altura bastante frecuente en el recinto, de dar al NOA y al NEA el mismo tratamiento que a la Patagonia en lo que se refiere al monto diferencial del 30 por ciento respecto del resto del país. A pesar de algunos discursos oficialistas, nadie está en contra de esta disposición; por el contrario, es una conquista que sin duda pertenece al pueblo más que a los legisladores o al propio gobierno, metido en una pelea mediática para ver quién fue el primero y quién se colgó después.
Nadie discute la legitimidad del monto diferencial para la Patagonia. Bienvenido sea, porque por supuesto bien merecido lo tiene. Sin embargo, con el mismo énfasis queremos decir que las provincias del Norte –Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja, Formosa, Chaco, Entre Ríos, Corrientes y Misiones, es decir, el NOA y el NEA tienen la misma legitimidad y el mismo derecho de ser tratadas como sus hermanas patagónicas. Apelo a los legisladores de las provincias del NOA y del NEA, que seguramente piensan lo mismo, para que acompañen esta propuesta.
Los motivos son los mayores índices de pobreza en el país. Sé que esto genera discusiones o rispideces entre quienes no quieren o no pueden admitir el crecimiento de los pobres en la Argentina y quienes despojados de toda otra connotación decimos honestamente que es una realidad que no se puede tapar.
Cualquier medición, sea la de la UCA, la de la Comisión Técnica de ATEINDEC y aun los índices no difundidos por el propio INDEC, porque el hecho de que no los publiquen no significa que no los conozcan-, da cuenta de que la pobreza ha aumentado en los últimos tres años y de que las regiones más severamente castigadas por este flagelo son justamente el NOA y el NEA. Aun los resultados más conservadores superan ocho veces la pobreza y cinco veces la indigencia respecto de lo que habría informado la intervención en el INDEC.
Los cuestionamientos a la difusión de estos índices no logran esconder el deterioro de las condiciones de vida de gran parte de la población. Su ocultamiento en todo caso impide el conocimiento de la población con carencias y lo más importante- que ésta pueda ejercer su legítimo derecho.
No se trata de estigmatizar la pobreza, señora presidenta, sino de conocerla. ¿Cuáles son los números del gobierno? No nos conformamos con admitir que no resultan creíbles. No resulta creíble decir que aumentó la pobreza porque disminuyó supuestamente el desempleo, según los índices de los mismos que niegan la medición de la pobreza y manipulan los datos estadísticos. No es creíble que el jefe de Gabinete y candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires diga, como lo hizo esta mañana, que la pobreza, la indigencia y el hambre se han extinguido en la Argentina porque la FAO lo dijo.
No hay estadísticas verdaderas y estadísticas falsas. El problema no está en la sustancialidad del dato sino en el procedimiento seguido en su elaboración. Por eso, no hay un solo dato para graficar que el costo de los bienes y servicios es mucho más alto en el NOA y en el NEA que en el resto del país. Por ejemplo, en la ciudad de Buenos Aires una familia gasta 160 pesos cada dos meses para la utilización del gas natural. Una familia en el NEA necesita utilizar seis garrafas en dos meses, que a un valor de 100 pesos cada una equivale a un costo de 600 pesos cada dos meses. De manera que una familia en el NEA gasta 600 pesos cada dos meses para tener gas, contra 60 pesos que gasta una familia en la ciudad de Buenos Aires. Estos datos son incontrastables. ¿Alguien los puede desmentir?
Por estas razones, señora presidenta, apoyamos el proyecto en general y solicitamos que se tenga en consideración la propuesta del dictamen de minoría del bloque de la Unión Cívica Radical.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Córdoba.


SR. AGUAD, OSCAR RAUL (CORDOBA): Señora presidenta: al igual que mi bloque, apoyo este programa de la Asignación Universal por Hijo más allá de cualquier coyuntura económica y social que vive el país. Si este programa fuera realmente universal, como debiera ser, sería muy importante y habría que mantenerlo aun en las mejores condiciones económicas, porque es un acto de estricta justicia. Pero quiero aprovechar esta oportunidad para hablar de los planes sociales y del momento que vive el país, como lo he hecho a lo largo de diez años en esta Cámara, reiterando una vez más que éste debe ser el debate del Congreso.
Allá por los años 70 se discutía el tema del desarrollo, el subdesarrollo y la teoría de la dependencia. En un debate público un grupo de intelectuales le planteó este tema a Frondizi, quien a mi juicio pronunció una metáfora que seguramente alguien más debe haber pronunciado antes que él. Dijo: “El problema no es que somos pobres porque somos dependientes, sino que somos dependientes porque somos pobres”.
Obviamente hoy el mundo ha cambiado: ningún país de la Tierra es independiente, hay una enorme interdependencia. Pero esto tiene que ver con la discusión de fondo, que es saber cuál es la causa de nuestro subdesarrollo, si responde a problemas endógenos o a nuestra frustración por no cambiar el sistema de producción del país.
La Argentina no produce el trabajo necesario anualmente para que la gente viva con dignidad. Consecuentemente, todos los años este Congreso aprueba un nuevo plan social. Sobre esa estructura productiva puede aplicarse algún sistema político. Nosotros creemos que el populismo no es el sistema adecuado para cambiar la estructura de producción del país porque al no respetar las instituciones tiene un problema enorme para generar sobre todo inversiones directas, tanto domésticas como extranjeras, que es lo que necesita un proceso de producción para crear puestos de trabajo en el país.
Los populismos definitivamente han demostrado su poca capacidad para transformar la matriz productiva de un país. Ese es el problema que no discutimos en este Congreso. Desgraciadamente pasaron los años y hay indicadores que demuestran que nuestra afirmación es veraz.
En la actualidad, con solamente medir la balanza comercial del país advertimos que la Argentina se primarizó desde 2001 hasta la fecha. Esto viene pasando desde el año 50. Cuando este gobierno tomó el timón del país, tenía una estructura de intercambio del 50 por ciento de manufacturas y 50 por ciento de productos primarios. Hoy el país tiene un 60 por ciento de productos primarios y un 40 por ciento de productos manufacturados.
Es decir, nos hemos vuelto a primarizar, con lo cual vamos a seguir teniendo que dictar un nuevo plan social por año. La cuestión es saber si los planes sociales sacan a la gente de la pobreza. No. ¿Los planes sociales cambian la estructura productiva del país? No. ¿Hay que dictar planes sociales? Y… con el 30 por ciento de pobreza todos los años hay que renovarlos y mejorarlos. ¿Cuándo vamos a dar este debate?
Lo que acabo de decir de la balanza comercial es una foto del país de hoy. El problema es que este gobierno deja una hipoteca al país, que es la falta de autoabastecimiento de gas y petróleo. Esta sí es una hipoteca. No nos animamos a discutir cuál es el valor estratégico de tener autoabastecimiento de gas y petróleo. Esto nos hace dependientes.
Tengo muy poco tiempo y solamente resta esto para demostrar nuestra torpeza, del país, no del peronismo gobernando. El peronismo fue el partido del trabajo. Aumentamos un 30 por ciento la Asignación Universal por Hijo en la Patagonia, la región más rica del país. Los que viven en la Patagonia están sentados sobre una bomba de gas y petróleo. La torpeza es no haber convertido esos recursos en riqueza. Esto demuestra el atraso del país.
Ese 30 por ciento nos demuestra que ese no es el camino. Ese 30 por ciento de incremento en la zona más rica del país nos demuestra por qué la Argentina sigue retrocediendo. No somos capaces de afrontar el debate que la hora requiere: cuál es la estructura productiva que el país necesita para generar 400 mil puestos de trabajo por año. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Santiago del Estero.


SR. OLIVA, CRISTIAN RODOLFO (SANTIAGO DEL ESTERO): Señora presidenta: en primer lugar voy a pedir autorización para insertar parte de mi discurso en el Diario de Sesiones.
Hago mías las palabras y los conceptos que han vertido los diferentes diputados de mi bloque, que ya han adelantado nuestra posición en sentido favorable a esta iniciativa, que desde ya celebramos. Es una iniciativa remitida por el Poder Ejecutivo nacional que tiende a establecer la movilidad de las asignaciones universales, tal como está explicitado en el mensaje de elevación. De lo que se trata es de dar certeza y de evitar la depreciación y la pérdida del poder adquisitivo de los ingresos de los beneficiarios. En definitiva, se persigue la idea de que todo esto no esté sujeto a la discrecionalidad del gobernante de turno.
Celebramos esta iniciativa y también que en esta sesión exista más consenso que en otras oportunidades, porque estamos hablando de un tema sensible para nuestro país.
Debemos decir que estas medidas no han sido obra de la casualidad, desde el momento en que fueron puestas en vigencia en nuestro país siempre ha existido un Estado presente, fuerte y sólido. Se ha tratado de enmendar o reparar la ausencia de un Estado en un período prolongado de nuestro país, cuando un sector importante de nuestra sociedad se vio acorralado frente a situaciones de vulnerabilidad por ese Estado ausente.
Ojalá haya menos argentinos que necesiten de este tipo de medidas, pero en tanto y en cuanto haya un argentino en situación de vulnerabilidad en cualquier parte del país, existirá un Estado presente y sólido para atender sus necesidades. Es nuestra concepción.
Luego de algunos años de la puesta en vigencia de esta iniciativa podemos hacer evaluaciones. No quiero ser reiterativo, pero voy a manifestar que todas las evaluaciones han sido positivas, inclusive la de los organismos internacionales en cuanto a los beneficios obtenidos. Han sido mensurados como altamente positivos para desterrar la pobreza, la indigencia y la falta de contención social en muchos sectores de nuestra sociedad.
A lo largo de nuestra historia varias veces hemos sido tentados a cambiar diametralmente de posiciones de la noche a la mañana. Hemos adoptado posiciones pendulares en cuestiones sensibles como la que ahora estamos tratando. Hemos ido de un extremo a otro.
Ojalá que el próximo presidente tenga la idea de que políticas como estas no solo deben cuidarse sino que también tienen que fortalecerse día a día. Hay que nutrirlas de la asistencia financiera necesaria para que todo argentino que precise del Estado pueda contar con la ayuda necesaria y oportuna.
Como cuento con poco tiempo debo decir que medidas de este tipo que tienden a preservar a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad –los niños, los jóvenes y los ancianos no deben ser consideradas como un gasto, como muchas veces acontece en la Argentina. También debemos aumentar los niveles de inversión en educación porque será un beneficio para nuestro país. Ojalá internalicemos el concepto de que estamos ante medidas que deben ser consideradas como una inversión. Esto lo podemos hacer quienes pensamos en una Nación grande que progrese cada día. Debemos ayudar a nuestros hermanos y alcanzar los objetivos que nos hemos propuesto. Por ello, estas medidas deben ser sostenidas siempre.
En función de lo expuesto, adelanto el acompañamiento de nuestro bloque.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Chubut.


SR. PAIS, JUAN MARIO (CHUBUT): Señora presidenta: mi intervención en principio apunta a reforzar un tema que algunos legisladores preopinantes de mi bancada han tratado de explicar, que es el adicional por zona que el proyecto que estamos tratando prevé para la asignación universal para la niñez y por embarazo.
Creo que han sido erróneas –seguramente por cuestiones de concepto- las críticas recibidas desde diversos bloques de la oposición. Han malinterpretado el concepto del adicional por zona y también la necesidad y la razón misma de ese coeficiente que, por otra parte, ya existe tanto en las asignaciones familiares en general –hay cuatro zonas con coeficiente 1, 2, 3 y 4- como en los salarios, tanto del sector público como del privado.
Decir que se discrimina al resto del país o a determinada zona porque la Patagonia tiene este beneficio que, como ya hemos dicho, creemos que es mínimo; incluso debería ser superior- es cuanto menos un agravio para los patagónicos y también para el resto de los argentinos.
Desde el sector público nacional, en la administración de los últimos treinta años de los gobiernos de Alfonsín, Menem, De la Rúa, Néstor Kirchner y Cristina, en las negociaciones colectivas del sector público siempre se reconoció el adicional por zona para la Patagonia. Asimismo, desde el sector privado, todas las cámaras empresarias –que incluso en algunos casos dan discursos muy favorables a las posturas de la oposición- siempre reconocieron para los trabajadores patagónicos un adicional por zona. Por su parte, los sectores sindicales también lo han reconocido.
Ese coeficiente por zona no es una compensación por el mayor rigor climático, por la falta de producción o porque estemos sentados sobre una bomba de gas y petróleo, como dijo el señor diputado Aguad. Ese reconocimiento constituye exclusivamente una igualación con el resto del país. Si no existiera el adicional por zona, los verdaderos discriminados –como hasta ahora- serían los beneficiarios patagónicos porque en esa región el costo de vida es superior. Entonces, si todos están contestes y nadie puede negar que el costo de vida en la Patagonia es superior que en el resto del país, el hecho de tener una asignación universal igual en términos monetarios implica que el patagónico adquiera menos bienes y servicios. Y si adquiere menos bienes y servicios, en términos reales, de la finalidad de la asignación universal, tiene un beneficio inferior.
Así que lo que está haciendo el gobierno es igualar e incluir. Eso es lo que no se admite cuando se lo critica en términos poco valiosos. No se discrimina; al contrario, el gobierno está igualando e incluyendo. La discriminación consiste en la falta de reconocimiento de una zona. Por eso vamos progresando.
Por su parte, este coeficiente por zona va a comenzar a regir en forma inmediata, a partir de la entrada en vigencia de esta ley. No hay que esperar al mes de marzo del año próximo.
El sistema de asignaciones familiares nació desde el sector sindical y el sector privado. Inclusive, en forma tripartita, el propio Estado junto con las cámaras empresarias y el sector de las organizaciones gremiales implementó las cajas de asignaciones familiares, buscando brindar una cobertura para las contingencias sociales. Este gobierno, este proyecto político, ha dado un paso más: ha incluido a aquellos que no estaban en el sector formal del trabajo. Aquí se dijo que quedaban excluidos de la asignación universal los sectores del salario mínimo, vital y móvil. Sin embargo, aun los que perciben salarios inferiores –porque tienen media jornada- están incluidos en el régimen general y reciben la otra asignación familiar. ¿De qué exclusión hablan? Seguramente no conocen el sistema de las asignaciones familiares porque han dicho cosas muy erróneas que incluso tienden nada más que a desacreditar esta legislación, que es positiva. Es decir, dicen que la quieren votar pero también la critican, o sea, palo porque bogas y palo porque no bogas. Es realmente una oposición maniquea y una postura que tiende a desacreditar una gestión y una norma absolutamente virtuosa.
Por otra parte, también se ha dicho que se discrimina a quienes perciben la asignación universal porque no tienen el reconocimiento de la ayuda escolar anual. Esta ayuda también la perciben quienes reciben la asignación por embarazo.
Evidentemente existe un grave desconocimiento por parte de quienes critican desde la oposición. Creo que no se han informado adecuadamente porque esta será una ley virtuosa. Por lo visto, después de que nos pegan palos porque bogamos, porque remamos y porque avanzamos, nos dicen que van a votar favorablemente tanto en general como en particular. En buena hora que lo hagan, pero en mala hora que critiquen esta medida de legislación nacional tan positiva. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. RAIMUNDI, CARLOS (BUENOS AIRES): Señora presidenta: no voy a hacer uso de la palabra. Simplemente pido autorización para insertar mi discurso en el Diario de Sesiones.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. RECALDE, HECTOR PEDRO (BUENOS AIRES): Señora presidenta: inevitablemente este debate es un déjà vu de la discusión que tuvimos cuando analizamos el proyecto de ley de movilidad jubilatoria allá por septiembre de 2008.
Como generalmente al oficialismo lo acusan de ser la escribanía de la Casa de Gobierno, quiero aprovechar para rendir homenaje a esos profesionales. Creo que es injusto recurrir a ellos como un modo de descalificación. Lo digo porque los escribanos –aquí tenemos algunos- realizan tareas que son muy importantes para la seguridad jurídica, como por ejemplo dar fe de ciertos actos. Ahora, si dicen que somos la escribanía de la Casa de Gobierno porque damos fe de las convicciones y de la militancia, bienvenido sea el elogio, pero –repito- si lo hacen para descalificarnos, creo que ese no es el ejemplo más adecuado.
Sin duda resulta conveniente recordar la discusión que tuvimos en aquel momento, que fue muy intensa. El debate giró en torno a los alcances de una fórmula matemática que era muy difícil de entender para quienes apenas habíamos sorteado algunos exámenes de aritmética y de matemática tanto en el colegio secundario como en la facultad. Es más, recuerdo que cuando se trató ese tema en comisión hubo dos diputados –uno un experto economista y la otra una legisladora con grandes conocimientos sobre los temas vinculados a la previsión social- que cuestionaron la metodología de la fórmula. Incluso llegaron a señalar que para el primer año esa fórmula iba a arrojar un ajuste del 3,8 por ciento.
Frente a ese planteo, dado que –como dije- no domino esa ciencia –soy un mero abogado laboralista-, me surgieron algunas dudas y me puse a estudiar el tema con la ayuda de mis asesores para tratar de discernir cuál podía ser el resultado de la aplicación de esa fórmula. En este sentido, aprovecho para honrar a esos colaboradores, que fueron los que me desasnaron en este tema. Uno de ellos fue Manuel Álvarez Agis, actual viceministro de Economía, y el otro Pablo Ceriani, que hoy es el gerente general de Aerolíneas Argentinas. El resultado de los cálculos que ellos hicieron arrojó que en el primer semestre –no en todo el año- el ajuste rondaría entre el 11 y el 12 por ciento, y en el año sería del 20 por ciento. Lo cierto es que en ese primer semestre la actualización fue del 11,59 por ciento. Quiere decir que la evaluación que ellos hicieron fue casi certera.
Luego se plantearon otras dudas, como por ejemplo si era conveniente aplicar el índice del INDEC o el RIPTE. Sobre este punto también tenían ciertos temores los representantes del movimiento obrero; tanto la CGT como la CTA confiaban más en el RIPTE. Hubo una intensa discusión y producto del debate que tuvimos internamente en el bloque nosotros discutimos hacia adentro, sin exportar nuestras diferencias- se modificó la fórmula. Lo trascendente es que frente a la posición del movimiento obrero propusimos que la fórmula se integrara con ambos conceptos y que en cada semestre se aplicara el índice que resultara más favorable para los jubilados.
Sinceramente nosotros pensábamos que el RIPTE iba a resultar el índice más favorable, pero lo cierto es que en todos los semestres se ajustó en base al índice del INDEC y no al RIPTE, porque este último daba un porcentaje de aumento inferior al primero.
Además, tengo que admitir que en este recinto la presidenta de la Nación esbozó una crítica por las dudas que yo había planteado en aquel entonces. Si bien eso es cierto, también deja en claro las posibilidades que tenemos los integrantes de este bloque de dar un debate interno con absoluta libertad, porque en lo que no vacilamos es en las convicciones. Podemos analizar, vacilar sobre las metodologías y los tiempos, pero nunca dudamos del rumbo hacia la igualdad y la justicia social que se emprendió en mayo de 2003 con nuestro inolvidable Néstor Kirchner.
Quiero finalizar diciendo que en ese momento votamos sin solidaridad, en soledad. Lo digo con dolor, porque muchos diputados y diputadas de la oposición que votaron en contra son compañeros que estaban convencidos de que iban a votar a favor. No voy a hacer nombres porque son muchos y no quiero que después planteen cuestiones de privilegio. De todas maneras, bienvenidos sean. La compañera Evita decía: “Bienvenidos los rezagados”.
Me alegra que hoy voten la misma fórmula que cuestionaron en aquel entonces, pero no he escuchado ningún cuestionamiento a la fórmula. También me hubiera gustado que dijeran que teníamos razón.
Asimismo quiero rendir un homenaje a la presidenta de la Nación, quien más firme que nosotros en sus convicciones apostó a seguir con la fórmula que había elegido el proyecto del Poder Ejecutivo, que dio un excelente resultado para los jubilados y ahora también lo dará para todos los beneficiarios de la asignación universal por hijo o por embarazo.
No quiero hacer ningún comentario sobre lo que algunos dijeron respecto de los embarazos ni sobre las canaletas que podría producir el pago de la Asignación Universal por Hijo. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por La Rioja.


SR. OLIVARES, HECTOR ENRIQUE (LA RIOJA): Señora presidenta: junto con mi colega de bancada Julio Martínez hemos presentado un proyecto sobre régimen universal de ingreso social materno infantil, que nos hubiera gustado que hubiese sido tratado en conjunto con este para lograr un mejor resultado. En él proponemos que esta asignación universal por hijo represente un 25 por ciento del haber mínimo garantizado por el Sistema Integrado Previsional Argentino. Esto mejoraría el nivel de esta asignación.
Aunque no hemos logrado que se tratara esa iniciativa, vamos a apoyar este proyecto, tal como han expresado los diputados de mi bloque que me han precedido en el uso de la palabra.
Quiero hacer una acotación con respecto a que se va a otorgar un diferencial del 30 por ciento a una zona que sabemos sufre por las distancias y las condiciones climáticas: la Patagonia. Sin embargo, hay otra zona que nuestro bloque ha querido incorporar y que esperamos que el bloque mayoritario tenga en cuenta. Me refiero al NOA y el NEA.
El señor diputado Ricardo Buryaile en su alocución pidió que en la zona del NOA se incluya a La Rioja porque allí tenemos una situación muy particular.
Quiero que la Cámara escuche el mensaje del gobernador de mi provincia con respecto a la cantidad de pobres que hay en La Rioja.

- El señor diputado Olivares acerca un teléfono celular al micrófono y reproduce una grabación.

SR. OLIVARES, HECTOR ENRIQUE (LA RIOJA): Queremos que en este diferencial de zona se incluya a La Rioja ya que, tal como ha reconocido el gobernador de mi provincia, el 80 por ciento de los riojanos son pobres, y muchos de ellos están resignados a esta asignación.
Nosotros queremos cambiar esa realidad, que los riojanos también tengan la oportunidad de tener un mejor ingreso; que tengan la posibilidad de un trabajo digno, un mejor salario, y puedan salir de esto, que consideramos es valedero como una situación particular pero no tiene que ser tomado como una situación permanente para cada una de las familias.
Por eso, queremos que el bloque mayoritario incorpore esta sugerencia, que incluye a la zona del NOA. Si bien es cierto que no tenemos las mismas diferencias, somos una provincia en la que las cuestiones climáticas y las distancias siempre nos han castigado. Merecemos ser tratados en forma igualitaria. Queremos que no exista más un 80 o 90 por ciento de pobres en la provincia, como lo ha reconocido su gobernador.
Por estas razones, solicitamos que se incluya a la provincia de La Rioja, en el marco de la región del NOA, en el goce de los mismos beneficios que se plantean para la Patagonia. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SR. LARROQUE, ANDRES (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: como tantas veces lo hemos hecho a lo largo de estos años, quiero destacar que hoy es un día histórico, porque estamos considerando un proyecto de ley que nos llena de alegría. Sin embargo, es conveniente analizarlo dentro de un contexto y recordar de qué país venimos.
Escuchamos al comienzo de la sesión al señor miembro informante, diputado Feletti, señalar que la Argentina viene de doce años de desocupación el período más extenso, si mal no recuerdo, y las secuelas que ello trajo aparejado para nuestro país.
Esta norma que se vincula con el hecho de potenciar un derecho consagrado por nuestra presidenta, me hace pensar en algo que hasta no hace muchos años era considerado una utopía. Digo esto porque el ex presidente Néstor Kirchner, la propia presidenta, diputados de este bloque e incluso opositores, participaron de aquello que fue el Frente Nacional contra la Pobreza. Recuerden que allá por diciembre de 2001 se realizó una consulta popular que obtuvo más de 3.000.000 de votos para alentar la creación de un fondo familiar. En aquel momento gobernaba de la Rúa y el ministro de Economía era Cavallo. Recorríamos los barrios y podíamos ver los afiches con la palabra “Sí”; la gente popularmente la había denominado “La consulta del Sí”. Sin embargo, los ciudadanos advertían esta situación con cierta candidez e inocencia, porque decían que un gobierno como ese no podía plantear ese tipo de medidas. La voluntad de la militancia era generar conciencia y que se expresara en la lucha del pueblo.
Recuerdo que en ese gobierno había una ministra de Trabajo, que suele sentarse por aquí. Ella es consecuente, sigue sosteniendo aquellas ideas y quiere llevarnos hacia aquel pasado neoliberal. Si bien cambia de partido, sostiene las mismas ideas y responde al mismo patrón.
Volviendo a lo que significaron aquellas jornadas, la consulta obtuvo más de 3.000.000 de votos, y la gente nos pedía salir a la calle, apoyando un salario familiar y brindando así una respuesta a la comunidad. Esto derivó en las jornadas del 19 y 20 de diciembre, y en un país que estalló por los aires. Tuvo que venir Néstor Kirchner a recomponer el país y ponernos nuevamente de cara a nuestro pueblo y a nuestra historia.
Néstor sacó al país del infierno y fue nuestra presidenta quien construyó una política de justicia social sin precedentes ni parangón a lo largo y a lo ancho del planeta. Me refiero a esta presidenta que ha sido reconocida en todo el mundo y que, casualmente, surgió en otro contexto muy significativo. En el año 2008, a partir de la recuperación de los fondos de los trabajadores en manos de las AFJP, pudo comenzar a pensarse en la implementación de la Asignación Universal por Hijo. Cuando se caía Lehman Brothers y en el mundo se profundizaban las políticas de ajuste y neoliberales, a partir de la decisión política de un proyecto nacional y popular y de un modelo de inclusión, nosotros -si se quiere, aislados o por suerte a contramano del mundo- pudimos generar una medida de inclusión y dignidad que hoy es reconocida por el mundo entero.
Como dijeron otros señores diputados, luego de la Asignación Universal por Hijo se establecieron la Asignación por Embarazo y todas las medidas complementarias, como por ejemplo, el plan Progresar. A esto debemos agregar la universalización del sistema previsional argentino, que brinda una cobertura que por supuesto para nosotros no debe tener un techo.
Nosotros trabajamos para que en nuestro país se siga construyendo más y más justicia social. Hoy se ha hablado mucho de la pobreza, la que nosotros veíamos cuando íbamos a los barrios en la década del 90. Muchos de los que están hoy presentes en ese momento estaban en el gobierno. Íbamos a dar clases de apoyo escolar y los pibes se desmayaban en sus pupitres. Eso era pobreza.
Ahora hay un Estado presente que es reparador. Seguiremos trabajando para que cada día haya más justicia social, integración y desarrollo. En todo caso, si hay cosas para corregir, siempre vamos a estar abiertos al debate. Pero no nos vengan a comparar la Argentina de hoy con la de los años 90 porque en ese momento nosotros, a diferencia de los que en ese entonces eran gobierno, estábamos en los barrios. Tampoco estaba “Clarín” para contar lo que pasaba; por el contrario, nos decía que todo estaba bárbaro.
Por lo tanto, que no nos vengan con el cuento de la pobreza porque nosotros sabemos muy bien de qué se trata. Me remito al Frente Nacional contra la Pobreza, que con toda dignidad, con Néstor Kirchner y con Cristina Fernández de Kirchner como humildes partícipes, sembraba su grito para comenzar a cambiar la Argentina. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.


SRA. GARCIA, ANDREA FABIANA (BUENOS AIRES): Señora presidenta: el proyecto de actualización de las asignaciones familiares tiene aristas muy significativas en el entramado virtuoso de desarrollo, inclusión, calidad de vida, trabajo, consumo y mercado interno vigente en la Argentina de hoy.
Además resalta el grado de soberanía política porque en este mismo recinto se debatieron otros proyectos de ley que se elaboraron en otros mercados y en centros económico-financieros, pero con el objetivo de precarizar, achicar el Estado y amedrentar al pueblo.
También es la consolidación de un sistema de protección social universal que viene a configurarse en la Argentina más justa que hemos podido construir, habiendo disminuido las brechas de desigualdad social.
Esto no es un relato ni un índice, sino algo que dice la propia CEPAL cuando destaca la suba del salario mínimo y la política de transferencia de ingresos como elementos principales de la reducción de la desigualdad en la Argentina.
En ese sentido debe mencionarse la existencia de más de un 95 por ciento de cobertura previsional, la movilidad jubilatoria, la universalización de la asignación familiar y la ley de movilidad. Todos estos logros constituyen un sistema de protección social universal que evidentemente deviene de una concepción política que reconoce a los derechos sociales como presupuesto y precondición para el efectivo ejercicio de la libertad.
La Asignación Universal por Hijo debe entenderse como un derecho que permite profundizar el proceso de construcción de ciudadanía, en contraposición a aquellos que la piensan con un sentido compensatorio, en un imaginario social que excluye cualquier consideración acerca de la amplitud de los derechos ciudadanos que traspasan la categoría de trabajador.
Esas consideraciones por parte de los que evalúan esto con un sentido compensatorio despegan al Estado como garante de igualdad y trasladan la responsabilidad a las familias por vía del trabajo. Solamente asocian los derechos con el trabajo mercantilizado, y tratan de denostar otras obtenciones de ingresos, como la política de transferencia que lleva adelante nuestro gobierno para distribuir la riqueza.
La Asignación Universal por Hijo es un derecho que promueve la construcción del sentido sobre la propia vida cotidiana y el futuro de ascenso social de quienes la perciben. Esto puede observarse en los pibes de la Argentina que han decidido estudiar o formarse. Pero la verdadera transformación que este proyecto de ley consolida es el aporte a la construcción de un nuevo sujeto histórico. El peronismo lo hizo en el 45 con los trabajadores, y en la edad de los derechos esta política social que ha planificado nuestra presidenta no tiene nada que ver con la semántica de los grupos dominantes que promueven ampliar el espacio a la sociedad civil solo para restringir el Estado. No tiene nada que ver con una simple suma de alternativas en los sectores económicos, sociales y políticos, como podemos ver en las ofertas electorales de hoy, porque exige a cualquier estrategia concertadora lo que no tienen: coherencia.
Esta transformación no está administrada por el Banco Mundial. Esta transformación y este nuevo sujeto social que construimos tienen que ver con una nueva mirada sobre lo que significa el verdadero desarrollo y la manera de medir sus criterios desbaratando índices capciosos que no buscan resolver la vida de los argentinos sino destruir los gobiernos.
Este nuevo sujeto social que construimos con nuestra política social constituye la instalación de una ética que no es la de la imposición dogmática. Es una ética democrática que iguala, que convoca a todos. Exige la creación y la aplicación de políticas con principios de universalidad, de igualdad y de no discriminación que sean progresivas -y no regresivas- y absolutamente respetuosas de los contenidos mínimos de derecho.
Este proyecto de ley que hoy venimos a aprobar no es ni un mandato moral ni una justificación política o económica. Tampoco está impuesto por un tratado internacional; se trata del reconocimiento de la patria a todos sus hijos y a la inexorable tarea humanista de un gobierno peronista.
Consolidamos una política social que nos permita seguir construyendo esta utopía, que es colectiva, para que la Argentina sea cada vez más justa. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Salta.


SR. KOSINER, PABLO FRANCISCO JUAN (SALTA): Señora presidenta: voy a hacer un pequeño ejercicio intentando separar los argumentos vinculados al oficialismo y a la oposición. De lo contrario, parece que nosotros nos aferramos a estadísticas que no existen o que inventamos. Se trata de buscar referencias más objetivas sobre lo que significa la política de asignaciones por parte de nuestro gobierno, porque también se escuchan cuestiones relativas a por qué el INDEC no anuncia estadísticas, pero cuando lo hace, no le creen. Entonces, es muy difícil entender ese razonamiento.
La Argentina ha recibido durante 2014 y los primeros dos meses de 2015 un total de cuarenta y dos reconocimientos internacionales de parte de organismos como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, y también de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, de la Organización de Estados Iberoamericanos, de la Organización Internacional del Trabajo, de la Organización Mundial de la Salud, las Naciones Unidas y de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, además del Fondo Monetario Internacional, por si existe algún sector que no le cree a estas organizaciones ya que son muy sociales y adscriben a teorías del mercado. En ese caso, también está el Fondo Monetario Internacional, que ha reconocido a la Argentina en cuanto a sus políticas sociales, políticas generadoras de empleo y políticas de desarrollo.
Quiero hacer mención a algunas cuestiones que se plantean dentro de esos reconocimientos. Por ejemplo, la Organización de Naciones Unidas plantea claramente que la Argentina ha podido reducir el 22 por ciento de la pobreza y el 42 por ciento de la pobreza extrema y que ha podido entrar dentro de los países de desarrollo humano muy avanzado. Leo textualmente: “Desde el año 2003 la Argentina avanza paso a paso hacia la concreción de la justicia social a través del establecimiento de un sistema de seguridad social que alcance a todos los sectores y que permita dejar atrás las condiciones de exclusión social que subyacen a la pobreza estructural”. Más adelante dice así: “De los 45 países que se encontraban en desarrollo humano medio en 1990, solamente tres Argentina, Croacia y Arabia Saudita pasaron a muy alto”. Lo mismo dice la Organización Internacional del Trabajo.
Hay un dato muy significativo que tiene que ver con lo que se dijo acá en cuanto a que estas políticas de planes sociales no sacan a la gente de la pobreza. La OIT en mayo del año pasado puso de relieve la asignación universal por hijo como la segunda política social a nivel global en términos de transferencias en relación con el PBI y aseguró que esta asignación ha reducido en forma notable la extrema pobreza y no ha impactado en la reducción de la fuerza de trabajo.
Es mentira que las políticas sociales de nuestro proyecto político no han reducido la pobreza. Es mentira que estos planes sociales –como les gusta decir a algunos fascistas alimentan vagos. Esto es mentira y ha sido reconocido categóricamente por este tipo de organizaciones. (Aplausos.)
El Banco Mundial dijo lo siguiente: “La Argentina priorizó un desarrollo económico con inclusión social”. He aquí la respuesta a por qué el Frente para la Victoria va a ganar las próximas elecciones. Vayan entendiendo, vayan comprendiendo que cuando hay un proyecto político que es reconocido como una política de desarrollo económico con inclusión social y penetra en los sectores más necesitados del acompañamiento del Estado para salir de posiciones de desprotección, de letargo permanente, de exclusión, entra tan fuerte en el reconocimiento del pueblo que ese pueblo sale a salvar ese proyecto político de recuperación del Estado.
A pesar de ello, el candidato a presidente Sanz dice que al momento que se implementó el programa de asignación universal los datos marcan que lo que se venía gastando en juego y en droga ha tenido un crecimiento.
Por su parte, el excandidato Miguel del Sel, del PRO, ha dicho: “Lo que se anuncia como una buena medida se ve que nadie estudia las consecuencias. ¿Qué preferís? ¿Que una piba ignorante se embarace para cobrar una platita todos los meses y ni siquiera se dé cuenta que le están arruinando la vida?”
A pesar de todo esto, algunos peronistas nos hacemos cargo.
Chiche Duhalde, que no representa a nuestro proyecto político, dijo: “Aunque parezca mentira, niñas de 12 o 13 años se embarazan para cobrar un plan social”.
El ministro de Educación del PRO, Esteban Bullrich, en una conferencia de prensa en Isidro Casanova, La Matanza, definió la asignación universal como “una política del fracaso”.
Eso es lo que está planteando ese modelo político de la Alianza fracasada en la Argentina respecto de estas políticas sociales que han sacado a millones y millones de argentinos de la exclusión.
Por eso, señora presidenta, estamos seguros de que el pueblo tiene un destino de crecimiento y de grandeza en materia de políticas de inclusión social. Por ello este es el proyecto político que va a seguir gobernando la Argentina desde el 10 de diciembre. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) La Presidencia informa que restan dos oradores y que luego se dará comienzo a los cierres.
Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. ALFONSIN, RICARDO LUIS (BUENOS AIRES): Señora presidenta: he escuchado con atención las diferentes exposiciones. Una de las últimas tuvo un tono y una mirada muy críticos –que comparto respecto de la década del noventa; pero me parece que cuando el orador señaló con el dedo a la bancada opositora, haciéndola responsable por lo ocurrido durante aquellos años, también debió dirigirse hacia la propia bancada oficialista.
Al igual que el señor diputado Recalde no doy nombres, pero desde luego que podría hacerlo. Muchos de los que integran la bancada oficialista discutían conmigo defendiendo fervorosamente las políticas implementadas durante la década del noventa. No fuimos nosotros quienes acompañamos la privatización de YPF, la privatización de Ferrocarriles Argentinos, la privatización de Gas del Estado y la privatización de la seguridad social. No fuimos nosotros quienes abrimos la economía de manera indiscriminada. Entonces, pido que hagan un mea culpa. Comprendo que cualquiera se puede equivocar y no atribuyo malas intenciones. Alguien dijo que las intenciones no hay que juzgarlas; no lo hago, porque probablemente creían que estaban haciendo algo bueno. Quizás estaban demasiado influenciados por la prédica neoliberal y conservadora que comenzó a extenderse por el mundo a principios de la década del ochenta.
Por eso pido un poquito más de humildad, señora presidenta, porque los principales responsables de la década del noventa iban colgados de la boleta de Menem. Muchos están en el Congreso, sentados en estas bancas. ¡Ven la paja en el ojo ajeno y no advierten la viga en el propio!
El candidato presidencial del Frente para la Victoria, el señor Scioli, era uno de los defensores más fervorosos de la década del noventa. ¿Acaso no lo recuerdan? ¿No le dicen nada? Yo nunca afirmé que el presidente Menem fue el mejor presidente de los argentinos desde la década del cincuenta; nunca dije semejante cosa. He cometido muchos errores, pero ese no.


SRA. DI TULLIO, JULIANA (BUENOS AIRES): ¡Pero ahora se fue con Macri, señor diputado!


SR. ALFONSIN, RICARDO LUIS (BUENOS AIRES): ¡No sea irrespetuosa, señora diputada! Cuando le corresponda hablar, puede contestarme.
A mi querido amigo Recalde también quiero decirle lo siguiente. Se habló de rezagados. Me parece importante recordar que bastantes años antes de que lo reconociera el oficialismo, nosotros reclamábamos que se creara el ingreso universal a la niñez y que frente a nuestros reclamos, la ministra de Desarrollo Social, la señora Alicia Kirchner, decía que eso era demagogia y asistencialismo porque lo que había que hacer era generar empleo. Es decir que ustedes, los oficialistas, llegaron atrás; estaban rezagados.
Algunos diputados afirmaron que este proyecto de ley respeta sus propias convicciones. ¡Entonces han cambiado, porque hace cuatro años que reclamamos la sanción de una norma de este tipo! Ahora tienen la convicción, pero hace cuatro años pensaban otra cosa.
En realidad, no era mi intención hablar de estas cuestiones; como se va agotando el término del que dispongo para hacer uso de la palabra, no quiero dejar de recordar que aquí se ha dicho que el oficialismo es desde 2003 un ejemplo de transformación social sin precedentes en la Argentina. No podemos dejar pasar por alto esta afirmación que no se ajusta a la realidad. No digo que no se ha hecho nada sino simplemente que no se hizo todo. Se podría haber hecho muchísimo más en el plano social; por ejemplo en educación, en salud, en transporte público, en seguridad, en trabajo para combatir el empleo en negro y también respecto del sistema tributario. Muchísimo más se podría haber hecho en estos aspectos que son muy sensibles desde el punto de vista de la justicia social. Y en estas cosas el desempeño del gobierno ha sido literalmente mediocre: o no hemos progresado o hemos retrocedido. Lamentablemente no tengo tiempo para demostrar lo que acabo de decir porque los minutos son muy pocos para debatir sobre los aspectos sociales de esta gestión.
Acompañamos esto que en definitiva venimos reclamando desde hace muchísimo tiempo más allá de las observaciones que podíamos hacer, que estaban inspiradas en la idea de extender este beneficio a todos aquellos que tienen derecho a ser titulares del mismo. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.


SR. RIVAS, JORGE (BUENOS AIRES): Señora presidenta: el proyecto de ley que estamos tratando, que ya obtuvo sanción en el Senado y que fuera enviado oportunamente por el Poder Ejecutivo, debe ser inscripto en el proceso de ampliación de derechos y de inclusión social que nuestro país vive desde el 25 de mayo de 2003. Lo que pretende es que las asignaciones familiares, la asignación universal por hijo y la asignación por embarazo se actualicen automáticamente dos veces al año, como ya ocurre con las jubilaciones y pensiones.
Como todos sabemos, la asignación universal por hijo es un seguro social que nuestro Estado nacional garantiza a las personas que no tienen trabajo y a las que trabajan de manera informal, o que perciben un sueldo inferior al salario mínimo, vital y móvil. Se otorga por cada hijo menor de 18 años, por hijo discapacitado sin límite de edad, y a partir de mayo de 2011 se complementó con la asignación universal por embarazo que reciben las futuras madres a partir de las doce semanas de gestación.
Es bueno destacar que para cobrar el ciento por ciento de la asignación por hijo es necesario que la madre acredite, si el beneficiario es menor de cuatro años, el cumplimiento de la totalidad de los controles sanitarios y del plan obligatorio de vacunación. Y cuando es mayor de 5 años, además de los controles sanitarios y del plan de vacunación obligatorio, también deberá acreditar la concurrencia regular a un establecimiento educativo público.
De esa manera se ha logrado mejorar los indicadores de salud en los niños beneficiarios de la asignación, así como también aumentar la matrícula escolar, mejorando la asistencia y disminuyendo la deserción escolar. La actualización automática de los montos de las asignaciones no puede más que consolidar estos avances.
Por mi parte, señora presidenta, quiero felicitar al Ejecutivo por enviar esta iniciativa en tiempos electorales, lo que me parece muy inteligente como táctica para obtener una sanción casi unánime. Y digo esto último porque en tiempos electorales las fuerzas políticas reaccionarias tratan de mimetizarse con las fuerzas políticas populares para simular una sensibilidad de la que carecen y obtener de esta manera algún voto más entre los sectores sociales más vulnerables.
Que el bloque al que pertenezco vaya a votar a favor del proyecto que estamos tratando no puede sorprender a nadie, ya que nuestro pueblo pobre ha sido el destinatario de la mayoría de las leyes que hemos sancionado. Lo que sí sorprende, y por otra parte demuestra que el tiempo político elegido para enviarnos el proyecto ha sido un acierto, es el hecho de que hoy nos acompañen determinados bloques parlamentarios. Me refiero a los que hasta hace poco nos decían, por medio de sus principales dirigentes, cosas tales como: “Los recursos de la asignación universal por hijo se van por la canaleta del juego y de la droga”. O, sobre las asignaciones por embarazo: “¿Qué querés, que una piba ignorante se embarace para cobrar una platita todos los meses y ni siquiera se dé cuenta de que le están arruinando la vida?”
No hace falta ser cientista político para interpretar que el acompañamiento que hoy recibimos de la centro derecha parlamentaria sólo se debe a una cuestión de puro cálculo electoral, un cálculo que la lleva a disfrazarse de lo que no es.
Tenemos claro que los problemas sociales no se resuelven con políticas asistenciales, sino con políticas económicas, pero también tenemos claro que en el mientras tanto el Estado debe estar presente para auxiliar transitoriamente a los sectores sociales más vulnerables.
Por último, la Argentina ha recibido el reconocimiento, tanto de UNESCO como de UNICEF, por el avance en la protección de la niñez y por el incremento de la escolaridad, gracias al impacto social positivo que produce la aplicación de estos planes.
Por estas razones, sin ningún cálculo electoral y por pura convicción ideológica, adelanto mi voto afirmativo en el convencimiento de que con la sanción de este proyecto de ley estamos avanzando en la universalización de la seguridad social para nuestro pueblo, y de que es por ese camino que nos seguimos acercando a una sociedad más inclusiva, más igualitaria y más solidaria. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Vamos a comenzar con los cierres.
Tiene la palabra el señor diputado por Córdoba, que comparte su tiempo de siete minutos con la señora diputada Patricia Bullrich.


SR. BALDASSI, HECTOR (CORDOBA): Señora presidenta: voy a tratar de ser breve para dejarle más tiempo a Patricia. La Asignación Universal por Hijo es sin duda uno de los logros más importantes y significativos de la democracia, porque tiene que ver, fundamentalmente, con la igualdad de oportunidades que tiene que garantizar un Estado a cada compatriota, viva donde viva o venga de donde venga. No se trata de una prebenda ni de una dádiva, sino de una asistencia del Estado y una expresión de solidaridad de millones de contribuyentes.
Valoro infinitamente a quienes batallaron por este tema hasta que el Poder Ejecutivo lo hiciera propio y decidiera convertirlo en ley. Este beneficio de la AUH, como cada uno de los ingresos fijos que perciben los jubilados y los trabajadores, es víctima también de ese depredador de la economía que es la inflación, y que el gobierno no reconoce.
Vamos a acompañar este proyecto que viene con sanción del Senado, y consideramos de estricta justicia que sea la misma ley la que garantice la movilidad ascendente de este beneficio, que por supuesto por ser universal no debe depender de la decisión de ningún funcionario de turno.
Me causa mucha satisfacción, mucha alegría poder coincidir con el Poder Ejecutivo ya que he venido a la política porque considero que debe haber consenso. Tenemos que decir la verdad: no conocemos los índices de pobreza y de desempleo; muchas veces el gobierno ha decidido no calcularlos, y si lo ha hecho no los ha dado a conocer.
Por eso digo que ésta es también una buena oportunidad para reclamar al gobierno que nos diga cuántos argentinos viven por debajo de la línea de pobreza en nuestro país.
El Estado debe ayudar a que la gente salga de la situación de emergencia que genera la falta de ingresos para satisfacer las necesidades básicas de los individuos. Cuando los programas –con excepción de éste que hoy estamos tratando se convierten en permanentes y no posibilitan que los argentinos se inserten en un contexto laboral y educativo, nos hacen correr el riesgo de que vivamos en la pobreza y no podamos salir de ellos.
Este proyecto que establece la Asignación Universal por Hijo y su actualización semestral, viene a saldar una deuda que este Congreso tenía con todos los beneficiarios del sistema desde el mismo momento de su implementación.
No coincido con algunas declaraciones que oí en el sentido de que se trata de una ampliación de derechos. Considero que se busca corregir una falencia en la aplicación de la norma.
Nuestro bloque va a acompañar la sanción de este proyecto de ley, sabiendo que existen recursos suficientes para paliar los problemas de las familias argentinas que hoy padecen algún problema. Estamos convencidos de que cada paso que demos para optimizar mecanismos y evitar resoluciones coyunturales será una contribución para un mejor funcionamiento del Estado.


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SRA. BULLRICH, PATRICIA (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señora presidenta: cuando en la década del 80 comienza a desestructurarse el estado de bienestar y el mundo fordista de la empresa, empieza a discutirse la asignación universal en el mundo.
Un gran teórico francés llamado Rosanvallon manifestó que nacía una nueva necesidad vinculada con la sociedad de la inserción.
Hasta ese momento la inserción estaba ligada totalmente al empleo. Entonces comenzaba en la Argentina en la década del 90 el debate por un ingreso ciudadano al desplomarse el empleo, en primer lugar como consecuencia de los baches de dejaron las privatizaciones.
Primero llegaron los planes sociales y luego la asignación universal, que aún no es universal. Por eso como tengo poco tiempo, para finalizar mi exposición quiero plantear el compromiso de nuestro bloque y del próximo gobierno de la República Argentina, si la gente nos acompaña con su voto.
En primer lugar, este contexto electoral nos invita a que las fuerzas políticas consensuemos. Por suerte, el próximo Parlamento estará integrado por corrientes políticas que van a tener que sentarse a discutir. Por ello, nuestro compromiso consiste en que todo lo que se haga será en el marco del Congreso de la Nación.
El segundo punto que queremos plantear es que deseamos que todo esto se transforme en un derecho y no en una manipulación de determinadas formas de acción política.
Creemos que la Asignación Universal por Hijo está ligada a una nueva forma de concebir la política: sin feudalismos y sin manipulación.
Pensamos que la asignación es un derecho de los ciudadanos y no un monopolio de ningún ciudadano. Creemos fundamental que se sancione este mecanismo, porque desde hace mucho tiempo ya hemos escrito que era necesario adoptar una variable para tener un mecanismo objetivo para las asignaciones universales.
Nos comprometemos a que este imperativo moral que implica que las familias tengan un ingreso monetario, además sea acompañado por una política integral que tenga que ver con la educación, con la vivienda, con una mejora integral en la calidad de vida de los ciudadanos y con el desarrollo.
Nos comprometemos ante la sociedad argentina a buscar la forma de profundizar en el Parlamento el sentido universal de esta asignación para que sea un derecho y nunca más se pueda manipular políticamente. (Aplausos en las bancas.)

SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra el señor diputado por Córdoba.


SR. NEGRI, MARIO RAUL (CORDOBA): Señora presidenta: voy a procurar no ser reiterativo de lo que se ha dicho a lo largo de la tarde y también intentaré tener mucho cuidado...


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Disculpe, señor diputado. Pido a los señores diputados que por favor guarden silencio y que quienes están de pie vayan ocupando sus respectivas bancas.
Continúa en el uso de la palabra el señor diputado por Córdoba.


SR. NEGRI, MARIO RAUL (CORDOBA): Señora presidenta: decía que procuraré tener cuidado de no caer en discusiones de coyuntura en estos pocos minutos.
En primer lugar, quiero expresar que vamos a acompañar en general el proyecto que ha enviado el Poder Ejecutivo. Asimismo, no nos es ajena la asignatura pendiente que se venía a resolver en la sociedad argentina.
Tenemos diferencias, que son un aporte propositivo sobre el proyecto. Algunas de ellas fueron tomadas en cuenta por la iniciativa en consideración. Se trata de recriminaciones nuestras al momento en que fue creada por decreto la asignación universal, que no es universal en su totalidad.
En todo este tiempo ha sido difícil separar del tema de la pobreza el debate de la asignación universal como un avance de las asignaciones familiares, que a lo largo de los años se fueron incorporando en la política de seguridad social. En algún momento deberíamos hacer un esfuerzo para lograr hacer esa separación, aunque en el fondo la política social no esté escindida.
Creo que hasta el día de hoy ha existido una confusión entre quienes creen que la asignación universal es la clave que puede resolver la pobreza y los que creemos que aunque hubiese un mínimo de pobreza debería haber Asignación Universal por Hijo. La historia lo ha indicado así. La asignación familiar en estado evolutivo para llegar a una asignación universal es el reconocimiento cualitativo de la primera responsabilidad del Estado como piso de igualdad al que nace, no al padre. Se trata de un reconocimiento como el que significó la escuela pública en la etapa de movilidad social o como lo fue el guardapolvo blanco, que no distinguía entre ricos y pobres.
Como bien decía Ruskin en 1870, el primer deber del Estado es que todo niño que nace debe estar alimentado, vestido y educado para alcanzar la mayoría de edad.
No me quiero detener históricamente en el avance de los países europeos. Todos lo conocen. Me refiero a Francia, Bélgica y Austria. Por supuesto que si saltáramos en el tiempo, en 1996, con la ley 24.714, la Argentina recoge el régimen de asignaciones familiares que hoy conocemos, que tenía un primer déficit que debía corregirse y que todos reconocimos. Abarcaba a los trabajadores que se desempeñaban en la economía formal pero quedaban afuera los informales. Es decir que con la misma cantidad de hijos y con los mismos derechos, el Estado no podía darles esa base de igualdad mínima. Esta situación debía ser corregida.
También quedaban afuera muchos sectores vulnerables. Ya en los noventa empezó el runrún de los reclamos en la política por avanzar en este piso de universalidad, en el reconocimiento del derecho de la asignación familiar. Desde nuestro partido muchos lo hicieron.
En este punto quiero expresar un reconocimiento: hay que dejar de lado la pijotería y el vuelo bajo. Digo esto porque en los últimos años hemos discutido para ver quién le arrebataba un proyecto a otro. Lo cierto es que cuando se registra un avance hay que reconocerlo; esto es algo que a nadie le tendría que costar. Al respecto, recordemos que las primeras preocupaciones que se plantearon en un proyecto legislativo fueron las de las diputadas Carrió y Carca. Ellas merecen nuestro reconocimiento y sin duda hubiese sido un buen gesto que la presidenta de la Nación lo tuviera en cuenta cuando firmó el decreto. Luego vinieron Aldo Neri e Isuani a profundizar la discusión.
Cuando se avanza en el reconocimiento de un derecho social sobre la base de la igualdad y cuando ese derecho va a ser legislado para los tiempos con carácter universal, hay que dejar de lado esas cosas para no incorporarlo al capital político personal y reconocerlo como un avance de la sociedad. Esto no puede ser sólo un reconocimiento a quien ejerce la administración del Estado momentáneamente.
Por ello, en nombre de los integrantes de este bloque y de todos los ciudadanos quiero expresar mi reconocimiento a quien corresponda, sin importar su color partidario. Así deberíamos actuar siempre en política.
Adelanto que vamos a acompañar esta propuesta en general, porque ya han quedado en claro cuáles son nuestras objeciones. En este sentido, dijimos que la actualización no debía ser semestral sino trimestral; se incorporó el reconocimiento del plus para los habitantes de la zona sur, pero también lo pedimos para los ciudadanos de la zona noreste y noroeste de nuestro país y señalamos que debían eliminarse las limitantes que obstruyen el carácter universal. Estas son las objeciones más importantes que planteamos.
Estamos a favor de que se sancione una ley de movilidad para todas las asignaciones familiares. Por supuesto que también coincidimos con el aumento del 30 por ciento. Pero les recuerdo que el gobierno ha hecho mención al plan Progresar y, sin embargo, no lo incorporó dentro del sistema de movilidad. Este ha sido un grave error. Es una asignatura pendiente; lo tendrían que haber incorporado más aun teniendo en cuenta que lo mencionaron como una preocupación.
En la actualidad 570 mil jóvenes de entre 18 y 24 años reciben el plan Progresar. De ahí la necesidad de estipular la movilidad para esa asignación. La verdad es que no entendemos la razón por la cual no lo hicieron.
Por otra parte, voy hacer una breve reflexión. Como dije en mi exposición no tendría que vincularse en el debate la asignación universal con la pobreza. Es cierto que esto podría ayudar, pero el debate tendría que encararse desde otra óptica, es decir, sobre las causas y las alternativas para resolverla. Obviamente que no podemos imaginar que con la universalidad del reconocimiento –que no se hace- vamos a encontrar la solución a la pobreza. Esto está vinculado con un problema mucho más estructural que tiene que ver con el modelo de desarrollo y de equidad social vigente en nuestro país.
Sin duda tenemos un problema, porque no nos podemos poner de acuerdo sobre si hay muchos o pocos pobres en la Argentina. Lo cierto es que hay pobres, pero el gobierno ha señalado a través de Aníbal Fernández que los informes de la UCA son mentirosos. En este sentido, recordemos que son informes que se hacen desde hace una década y que hasta hace cinco años, cuando crecía la economía, esos informes -que ahora son desconocidos- eran aplaudidos.
Como dije, no nos podemos poner de acuerdo. Aníbal cree –seguramente también lo piensa el gobierno- que en Alemania hay más pobres que en la Argentina, pero nadie lo puede verificar. El problema es que no nos podemos poner de acuerdo porque el Estado es el principal responsable a la hora de construir la base estadística y de muestreo que pueda registrar a lo largo y a lo ancho del país la retracción social, la desocupación, la caída de los ingresos, la deserción escolar.
Desde 2013 no tenemos cifras por parte del Estado. Entonces debemos discutir sobre la base de los informes de la UCA y la lengua de Aníbal Fernández, en vez de hacerlo sobre estadísticas que el Estado debe dar como base de credibilidad cierta para poder proyectarse en el futuro. Desde 2007 no tenemos una información certera de lo que pasa. Por eso se mezclan ambas cuestiones. Por eso no podemos obviar ni salir de la pobreza.
El gobierno tiene un error conceptual. No universaliza porque dice que a algunos no les hace falta. Si uno no universaliza como concepción del primer acto de responsabilidad del Estado, lo que está haciendo es un subsidio, no una universalización del derecho. Hay un error conceptual, un prejuicio ideológico, como si esto tuviese que ver con la plata. Tiene que ver con la responsabilidad del punto inicial de partida que el Estado le asegura a una sociedad con mayor o menor evolución.
¿Quién dictamina dónde estamos hoy o hacia dónde debemos ir? Está claro que si nos quedamos en la etapa de discutir la pobreza, no vamos a terminar nunca. Nosotros no nos ponemos de acuerdo pero los pobres aumentan. ¿Había más pobres? Había más pobres. ¿Hay menos pobres? No, volvió a aumentar la pobreza en la Argentina.
Esta debería ser una noche importante en el reconocimiento del avance de un derecho colectivo de la sociedad, así como en su momento lo fueron las asignaciones familiares, así como se fueron ampliando cada una de ellas, así como fuimos en la búsqueda de una asignación universal que las sintetizara y englobara a todas, que pudiese marcar en todos los tiempos, sin importar quién gobierna, el desprejuicio de poder utilizar un instrumento que es un derecho que viene de una responsabilidad colectiva del Estado para ninguno de los que gobierna. Sin embargo, algunos pretenden discutir si son dueños de una porción del esfuerzo y del dinero de la sociedad para discrecionalmente repartírsela entre unos y otros.
Fíjense qué retroceso: estamos festejando que puedan ir al banco a sacar con una tarjeta y que no le den en la mano la asignación universal, cuando debería ser un derecho colectivo que marque el avance social de las políticas de una Argentina que fue pionera en los años 40 y 50, que reculó en los 90 y que ahora a medias tintas las usa para hacer política y no para reconocer el derecho colectivo de todos. (Aplausos.)


SRA. PRESIDENTA(ABDALA DE MATARAZZO) Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.


SRA. DI TULLIO, JULIANA (BUENOS AIRES): Señora presidenta: como decía el señor diputado Larroque, para nosotros y los bloques aliados que formamos una fuerza política que hace doce años transforma la Argentina, hoy es un día histórico.
Me siento muy orgullosa de ser parte de este colectivo de hombres y mujeres, muchos de ellos muy jóvenes de este Parlamento y de este bloque.
A lo largo de estas horas he escuchado con la certeza de que claramente hemos podido resumir, aunque sea en cinco minutos, lo que cada uno de nuestros compañeros pensaba sobre este tema tan caro e importante para nosotros y para nuestro verdadero sentir, pensar y actuar en coherencia y con armonía. Esto es lo que venimos haciendo hace doce años.
Me llama un poco la atención lo siguiente. Pensé que durante esta jornada tal vez habría algunas diferencias o disidencias, pero lo cierto es que existe una verdadera diferencia de fondo. Lo que acaba de señalar el señor diputado que me ha precedido en el uso de la palabra, concluyendo su alocución, refleja en realidad un concepto filosófico que nos diferencia enormemente. Me refiero a un concepto de país que evidentemente se traza cada vez que se gobierna. Aquí todos los bloques políticos han gobernado.
Me gustó mucho la forma en que el señor diputado Feletti hizo su intervención como miembro informante, presentando la sanción que viene en revisión del Honorable Senado y que envió la presidenta de la República al Parlamento nacional, les guste o no.
Comparto lo que el señor diputado señaló en el sentido de que en estos doce años hemos transformado al país por medio de un proyecto político, y en ese momento me hice una pregunta, al igual que muchos compañeros de mi bancada. Si en estos doce años no hubiéramos sido gobierno, ¿habría existido la Asignación Universal por Hijo o la asignación por embarazo? Ciertamente que no.
Luego de haber escuchado durante tantas horas la alocución de algunos diputados, realmente no sé por qué votarán esta iniciativa. Dijeron que la acompañarían en general y en particular, pero no termino de entender por qué van a acompañarla. Digo esto porque evidentemente han demostrado tener diferencias sustanciales y centrales con el proyecto de ley que tenemos en consideración y que estamos a punto de votar. Me interesa enmarcar esta iniciativa, como lo hizo el señor diputado Feletti y también muchos otros de mi bancada, motivo por el cual me siento orgullosa.


- Ocupa la Presidencia el presidente de la Honorable Cámara, doctor Julián Andrés Domínguez.

SRA. DI TULLIO, JULIANA (BUENOS AIRES): Esta iniciativa fue presentada por la presidenta de la República por cadena nacional. Sí, por cadena nacional, les joda o no. Recuerdo que en el momento de hacer el anuncio corrigió a la locutora que dijo que la presidenta de la República iba a hacer un anuncio. La presidenta la corrigió señalando que no solo realizaría un anuncio muy importante sino que además iba a destacar las obras que se habían inaugurado y que no son anunciadas por cadena nacional, pero que consideraba necesario hacerlo para conocimiento del pueblo argentino, ya que al día siguiente no salían publicadas en las tapas de los diarios. Esto lo mencionó una diputada del bloque del Frente Cívico por Santiago y yo quiero recordarlo.
Lo primero que mencionó la señora presidenta de la Nación fue el acuerdo de reparación histórica que habían firmado Néstor Kirchner y el entonces gobernador Zamora. Enumeró las obras estratégicas, centrales y medulares para la provincia de Santiago del Estero por un monto superior a 1.180 millones de pesos. Una de ellas, la del Acueducto del Oeste, estaba prometida desde 1928; así lo recordó la propia gobernadora.
Otras obras que pueden mencionarse son las correspondientes al anillado eléctrico de 500 kilovatios de la ciudad de Santiago del Estero, a la pavimentación de la ruta nacional en el tramo Río Hondo-Amicha, por 46 millones de pesos y a la pavimentación de las rutas provinciales números 16 y 17. Todo esto fue en Santiago del Estero.
También debe mencionarse la inauguración de la empresa de productos fitosanitarios Tecnomyl, en Río Grande, por 24 millones de dólares.
En Córdoba, donde está un compañero nuestro, el “Pipi” Francioni, se inauguró, con una inversión de 300 millones de pesos, la estación de servicio más grande de la República Argentina, con una superficie de 16.800 metros cuadrados. Cien millones de pesos fueron aportados por YPF. Asimismo hay cincuenta empleados. Se trata de un pueblito del que fue intendente “Pipi” Francioni.
También anunció que a tres años del lanzamiento del Plan Procrear la provincia de Buenos Aires iba a ceder más de 1.228 terrenos y que hoy hay 170 mil construcciones, habiéndose entregado 95 mil.
También anunció créditos para pymes, del Fogapyme y del Fondyf, desde 2009 hasta hoy, por 500 millones de pesos.
Asimismo se entregaron vehículos al INTI y fondos para Parques Nacionales de San Juan, del Chaco, de Mendoza, de La Rioja y de las ciudades de Goya y de Corrientes, en la provincia del mismo nombre.
Por otra parte debe señalarse que antes había ochenta parques industriales y hoy hay más de cuatrocientos.
Este es el país del que habla la señora presidenta de la Nación. Por supuesto que lo que hizo después fue presentar el proyecto que iba a enviar a este Parlamento. Para ello lo enmarcó en el modelo de país que desde hace doce años viene transformando la Argentina.
En 2009 se estableció la Asignación Universal por Hijo y en 2011 la Asignación por Embarazo.
En 2012 se hizo lo propio con el ingreso del grupo familiar.
En 2013 se reconocieron los derechos del personal de casas particulares.
También se reconoció a la mujer como titular preferente, a pedido de una senadora por San Luis.
Por otra parte se extendió la ayuda escolar anual a los trabajadores informales. ¿Por qué siguen diciendo que no la cobran? ¿Lo hacen por desinformación o a propósito?
El impacto de la Asignación Universal por Hijo se tradujo en una mayor escolaridad. Con un compañero, el señor diputado Kunkel, recordamos cosas que son cotidianas. Cuando en 2009 se estableció en nuestro país la Asignación Universal por Hijo en el mes de marzo no se hicieron más colas en los municipios para retirar guardapolvos. Ello fue así porque las madres pasaron a comprarlos con dicha asignación. (Aplausos en las bancas y en las galerías.)
También debe mencionarse que casi se ha alcanzado el ciento por ciento del cumplimiento de los controles de salud destinados a niños, niñas, adolescentes y embarazadas. Una gran parte de los ingresos se destinan a hacer más saludable la alimentación. Además esto contribuye fuertemente a lograr la inserción social.
Estas son las diferencias que nosotros tenemos y que parece que son insalvables.
Se empodera a la mujer porque es ella la que en su mayoría cobra esta Asignación Universal por Hijo, como así también las asignaciones familiares.
Además, se rompe con la reproducción de la pobreza. Esto es algo que reconocen todos los organismos del mundo menos la oposición de este país. Se trata de un tema respecto del cual se estudia y se escriben libros en el mundo.
En ese momento la señora presidenta de la Nación también mostró el libro que escribió Bernardo Kliksberg acera de esta fenomenal experiencia que desde 2009 atraviesa el pueblo argentino en su conjunto. Este proyecto de ley propone la movilidad de las asignaciones familiares y de las asignaciones por hijo e incrementa el valor de las asignaciones familiares y de la asignación por embarazo y crea la asignación para los residentes de la Patagonia. ¡Cómo les cuesta pensar en un país federal entero, che! ¡De Norte a Sur! ¡Cómo les cuesta! Todavía tienen discursos mitristas metidos internamente. Les cuesta. Hay que recorrer la Argentina, y no sólo cuando se está haciendo campaña. Hay que recorrer el país. (Aplausos.)
En cuanto a las asignaciones familiares y la asignación por hijo, que todavía algunos discuten, quiero decir que mi compañero Recalde fue el único que dijo que se había equivocado cuando propuso la fórmula de RIPTE. Se equivocaron todos pero él fue el único en reconocerlo. Lo votaron en soledad y se equivocaron todos, y siguen insistiendo en el índice que a la asignación familiar le dio el 566 por ciento de aumento. Mídanlo como quieran. Mídanlo con la inflación que quieran, e incluso con la paparruchada que hicieron ayer en el Congreso. Mídanlo como quieran, pero es superior a la inflación. Es infinitamente superior.
Si la jubilación mínima la hubiéramos calculado con el RIPTE hubiera sido de 198,55. Si lo hubiéramos hecho en base al fallo “Badaro”, 2.699,62, pero hoy es de 3.821,73. No lo van a reconocer, pero se equivocaron.
¿Por qué quiero remarcar que estos doce años son centrales para implementar una medida como esta? Si Néstor Kirchner no hubiera asumido ese 25 de mayo de 2003 no hubiéramos hecho la primera reestructuración de la deuda, que representa la quita más fenomenal de la deuda. Si Cristina no hubiera sido presidenta en 2007 no hubiéramos hecho el segundo canje de la deuda. A nadie se le había ocurrido. Nos habían gobernado todos pero a nadie se le había ocurrido hacerlo, nos hundían cada vez más. Tomaban cada vez más deuda y endeudaban cada vez más al país para pagar los servicios de la deuda. Nadie se había atrevido a hacer esto.
Entonces, esta es la diferencia central. Es el proyecto de país que nosotros encaramos y que vamos a seguir encarando, por supuesto. Pero además, si Cristina no hubiera ganado la reelección en el 2011 con el casi 55 por ciento de los votos del pueblo argentino, le hubieran pagado a los buitres, y no se hubiera reestatizado el sistema jubilatorio.
Cristina profundizó lo que Néstor Kirchner comenzó, y también lo hicimos en soledad. No escuché ni a un solo diputado o diputada que dijera: “Me equivoqué”. No escuché a ninguno. Es posible hacer esto porque reestatizamos el sistema de jubilaciones y pensiones, y lo hicimos en soledad. Reestatizamos también YPF, Aerolíneas Argentinas, AYSA y los ferrocarriles, y si no hubiéramos logrado estos casi seis millones de puestos de trabajo con paritarias libres tampoco podríamos estar hablando de que esta asignación es correcta para el universo correcto y para quien corresponda. Es universal. No sé cómo quieren dibujarla, pero es universal.
Tampoco se hubiese jubilado casi el 98 por ciento de las personas en condiciones de hacerlo. En este recinto se votó irresponsablemente una ley relativa al 82 por ciento móvil hace varios años, y por suerte la presidenta la vetó. Hoy estamos en el 81 por ciento. ¿Por qué? Porque lo podemos pagar. Si no hubieran sido Néstor y Cristina, que fueron los conductores de este proyecto político durante doce años, ¿quién hubiera impulsado los aumentos de las jubilaciones? Hoy estamos haciendo una modificación para incluir las asignaciones universales, que también votamos en soledad. Son ciertamente modelos diferentes de país, señor presidente.
Dejen de decir que el DNU no es una ley. Queda feo entre nosotros decir eso. Tiene fuerza de ley. Lo pueden decir en la tele, pero acá no lo digan, por favor. Tiene fuerza de ley.
Siguen diciendo, además, señor presidente, que no hay que pagarlo desde la ANSES. Los escuché hoy decirlo. ¿Por qué lo votan, entonces? Explíquenme. Si no hay que pagarlo desde la ANSES, ¿por qué lo van a votar? Póngase de acuerdo.
Además, pagamos tantas cosas con la ANSES, todos esos maravillosos programas que nosotros tenemos, que no solo son las asignaciones familiares, sino también la Asignación Universal por Hijo, Progresar, programa Argenta, Procrear, Conectar Igualdad, esos programas que cada vez que votamos el presupuesto ustedes dicen que son horribles, y siguen hablando de clientelismo. Lo hicieron en 2009, ni bien la presidenta mandó el DNU al Congreso, y lo acaban de decir, lo siguen diciendo. Es una vergüenza que lo digan.
También alguna diputada y algún diputado pidieron que se discuta la eliminación del impuesto a las ganancias. Lo explicó bien el diputado Feletti: acá hay dos variables, y la presión tributaria también está dentro de esas variables. Entonces, ¿cómo lo van a pagar? ¿Van a emitir, maquinita, inflación? ¿Cómo lo van a pagar?

- Varios señores diputados hablan a la vez.

SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Silencio, por favor.


SRA. DI TULLIO, JULIANA (BUENOS AIRES): ¿Cómo van a recaudar?

- Varios señores diputados hablan a la vez.

SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Silencio, por favor.


SRA. DI TULLIO, JULIANA (BUENOS AIRES): Cuando se habla de pobreza –y con esto voy a terminar, no es casual que cada vez que la presidenta presenta un aumento de las jubilaciones, un aumento a la Asignación Universal por Hijo, un aumento a las asignaciones familiares, al día siguiente en las tapas de Clarín y La Nación aparece algún dato sobre pobreza. Dieciocho tapas, señor presidente, no se las voy a mostrar. Si tienen ganas, búsquenla y van a ver lo que les estoy diciendo.
En el día de hoy, a propósito de la discusión de la Asignación Universal por Hijo y su movilidad, amanecimos también con las cifras de la UCA. Por supuesto yo tampoco le creo a la UCA. No solo no le creo porque no se sabe de dónde saca esas variables, sino porque nadie en este país puede decir que tenemos los mismos índices de pobreza que en los 90. No sean ridículos, no se puede repetir. No se puede ni siquiera repetir. Traten de no decirlo.
Pero además, si no nos creen a nosotros, vayan a la página del BID, que le da la mitad de la pobreza que le da a la UCA, o a la de la CEPAL, que le da menos de la mitad que a la UCA.
Hay un solo dato que la UCA no pone: el único lugar de la Argentina donde la mortalidad infantil aumentó es en Capital Federal. Eso sí que lo evita poner. Ese dato no lo pone, y no lo pone porque tiene intereses.
Acá se han mencionado muchas frases y evaluaciones espantosas que se han tenido desde el 2009 hasta hoy sobre la Asignación Universal por Hijo. Una diputada rubia, muy rubia, dijo el día que la presidenta envió el DNU a este Parlamento que se había cerrado un pacto con lo peor del sindicalismo, que le estábamos entregando a Moyano también los trabajadores informales. Habrá cambiado de opinión, espero.
Señor presidente: lo que hace la presidenta es comprender el mundo. Eso es lo que hace: interpreta y comprende el mundo, el mundo que ustedes no entienden. El mundo habla bien de nosotros, menos ustedes. (Aplausos.) Interpreta y se fija cuáles son las mejores soluciones. Además, lo que genera son soluciones para los problemas que tenemos, pero en función de los intereses del país.
Ayer, la señora presidenta dijo que no puede haber nada más importante que la patria y que sin patria no hay futuro. También afirmó que el “Círculo Rojo”, que los legisladores de la oposición deben conocer bastante bien seguramente algunos de ellos forman parte de él, no perdonarán las transformaciones que hizo su gobierno: inclusión social, desendeudamiento, independencia, soberanía, proyecto económico y cultural, y mucho menos la patria recuperada.
Asimismo, la señora presidenta de la República Argentina nos recordó a todos que la historia no se escribe en los diarios ni en los expedientes, sino en el corazón y la memoria de los pueblos. Es en ese lugar donde a nosotros nos gusta estar. (Aplausos en las bancas y en las galerías.)


SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Se va a votar en forma nominal el dictamen de mayoría de la Comisión de Presupuesto y Hacienda recaído en el proyecto de ley venido en revisión sobre movilidad de las asignaciones familiares y de la asignación universal por hijo, conforme a la ley 26.417. (Orden del Día N° 2.171)

- Se practica la votación nominal2015/133OE04_01_R04.pdf.

- Conforme al tablero electrónico, sobre 232 señores diputados presentes, 231 han votado por la afirmativa.

SR.(SECRETARIO (CHEDRESE)) Han votado por la afirmativa 231 señores diputados. No se han registrado votos negativos. (Aplausos y manifestaciones en las bancas y en las galerías.)

aquí votación nominal

SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) En consideración en particular el artículo 1°.
Tiene la palabra el señor diputado por Formosa.


SR. BURYAILE, RICARDO (FORMOSA): Señor presidente: dado que hemos suscripto un dictamen de minoría y es nuestra intención sugerir modificaciones, quisiera que el señor miembro informante nos diga si aceptarán cambios.


SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


SR. FELETTI, ROBERTO JOSE (CIUDAD DE BUENOS AIRES): Señor presidente: el bloque oficialista no aceptará modificaciones.


SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Tiene la palabra el señor diputado por Formosa.


SR. BURYAILE, RICARDO (FORMOSA): Señor presidente: en tal caso, dejamos constancia de que hemos presentado un dictamen de minoría y de que también en particular acompañaremos con nuestro voto el proyecto de ley, considerando las disidencias planteadas.


SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Tiene la palabra el señor diputado por Córdoba.


SR. SCHIARETTI, JUAN (CORDOBA): Señor presidente: al igual que el señor diputado preopinante, dejo constancia de las disidencias en particular.


SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Se va a votar.

- Resulta afirmativa.

- Sin observaciones, se votan y aprueban los artículos 2° a 7°.

- El artículo 8° es de forma.

SR. PRESIDENTE(DOMÍNGUEZ) Queda definitivamente sancionado el proyecto de ley. La movilidad de las asignaciones familiares y de la Asignación Universal por Hijo se ha convertido en ley.
Se comunicará al Poder Ejecutivo y se dará aviso al Honorable Senado. (Manifestaciones y aplausos en las bancas y en las galerías.)



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