INTERESES MARITIMOS, FLUVIALES, PESQUEROS Y PORTUARIOS
Comisión PermanenteOf. Administrativa: Piso P02 Oficina 219
Jefe SR. RODRIGUEZ JUAN MANUEL
Martes 17.30hs
Of. Administrativa: (054-11) 6075-2367 Internos 2367/2449/2356
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- INDUSTRIA
- INTERESES MARITIMOS, FLUVIALES, PESQUEROS Y PORTUARIOS
Reunión del día 14/08/2002
- CONJUNTA
- En Buenos Aires, a los catorce días del mes de agosto de 2002, a la hora 10 y 48:
SR. PRESIDENTE RIAL Damos inicio a la reunión de la Comisión de Industria con la presencia de seis señores diputados. Quiero señalar que algunos diputados se incorporarán a la reunión un poco más tarde porque están presenciando otras reuniones que están celebrándose al mismo tiempo. Las comisiones de Presupuesto y Hacienda, y la de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios, están considerando temas de urgente resolución para su probable tratamiento esta tarde en el recinto de la Cámara.
Por otra parte, antes de comenzar con el tratamiento del tema que nos convoca comento a los señores diputados que pasaremos para la firma dos proyectos de resolución, uno sobre la disposición de medidas conducentes a revisar las normativas que regulan los regímenes de la industria naval -expediente 4649-d-02- y otro sobre pedido de informes al Poder Ejecutivo acerca de la presunta evasión de impuestos en la que habrían incurrido las grandes comercializadoras de granos, que corresponde al expediente 0695-d-02.
Hoy nos visitan representantes de la Cámara de Fertilizantes y Agroquímicos. Hace diez días ellos me adelantaron el tema y me pidieron una reunión urgente para considerar el problema que puede complicar muchísimo el funcionamiento del sector.
T.2
Es indudable que esta comisión tiene la obligación de atender los temas que a ustedes les preocupan.
Les solicito que se identifiquen antes de hacer uso de la palabra porque se va a tomar registro taquigráfico de lo que aquí se exprese, de modo tal que los señores diputados que hoy no pudieron estar presentes podrán consultar la versión taquigráfica y fijar posición con respecto al tema que ustedes van a plantear.
Tiene la palabra el presidente de la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos, ingeniero agrónomo Aharón Averbach.
Por otra parte, antes de comenzar con el tratamiento del tema que nos convoca comento a los señores diputados que pasaremos para la firma dos proyectos de resolución, uno sobre la disposición de medidas conducentes a revisar las normativas que regulan los regímenes de la industria naval -expediente 4649-d-02- y otro sobre pedido de informes al Poder Ejecutivo acerca de la presunta evasión de impuestos en la que habrían incurrido las grandes comercializadoras de granos, que corresponde al expediente 0695-d-02.
Hoy nos visitan representantes de la Cámara de Fertilizantes y Agroquímicos. Hace diez días ellos me adelantaron el tema y me pidieron una reunión urgente para considerar el problema que puede complicar muchísimo el funcionamiento del sector.
T.2
Es indudable que esta comisión tiene la obligación de atender los temas que a ustedes les preocupan.
Les solicito que se identifiquen antes de hacer uso de la palabra porque se va a tomar registro taquigráfico de lo que aquí se exprese, de modo tal que los señores diputados que hoy no pudieron estar presentes podrán consultar la versión taquigráfica y fijar posición con respecto al tema que ustedes van a plantear.
Tiene la palabra el presidente de la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos, ingeniero agrónomo Aharón Averbach.
SR. AVERBACH Agradecemos la oportunidad que nos brindan de exponer aquí este tema.
Tenemos un problema específico relacionado con la empresa Profértil, pero primero quiero destacar lo que a nuestro entender es CIAFA.
La cámara a la que pertenecemos es productora de fertilizantes y productos fitosanitarios llamados agroquímicos. Nuestra industria está creciendo y se mantiene a pesar de la debacle del país. Estamos vinculados con el campo, progresamos, las aguas venían muy turbias hacía un tiempo pero ahora se han aclarado y estamos mejor.
Hace un tiempo tuvimos una charla con el ministro Lavagna, quien nos dijo que estábamos en el quinto subsuelo y que ahora nos encontrábamos en el cuarto subsuelo. Nuestra cámara no está en el cuarto subsuelo; tampoco está en el primer piso, pero está bien.
Es sabido que un producto fitosanitario como el fertilizante es de fundamental importancia para la producción agropecuaria. Datos internacionales demuestran que hoy un tercio de la producción de alimentos del mundo se pierde por no utilizar productos que ataquen a las malezas, los insectos y demás plagas. Incluso, si tomamos en cuenta la poscosecha, se pierde el 52 por ciento de los alimentos del mundo. En consecuencia, analizando el crecimiento de la población mundial, podemos determinar que la utilización de los productos que nosotros comercializamos es fundamental.
Un producto fitosanitario, un fertilizante, que viene a granel, se embolsa; un producto fitosanitario que tiene libre ingreso al país puede venir como grado técnico, es decir, la droga principal, y se formula o puede venir directamente formulado. En el caso de que venga directamente formulado no tiene ningún valor agregado para el país porque simplemente es un producto que se vende para beneficio de los productores. Nuestra cámara produce alrededor de cuarenta y dos principios activos y está exportando.
En este sentido, tenemos problemas con Brasil, hemos ganado un arbitraje y el 23 de agosto se cumplirán los 120 días que se le dio de tiempo a ese país para que se expida. Ganamos el arbitraje porque Brasil no nos deja introducir productos debido a trabas que pone en el registro; es el tercer caso que gana la Argentina.
Vale la pena que comente a los señores diputados integrantes de la comisión y a los presentes que había tres delegados -uno argentino, uno brasileño y uno uruguayo- y que por unanimidad se aceptó la posición argentina. Hace diez años que estamos volcados hacia el Mercosur y pensamos que tenemos grandes posibilidades de exportar a un mercado que supera ampliamente el nuestro, un gran mercado de venta de agroquímicos donde no hay producción de fitosanitarios.
Deseo destacar este tema porque el nuestro no es el caso de los pollos o de los huevos; competimos con la importación, nos ponen trabas y siempre falta algo. La calidad de nuestros productos es indiscutible, tenemos la fábrica de urea más grande del mundo, lo que constituye un prestigio para nuestra cámara y para el país. Profértil abastece, puede exportar y se agrega a la producción que tenía Pecom Energía, hoy Petrobras y antes PASA.
T.3
De esta manera, estamos abastecidos de urea nitrogenada, y podemos afirmar que el potasio no es un faltante muy grande en la Argentina.
En el rubro fitosanitario sintetizamos una gama de productos partiendo de materias primas, muchas nacionales, y las empresas están trabajando cada vez más para integrarse e ir fabricando sus propios productos y principios activos para no tener que importar.
Así como hablé de Profértil, la Argentina tiene en Atanor la principal fábrica de Latinoamérica, que produce el 20 por ciento del mercado de los Estados Unidos.
Este es el panorama de una industria que nosotros consideramos estratégica para la Argentina, porque estamos suministrando insumos de productos agropecuarios a los precios más baratos del mundo. Los productores vienen a nuestra cámara y nos dicen que son caros, pero yo voy a dejar a los señores diputados un folleto de nuestra cámara y una publicación de la Comisión Nacional Agropecuaria del Brasil, que agrupa a todos los productores brasileños, a la Sociedad Rural, a Coninagro y a la Federación Agraria. Aquí figura lo que pierde Brasil por no importar productos de la Argentina, con lo que queda palmariamente demostrado que aquí se venden los agroquímicos a muy bajo precio. Estas cifras las hemos comparado con las de los Estados Unidos y hemos quedado sorprendidos porque realmente hemos visto casos de productos que costaban un 40 por ciento más caro.
Tenemos un problema específico relacionado con la empresa Profértil, pero primero quiero destacar lo que a nuestro entender es CIAFA.
La cámara a la que pertenecemos es productora de fertilizantes y productos fitosanitarios llamados agroquímicos. Nuestra industria está creciendo y se mantiene a pesar de la debacle del país. Estamos vinculados con el campo, progresamos, las aguas venían muy turbias hacía un tiempo pero ahora se han aclarado y estamos mejor.
Hace un tiempo tuvimos una charla con el ministro Lavagna, quien nos dijo que estábamos en el quinto subsuelo y que ahora nos encontrábamos en el cuarto subsuelo. Nuestra cámara no está en el cuarto subsuelo; tampoco está en el primer piso, pero está bien.
Es sabido que un producto fitosanitario como el fertilizante es de fundamental importancia para la producción agropecuaria. Datos internacionales demuestran que hoy un tercio de la producción de alimentos del mundo se pierde por no utilizar productos que ataquen a las malezas, los insectos y demás plagas. Incluso, si tomamos en cuenta la poscosecha, se pierde el 52 por ciento de los alimentos del mundo. En consecuencia, analizando el crecimiento de la población mundial, podemos determinar que la utilización de los productos que nosotros comercializamos es fundamental.
Un producto fitosanitario, un fertilizante, que viene a granel, se embolsa; un producto fitosanitario que tiene libre ingreso al país puede venir como grado técnico, es decir, la droga principal, y se formula o puede venir directamente formulado. En el caso de que venga directamente formulado no tiene ningún valor agregado para el país porque simplemente es un producto que se vende para beneficio de los productores. Nuestra cámara produce alrededor de cuarenta y dos principios activos y está exportando.
En este sentido, tenemos problemas con Brasil, hemos ganado un arbitraje y el 23 de agosto se cumplirán los 120 días que se le dio de tiempo a ese país para que se expida. Ganamos el arbitraje porque Brasil no nos deja introducir productos debido a trabas que pone en el registro; es el tercer caso que gana la Argentina.
Vale la pena que comente a los señores diputados integrantes de la comisión y a los presentes que había tres delegados -uno argentino, uno brasileño y uno uruguayo- y que por unanimidad se aceptó la posición argentina. Hace diez años que estamos volcados hacia el Mercosur y pensamos que tenemos grandes posibilidades de exportar a un mercado que supera ampliamente el nuestro, un gran mercado de venta de agroquímicos donde no hay producción de fitosanitarios.
Deseo destacar este tema porque el nuestro no es el caso de los pollos o de los huevos; competimos con la importación, nos ponen trabas y siempre falta algo. La calidad de nuestros productos es indiscutible, tenemos la fábrica de urea más grande del mundo, lo que constituye un prestigio para nuestra cámara y para el país. Profértil abastece, puede exportar y se agrega a la producción que tenía Pecom Energía, hoy Petrobras y antes PASA.
T.3
De esta manera, estamos abastecidos de urea nitrogenada, y podemos afirmar que el potasio no es un faltante muy grande en la Argentina.
En el rubro fitosanitario sintetizamos una gama de productos partiendo de materias primas, muchas nacionales, y las empresas están trabajando cada vez más para integrarse e ir fabricando sus propios productos y principios activos para no tener que importar.
Así como hablé de Profértil, la Argentina tiene en Atanor la principal fábrica de Latinoamérica, que produce el 20 por ciento del mercado de los Estados Unidos.
Este es el panorama de una industria que nosotros consideramos estratégica para la Argentina, porque estamos suministrando insumos de productos agropecuarios a los precios más baratos del mundo. Los productores vienen a nuestra cámara y nos dicen que son caros, pero yo voy a dejar a los señores diputados un folleto de nuestra cámara y una publicación de la Comisión Nacional Agropecuaria del Brasil, que agrupa a todos los productores brasileños, a la Sociedad Rural, a Coninagro y a la Federación Agraria. Aquí figura lo que pierde Brasil por no importar productos de la Argentina, con lo que queda palmariamente demostrado que aquí se venden los agroquímicos a muy bajo precio. Estas cifras las hemos comparado con las de los Estados Unidos y hemos quedado sorprendidos porque realmente hemos visto casos de productos que costaban un 40 por ciento más caro.
SR. SEBRIANO ¿Aun antes de la devaluación?
SR. AVERBACH Este informe de la CNA es de antes de la devaluación. Eso provocó algún tipo de problemas respecto de la deuda que, para nosotros, están terminados. Salieron las resoluciones 10 y 143, y este es un tema cerrado. Nosotros hicimos nuestra propuesta original y hace diez años que vendemos en dólares y dijimos que queremos cobrar en dólares. A lo que se exporta, le descontamos las retenciones y un 5 por ciento adicional.
En el caso de las economías regionales aceptamos pagar las deudas uno a uno, y en el caso de los productos que aumentaron en el mercado tendremos en cuenta ese aumento.
Nosotros estamos mirando para adelante: queremos financiar, aunque sabemos que es difícil recuperar el capital de trabajo porque una empresa que empezó a producir ahora recién comenzará a vender dentro de un año.
Nuestras fábricas no tienen rueditas: tenemos veinte industrias en la Argentina y estamos dispuestos a seguir apoyando al país y seguir creciendo.
Comparativamente, los productos que nosotros vendemos son los más baratos del mundo, y tendremos que esperar hasta el día 23 para ver qué pasa. Debemos tener en cuenta que los brasileños son muy estáticos con sus normas, y nosotros hace diez años que peleamos con este gobierno y con el anterior. Cuando tuvimos representantes oficiales en las áreas de agricultura e industria y la Cancillería nos apoyó, ganamos el arbitraje y se abrió una gran posibilidad para poder exportar.
En la Argentina tenemos una materia gris muy importante. Nuestros socios en productos fitosanitarios -este tema es un poco más complejo- pueden hacer productos nuevos de última generación y cada vez estamos creciendo más en este sentido.
Finalmente, me quiero referir a dos puntos excepcionales antes de que el doctor Girotti se ocupe del tema de las alícuotas de los fertilizantes. Si lo que dice el Senado se aprueba como tal, y de esta manera los fertilizantes quedan gravados con una devolución teórica del 30 por ciento -todavía no se sabe cómo se va a devolver y qué va a pasar con la deuda anterior-, los señores diputados tienen que entender muy claramente que de esta manera se está favoreciendo la importación contra la industria nacional.
T.4
cab
ind
Profértil paga 28 por ciento por gas, y 23 o 24 por ciento de IVA, y si la gravan con el 10,5 por ciento le quedará un crédito fiscal que nunca podrá ser recuperado. Es decir, se castiga la inversión y se favorece al importador. Un importador de un fertilizante paga 10,5; Profértil fabrica y paga también 10,5 de IVA, pero le queda un crédito fiscal irrecuperable. Ese es un problema específico que después va a comentar el señor Girotti.
No queremos hablar de problemas sino de las cosas positivas, y si bien no es motivo de la reunión, queremos comentar un poco el tema de la ley 24.603, de patentes. Esta ley tiene bastante tiempo, pero ahora hay una lectura más estricta. Dado que las patentes son muy globales, abarcan productos que a veces no nos permiten fabricar, a pesar de que la patente está perimida.
Otro problema que tenemos está referido a la propiedad intelectual, tema que está muy discutido,, y sólo lo menciono porque no es para esta reunión.
Del mismo modo, señalo la cuestión del antidumping, donde creemos que la Argentina tiene que ser más rápida en la adopción de resoluciones. La Comisión Nacional de Comercio Exterior tarda muchísimo en resolver, cuando ya el producto se introdujo al país y está perjudicando a la industria nacional.
El último comentario que quiero hacer está relacionado con el problema del ALCA. En un principio nuestra cámara vio al ALCA con cierta expectativa. Como estamos muy vinculados y dependemos del productor agropecuario, mientras Estados Unidos siga sosteniendo los subsidios a su producción agrícola nosotros entendemos que la Argentina no puede tomar compromiso con el ALCA, ya que perjudica al productor agropecuario y también a nosotros. Somos industriales que producimos agroquímicos, y Estados Unidos tiene una agricultura subsidiada que le permite vender sus productos más barato en la Argentina. Además, estamos en contra estación, con lo cual lo que a ellos les sobra nos lo mandan a nosotros. A pesar de ello, somos tan competitivos que no envían productos que ya se elaboran en la Argentina a un precio bajo.
Con respecto al ALCA nuestra cámara tiene una posición clara. Quería leerles un artículo que publicó ayer "Clarín", firmado por el politólogo brasileño Luis Alberto Moniz Bandeira, que claramente dice que "el Congreso norteamericano mantuvo los subsidios a la agricultura." Es decir, la Argentina aflojó en todo, pero los norteamericanos siguen manteniendo sus subsidios. Y continúa diciendo: "El objetivo de Estados Unidos, con la formación del ALCA, es consolidar las medidas ultraliberales, forzar una apertura unilateral de las economías latinoamericanas, de modo de obtener más ventajas comerciales y mayores reducciones de barreras a las exportaciones y a sus capitales."
Nuestra posición frente al ALCA es que mientras se mantengan los subsidios agrícolas, que Estados Unidos dijo que no eran negociables, la Argentina no debe entrar en ese acuerdo. Esa por lo menos es la posición de nuestra cámara, que coincide con la de nuestros productores agropecuarios.
Este es un panorama muy global de lo que es nuestra cámara, y reitero que estoy absolutamente convencido de que nuestra industria es competitiva, porque mantiene precios bajos para nuestros productores -a pesar de que ellos protestan-, lo cual es fundamental para un país agropecuario como el nuestro. Hoy todo el mundo sabe que dependemos de los agrodólares para que el dólar se mantenga en su nivel.
También estamos muy preocupados -y se lo planteamos al jefe de Gabinete, señor Atanasoff, y al ex secretario de Agricultura, señor Delpech- por la participación de la Argentina en las reuniones de la FAO, de la Organización Mundial del Comercio y de la Organización Mundial de la Salud, donde no puede dejar de estar presente, porque allí nos van a poner medidas paraarancelarias que van a perjudicar la exportación de nuestros productos agropecuarios. Eso va a ser gravísimo para la Argentina, porque si bien sin industria no hay Nación, hoy es el campo el que aporta los dólares.
El señor Girotti se va a referir al problema específico de la alícuota del IVA para fertilizantes, que es realmente dramático.
En el caso de las economías regionales aceptamos pagar las deudas uno a uno, y en el caso de los productos que aumentaron en el mercado tendremos en cuenta ese aumento.
Nosotros estamos mirando para adelante: queremos financiar, aunque sabemos que es difícil recuperar el capital de trabajo porque una empresa que empezó a producir ahora recién comenzará a vender dentro de un año.
Nuestras fábricas no tienen rueditas: tenemos veinte industrias en la Argentina y estamos dispuestos a seguir apoyando al país y seguir creciendo.
Comparativamente, los productos que nosotros vendemos son los más baratos del mundo, y tendremos que esperar hasta el día 23 para ver qué pasa. Debemos tener en cuenta que los brasileños son muy estáticos con sus normas, y nosotros hace diez años que peleamos con este gobierno y con el anterior. Cuando tuvimos representantes oficiales en las áreas de agricultura e industria y la Cancillería nos apoyó, ganamos el arbitraje y se abrió una gran posibilidad para poder exportar.
En la Argentina tenemos una materia gris muy importante. Nuestros socios en productos fitosanitarios -este tema es un poco más complejo- pueden hacer productos nuevos de última generación y cada vez estamos creciendo más en este sentido.
Finalmente, me quiero referir a dos puntos excepcionales antes de que el doctor Girotti se ocupe del tema de las alícuotas de los fertilizantes. Si lo que dice el Senado se aprueba como tal, y de esta manera los fertilizantes quedan gravados con una devolución teórica del 30 por ciento -todavía no se sabe cómo se va a devolver y qué va a pasar con la deuda anterior-, los señores diputados tienen que entender muy claramente que de esta manera se está favoreciendo la importación contra la industria nacional.
T.4
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Profértil paga 28 por ciento por gas, y 23 o 24 por ciento de IVA, y si la gravan con el 10,5 por ciento le quedará un crédito fiscal que nunca podrá ser recuperado. Es decir, se castiga la inversión y se favorece al importador. Un importador de un fertilizante paga 10,5; Profértil fabrica y paga también 10,5 de IVA, pero le queda un crédito fiscal irrecuperable. Ese es un problema específico que después va a comentar el señor Girotti.
No queremos hablar de problemas sino de las cosas positivas, y si bien no es motivo de la reunión, queremos comentar un poco el tema de la ley 24.603, de patentes. Esta ley tiene bastante tiempo, pero ahora hay una lectura más estricta. Dado que las patentes son muy globales, abarcan productos que a veces no nos permiten fabricar, a pesar de que la patente está perimida.
Otro problema que tenemos está referido a la propiedad intelectual, tema que está muy discutido,, y sólo lo menciono porque no es para esta reunión.
Del mismo modo, señalo la cuestión del antidumping, donde creemos que la Argentina tiene que ser más rápida en la adopción de resoluciones. La Comisión Nacional de Comercio Exterior tarda muchísimo en resolver, cuando ya el producto se introdujo al país y está perjudicando a la industria nacional.
El último comentario que quiero hacer está relacionado con el problema del ALCA. En un principio nuestra cámara vio al ALCA con cierta expectativa. Como estamos muy vinculados y dependemos del productor agropecuario, mientras Estados Unidos siga sosteniendo los subsidios a su producción agrícola nosotros entendemos que la Argentina no puede tomar compromiso con el ALCA, ya que perjudica al productor agropecuario y también a nosotros. Somos industriales que producimos agroquímicos, y Estados Unidos tiene una agricultura subsidiada que le permite vender sus productos más barato en la Argentina. Además, estamos en contra estación, con lo cual lo que a ellos les sobra nos lo mandan a nosotros. A pesar de ello, somos tan competitivos que no envían productos que ya se elaboran en la Argentina a un precio bajo.
Con respecto al ALCA nuestra cámara tiene una posición clara. Quería leerles un artículo que publicó ayer "Clarín", firmado por el politólogo brasileño Luis Alberto Moniz Bandeira, que claramente dice que "el Congreso norteamericano mantuvo los subsidios a la agricultura." Es decir, la Argentina aflojó en todo, pero los norteamericanos siguen manteniendo sus subsidios. Y continúa diciendo: "El objetivo de Estados Unidos, con la formación del ALCA, es consolidar las medidas ultraliberales, forzar una apertura unilateral de las economías latinoamericanas, de modo de obtener más ventajas comerciales y mayores reducciones de barreras a las exportaciones y a sus capitales."
Nuestra posición frente al ALCA es que mientras se mantengan los subsidios agrícolas, que Estados Unidos dijo que no eran negociables, la Argentina no debe entrar en ese acuerdo. Esa por lo menos es la posición de nuestra cámara, que coincide con la de nuestros productores agropecuarios.
Este es un panorama muy global de lo que es nuestra cámara, y reitero que estoy absolutamente convencido de que nuestra industria es competitiva, porque mantiene precios bajos para nuestros productores -a pesar de que ellos protestan-, lo cual es fundamental para un país agropecuario como el nuestro. Hoy todo el mundo sabe que dependemos de los agrodólares para que el dólar se mantenga en su nivel.
También estamos muy preocupados -y se lo planteamos al jefe de Gabinete, señor Atanasoff, y al ex secretario de Agricultura, señor Delpech- por la participación de la Argentina en las reuniones de la FAO, de la Organización Mundial del Comercio y de la Organización Mundial de la Salud, donde no puede dejar de estar presente, porque allí nos van a poner medidas paraarancelarias que van a perjudicar la exportación de nuestros productos agropecuarios. Eso va a ser gravísimo para la Argentina, porque si bien sin industria no hay Nación, hoy es el campo el que aporta los dólares.
El señor Girotti se va a referir al problema específico de la alícuota del IVA para fertilizantes, que es realmente dramático.
SR. GIROTTI Uno de los temas que nos preocupa es la propuesta del Poder Ejecutivo para modificar la alícuota del IVA en determinado sector, fundamentalmente el agro.
T.5
Esto se originó en el Poder Ejecutivo y la razón fundamental está basada en el problema de reducir el aporte del Tesoro a toda la cadena de producción agrícola, llegando hasta la exportación.
Ustedes bien saben que la gente de la AFIP señala que anualmente está devolviendo a los exportadores 600 millones de dólares más respecto de la recaudación del valor agregado en toda la cadena. Entonces, en lugar de un impuesto sería un subsidio al valor agregado porque a medida que sube el valor aumenta el subsidio.
Como aparentemente no encontraron mecanismos para reducir la evasión, la solución aportada fue bajar la alícuota del IVA del 21 al 10,5 por ciento en principio para la venta de granos y de una serie de productos del agro. El proyecto fue redactado en esos términos por el Poder Ejecutivo y un texto muy similar fue aprobado por la Cámara de Diputados.
Hasta ese entonces nosotros no teníamos problemas porque la iniciativa no nos afectaba en forma directa. Pero posteriormente el proyecto fue modificado por la Cámara de Senadores incluyéndose la reducción de la alícuota del IVA a los fertilizantes. Esta modificación atenta contra uno de los principios básicos, que es tratar de reducir la evasión. Si en la reducción del impuesto se incluye a los insumos baja el interés de la cadena productiva en blanquear la posición a efectos de disminuir la evasión.
En el país somos dos los fabricantes de fertilizantes: Pecom y Profértil. Nuestra situación se complica porque -como decía el ingeniero Averbach- las materias primas son el gas natural y la energía eléctrica, y ambos tributan una alícuota del IVA del 27 por ciento.
El promedio de nuestro IVA compras es el 24 por ciento. Entonces, si compramos con un IVA del 24 por ciento y vendemos con un IVA del 10,5 por ciento se genera un crédito fiscal que es irrecuperable.
De alguna manera, con la modificación introducida por la Cámara de Senadores y con el compromiso de la AFIP de hacer una devolución a las empresas -específicamente, a Pecom y Profértil- podríamos recuperar la posición mensual que se va generando pero a la vez nos impide recuperar el crédito fiscal IVA producido por las inversiones.
En el caso específico de Profértil, el año pasado pusimos nuestra planta de producción en marcha invirtiendo 700 millones de dólares.
Como decía el ingeniero Averbach, se trata de la unidad de producción de urea más grande del mundo. Esta inversión nos genera un crédito fiscal de 120 millones de dólares que nunca podremos recuperar. En consecuencia, se trataría de un costo adicional a nuestra producción.
Como también señalaba el ingeniero Averbach, esta situación sería como un castigo a la inversión, porque generamos un crédito fiscal pero no recuperamos el IVA todos los meses; solamente estamos sujetos a que en un momento se nos reintegre.
Este proceder beneficia al importador de fertilizantes ya que se reduce el capital de trabajo y se nacionalizarían las mercaderías que se importan. El fertilizante se importaría con una alícuota del 10,5 por ciento, con lo cual se reduciría aproximadamente en un 10 por ciento el capital de trabajo.
En el caso de la producción local se produce un efecto inverso. Nuestras plantas están instaladas en el país y tenemos que aumentar el capital de trabajo a raíz de que pagamos un IVA mucho mayor que el que después recuperamos.
Creemos que esto además de ser injusto va en contra de lo que el país requiere en este momento, que es la generación de puestos de trabajo. Nosotros invertimos una gran cantidad de dinero, y nuestra empresa llegó para instalarse y quedarse. Es imposible que traslademos nuestra planta a otro lugar para producir fertilizantes.
Sería ideal que la Cámara de Diputados mantuviera la posición sostenida al momento de aprobarse este proyecto.
T.6
Entendemos que este tema va a ser tratado en la sesión de hoy o en la de la semana próxima porque fue incluido en el plan de labor. Asimismo, tenemos conocimiento de que la Comisión de Presupuesto y Hacienda está discutiéndolo. Entonces, en defensa de la industria nacional les pedimos que se mantenga la posición de la Cámara de Diputados tal cual fue fijada en mayo o junio de este año, cuando se aprobó la propuesta del Poder Ejecutivo. De otro modo, se va a causar un problema de difícil solución a los productores de fertilizantes, porque todos sabemos que en la actualidad es casi una misión imposible obtener capital de trabajo.
Esa circunstancia llevaría a que tengamos que incrementar nuestro capital de trabajo e iría en desmedro de la situación del mercado en general porque nos impediría dar crédito a nuestros clientes, agravando el escenario en lugar de mejorarlo. Este es nuestro pedido.
T.5
Esto se originó en el Poder Ejecutivo y la razón fundamental está basada en el problema de reducir el aporte del Tesoro a toda la cadena de producción agrícola, llegando hasta la exportación.
Ustedes bien saben que la gente de la AFIP señala que anualmente está devolviendo a los exportadores 600 millones de dólares más respecto de la recaudación del valor agregado en toda la cadena. Entonces, en lugar de un impuesto sería un subsidio al valor agregado porque a medida que sube el valor aumenta el subsidio.
Como aparentemente no encontraron mecanismos para reducir la evasión, la solución aportada fue bajar la alícuota del IVA del 21 al 10,5 por ciento en principio para la venta de granos y de una serie de productos del agro. El proyecto fue redactado en esos términos por el Poder Ejecutivo y un texto muy similar fue aprobado por la Cámara de Diputados.
Hasta ese entonces nosotros no teníamos problemas porque la iniciativa no nos afectaba en forma directa. Pero posteriormente el proyecto fue modificado por la Cámara de Senadores incluyéndose la reducción de la alícuota del IVA a los fertilizantes. Esta modificación atenta contra uno de los principios básicos, que es tratar de reducir la evasión. Si en la reducción del impuesto se incluye a los insumos baja el interés de la cadena productiva en blanquear la posición a efectos de disminuir la evasión.
En el país somos dos los fabricantes de fertilizantes: Pecom y Profértil. Nuestra situación se complica porque -como decía el ingeniero Averbach- las materias primas son el gas natural y la energía eléctrica, y ambos tributan una alícuota del IVA del 27 por ciento.
El promedio de nuestro IVA compras es el 24 por ciento. Entonces, si compramos con un IVA del 24 por ciento y vendemos con un IVA del 10,5 por ciento se genera un crédito fiscal que es irrecuperable.
De alguna manera, con la modificación introducida por la Cámara de Senadores y con el compromiso de la AFIP de hacer una devolución a las empresas -específicamente, a Pecom y Profértil- podríamos recuperar la posición mensual que se va generando pero a la vez nos impide recuperar el crédito fiscal IVA producido por las inversiones.
En el caso específico de Profértil, el año pasado pusimos nuestra planta de producción en marcha invirtiendo 700 millones de dólares.
Como decía el ingeniero Averbach, se trata de la unidad de producción de urea más grande del mundo. Esta inversión nos genera un crédito fiscal de 120 millones de dólares que nunca podremos recuperar. En consecuencia, se trataría de un costo adicional a nuestra producción.
Como también señalaba el ingeniero Averbach, esta situación sería como un castigo a la inversión, porque generamos un crédito fiscal pero no recuperamos el IVA todos los meses; solamente estamos sujetos a que en un momento se nos reintegre.
Este proceder beneficia al importador de fertilizantes ya que se reduce el capital de trabajo y se nacionalizarían las mercaderías que se importan. El fertilizante se importaría con una alícuota del 10,5 por ciento, con lo cual se reduciría aproximadamente en un 10 por ciento el capital de trabajo.
En el caso de la producción local se produce un efecto inverso. Nuestras plantas están instaladas en el país y tenemos que aumentar el capital de trabajo a raíz de que pagamos un IVA mucho mayor que el que después recuperamos.
Creemos que esto además de ser injusto va en contra de lo que el país requiere en este momento, que es la generación de puestos de trabajo. Nosotros invertimos una gran cantidad de dinero, y nuestra empresa llegó para instalarse y quedarse. Es imposible que traslademos nuestra planta a otro lugar para producir fertilizantes.
Sería ideal que la Cámara de Diputados mantuviera la posición sostenida al momento de aprobarse este proyecto.
T.6
Entendemos que este tema va a ser tratado en la sesión de hoy o en la de la semana próxima porque fue incluido en el plan de labor. Asimismo, tenemos conocimiento de que la Comisión de Presupuesto y Hacienda está discutiéndolo. Entonces, en defensa de la industria nacional les pedimos que se mantenga la posición de la Cámara de Diputados tal cual fue fijada en mayo o junio de este año, cuando se aprobó la propuesta del Poder Ejecutivo. De otro modo, se va a causar un problema de difícil solución a los productores de fertilizantes, porque todos sabemos que en la actualidad es casi una misión imposible obtener capital de trabajo.
Esa circunstancia llevaría a que tengamos que incrementar nuestro capital de trabajo e iría en desmedro de la situación del mercado en general porque nos impediría dar crédito a nuestros clientes, agravando el escenario en lugar de mejorarlo. Este es nuestro pedido.
SR. ESAIN Vengo del interior de la provincia de Mendoza, donde -como ustedes saben- ha habido una movilización sumamente importante debido al tema de los fertilizantes.
Quiero realizar algunas consultas con respecto a la urea. En primer lugar, sé que prácticamente no existiría costo de importación porque sería una producción con materia prima estrictamente local.
Hoy he conversado con las autoridades legislativas de la provincia. Sabía que ustedes iban a concurrir a esta comisión, por lo que voy a aprovechar esta oportunidad para hacer algunas preguntas.
En este sentido, puedo mencionar que la urea habría aumentado un 20 por ciento con el precio del dólar.
Quiero realizar algunas consultas con respecto a la urea. En primer lugar, sé que prácticamente no existiría costo de importación porque sería una producción con materia prima estrictamente local.
Hoy he conversado con las autoridades legislativas de la provincia. Sabía que ustedes iban a concurrir a esta comisión, por lo que voy a aprovechar esta oportunidad para hacer algunas preguntas.
En este sentido, puedo mencionar que la urea habría aumentado un 20 por ciento con el precio del dólar.
SR. GIROTTI El precio de venta en dólares, si lo comparamos con el que existía antes de la devaluación, está por debajo de ese valor, es decir, entre el 20 y el 25 por ciento por debajo de ese precio. Estos son los precios de venta de la empresa a la que represento.
Con respecto a la producción deseo mencionar que Profértil hizo una inversión de 700 millones de dólares, más de la mitad de esa cifra representa a créditos tomados en el exterior. No existía capacidad de tomar créditos -menos ahora- para poder financiar el proyecto y tenemos que hacer la devolución en dólares. Entonces, un gran componente de nuestros costos es en dólares.
La materia prima, que es el gas natural, está dolarizada, los contratos privados -compramos el gas en boca de pozo- están dolarizados y los repuestos también son importados. Por ser la planta más grande del mundo tenemos ventajas y algunos compromisos. Gran parte de los componentes de nuestros costos están dolarizados. De cualquier manera, los precios de venta de Profértil están en el orden del 20 al 25 por ciento por debajo de los que existían antes de la devaluación.
Deseo realizar un comentario adicional. Profértil es una empresa eficiente; no tenemos esta escala para batir récord o para tener la planta más grande del mundo sino para poder ser competitivos y compensar costos extras que existen en nuestro país y no en otros, que son nuestros competidores, como Venezuela o los países árabes. A pesar de ser una empresa muy eficiente, desde el 1° de enero a la fecha llevamos acumulado un quebranto de más de 50 millones de dólares. Esta es la situación del sector.
Con respecto a la producción deseo mencionar que Profértil hizo una inversión de 700 millones de dólares, más de la mitad de esa cifra representa a créditos tomados en el exterior. No existía capacidad de tomar créditos -menos ahora- para poder financiar el proyecto y tenemos que hacer la devolución en dólares. Entonces, un gran componente de nuestros costos es en dólares.
La materia prima, que es el gas natural, está dolarizada, los contratos privados -compramos el gas en boca de pozo- están dolarizados y los repuestos también son importados. Por ser la planta más grande del mundo tenemos ventajas y algunos compromisos. Gran parte de los componentes de nuestros costos están dolarizados. De cualquier manera, los precios de venta de Profértil están en el orden del 20 al 25 por ciento por debajo de los que existían antes de la devaluación.
Deseo realizar un comentario adicional. Profértil es una empresa eficiente; no tenemos esta escala para batir récord o para tener la planta más grande del mundo sino para poder ser competitivos y compensar costos extras que existen en nuestro país y no en otros, que son nuestros competidores, como Venezuela o los países árabes. A pesar de ser una empresa muy eficiente, desde el 1° de enero a la fecha llevamos acumulado un quebranto de más de 50 millones de dólares. Esta es la situación del sector.
SR. LLANO ¿Por qué tienen quebranto? ¿Se debe a la demanda?
SR. GIROTTI La demanda interna ha caído. Estimamos que la demanda de fertilizantes de este año va a ser un 30 por ciento menor que la del año pasado. Era una demanda que venía en crecimiento y ahora ha caído, por lo que nos vemos obligados a exportar lo que no podemos vender en el mercado interno.
T.7
Nuestro nivel de producción es equivalente. Gran parte del quebranto se origina por la pesificación de los créditos. Tenemos un crédito fiscal de IVA de 120 millones de dólares, que hoy son 120 millones de pesos, o menos, y para pagar dicho crédito fiscal estamos endeudados en dólares y tenemos que devolver en esa moneda, lo que nos genera un quebranto de más de 50 millones.
T.7
Nuestro nivel de producción es equivalente. Gran parte del quebranto se origina por la pesificación de los créditos. Tenemos un crédito fiscal de IVA de 120 millones de dólares, que hoy son 120 millones de pesos, o menos, y para pagar dicho crédito fiscal estamos endeudados en dólares y tenemos que devolver en esa moneda, lo que nos genera un quebranto de más de 50 millones.
SR. ESAIN En el caso de los granos, teniendo en cuenta que hay exportación y los precios son en dólares, para los productores de las economías regionales -que generalmente no exportan- es importante una reducción del 20 por ciento en relación con el dólar. Este juego de números realmente ha significado un costo enorme en la producción.
Me parece que este tema merece algún tratamiento de parte de los productores con ustedes porque de lo contrario se producirá un cuello de botella que va a impedir el uso de fertilizantes y se va a originar la situación a la que se refirió el señor Averbach en su exposición anterior.
En segundo lugar quiero manifestar que en algún momento ha habido una interrupción del financiamiento del ciclo agrícola, y esto también realmente ha perjudicado a las economías del interior. Por lo tanto, no sé qué posición tomará cada una de las empresas del sector o la cámara.
Me parece que este tema merece algún tratamiento de parte de los productores con ustedes porque de lo contrario se producirá un cuello de botella que va a impedir el uso de fertilizantes y se va a originar la situación a la que se refirió el señor Averbach en su exposición anterior.
En segundo lugar quiero manifestar que en algún momento ha habido una interrupción del financiamiento del ciclo agrícola, y esto también realmente ha perjudicado a las economías del interior. Por lo tanto, no sé qué posición tomará cada una de las empresas del sector o la cámara.
SR. AVERBACH Como dije en un principio, los asociados a CIAFA vendían en dólares y financiaban la cosecha. A veces hacíamos planes canje, pero pongamos en claro que un productor que tenía deudas con la empresa no puede volver a comprar si no paga lo que debe. Ahí aparecieron las resoluciones 10 y 143, y más allá de que la dirigencia gremial decía una cosa, los productores terminaban pagando a 1,40 o 1,80, dependiendo del momento. Pero este problema desapareció, y hoy en día las deudas con los socios de CIAFA no constituyen un problema. Estamos mirando hacia adelante.
Al principio las aguas estaban turbias porque vendemos en dólares y debemos en dólares, pero aceptamos la posición de los productores, que se acercaron a nuestras empresas para arreglar y, en general, pagaron a un dólar distinto, aunque tuvimos muy en cuenta a las economías regionales. Nuestros socios no venden tanto en la economía regional, pero hay empresas multinacionales que tienen mercados en Mendoza, Salta y Tucumán, y los productos fundamentales de los productores de CIAFA, salvo en el caso de los fertilizantes, se venden en la Pampa Húmeda, y aceptamos la posición planteada.
Los socios reconocieron a los productores la posibilidad de arreglar sus deudas, pero primero quisiéramos cobrar y después vender, porque el problema de la financiación es serio y grave para las empresas y los productores.
Por eso es que aceptamos planes canje y el pago con cereales para asegurarnos la cobranza, porque de otro modo, ¿quién puede financiar? La empresa tiene fines de lucro y nosotros no podemos financiar 180 días en pesos porque en la Argentina actual eso es imposible. Financiamos en dólares, y cuando llegue el momento veremos qué pasa, pero hoy las deudas no existen.
Quiero recordar que cuando ocurrió el desgraciado episodio de la guerra de las Malvinas la industria nacional fue la que abasteció a la Argentina, y vamos a seguir haciéndolo. Lo que se plantea aquí es cierto y lógico, porque a los productores les aplicaron retenciones y deben estar disconformes, pero esta es la situación del país, y se la veía venir.
En una reunión en CRA el señor Crotto manifestó que el presidente Duhalde le había dicho en la cara que no iba a haber retenciones, pero yo le dije que sí las iba a haber, porque se caía de maduro.
Hoy, teóricamente, el campo está beneficiado.
T.8
cab
ind
Por eso nosotros estamos más o menos bien. Pero buscamos arreglar la situación, financiar, tener precios adecuados, porque -como decía Girotti- el capital productivo o de trabajo es importante para la empresa. Nadie nos financia, porque lo que compramos tenemos que pagarlo cash, y producir agroquímico lleva su tiempo. Es distinta la situación de quien importa, que saca el producto del puerto y lo vende al día siguiente. Nosotros estamos produciendo, tomamos materias primas nacionales e importadas y tardamos un tiempo en recuperar esa inversión, que tenemos que pagar en dólares y no hay financiación ni para la Argentina ni para las empresas.
Al principio las aguas estaban turbias porque vendemos en dólares y debemos en dólares, pero aceptamos la posición de los productores, que se acercaron a nuestras empresas para arreglar y, en general, pagaron a un dólar distinto, aunque tuvimos muy en cuenta a las economías regionales. Nuestros socios no venden tanto en la economía regional, pero hay empresas multinacionales que tienen mercados en Mendoza, Salta y Tucumán, y los productos fundamentales de los productores de CIAFA, salvo en el caso de los fertilizantes, se venden en la Pampa Húmeda, y aceptamos la posición planteada.
Los socios reconocieron a los productores la posibilidad de arreglar sus deudas, pero primero quisiéramos cobrar y después vender, porque el problema de la financiación es serio y grave para las empresas y los productores.
Por eso es que aceptamos planes canje y el pago con cereales para asegurarnos la cobranza, porque de otro modo, ¿quién puede financiar? La empresa tiene fines de lucro y nosotros no podemos financiar 180 días en pesos porque en la Argentina actual eso es imposible. Financiamos en dólares, y cuando llegue el momento veremos qué pasa, pero hoy las deudas no existen.
Quiero recordar que cuando ocurrió el desgraciado episodio de la guerra de las Malvinas la industria nacional fue la que abasteció a la Argentina, y vamos a seguir haciéndolo. Lo que se plantea aquí es cierto y lógico, porque a los productores les aplicaron retenciones y deben estar disconformes, pero esta es la situación del país, y se la veía venir.
En una reunión en CRA el señor Crotto manifestó que el presidente Duhalde le había dicho en la cara que no iba a haber retenciones, pero yo le dije que sí las iba a haber, porque se caía de maduro.
Hoy, teóricamente, el campo está beneficiado.
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Por eso nosotros estamos más o menos bien. Pero buscamos arreglar la situación, financiar, tener precios adecuados, porque -como decía Girotti- el capital productivo o de trabajo es importante para la empresa. Nadie nos financia, porque lo que compramos tenemos que pagarlo cash, y producir agroquímico lleva su tiempo. Es distinta la situación de quien importa, que saca el producto del puerto y lo vende al día siguiente. Nosotros estamos produciendo, tomamos materias primas nacionales e importadas y tardamos un tiempo en recuperar esa inversión, que tenemos que pagar en dólares y no hay financiación ni para la Argentina ni para las empresas.
SR. ESAIN Quisiera preguntar si el plan canje es sólo para los granos o también se hace extensivo a otras economías regionales, como el caso de la urea.
SR. AVERBACH No, es para los granos, para los que tienen que exportar.
SR. GIROTTI En el caso de Profértil, por nuestras posibilidades vendemos solamente a la cadena de distribución, no a los productores finales. No tenemos espaldas financieras para prestar los servicios que este tipo de productos requiere, así que vendemos directamente a grandes mayoristas, no a las economías regionales en forma directa. Pero sabemos que nuestros distribuidores han hecho concesiones especiales. En el caso de las deudas, se han tomado y eso es lo que lentamente va restituyendo, primero, la confianza, y después, las posibilidades de financiamiento.
SR. BRIOZZO Entonces ese 20 por ciento por debajo del dólar al que usted se refirió es en relación con el precio de la empresa con sus distribuidores. Quizás es cierto lo que plantea el señor diputado Esaín respecto del aumento en dólares, porque, ¿cuánto se carga hasta llegar al precio final?
SR. GIROTTI Eso depende de los volúmenes que muevan, del distribuidor, de la zona.
SR. SARLI En general, lo que ha ocurrido en todo este proceso es que inmediatamente de sancionada la ley el 7 de enero se congeló todo tipo de financiación, tanto desde el punto de vista del proveedor como del comprador. Inmediatamente se retrotrajo toda la situación, y primero se exigía que se pagara lo que se debía. Pero ese concepto tal vez fue aplicado con más energía por las grandes empresas, no por las pymes nacionales, que siguieron entregando insumos al productor con la conformidad de éste de pagar de alguna forma en el tiempo esa deuda que originalmente tenía en dólares. Eso es conocido por Confederaciones Rurales, Coninagro y demás, porque hemos tenido muchas reuniones con ellos y nos han agradecido que la industria nacional haya seguido entregando los insumos.
El productor de pronto se quedó sin crédito y sin insumos. Eso se fue acomodando en el tiempo y hoy podemos decir que todavía el crédito no existe, no sólo por parte del productor para conseguir el insumo nacional, sino por parte de la industria para conseguir el insumo del exterior, que se está pagando a 45 días, que es el tiempo que tarda en llegar a puerto la materia prima importada; es decir que prácticamente es una compra a contado contra arribo a puerto, y más de una vez es pago anticipado o pago contra documento. Al productor le ha pasado lo mismo, se le ha transferido el problema del crédito; en este momento no existe financiamiento bancario o es inalcanzable.
Actualmente se están aplicando algunos sistemas para lograr algo de financiación. Aquellos productores consumidores finales o distribuidores que trabajan con consumidores finales, que están vinculados a la exportación de los granos más importantes -girasol, maíz, trigo y soja- pueden pagar con un equivalente en granos. Entonces el productor, en vez de vender el grano, transformarlo en pesos, comprar los dólares y pagar el insumo, entrega el grano en dólar, se ahorra una etapa y gana algo.
Por otra parte, en este momento están apareciendo los sistemas de fideicomiso establecidos por organismos privados y bancos, que se han unido y donde están participando empresas. Es gente que coloca capital, constituye un fideicomiso y le ofrece al productor que quiere comprar insumos que lo haga a través del fideicomiso. Establecen una serie de pautas con el productor, por las cuales éste entregará parte de su producción, y ellos se protegen por medio de seguros, controles profesionales y demás. De esta manera se está obteniendo el crédito en forma intermediaria, que no lo da el banco en este momento.
Otra forma que se está produciendo en el mercado es la cesión de ventas a futuro. Los certificados de venta con la Bolsa de Cereales y demás, se transfieren a quien entrega el insumo. El productor dice: le voy a entregar a usted tanto de soja.
T.9
Ese certificado lo transfiere a futuro el proveedor del insumo. Es una forma de crédito indirecto; una especie de fideicomiso.
Respecto de los precios en dólares, bajaron los precios de la empresa nacional, pero no todas las empresas bajaron los costos del productor o del intermediario.
La empresa nacional bajó los precios porque tenía la necesidad de reconstruir el déficit producido por la devaluación. Aunque tenía que cobrar en dólares, le pagaban en pesos, pero a la vez tenía que pagar al exterior en dólares.
Hoy en día la mayoría de las empresas manifiestan quebrantos de balances; esto lo sabemos todos. Hay pocas empresas que están recomponiendo su situación. Los patrimonios son negativos y hay empresas que tendrían que presentarse en quiebra, pero sin embargo no lo hacen porque todavía se tolera que persistan.
En realidad bajaron los precios en dólares para las economías que trabajan en esa moneda, pero para las economías regionales u otras líneas no vinculadas a la exportación, en este momento se hacen contratos particulares. Se destruyó el contrato original general de la industria y del comercio de agroquímicos. Los contratos se hacen con precios y pautas particulares, y casi todos con pago anticipado. Prácticamente no existe el crédito en la venta de agroquímicos.
El productor de pronto se quedó sin crédito y sin insumos. Eso se fue acomodando en el tiempo y hoy podemos decir que todavía el crédito no existe, no sólo por parte del productor para conseguir el insumo nacional, sino por parte de la industria para conseguir el insumo del exterior, que se está pagando a 45 días, que es el tiempo que tarda en llegar a puerto la materia prima importada; es decir que prácticamente es una compra a contado contra arribo a puerto, y más de una vez es pago anticipado o pago contra documento. Al productor le ha pasado lo mismo, se le ha transferido el problema del crédito; en este momento no existe financiamiento bancario o es inalcanzable.
Actualmente se están aplicando algunos sistemas para lograr algo de financiación. Aquellos productores consumidores finales o distribuidores que trabajan con consumidores finales, que están vinculados a la exportación de los granos más importantes -girasol, maíz, trigo y soja- pueden pagar con un equivalente en granos. Entonces el productor, en vez de vender el grano, transformarlo en pesos, comprar los dólares y pagar el insumo, entrega el grano en dólar, se ahorra una etapa y gana algo.
Por otra parte, en este momento están apareciendo los sistemas de fideicomiso establecidos por organismos privados y bancos, que se han unido y donde están participando empresas. Es gente que coloca capital, constituye un fideicomiso y le ofrece al productor que quiere comprar insumos que lo haga a través del fideicomiso. Establecen una serie de pautas con el productor, por las cuales éste entregará parte de su producción, y ellos se protegen por medio de seguros, controles profesionales y demás. De esta manera se está obteniendo el crédito en forma intermediaria, que no lo da el banco en este momento.
Otra forma que se está produciendo en el mercado es la cesión de ventas a futuro. Los certificados de venta con la Bolsa de Cereales y demás, se transfieren a quien entrega el insumo. El productor dice: le voy a entregar a usted tanto de soja.
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Ese certificado lo transfiere a futuro el proveedor del insumo. Es una forma de crédito indirecto; una especie de fideicomiso.
Respecto de los precios en dólares, bajaron los precios de la empresa nacional, pero no todas las empresas bajaron los costos del productor o del intermediario.
La empresa nacional bajó los precios porque tenía la necesidad de reconstruir el déficit producido por la devaluación. Aunque tenía que cobrar en dólares, le pagaban en pesos, pero a la vez tenía que pagar al exterior en dólares.
Hoy en día la mayoría de las empresas manifiestan quebrantos de balances; esto lo sabemos todos. Hay pocas empresas que están recomponiendo su situación. Los patrimonios son negativos y hay empresas que tendrían que presentarse en quiebra, pero sin embargo no lo hacen porque todavía se tolera que persistan.
En realidad bajaron los precios en dólares para las economías que trabajan en esa moneda, pero para las economías regionales u otras líneas no vinculadas a la exportación, en este momento se hacen contratos particulares. Se destruyó el contrato original general de la industria y del comercio de agroquímicos. Los contratos se hacen con precios y pautas particulares, y casi todos con pago anticipado. Prácticamente no existe el crédito en la venta de agroquímicos.
SR. ESAIN Desapareció la financiación.
SR. LLANO ¿Esa causa influyó en el descenso de la demanda interna de fertilizantes?
SR. GIROTTI No en gran medida. Las cosas cambiaron a través del tiempo.
El crédito desapareció porque nos costó mucho recuperar el capital de trabajo invertido. Después de la devaluación cada uno mantuvo el statu quo, se quedó quieto a ver qué pasaba. Mi empresa todavía espera recuperar lo vendido hace doce meses.
El crédito bancario desapareció. La mayoría de las empresas devolvimos -a su vencimiento o en forma anticipada- todos los préstamos tomados a corto plazo para conformar el capital de trabajo. Todavía tenemos acreencias pendientes, pero nos quedamos sin crédito bancario, además de la pérdida de confianza y de la destrucción de las relaciones entre partes, que lentamente se fueron recomponiendo.
En relación con la aplicación de fertilizantes, la situación fue variando a lo largo del tiempo. En general, los sectores más tecnificados decidieron hacer una apuesta similar a la del año pasado; agregaron la misma tecnología porque a pesar de las retenciones las cifras siguen demostrando que es conveniente un costo mayor pero un beneficio que proporcionalmente es mucho mayor. Esa es mi visión personal. Sin embargo, gran cantidad de agricultores en lugar de continuar con el círculo virtuoso que significa agregar tecnología para tener mayor rendimiento, por distintos problemas y por falta de crédito y de visión decidió reducir los gastos. Eso se convierte en un círculo vicioso que disminuye las posibilidades de mejorar los rendimientos.
El crédito desapareció porque nos costó mucho recuperar el capital de trabajo invertido. Después de la devaluación cada uno mantuvo el statu quo, se quedó quieto a ver qué pasaba. Mi empresa todavía espera recuperar lo vendido hace doce meses.
El crédito bancario desapareció. La mayoría de las empresas devolvimos -a su vencimiento o en forma anticipada- todos los préstamos tomados a corto plazo para conformar el capital de trabajo. Todavía tenemos acreencias pendientes, pero nos quedamos sin crédito bancario, además de la pérdida de confianza y de la destrucción de las relaciones entre partes, que lentamente se fueron recomponiendo.
En relación con la aplicación de fertilizantes, la situación fue variando a lo largo del tiempo. En general, los sectores más tecnificados decidieron hacer una apuesta similar a la del año pasado; agregaron la misma tecnología porque a pesar de las retenciones las cifras siguen demostrando que es conveniente un costo mayor pero un beneficio que proporcionalmente es mucho mayor. Esa es mi visión personal. Sin embargo, gran cantidad de agricultores en lugar de continuar con el círculo virtuoso que significa agregar tecnología para tener mayor rendimiento, por distintos problemas y por falta de crédito y de visión decidió reducir los gastos. Eso se convierte en un círculo vicioso que disminuye las posibilidades de mejorar los rendimientos.
SR. LLANO ¿Eso se traduce en una disminución de las superficies cultivadas?
SR. GIROTTI No sé exactamente si se traduce en una reducción de las superficies cultivadas, pero sí posiblemente de los rendimientos.
SR. SARLI La superficie cultivada de trigo se redujo por un problema internacional y de conveniencia. Este año el productor cultivará más soja porque es beneficiosa la diferencia de cotización internacional comparada con la del año pasado.
SR. BRIOZZO Analizando el fenómeno del complejo agroalimentario de los últimos diez años, comparando la campaña 1991/1992 con la de 2001/2002, vemos que hay un pasaje de 32 o 33 millones de toneladas a 68 millones de toneladas. Me parece que a veces al hablar de la enorme importancia de la productividad no se hace debida referencia a los aspectos relacionados con los insumos, la tecnología y la gestión, tema que no es menor.
T.10
Parecería que es una cuestión de recursos naturales. Es cierto que hubo algunos millones más de hectáreas, pero fue un porcentaje muy pequeño que no explica el enorme salto y el aumento de la productividad.
Esta es la base: más insumo, mayor tecnología y mejor calidad de gestión. Es bueno realizar estos comentarios porque el tema no está muy claro.
Deseo plantear otra cuestión: me gustaría que nos sinceremos. Lo escuchaba hablar cuando usted planteaba el tema de sus costos dolarizados, que es lo que hacen todos cuando vienen a esta comisión. Aparentemente nadie paga salarios, impuestos, servicios, que sí se pesificaron; supuestamente nadie estaba endeudado en el interior, miles de millones de dólares de empresas estaban en dólares y se pasaron a pesos, uno a uno, con un enorme costo para el Estado nacional. Desde el pequeño agricultor hasta las empresas tienen un porcentaje de sus costos que es cierto que están dolarizados, como usted dice, pero tienen otro porcentaje que no lo está, que sustancialmente ha bajado si lo comparamos con el precio del dólar.
Me da la impresión de que en algún momento debemos hacer un sinceramiento, porque hablamos con los agricultores y nos dicen lo mismo, pero no nos dicen que venden en dólares y que todos los costos están en dólares pero no han crecido en la misma proporción. Hay que sincerarse: si bien estaban endeudados en el exterior, también miles de millones de dólares se transformaron en pesos, porque estaban endeudados internamente a costa del Estado.
En cuanto a los salarios, habría que empezar un proceso en el que se expresen números. Por ejemplo, con la cuestión de los agroquímicos aquí hemos tenido muchas discusiones acerca de las deudas. Nadie pone números sobre la mesa, nadie dice cuál es la incidencia real de los agroquímicos sobre cada cultivo, porque no es lo mismo en la soja que en el trigo o el maíz. Nadie pone números sobre la mesa y mucho menos sobre las empresas. Si esto sucede me da la impresión de que no habría razón para trasladarlo directamente, si algo el año pasado valía cinco dólares el litro no tendría que valer cinco dólares este año. No habría por qué haber hecho un traslado directo en dólares porque pareciera que muchos costos en pesos han bajado.
T.10
Parecería que es una cuestión de recursos naturales. Es cierto que hubo algunos millones más de hectáreas, pero fue un porcentaje muy pequeño que no explica el enorme salto y el aumento de la productividad.
Esta es la base: más insumo, mayor tecnología y mejor calidad de gestión. Es bueno realizar estos comentarios porque el tema no está muy claro.
Deseo plantear otra cuestión: me gustaría que nos sinceremos. Lo escuchaba hablar cuando usted planteaba el tema de sus costos dolarizados, que es lo que hacen todos cuando vienen a esta comisión. Aparentemente nadie paga salarios, impuestos, servicios, que sí se pesificaron; supuestamente nadie estaba endeudado en el interior, miles de millones de dólares de empresas estaban en dólares y se pasaron a pesos, uno a uno, con un enorme costo para el Estado nacional. Desde el pequeño agricultor hasta las empresas tienen un porcentaje de sus costos que es cierto que están dolarizados, como usted dice, pero tienen otro porcentaje que no lo está, que sustancialmente ha bajado si lo comparamos con el precio del dólar.
Me da la impresión de que en algún momento debemos hacer un sinceramiento, porque hablamos con los agricultores y nos dicen lo mismo, pero no nos dicen que venden en dólares y que todos los costos están en dólares pero no han crecido en la misma proporción. Hay que sincerarse: si bien estaban endeudados en el exterior, también miles de millones de dólares se transformaron en pesos, porque estaban endeudados internamente a costa del Estado.
En cuanto a los salarios, habría que empezar un proceso en el que se expresen números. Por ejemplo, con la cuestión de los agroquímicos aquí hemos tenido muchas discusiones acerca de las deudas. Nadie pone números sobre la mesa, nadie dice cuál es la incidencia real de los agroquímicos sobre cada cultivo, porque no es lo mismo en la soja que en el trigo o el maíz. Nadie pone números sobre la mesa y mucho menos sobre las empresas. Si esto sucede me da la impresión de que no habría razón para trasladarlo directamente, si algo el año pasado valía cinco dólares el litro no tendría que valer cinco dólares este año. No habría por qué haber hecho un traslado directo en dólares porque pareciera que muchos costos en pesos han bajado.
SR. GIROTTI Puedo hablar por mi empresa en particular.
Lamentablemente, no tenemos una sola deuda pesificada: todas ellas estaban en dólares tomadas como prefinanciación o posfinanciación de exportaciones y tenemos que devolverlas en dólares. Los salarios en forma directa tienen una proporción menor en nuestros costos; nuestro costo mayor es la materia prima, es endeudamiento, y todo eso está en dólares.
Lamentablemente, no tenemos una sola deuda pesificada: todas ellas estaban en dólares tomadas como prefinanciación o posfinanciación de exportaciones y tenemos que devolverlas en dólares. Los salarios en forma directa tienen una proporción menor en nuestros costos; nuestro costo mayor es la materia prima, es endeudamiento, y todo eso está en dólares.
SR. PRESIDENTE RIAL ¿Cuál es la incidencia de los salarios con respecto al costo?
SR. GIROTTI Está entre el 6 y el 7 por ciento y tuvimos una reducción, por eso nuestros precios de venta medidos en dólares son menores que los del año pasado.
Si me pregunta a qué precio debería vender para que esta empresa fuera viable, le respondería que tenemos que vender a un precio mayor que al que estamos vendiendo; no lo hacemos porque entendemos lo que está ocurriendo en el mercado. La empresa y los inversores pusieron dinero para generar trabajo en forma directa e indirecta y para utilizar el gas que en algún momento se venteaba y se quemaba; entonces, por lo menos esperan no poner más dinero, aunque saben que por un tiempo no van a tener rentabilidad; no quieren hacer más aportes.
Si me pregunta a qué precio debería vender para que esta empresa fuera viable, le respondería que tenemos que vender a un precio mayor que al que estamos vendiendo; no lo hacemos porque entendemos lo que está ocurriendo en el mercado. La empresa y los inversores pusieron dinero para generar trabajo en forma directa e indirecta y para utilizar el gas que en algún momento se venteaba y se quemaba; entonces, por lo menos esperan no poner más dinero, aunque saben que por un tiempo no van a tener rentabilidad; no quieren hacer más aportes.
SR. BRIOZZO Usted habla de salarios, paga impuestos, recibe servicios, se refiere particularmente al gas, pero recibe otros servicios y las tarifas fueron pesificadas.
SR. GIROTTI En energía eléctrica todavía tengo precios bajos.
T.11
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SR. ESAIN ¿Por qué el gas no respeta la regla general que sigue toda la actividad de los servicios públicos en el sentido de que no puede haber aumentos y teniendo en cuenta que ustedes han tolerado una prohibición para aumentar?
SR. GIROTTI Eso es lo que está ocurriendo en general con los grandes consumidores de gas, excepto los domésticos.
SR. ESAIN Pero esa es una decisión empresaria...
SR. GIROTTI Pero ese es un compromiso entre tener disponibilidad permanente de gas o estar sujeto a cortes, y si tenemos cortes de gas los costos serán mayores. Por supuesto que se trata de una decisión empresaria: nos hubiese convenido seguir con la tarifa pesificada y vender a un precio menor en dólares para obtener una diferencia mayor, pero esta situación la fijan las reglas del mercado.
SR. PRESIDENTE RIAL Conociendo lo que sucede en este sector, entiendo que no existe un sinceramiento desde determinados sectores acerca cuál es la economía real. Este caso es atípico, y por eso pregunté cuánto era el costo de incidencia de la mano de obra, que evidentemente estará en el orden del 20 o 30 por ciento, pero esto nos sorprende porque la baja será muy poca en función de la pesificación que ocurrió. De todos modos, esta es la realidad del tipo de industria que manejan ustedes, porque cuentan con muy poca mano de obra y es altamente tecnificada.
Yo he recorrido la planta petroquímica de Bahía Blanca y he quedado sorprendido porque se invirtieron 3.500 millones en el sector y la cantidad de mano de obra es irrisoria.
Yo he recorrido la planta petroquímica de Bahía Blanca y he quedado sorprendido porque se invirtieron 3.500 millones en el sector y la cantidad de mano de obra es irrisoria.
SR. AVERBACH La industria química tiene muy poca gente en forma directa.
SR. GIROTTI No tengo problemas en discutir en forma detallada el tema de los costos, pero sinceramente quiero repetir que llevamos acumulados más de 50 millones de dólares de quebranto, y esto no significa que seamos ineficientes, porque tenemos una planta industrial de escala mundial que nos permite ser eficientes, pero para compensar ese quebranto nuestros precios tendrían que ser mayores.
Esta es la respuesta sintetizada a la pregunta que hizo el diputado preopinante, y podríamos hablar del tema de los costos más detalladamente. Tal vez podamos ser acusados de no haber hecho algo distinto antes de la devaluación, pero era imposible conseguir y pesificar 300 millones de dólares en ese momento.
Esta es la respuesta sintetizada a la pregunta que hizo el diputado preopinante, y podríamos hablar del tema de los costos más detalladamente. Tal vez podamos ser acusados de no haber hecho algo distinto antes de la devaluación, pero era imposible conseguir y pesificar 300 millones de dólares en ese momento.
SR. ESAIN Fuera del ámbito de la empresa, teniendo en cuenta que su actividad está dolarizada, quiero hacer una pregunta al ingeniero Averbach: ¿en qué porcentaje influyó la pesificación en los pasivos financieros del sector? Es decir, de los pasivos financieros empresarios que existían, ¿qué porcentaje tomó la pesificación? ¿El 10, el 20 o el 30 por ciento?
SR. AVERBACH Esa es una cifra que manejan las empresas, y yo no las puedo decir, pero deben ser muy similares a las de previsibilidad. Ellas dependen de cada empresa. Debemos tener en cuenta que la mayoría de las empresas de nuestra cámara son pymes, salvo Profértil y Atanor.
SR. GIAMBIAGI No todas las empresas estuvieron igual. En nuestro caso, todo lo que exportamos y todo lo que era prefinanciación y posfinanciación estaba en dólares, por lo que no se pesificó y lo tuvimos que devolver en dólares. En el caso de la prestación del dinero lo que se pesificó fue un 10 por ciento en bancos, pero el resto era todo en dólares.
No se puede dejar de pagar, porque lo que se consigue es dejar de operar. La industria es muy dependiente del crédito, y los que vendemos en el mercado interno somos parte de él.
T.12
cab
ind
Nosotros podíamos financiar al exterior a 90 y 120 días, porque nos prefinanciábamos. Podíamos dar crédito a los agricultores hasta la cosecha porque los bancos nos respaldaban. En este momento los bancos no solamente no prestan en pesos sino que tampoco prefinancian en dólares, y además hubo que devolverles dinero.
De modo que las empresas a las que les va bien están con enormes dificultades de capital de trabajo y no pueden dar crédito; y a las que no les va bien, tienen vida limitada y es difícil que sobrevivan. Esta es la historia, pero no es pareja. Hay empresas que estaban fuertemente endeudadas en el mercado interno, a las que la pesificación les licuó el pasivo; es el caso de buena parte de la economía agropecuaria, donde se habían tomado dólares en bancos y se los pasaron a pesos, mientras que sus cosechas las venden en dólares, al dólar agropecuario. El sector consumidor de productos, que es el chacarero, es el que más se ha beneficiado con la pesificación. Generalmente las industrias exportadoras, consumidoras de algunos insumos importados, no se beneficiaron demasiado. En nuestro caso, un 10 por ciento de los créditos se escurrió en este terreno. Nosotros teníamos dinero por dos millones de dólares, de distinto tipo, y no aparece.
No se puede dejar de pagar, porque lo que se consigue es dejar de operar. La industria es muy dependiente del crédito, y los que vendemos en el mercado interno somos parte de él.
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Nosotros podíamos financiar al exterior a 90 y 120 días, porque nos prefinanciábamos. Podíamos dar crédito a los agricultores hasta la cosecha porque los bancos nos respaldaban. En este momento los bancos no solamente no prestan en pesos sino que tampoco prefinancian en dólares, y además hubo que devolverles dinero.
De modo que las empresas a las que les va bien están con enormes dificultades de capital de trabajo y no pueden dar crédito; y a las que no les va bien, tienen vida limitada y es difícil que sobrevivan. Esta es la historia, pero no es pareja. Hay empresas que estaban fuertemente endeudadas en el mercado interno, a las que la pesificación les licuó el pasivo; es el caso de buena parte de la economía agropecuaria, donde se habían tomado dólares en bancos y se los pasaron a pesos, mientras que sus cosechas las venden en dólares, al dólar agropecuario. El sector consumidor de productos, que es el chacarero, es el que más se ha beneficiado con la pesificación. Generalmente las industrias exportadoras, consumidoras de algunos insumos importados, no se beneficiaron demasiado. En nuestro caso, un 10 por ciento de los créditos se escurrió en este terreno. Nosotros teníamos dinero por dos millones de dólares, de distinto tipo, y no aparece.
SR. PRESIDENTE RIAL Acabo de chequear que el tema no está incluido en el orden del día de la reunión de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, pero me comentan que se está tratando allí, de modo que tomaremos contacto con los diputados que la integran.
Tiene la palabra el señor diputado Llano.
Tiene la palabra el señor diputado Llano.
SR. LLANO ¿Qué razones se dieron en el Senado para extender la alícuota a los fertilizantes?
SR. AVERBACH Es un tema bastante complicado. Los senadores Verna y Gioja dijeron que era una propuesta de la mayoría. La sanción de Diputados se refería a la aplicación a agroquímicos y fertilizantes, y la primera modificación del Senado decía que agroquímicos y fertilizantes quedaban fuera de la pesificación.
Hablamos con el doctor Abad, porque nuestra propuesta era que se aplicara a fertilizantes, no a agroquímicos. Se incluía a los fertilizantes porque eran elaborados por dos empresas, Pecom y Profértil, que se podían controlar. Luego de muchas reuniones en el Senado se modificó la propuesta original y quedaron únicamente los fertilizantes. Como dijo Girotti, el objetivo era disminuir la evasión de 600 millones de dólares a 300 millones, con la esperanza de que al tener que pagar solamente 10,5 por ciento, la gente no siguiera evadiendo, pero se castigaba a la industria nacional.
Hablamos con el doctor Abad, porque nuestra propuesta era que se aplicara a fertilizantes, no a agroquímicos. Se incluía a los fertilizantes porque eran elaborados por dos empresas, Pecom y Profértil, que se podían controlar. Luego de muchas reuniones en el Senado se modificó la propuesta original y quedaron únicamente los fertilizantes. Como dijo Girotti, el objetivo era disminuir la evasión de 600 millones de dólares a 300 millones, con la esperanza de que al tener que pagar solamente 10,5 por ciento, la gente no siguiera evadiendo, pero se castigaba a la industria nacional.
SR. GIROTTI No tenemos ningún elemento, pero creemos que hubo alguna negociación con las entidades del agro. Creo que ellas pidieron que se incorporara a agroquímicos y fertilizantes, y para la AFIP era inviable incorporar a todos porque no se podía controlar; como solución de compromiso quedaron solamente los fertilizantes. Esta es una interpretación, porque no tenemos elementos concretos.
SR. AVERBACH Como me dijo un diputado, hubo una mano negra. Yo no hablo de mano negra ni nada, pero fue una cosa traspapelada. ¿Castigar a la industria para no favorecer a nadie? No se entiende.
T.13
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SR. PRESIDENTE RIAL Tampoco se favorece el agro.
SR. AVERBACH Van a perder 300 en lugar de 600. No sé si la gente va a aportar más.
SR. PRESIDENTE RIAL A ellos les bajan el costo.
SR. GIROTTI Al agro le bajaría el capital de trabajo, y lo mismo les ocurriría a los importadores. Ellos pagarían el 10,5 por ciento y bajarían el crédito fiscal.
SR. PRESIDENTE RIAL ¿Esa es la única compensación?
SR. GIROTTI Sí, y la posición del agro es razonable. Si la medida me comprendiera, me gustaría obtener una baja en la alícuota del IVA a la electricidad y al gas natural. De esa manera podría compensar los gastos, pero todavía es imposible abrir el espectro.
SR. PRESIDENTE RIAL ¿Ustedes pagan el 24 por ciento de IVA?
SR. GIROTTI En promedio pagamos ese porcentaje. Pero, por ejemplo, pagamos un 27 por ciento de IVA del gas natural, que para nosotros es un insumo primario.
SR. PRESIDENTE RIAL ¿En cuánto les incide el costo del gas natural?
SR. GIROTTI El gas natural representa el 80 por ciento del costo variable.
SR. PRESIDENTE RIAL Si no hay más asuntos que tratar, finalizaremos la reunión para dirigirnos a otras comisiones.
SR. SARLI Señor presidente: brevemente quisiera mencionar un último tema.
En cierta manera estoy comandando las empresas asociadas en CIAFA. La Cámara reúne a empresas que producen fertilizantes, es decir, el alimento de las plantas. También hay empresas que trabajan en la protección de los vegetales y que producen los llamados vulgarmente agroquímicos o plaguicidas.
El mercado de agroquímicos representa aproximadamente 600 millones de dólares. El glifosato -producto que todos conocemos de nombre- es un herbicida utilizado en el principal cultivo argentino que es la soja y en el principal sistema de tecnificación del agro que es el tratamiento de labranza cero, utilizado para evitar destrucciones del suelo, bajar costos y demás. Ese agroquímico representa el 50 por ciento del mercado argentino, es decir que aproximadamente 300 millones de dólares provienen de la comercialización de ese agroquímico.
Recién se formularon algunas preguntas sobre los costos. Al respecto puedo decir que el insumo glifosato importado representa un 71 por ciento del precio de costo. En consecuencia, la incidencia de la materia prima importada es del 71 por ciento del costo en dólares. Además, hay un 4 o 5 por ciento más de aditivos que se agregan directamente al costo. Podríamos decir que hay un 75 por ciento de material importado en el agroquímico más importante del país, que es el glifosato. Este agroquímico es el que más influye en el costo del productor y del cultivo más importante argentino que en este momento es la soja.
En cierta manera estoy comandando las empresas asociadas en CIAFA. La Cámara reúne a empresas que producen fertilizantes, es decir, el alimento de las plantas. También hay empresas que trabajan en la protección de los vegetales y que producen los llamados vulgarmente agroquímicos o plaguicidas.
El mercado de agroquímicos representa aproximadamente 600 millones de dólares. El glifosato -producto que todos conocemos de nombre- es un herbicida utilizado en el principal cultivo argentino que es la soja y en el principal sistema de tecnificación del agro que es el tratamiento de labranza cero, utilizado para evitar destrucciones del suelo, bajar costos y demás. Ese agroquímico representa el 50 por ciento del mercado argentino, es decir que aproximadamente 300 millones de dólares provienen de la comercialización de ese agroquímico.
Recién se formularon algunas preguntas sobre los costos. Al respecto puedo decir que el insumo glifosato importado representa un 71 por ciento del precio de costo. En consecuencia, la incidencia de la materia prima importada es del 71 por ciento del costo en dólares. Además, hay un 4 o 5 por ciento más de aditivos que se agregan directamente al costo. Podríamos decir que hay un 75 por ciento de material importado en el agroquímico más importante del país, que es el glifosato. Este agroquímico es el que más influye en el costo del productor y del cultivo más importante argentino que en este momento es la soja.
SR. ESAIN ¿Hay actualmente materia prima para sustituirlo?
SR. SARLI En la Argentina hay dos empresas que producen la materia prima básica, que es el llamado glifosato ácido: Monsanto Argentina y Atanor.
El año pasado Monsanto hizo una presentación ante la Secretaría de Industria -expediente 6.932- señalando que el glifosato ácido que ellos producen en el país junto a Atanor viene desde China con dumping. Y, al conocerse esta presentación, se produjo una retracción en el mercado. Ello significa que quienes estaban importando dejaron de hacerlo ante la posibilidad de que se aplicara un arancel al producto al encontrarse en la Argentina. Indudablemente eso provocó un aumento del precio de costo.
El aumento del costo del glifosato, principal insumo argentino, fue aprovechado por las empresas multinacionales, no así por la pequeña industria, que tuvo que sobrevivir tratando de mantener un precio bajo para que el mismo mercado siguiera consumiéndolo.
Hoy en día este expediente está investigándose en la Comisión Nacional de Comercio Exterior y en la Secretaría de Política y Gestión Comercial. Y, si prospera el arancelamiento al glifosato ácido, como dijo el ingeniero Averbach, habrá veintidós industrias argentinas que no tienen rueditas y que serán sustancialmente afectadas al no poder producir en el país.
La empresa Atanor también produce glifosato ácido y en su presentación ante la Comisión Nacional de Comercio Exterior señala que el arancelamiento no provoca daño para su proyecto mientras que Monsanto se manifiesta en contra.
Hoy no tenemos mucho tiempo, pero podríamos analizar el proyecto ya que tiene un montón de defectos y hay cuestiones que están intencionalmente mal presentadas, y ello hay que denunciarlo. Además, menosprecian la industria nacional a favor de la industria de Monsanto para proteger un proyecto que a nuestro entender está mal planteado.
T.14
En el proyecto se le pide al Estado que lo proteja, los demás no importan. Esa es más o menos la conclusión que sacamos.
Se está a punto de tomar una resolución con respecto a este proyecto; la investigación está terminando. Luego se llevará a cabo la audiencia, y puede prosperar porque se considera que hay daño o bien dumping.
Con respecto al dumping, desde China hacia la Argentina se está vendiendo por debajo de los precios de mercado. Monsanto propone que no se investigue a China sino a la India, y cita una serie de cosas que son difíciles explicar ahora, pero si alguno de ustedes quiere entrar en detalle conozco bien el expediente y puedo referirme al tema; se trata de cuestiones muy controvertidas. Por ejemplo, en relación con los costos, incluyen materias primas que ellos mismos se proveen en la India.
Muchas situaciones nos llaman terriblemente la atención, entre ellas, que la Comisión Nacional de Comercio Exterior haya abierto una investigación sin haber devuelto esta presentación porque Monsanto no es representativa de la industria argentina, tiene el 50 por ciento del ácido que se produce en la Argentina y el 7 por ciento de la industria en el proceso del glifosato, es decir que no tiene representatividad suficiente.
Además, según lo que establecen las reglamentaciones actuales, ese proyecto no tiene historia económica como para manifestar un daño porque hace un año y medio que está en funcionamiento y necesita entre cuatro y cinco años para saber si los flujos de caja y los deterioros económicos realmente se manifiestan.
Queremos dejar sentado que posiblemente se produzca un perjuicio importante para la industria nacional, y -como dijera un catedrático de Bolonia- esta industria no es como las carpas del desierto que se vuelan con el primer viento sino que, por más que no quiera, tiene que seguir en la Argentina. Repito: va a existir un perjuicio importante para la industria de los agroquímicos y, posiblemente, porque no podemos saberlo, se va a producir un aumento del costo del insumo más importante para el agro, el glifosato, que representa el 50 por ciento del mercado, influyendo ese alto porcentaje en el principal cultivo argentino.
El año pasado Monsanto hizo una presentación ante la Secretaría de Industria -expediente 6.932- señalando que el glifosato ácido que ellos producen en el país junto a Atanor viene desde China con dumping. Y, al conocerse esta presentación, se produjo una retracción en el mercado. Ello significa que quienes estaban importando dejaron de hacerlo ante la posibilidad de que se aplicara un arancel al producto al encontrarse en la Argentina. Indudablemente eso provocó un aumento del precio de costo.
El aumento del costo del glifosato, principal insumo argentino, fue aprovechado por las empresas multinacionales, no así por la pequeña industria, que tuvo que sobrevivir tratando de mantener un precio bajo para que el mismo mercado siguiera consumiéndolo.
Hoy en día este expediente está investigándose en la Comisión Nacional de Comercio Exterior y en la Secretaría de Política y Gestión Comercial. Y, si prospera el arancelamiento al glifosato ácido, como dijo el ingeniero Averbach, habrá veintidós industrias argentinas que no tienen rueditas y que serán sustancialmente afectadas al no poder producir en el país.
La empresa Atanor también produce glifosato ácido y en su presentación ante la Comisión Nacional de Comercio Exterior señala que el arancelamiento no provoca daño para su proyecto mientras que Monsanto se manifiesta en contra.
Hoy no tenemos mucho tiempo, pero podríamos analizar el proyecto ya que tiene un montón de defectos y hay cuestiones que están intencionalmente mal presentadas, y ello hay que denunciarlo. Además, menosprecian la industria nacional a favor de la industria de Monsanto para proteger un proyecto que a nuestro entender está mal planteado.
T.14
En el proyecto se le pide al Estado que lo proteja, los demás no importan. Esa es más o menos la conclusión que sacamos.
Se está a punto de tomar una resolución con respecto a este proyecto; la investigación está terminando. Luego se llevará a cabo la audiencia, y puede prosperar porque se considera que hay daño o bien dumping.
Con respecto al dumping, desde China hacia la Argentina se está vendiendo por debajo de los precios de mercado. Monsanto propone que no se investigue a China sino a la India, y cita una serie de cosas que son difíciles explicar ahora, pero si alguno de ustedes quiere entrar en detalle conozco bien el expediente y puedo referirme al tema; se trata de cuestiones muy controvertidas. Por ejemplo, en relación con los costos, incluyen materias primas que ellos mismos se proveen en la India.
Muchas situaciones nos llaman terriblemente la atención, entre ellas, que la Comisión Nacional de Comercio Exterior haya abierto una investigación sin haber devuelto esta presentación porque Monsanto no es representativa de la industria argentina, tiene el 50 por ciento del ácido que se produce en la Argentina y el 7 por ciento de la industria en el proceso del glifosato, es decir que no tiene representatividad suficiente.
Además, según lo que establecen las reglamentaciones actuales, ese proyecto no tiene historia económica como para manifestar un daño porque hace un año y medio que está en funcionamiento y necesita entre cuatro y cinco años para saber si los flujos de caja y los deterioros económicos realmente se manifiestan.
Queremos dejar sentado que posiblemente se produzca un perjuicio importante para la industria nacional, y -como dijera un catedrático de Bolonia- esta industria no es como las carpas del desierto que se vuelan con el primer viento sino que, por más que no quiera, tiene que seguir en la Argentina. Repito: va a existir un perjuicio importante para la industria de los agroquímicos y, posiblemente, porque no podemos saberlo, se va a producir un aumento del costo del insumo más importante para el agro, el glifosato, que representa el 50 por ciento del mercado, influyendo ese alto porcentaje en el principal cultivo argentino.
SR. BRIOZZO Quiero saber si la relación de causalidad está probada y cuál es el estado del expediente.
SR. SARLI El expediente está en investigación, que aparentemente ha sido terminada, por lo que va a abrirse la audiencia.
SR. BRIOZZO Entonces, las cuestiones del margen y de la relación de causalidad están terminadas.
SR. SARLI Están terminadas. No sabemos cuáles son las conclusiones, pero en este momento se estaría por llevar a cabo la audiencia pública. A partir de allí se produciría una resolución sobre prearancelamiento y no sabemos qué es lo que va a ocurrir.
SR. AVERBACH Atanor es socia de nuestra cámara y está en contra del dumping, a pesar de que es consciente como empresa de que no tiene capacidad suficiente para abastecer al país y que si aumenta el precio va a ganar más dinero. Es una empresa seria, no puede abastecer y no está de acuerdo, aunque económicamente le puede convenir porque puede producir 20 o 25 millones de litros y si vende a un dólar mayor podrá ganar más; sin embargo está en contra de esa presentación.
Para terminar, ya que hablamos de Atanor, quiero dar un ejemplo de la integración. Atanor compró una fábrica de azúcar simplemente porque tiene un insumo, el alcohol, que le sirve como materia prima de sus productos. Con esto quiero demostrar que estamos tratando de mejorar nuestros costos, de integrarnos y de invertir en el país. La inversión de Profértil es muy importante; hacemos un aporte muy grande en tecnología y si bien tenemos poca mano de obra con respecto a las industrias conexas, estamos muy vinculados a ellas. Como decía el señor Girotti, los técnicos y los repuestos están muy relacionados a la cuestión.
Por último deseo expresar que esta ha sido nuestra presentación y que les agradezco la oportunidad que nos han dado de transmitir la importancia de una industria como la nuestra. El tiempo va a demostrar que se trata de una industria muy importante.
Para terminar, ya que hablamos de Atanor, quiero dar un ejemplo de la integración. Atanor compró una fábrica de azúcar simplemente porque tiene un insumo, el alcohol, que le sirve como materia prima de sus productos. Con esto quiero demostrar que estamos tratando de mejorar nuestros costos, de integrarnos y de invertir en el país. La inversión de Profértil es muy importante; hacemos un aporte muy grande en tecnología y si bien tenemos poca mano de obra con respecto a las industrias conexas, estamos muy vinculados a ellas. Como decía el señor Girotti, los técnicos y los repuestos están muy relacionados a la cuestión.
Por último deseo expresar que esta ha sido nuestra presentación y que les agradezco la oportunidad que nos han dado de transmitir la importancia de una industria como la nuestra. El tiempo va a demostrar que se trata de una industria muy importante.
SR. ESAIN El problema de los precios en la Pampa Húmeda tiene una rápida solución porque prácticamente se exporta todo y en dólares, pero en el interior del país esta situación de equiparación de los precios va a terminar matando a sus clientes si no existe una toma de conciencia y una actitud diferente por parte de los sectores a los que ustedes representan.
T.15
T.15
SR. GIROTTI Existen tratamientos especiales para esos casos: nosotros los tuvimos en el caso de la deuda y también en el de las ventas y las economías regionales.
SR. ESAIN Pero si levantan todo el sistema de financiación del circuito agrícola la gente no va a usar fertilizantes.
SR. GIROTTI Ese no es un efecto deseado sino la consecuencia de una situación que todos vivimos. Nuestra intención apunta a vender en el mercado interno, y no tenemos dudas en ese sentido.
Esta es una consecuencia indeseada a partir de todo lo que ha ocurrido, porque el crédito ha desaparecido y se destruyeron las relaciones. El país no puede funcionar sin sistema financiero; hasta tanto no se den nuevas condiciones va a ser muy difícil que el país funcione. Toda la intención de la empresa es que el mercado siga creciendo.
Esta es una consecuencia indeseada a partir de todo lo que ha ocurrido, porque el crédito ha desaparecido y se destruyeron las relaciones. El país no puede funcionar sin sistema financiero; hasta tanto no se den nuevas condiciones va a ser muy difícil que el país funcione. Toda la intención de la empresa es que el mercado siga creciendo.
SR. BRIOZZO En última instancia, el canje está funcionando en la Pampa Húmeda, y el fideicomiso también...
Varios participantes hablan a la vez.
SR. LLANO Por ejemplo, el productor de duraznos que encontró un nicho en el exterior tiene que hacer una gran inversión, pero si le cae una helada va a tener que enfrentar una situación muy complicada.
SR. GIROTTI Hay que recomponer el sistema crediticio argentino porque un país sin crédito no puede funcionar.
SR. AVERBACH Quiero recordar a los señores diputados que voy a dejar en poder de la comisión un folleto que detalla nuestras actividades.
SR. PRESIDENTE RIAL En este momento nosotros vamos a ir a la Comisión de Presupuesto y Hacienda para seguir analizando este tema. De todos modos, su tratamiento no va a ser incorporado en la sesión de hoy y no garantizo que sea considerado la semana que viene.
De todos modos, vamos a tomar nota de lo que hemos conversado, y sería bueno que ustedes también se reúnan lo más rápido posible con la gente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda...
De todos modos, vamos a tomar nota de lo que hemos conversado, y sería bueno que ustedes también se reúnan lo más rápido posible con la gente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda...
SR. GIROTTI La semana pasada estuvimos reunidos con el señor diputado Giubergia, presidente de dicha comisión, y con el secretario de la misma, por lo que ya conocen este tema en detalle.
SR. PRESIDENTE RIAL Correcto.
No habiendo más asuntos que tratar, damos por finalizada esta reunión.
No habiendo más asuntos que tratar, damos por finalizada esta reunión.
- Es la hora 11 y 58.